webnovel

Adiestrar a un Bestia no deberia ser tan dificil ¿No?

---------------------------------------------------------------------------------------------------------

- "Así fue mi día a día durante cientos de años, viajando por una infinidad de mundos diferentes. Esperando algún día acabar, cosa que nunca pasó"

Era el segundo día de nuestra llegada a este mundo, seguíamos de camino al norte juntos Hunter y yo en busca de vida además de nosotros.

- "Oye, Tu pierna sabe bien, por cierto; los chefs del palacio podrían prepararla como un platillo gourmet"

- "Ya llevas como tres de esas, veo que la bruja tenía razón sobre su especie"

- "¿Ah? ¿Se conocen?"

- "Solo de cara y nombre, hablaba de lo que pasó en sus elecciones, dijiste que lo recordabas claramente, pero veo que no es así"

- "Hmph... me estoy asando imbécil que esperabas y esté condenado pelaje de bestia, no ayuda."

- "Transfórmate a forma humana y problema resuelto, te vi haciéndolo en las elecciones"

A lo que Hunter respondió dirigiendo su mirada hacia mí

- "Ah, si claro que lo haría, pero ALGUIEN destruyó CIERTO talismán que hacía eso mismo"

- "¿Te refieres a esta cosa? – Saqué el talismán de mi bolsillo derecho y se lo enseño a Hunter."

- "!!!!!"- En un movimiento errático, Hunter arrancó mi mano con el talismán en ella.

Me quedé viendo mi sangre escurrir por unos segundos de mi muñeca hasta que mi mano comenzó a regenerarse.

- "Tan solo lo hubieras pedido, bestia"

- "¡AL DIABLO CON ESO!" – Me dijo Hunter mientras se ponía el talismán en el cuello.

La tierra tembló, y varias almas salieron del talismán, imbuyéndose en Hunter. Mucha energía fue liberada hasta que de pronto el talismán ardió espontáneamente en llamas, prendiendo el pelaje de Hunter al instante.

- "¡AAAAAAA JUEPUTAA APAGALOOO!"-

Usando mi capacidad de creación elemental, creé una enorme gota de agua sobre Hunter, que al dejarla caer apagó las llamas de cuerpo de Hunter.

- "¡IMBECIL DE MIERDA! ¿POR QUÉ NO ME DIJISTE?" - Me reclamó Hunter.

A lo que yo le respondí sonriendo un poco.

- ¿Por qué me arrancaste la mano en primer lugar?

- "Muy chistosito… Ahora dime sabelotodo, ¿¡Por qué carajos no funcionó mi talismán!?"-

- "Sabré muchas cosas, pero solo podría hacer varias hipótesis, ¿El talismán tenía almas dentro no?, la energía para los viajes entre mundos es la misma, debes de estar empapado de esa energía después del viaje"

- "¡Y CUANDO SE ME QUITA!"

- "No lo sé, tendrás que esperar, igual eso querías en Lydenfrost ¿no?"

- "LYDENFROST ES LYDENFROST, NO LO COMPARES CON AQUÍ"

- "¿Tan poco conoces de tu propio mundo?"

- "¿Eh? A que te-" – la frase de Hunter se vio interrumpida por haber visto el horizonte y divisar un cambio en el paisaje a lo lejos, un lugar con vegetación abundante. Pero que no conectaba con otro lugar… podría ser.

- ¡¿UN OASIS?! – Exclamó Hunter poniéndose en cuatro patas saliendo en guinda hacia el oasis.

-Será mejor que este loco descanse, Igual en un par de horas anochecerá; dejaré que disfrute a solas y llegaré en unos minutos-

Treinta minutos después de que Hunter se me adelantara, llegué al Oasis, estaba lleno de vegetación e incluso algunos árboles frutales que ya había visto antes en otros mundos. No me fue tan difícil encontrar a Hunter, estaba echándose un chapuzón para aliviar su calor frente a mí, justo en el yacimiento de agua.

- "Pasaremos la noche aquí, prepararé un refugio y prenderé una fogata".

- "¡Al fin llegas, cuatro-ojos!"- Me contestó Hunter flotando panza arriba en la superficie del agua!

- "Anochecerá pronto, será mejor que salgas de ahí si no quieres congelarte"

- "Pff da igual, me quedaré aquí, más te vale tener la fogata lista para cuando llegue allá."

- "Tomaré en cuenta su sugerencia."

- "¿Sugerencia? ¡ES UNA ORDEN!"

La noche cayó y me las arreglé para tener listo un refugio para los dos hechos, con los materiales que tenía a la mano, nada que unas lianas, madera vieja y unas hojas enormes no solucionen. Me aseguré de que el refugio fuera lo suficientemente fuerte para soportar física y psicológicamente al bestia caprichoso. Hablando del diablo, se decidió aparecer justo ahora, empapado y temblando del frío.

- "Decidiste aparecer finalmente, siéntate, tengo estofado listo"

Hunter no dijo ni una sola palabra, el sonido chisporroteante de la fogata, solo se sentó y se sirvió un poco de estofado y cuando terminamos de comer, Hunter al fin decidió decir algo entre dientes.

- "Tenías razón. Te hubiera hecho caso."

- "Los "hubiera" no existen, Hunter. Es hacer o no hacer lo que marca la diferencia"

- "A qué te referías… Antes"

- "¿Mh?"

- "¿A qué te referías con que no se nada de Lydenfrost? He vivido ahí toda mi vida, no tienes ni idea de lo que dices -

- "Bueno, tú no sabías que Lydenfrost tenía un desierto en primer lugar, o que tras la frontera hay un infierno de fuego"

- "¡Patrañas! ¡¡Y eso como lo sabes con tanta seguridad!? NADIE ha atravesado la frontera"

- "Información de los "Superiores", me la envían cada vez que llego a un mundo nuevo. ¿Qué? ¿Ahora te haces el que quieres saber?"

Hunter asintió con la cabeza ligeramente, parecía genuinamente intrigado, si no contamos claro las capas de pena que tenía en su cara debido a lo sucedido.

- "Está bien... Si así lo deseas… tan solo imagina…"

----------------------------------------------------------------------------------------------------------

Un planeta tan cercano a su estrella que su superficie vaporizaría a cualquiera en un instante, hasta que un día los "Superiores" enviaron un meteoro impactó con la superficie del planeta. Este poseía una especie de cristal que se repartió en el cráter; Creando un domo donde la vida pudo darse. Miles de años pasaron y el terreno se dividió en anillos, uno más alto que el otro, hasta llegar a la frontera de las montañas heladas. Cada uno con un bioma único y sus respectivas criaturas

----------------------------------------------------------------------------------------------------------

Hunter, sorprendido, me dijo.

- "V-vaya… Increíble…"

- "Visité la mayoría de los reinos, conozco de punta a punta tu mundo"

- "Basta de alardear y cuéntame más de antes del cataclismo. De todas maneras, si te desvaneces en la noche, nunca sabré qué paso, así que, ¡CUÉNTALO AHORA!"

- "Si tú insistes…"

---------------------------------------------------------------------------------------------------------

Me regresé a mi pequeña base en medio del bosque, para finalmente terminar con mi trabajo del día, enviarles el alma a mis jefes.

Introduje al alma dentro del tubo de mi mano derecha y en la pantalla de mi brazalete se mostró una interfaz donde podía ver los datos del alma que enviaba. Al terminar de revisar los datos del alma, presioné el botón de "Enviar" e inmediatamente extendí mi brazo derecho hacia arriba. De él salió un rayo concentrado del alma en cuestión, trascendiendo dimensiones e iluminando los cielos de ese color verde fosforescente característico de las almas.

Un par de horas después recibí mi siguiente misión, te lo mostraría ahorita, pero, mi brazalete no funciona. Decía algo como "Excelente trabajo el de hoy, Señor Spacetime. Su "cosecha" será útil para mejorar el futuro de este y otros mundos. Le hemos acreditado nuevamente 24 horas más de vida a su "Brazalete Moebius" para que usted siga disfrutando de su Inmortalidad Condicional." Un texto que siempre mandan, lo he leído miles de veces.

Después de eso estaba lo que verdaderamente importaba, mi siguiente objetivo. En este caso, ellos decidieron que cosecharía a un bestia topo del Reino Central Bestia llamado Leqkyu, un renombrado ingeniero que había estado trabajando últimamente con los reptilianos, que según yo entiendo, no se llevaban muy bien con los del Reino Central.

El Reino Central Bestia, conocido por ser la potencia económica y política más importante de la región, consistente de 3 subreinos suspendidos sobre el anillo acuático de Lydenfrost, una ciudad flotante construida en base a lo que quedaba de aquel meteoro. Con tres puentes conectando cada uno de los subreinos con el segundo anillo. Una metrópolis hecha por y para bestias mamíferos.

---------------------------------------------------------------------------------------------------------

Hunter de repente me interrumpió.

- "He vivido ahí toda mi vida, para que rayos me lo cuentas".

- "No sé hasta qué punto no recuerdas"

- "Tengo la memoria borrosa, no idiotizada, pero continua".

- "…"

--------------------------------------------------------------------------------------------------------

Después de un viaje de 6 horas en carruaje al segundo anillo y una caminata de otras 3 horas llegué al Reino Central Bestia donde enormes muros me recibieron tal cual otros reinos de esta región, junto con cuatro guardias bestias fornidos vigilando la entrada, por lo que había leído en el camino, los Bestias son muy territoriales al igual que sus símiles animales, solo toleran a los de su misma especie, y, por ende, tenía que camuflarme.

Utilicé mis ropajes de pueblerino para intentar pasar como uno de ellos, físicamente son similares a los humanos, excepto que ellos tienen vestigios animales como orejas, colas o una estatura fuera de lo normal, además de mayor vello corporal. Intenté a toda forma ocultar mi humanidad cubriendo mi cuerpo entero, dejando solo mi cara al descubierto con unas pequeñas orejas de zorro que generé sobre mi cabeza.

Cruzando iba el puente levadizo hasta que uno de los guardias se dio cuenta de mi verdadera identidad y dio la alarma de cazarme.

"INTRUSO HUMANO, INTRUSO HUMANO ¡GUARDIAS ATRÁPENLO!" -Gritaron los guardias, mientras intentaba huir lo más rápido que podía

Opté por escabullirme en un callejón, los guardias me siguieron y como era de esperarse, los noquee de un golpe furtivo directo a la cabeza, Recuerdo haberlos apilado contra un muro.

Afortunadamente, había una taberna cercana, así que nadie sospecharía de unos guardias desmayados.

Me di cuenta de que mi disfraz de bestia tenía un defecto, puede que me viera como bestia, pero no olía como uno. Lo bueno, es que ahora tenía 4 bestias inconscientes y su ropa apestosa. No fue muy agradable que se diga.

Volviendo a lo de la misión, debido a la ambigüedad del mensaje de los "Superiores" tuve que buscar información del paradero de mi próxima víctima por otros medios y decidí entrar a la taberna a ver que me podría encontrar.

Al abrir las puertas de la taberna, me recibió un fuerte olor a cerveza y otros tipos de licor, recuerdo que era un lugar alegre y con música en vivo, al tabernero despachando bebidas y al resto de personas disfrutando del ambiente.

Estando ahí dentro, me acerqué a la barra, pedí un par de tragos y me fui a sentar a una mesa vacía en una esquina del local, donde me puse a observar a los bestias que me rodeaban.

Vi a todo tipo de bestias ahí dentro, jóvenes, viejos, bellos, feos, cheles, prietos, hembras, machos, altos y bajos.

Fue entonces que me fijé en un grupo sentado en una de las mesas del centro de la taberna, compuesto por un bestia oso, un bestia zorro y una bestia búho. Y recuerdo que vestían de ropa extravagante, tanto que resaltaban del resto de pueblerinos, se estaban carcajeando y parecía que se conocían desde hace mucho tiempo.

Probablemente, eran aventureros, decidí observarlos un poco más hasta que vi algo que realmente me interesó, el bestia oso sacó un pergamino, ellos parecían estar en una misión a algo.

Finalmente decidí acercármeles.

"Bonito lugar para los precios que tienen no creen" -Les dije de forma carismática al yo acercármeles.

El bestia oso guardó el pergamino y los tres bestias me miraron.

"¿Te conozco de algo? ¿Chicos, conocen a este tipo?"- Dijo el bestia oso.

"Nopo"- Contestó el bestia zorro.

"En lo absoluto"- Dijo la bestia búho.

De manera seria, el bestia oso me dirigió la palabra

"Habla rápido, ¿Qué quieres?"

"No vengo a hacerles daño, de hecho, simplemente ando buscando a alguien con quien tengo un asunto pendiente, y pensé que ustedes aventureros pueden conocerlo"

"Y a vos quien te dijo que somos aventureros" – Dijo el bestia zorro.

"Se les nota, no lo tratan de disimular, destacan entre todo este bestierio, ahora sí a lo que venía"

De mi bolsillo saqué un trozo de papel con la cara ilustrada de Leqkyu y lo puse sobre la mesa de un golpe. Los aventureros tomaron el papel y cada uno lo vio a detalle.

"Verán, soy un cazarrecompensas y me han encargado a este tipejo y quería saber si lo han visto por ahí. Dicen que trabaja con los reptilianos. Si me ayudan, les daré una buena parte de la recompensa."

El bestia oso al ver que iba en serio me miró y me dirigió nuevamente la palabra.

"No lo conocemos, pero si está tan relacionado con los reptilianos, seguramente nos lo encontremos en el futuro, ven siéntate."- Me dijo el bestia oso – "Primero que nada, dinos quién eres."

"Mi nombre es Spacetime, proveniente del quinto anillo de Lydenfrost, como ya dije antes soy un viajero cazarrecompensas que busca acabar con aquel quien les mostré anteriormente junto con bazofia reptiliana que tanto asecha su reino, mucho gusto"

Los otros tres se miraron mutuamente y asintieron levemente con la cabeza antes de decirme.

"El mío es Shizar, del tercer anillo de Lydenfrost, legendario aventurero y líder de este grupo." -dijo el bestia oso

"Me llamo Lumi, archimaga del séptimo anillo de Lydenfrost, aventurera desde hace un año, encargada de las tácticas y poder mágico del grupo." -dijo la bestia buho

"Me dicen Saaden, del sexto anillo de Lydenfrost, ladrón de nacimiento y aventurero gracias a estos dos que me rescataron." -dijo el bestia zorro

Fue entonces que Shizar me acercó al centro de la mesa y me dijo susurrando.

"Y nosotros, al igual que tú, hemos sido contratados por la nobleza para solo una cosa"

 

 "Exterminar a esa plaga reptiliana de una vez por todas"