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UN ETERNO FINAL

Un final para el moribundo, un final para los reyes, un final para los soberanos, un final para los humanos, un final para la paz. Todo siempre tiene un fin. Solo el tiempo puede preservar, en todo lo que existe y en todo lo que será. El cambio no importa, el cambio desaparece con el tiempo, solo el final preservara. Pero ¿Qué es el final? Adrián se preguntó, mientras miraba a su alrededor, todo loque conocía se habían vuelto parte de este desolado paisaje. ¿Es esto el final? Se siguió preguntando. “No, este no será mi final” - miro al cielo, el cual era rojo sangre, lo miro tan fervientemente, y cerro sus puños con un gran odio. Sus gritos empezaron a salir. ¡Yo decidiré que final quiero para mi vida! ¡Yo decidiré mi propio destino! – Grito hacia el cielo, diciendo que este no será su fin. El será propicio de su propia vida, de su propio final, de su ultimo suspiro.

Dario_Lidford · History
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CAPITULO 22: ¡VERDAD ABSOLUTA!

"Un universo tan grande como una taza, y a la vez tan pequeño como un grano de arroz" – Una voz hablo en la oscuridad.

La voz parecía tan antigua como el mundo mismo, pero parecía ser parte del orden natural. 

De pronto de la oscuridad un cielo estrellado apareció.

"No sé quién soy, solo puedo mirar a la oscuridad, pero ella no me ve ¿soy acaso algo…?" - La voz antigua se preguntaba. 

"¿Porque no puedo saberlo?"

De pronto de la voz antigua, poco a poco, empezaron a aparecer un millar de legiones, las cuales se alzaron en contra de su ser, podría haber fácilmente millones de tropas, cada una de diferente raza, ejercían un control sobre el cielo terrorífico, se lanzaron en una gran cruzada en contra del sujeto con la máscara. 

Decenas de armas capaz de aplastar el cielo y la tierra aparecieron, incluso los soles se movieron yendo contra tal persona. 

La persona con la máscara, no tenía miedo, le aterraba más la idea de no saber que si lo que veía existía, o era algo que su mente se inventaba. Al final miro hacia todas las legiones, antes de pronunciar unas simples palabras. 

"Yo…soy el Diablo Celestial"

Unas simples palabras, convirtió a todas las legiones en simple polvo, todo se desvaneció de un momento para otro, incluso los soles que se acercaban, parecían que dieron medio vuelta mientras huían, pero al final también desaparecieron en la nada, cuando el miro hacia atrás, nada existía, cundo miro hacia adelante, incluso el suelo había desaparecido. 

El diablo celestial o como se hacía llamar, exhalo un suspiro antes de señalar al cielo. 

"VERDAD ABSOLUTA" – Una simple palabra, se marcó en este mundo, la palabra desapareció desvaneciéndose por todo el marco del cielo nocturno. Y cuando el ser con la máscara vio hacia el cielo. 

El cielo lo estaba viendo.

La palabra verdad, se convirtió en el mismo, cuando cerró los ojos, pudo ver como el mundo entero se había vuelto el mismo. 

De pronto innumerables seres que se parecían a la persona enmascarada surgieron, aparecieron de todos lados.

"Esta…no es la verdad que busco, nada lo es y nada lo será" – Después de decir tales palabras, camino por la oscuridad del espacio mismo. 

Cuando la secuencia de imágenes termino. 

Adrián despertó.

"Ha…ha… ¿Que fue eso?" – Adrián despertó como si el sueño fuera una pesadilla. 

Su respiración se vio afectada, al igual que su mirada, simplemente no sabía que había pasado, pero sintió como si todo el mundo pudiera verlo, ese sueño fue tan real, que ni siquiera sabía si esa persona era él o no. 

Poco a poco empezó a acomodar sus pensamientos. 

Luego de unos minutos, logro calmarse, y recordó el sueño que tuvo hace un rato.

"¿Qué sucedió?" - Se pregunto, mientras miraba a su alrededor, toda la niebla había desaparecido en un gran radio. De hecho, la niebla o sus restos ya no querían acercarse a Adrián, era como si incluso si quisiera, no lo volvería a intentar por el resto de su vida. 

Lo último que Adrián podía recordar era que estaba a punto de morir. 

Pero en ese momento, la máscara parecía haber cobrado vida. 

"Al final grité algo, no, ese no fui yo, fue el tipo de la máscara" – Adrián podía recordar vagamente, a la vez que miraba su sombra.

Por alguna razón, miro hacia ella, pero al siguiente instante pudo sentir que algo lo miraba, como en su sueño. 

"La verdad" – Se dijo así mismo, según todos los recuerdos, que tal sujeto le había mostrado, podía sentir que había algo dentro de su sombra. No, algo estaba habitando dentro de ella.

"Puedo sentirlo, ¿Qué significa esto?" – Su sombra, incluso si no estuviera ahí, podía sentir claramente que algo se había formado. 

Su cuerpo seguía débil, pero no pudo suprimir su curiosidad. Un montón de recuerdos que no eran suyos, se habían mezclado. Sabía que es lo que tenía que hacer.

"Aparece" – Dijo una simple palabra, pero cuando hablo.

Varias volutas de niebla se manifestaron uniéndose en una masa, la cual empezó a imitar un aura impactante, pronto la niebla que no fue convertida, se alejó de Adrián, tenía mucho miedo, casi podía sentir como todo su ser se había vuelto una segunda presencia, y eso le aterrorizaba. 

"¡Como puede ser posible!" – Dijo Adrián sorprendido, mientras miraba a la figura hecha de niebla, no era una persona, eran varias volutas fusionadas, pero podía responder a sus pensamientos. Con solo sentir su aura, no pudo determinar qué tan fuerte era, pero le aterrorizaba. 

Por el momento Adrián guardo al sujeto de niebla en su sombra, su cuerpo estaba agotado, incluso podía sentir que le dolían los ojos, cualquier cosa que había hecho le había dejado debilitado.

Por el momento no podía seguir en este lugar, tenía que descansar y luego mirar que es lo que podía hacer. 

 Ahora la niebla no trataba de detenerlo y pudo empezar a salir fácilmente. 

Sin embargo, en ese momento. De la niebla un par de personas salieron corriendo, como si estuviera huyendo. 

Adrián los reconoció inmediatamente, fueron los padres de aquella chica que se quedó con el Boticario Gu. 

La chica corría estrepitosamente, mientras el esposo habría un camino con toda su fuerza, alejando a la niebla. 

"¡Sálvanos!" – grito la mujer con voz suplicante. Pero en ese momento Adrián dio varios pasos atrás, haciendo que solo la niebla solo se alejara de su alrededor.

Adrián recordó la escena cuando encontró las plantas que buscaba, los cuerpos en el suelo, no eran solo de gente que había muerto por la niebla, también había cadáveres que fueron asesinados. 

Ahora que veía a la pareja a salvo, podía suponer que ellos tenían que ver algo con tales cadáveres, por lo cual en ese momento incluso si estuvo herido, tuvo que alejarse rápidamente. 

Adrián no los conocía, y en este lugar, cualquiera podía conspirar contra cualquiera, incluso el asesinato estaba permitido. 

Al ver que Adrián se alejaba, la pareja se puso ansiosa, incluso el esposo quien ya no podía aguantar a la poderosa niebla. 

Al ver que se quedaban sin opciones, la esposa grito desesperadamente.

"¡Te pagaremos 100 monedas si nos salvas!" – Cuando su voz sonó, Adrián detuvo sus pasos.