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The Legend Of Zelda Ocarina of Time

Link es un niño de la tribu kokiri, habitantes del bosque, pronto se ve empujado fuera de su hogar para cumplir una tarea encomendado por la Deidad Protectora del Bosque y partirá hacia una aventura de proporciones épicas. Conocerá diversas razas, reinos y desafíos en su camino por establecer la paz a su mundo. Hará aliados de todo tipo que le guiaran para establecerse como un héroe legendario. Visitará y participará en distintas culturas adoptando sus costumbres y protegiéndolos de aquel hombre que busca hurtar el tesoro para dominar el mundo. Dos niños nacidos del destino, uno en el desierto y otro en los bosques serán quienes forjen el futuro del Reino de Hyrule

Gabo96 · Fantasy
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67 Chs

El Templo de Fuego

Link llegó a una habitación de piedra. Había unas grandes escaleras al frente y a los lados de ésta dos puertas, aunque la de la derecha tenía algo parecido a un tótem bloqueándola. Subió las escaleras y se encontró a unos Keese de fuego, pero no fueron problema. Pegados a la pared había otros tres tótems diferente al anterior, pues estos parecía chimeneas y tenían fuego encendido. A la derecha e izquierda había puertas, aunque la de la derecha estaba cerrada. Ante esto, Link decidió acceder por la izquierda.

Llegó a una habitación con varias plataformas y un lago de lava en el suelo. Al otro lado de la sala había una puerta con una cerradura igual a la del Templo del Bosque; supuso que ahí estaría el dragón ese que Link goron le había dicho. Y, delante de la puerta, Link no podía creer que lo estuviera viendo. Después de siete años, no había cambiado nada. Ahí, de pie, estaba Darunia. Éste, mirándolo con el entrecejo fruncido, dijo:

—¿Quién es? ¿Eres tú, Link...? ¡Es Link en persona! ¡Cuánto has crecido desde la última vez que te vi! Me encantaría tener una conversación contigo de hombre a hombre, pero ahora no es un buen momento. ¡Ganondorf está causando problemas en la Montaña de la Muerte otra vez! ¡Ha revivido al feroz y viejo dragón Volvagia! Además, plantea alimentar a ese dragón con mi gente, como advertencia a las razas que pretendan enfrentarse a él... ¡Si ese dragón escupellamas sale de la montaña, todo Hyrule acabará convertido en un páramo carbonizado! Voy a adelantarme para intentar encerrar a ese siniestro dragón... Me preocupa el hecho de no tener el martillo legendario, ¡pero no tengo otra opción! Te lo estoy pidiendo como hermano, Link... ¡Mientras yo me ocupo del dragón, ve a liberar a mi gente! Las celdas de los prisioneros se encuentran en la otra dirección. ¡Cuento contigo, Link!

Link no supo cómo lo hizo, pero Darunia abrió la puerta atrás de él y se metió, volviéndola a cerrar. Ya se disponía a hacer la promesa de Darunia cuando vio una celda en el rincón izquierdo de la sala, de modo que fue hacia allí. Había un interruptor amarillo junto a la celda y dentro de ésta había un goron temblando. Link supo a qué se debía y accionó el interruptor, liberando al goron, el cual le dijo:

—¿Me estás liberando? ¿Puedo irme? ¡Voy a contarte un secreto por haberme salvado! Para acceder a la sala en la que está Darunia, tienes que hacer algo con el pilar que hay clavado en el techo. ¡Busca un camino que lleva a la sala que está encima del techo! —y se fue estirando los brazos con una inmensa sonrisa en el rostro.

Detrás de él había un cofre que Link abrió. Dentro había una Llave Pequeña, pero sabía que esa llave no abriría la cerradura donde estaba Darunia, además de que no podía llegar hasta ella y que le había prometido salvar a su gente. Antes de irse, Link vio efectivamente un pilar en el techo y se preguntó cómo bajarlo, pues gracias a él podría ayudar a Darunia, pero decidió dejarlo para más tarde. Al lado derecho también había plataformas, pero no se veía nada importante, de modo que salió por la puerta por la que entró y decidió entrar en la opuesta, la que tenía cerradura.

La siguiente sala parecía una habitación de volcán, pues era más grande, tenía lava en el suelo y varias plataformas con aspectos de piedras carbonizadas. Cruzando toda la habitación desde donde estaba Link había un gran puente para llegar a una puerta al otro lado, pero incluso Link vio que tenía cerradura, de modo que decidió buscar haber qué encontraba en aquella habitación. Para empezar había algunos Keese de fuego que tuvo que matar a flechazos. Increíblemente, gracias a su puntería, los mató y, como pudo llegó a lado sur de la habitación.

Ahí había una puerta con ladrillos muy mal puestos, de modo que Link decidió poner una bomba para ver qué había detrás. Así lo hizo y vio una puerta por la que entró. Llegó a un pasillo de roca en el que al fondo había otra celda con un interruptor y un goron. Activó el primero y el goron, incorporándose, dijo:

—¿Me estás liberando? ¿Puedo irme? ¡Como me has salvado, voy a contarte un secerto! En este templo hay mecanismos que se activan si los golpeas con la espada, aunque también puedes utilizar la "cosecha especial" de los goron —puso énfasis en la oración "cosecha especial" y se fue.

Link creía saber a qué se refería, pero no del todo. Como el goron pasado, detrás de él había un cofre con una Llave Pequeña. Ya podía irse, pero al norte vio otra puerta y le dio curiosidad por ir a ver, de modo que fue hacia allá gracias a las plataformas y vio que había una puerta debajo de una repisa donde había un bloque con el símbolo del Portal del Tiempo. Sabía qué hacer con éste último, pero decidió primero ir hacia la puerta de abajo. Igualmente había un pasillo con un goron encerrado y un interruptor, el cual activó y el goron dijo:

—¿Me estás liberando? ¿Puedo irme? ¡Te revelaré un secreto por haberme salvado! Los muros que se pueden destruir con la "cosecha especial" —como el goron pasado, hizo énfasis en la oración —de los goron suenan diferente a los normales si les das un golpe con la espada —y se fue.

También había un cofre detrás con una Llave Pequeña. Link salió de allí y, parándose junto a la repisa, tocó la Canción del Tiempo. Inmediatamente, el bloque con el símbolo del Portal se quitó de la repisa y se colocó en el pasillo para llegar a la puerta de abajo, cosa que a Link no le importó dado que ya había hecho lo que debía allí. Subió a la repisa gracias al bloque y vio otra puerta encima por la que entró.

La siguiente sala era rectangular y de repente baldosas del suelo se salieron de su lugar y se fueron hacia Link, el cual reaccionó rápido y se protegió con el escudo. Al fondo había un monstruo que parecía una babosa pero mucho más grande y fea llamada Like Like. Cuando Link la quiso matar, ésta se la tragó y al escupirlo ya no tenía su Escudo Hyliano ni el sayo goron. Sin pensarlo, Link le dio muchos espadazos hasta que murió y recuperó su escudo y su sayo. También había una Skulltula dorada que destruyó.

Se volvió a poner el sayo porque aunque no había lava en la habitación se sentía el calor. Salió a la sala que parecía volcán y entró por la puerta que había visto al frente desde que entró. Usó una Llave Pequeña de las dos que tenía. Llegó a una sala y lo primero que vio fue que la sala se dividía en dos debido a un río de lava que cruzaba la habitación por la mitad.

La primera parte, que era donde estaba Link, estaba desierta; la segunda parte tenía una reja que la separaba de la primera, había dos pilares junto a un hueco en el suelo del que salía un chorro de lava. Las dos partes se conectaban por una tabla de madera a modo de puente. Link cruzó por éste y accedió a la segunda parte. Al ver que no podía hacer mucho abajo, decidió escalar la reja y ver qué encontraba arriba. Vio que la reja en la derecha e izquierda tenía piso firme para llegar a la cima de los pilares y también vio que en el pilar derecho había un bloque con una cara extraña.

Link se fue hacia este pilar porque se le había ocurrido una idea, aunque no estaba seguro de que funcionara. Empujó el bloque al agujero y cuando saliera el chorro, que lo empujara. Sintió que el bloque estaría muy pesado para que el chorro lo levantara, pero increíblemente lo levantó hacia un agujero en el techo. Link esperó que bajara el chorro y subir al bloque. Cuando el chorro volvió a salir, el bloque subió con Link en él y así llegaron a una habitación pequeña cuadrada. Ahí había una puerta con cerradura que Link abrió con la Llave que le quedaba.

Accedió a una habitación con paredes de roca, igual que la primera del templo, sólo que aquí había más plataformas. Enfrente de Link había una celda con un goron encerrado, pero no había interruptor. Link se acercó y vio que éste estaba del otro lado, pero ¿cómo llegaría a él? No se precipitó por eso y puso atención a la sala. A la izquierda del todo había dos repisas, una más alta que la otra, en las que había unos enemigos con forma de babosa, pero ardiendo, y éstos no parecían que se comieran a Link, aunque sí lo quisieron atacar en cuanto lo vieron. Link simplemente les dio dos espadazos, uno para que su fuego se apagara y otro para matarlos; se llamaban Llamababa.

Enfrente de esas repisas había otras, aunque Link no podía llegar a ellas. La primera (la más baja) tenía un diamante parado y un bloque junto a él. La segunda no tenía nada encima aunque, compartiéndola con la tercera, tenía una reja volteando hacia el lado por donde había llegado Link; la tercera también tenía en un rincón un haz de fuego. Como no se podía usar el Gancho en la reja, Link decidió saltar desde la repisa donde estaba a la primera de las otras, y lo logró, aunque casi se cae.

De ahí empujó el bloque hasta que cayó al suelo, y como aún no se podía sujetar a la reja, lo empujó un poco más hasta que ya pudo subir. Decidió subir de una vez a la tercera, pero se preguntó cómo quitar el haz de fuego y para qué serviría el diamante. Entonces recordó lo que el segundo goron le había dicho sobre los mecanismos especiales y la "cosecha especial": los mecanismos debían ser esos diamantes y la cosecha, las bombas. Lanzó una bomba hacia el diamante aunque no lo veía, pero le atinó y el haz de fuego desapareció. Link vio que detrás había otra reja, de modo que la subió. Ésta daba un giro a la derecha para llegar a una plataforma donde había una puerta al fondo.

Link la abrió y llegó a una habitación llena de plataformas muy altas, las cuales se alzaban muy pegadas a otras, haciendo que la sala pareciera laberinto. Link se dirigió a la derecha según salía y tuvo que esquivar varias piedras que rodaban entre los laberintos. En un rincón del lado derecho había un goron encerrado y ésta vez sí tenía interruptor, de modo que lo accionó. El goron se incorporó y dijo:

—¿Me estás liberando? ¿Puedo irme? ¡Voy a contarte un secreto por haberme salvado! En este templo, algunas puertas se desploman cuando intentas abrirlas. ¡Cuando veas que una puerta se empieza a caer, apártate! Podrás romperla con una muestra de la "cosecha especial" de los goron... —y se fue.

Como anteriormente, había un cofre con una Llave Pequeña. Siguió explorando la habitación, teniendo cuidado con la rocas, pero no vio nada, salvo una puerta con cerradura al lado opuesto por donde había salido. La abrió y llegó a una habitación circular con plataformas muy angostas. Al otro lado había otra puerta con cerradura y al lado derecho una con barrotes. Arriba de ésta pero un poco a la izquierda había un ojo al que Link le tiró una flecha. Los barrotes de la puerta se quitaron y Link continuó por ahí. Llegó a una habitación con bastante lava, pero él estaba metido en una especie de cárcel en la que había un cofre.

Lo abrió y descubrió el mapa del Templo del Fuego. Como no había más camino, se regresó a la habitación anterior y los barrotes volvieron a salir nada más entrar. Como una de las puertas tenía cerradura, se regresó a la sala de las plataformas altas y siguió buscando caminos. Encontró un espacio en la pared de la izquierda con una puerta al fondo. Nuevamente llegó a un pasillo con un goron encerrado al final. Activó el interruptor que había ahí y el goron le dijo:

—¿Me estás liberando? ¿Puedo irme? ¡Voy a contarte un secreto por haberme liberado! Si estás envuelto en llamas, intenta blandir tu espada o rodar. ¿Sabías este truco? —y se fue.

De nuevo había un cofre con una Llave Pequeña, de modo que Link decidió usarla en la puerta de la sala circular y las plataformas angostas. Vio que llegó a la misma habitación con bastante lava, aunque ahora en el exterior. Al principio había un camino angosto que se alzaba por la lava y daba vuelta a la izquierda. Después vio que había rejas suspendidas sobre la lava. Link saltó a la primera y una muralla de fuego se propagó detrás de él para perseguirlo. Vio que a la izquierda había una puerta, pero tenía cerradura, de modo que siguió avanzando hacia el frente.

De vez en cuando salían unos Bubbles como los del Templo del Bosque, pero envueltos en fuego, pero Link no les hizo caso por correr lejos de la muralla de fuego. Al final del todo Link supo que la habitación tenía una forma similar a media luna al mirar el mapa. Llegó a una repisa donde estuvo a salvo del fuego. Ahí había otra puerta y vio sorpresivamente que desde ése lugar podía llegar a la cárcel donde estaba el cofre con el mapa, pero no le prestó atención a eso y continuó por la puerta.

Al salir vio que la sala era la de las plataformas altas, sólo que ésta vez estaba sobre ellas, y no en el suelo donde rodaban las rocas. Saltó a la plataforma de enfrente, la cual tenía un Llamababa y un suelo frágil en un sitio. Eliminó al Llamababa y examin�� el suelo frágil. Le puso una Bomba y el suelo se fragmentó en varios pedazos, mostrando un agujero, por el cual Link bajó gracias a la reja que tenía pegada a la pared.

Accedió a un pasillo y cuando llegó al final vio el goron que no había podido rescatar antes (el de la sala de las repisas altas). Como ahí estaba el interruptor, lo activó y el goron, incorporándose, dijo:

—¿Me estás liberando? ¿Puedo irme? ¡Te daré un consejo por haberme rescatado! En algún lugar de este templo vas a toparte con seres que te atacan bailando. ¡Las flechas no les causan daño! Creo que deberías emplear un poco de la "cosecha especial" de los goron... —y se fue. También había ahí un cofre con una Llave Pequeña, la cual Link tomó.

Se regresó a la habitación de las plataformas altas por la reja y vio que enfrente de la plataforma en la cual estaba (la del suelo frágil que se hizo agujero) había otra con un interruptor. Saltó a ella y lo activó. Entonces vio que en un rincón sur de la habitación se abría una celda. Fue hacia ella de plataforma en plataforma y vio que había otro goron que se incorporó al ver a Link. Éste también vio que esa celda estaba encima a la derecha del primer goron que rescató de esa sala. El goron le dijo:

—¿Me estás liberando? ¿Puedo irme? ¡Voy a contarte un secreto por haberme salvado! ¡Si ves un lugar en el mapa al que no puedes acceder, prueba a tocar la ocarina! —y se fue. Como todos los demás goron, había un cofre detrás de él con una Llave Pequeña.

Como Link no veía nada más en la habitación, decidió salir a la que tenía bastante lava hacia la puerta con cerradura. De nuevo, al saltar a las rejas suspendidas, una muralla de fuego se formó atrás, pero ahora no se precipitó tanto. Llegó a la puerta y usó una de las dos Llaves que tenía. Accedió a un pasillo parecido a los que tenían goron encerrados, sólo que ahí no había. Era un pasillo solitario y recto. Link salió por la puerta del final.

Llegó a una sala que tenía dos caminos: derecha e izquierda. A ambos lados había varios pilares angostos que se veían muy sospechosos y otros más bajitos y anchos que giraban y escupían fuego. Navi se adelantó a una reja que había en el suelo y de la cual salía un pilar. Le preguntó a Link si la sala que se veía abajo no era en la que había visto a Darunia. Éste se acercó a la reja y comprobó que en efecto era esa sala, pero no sabía cómo llegar a ella, aunque no le preocupó porque quizá aún faltaran más goron.

Link decidió ir por el camino de la derecha y vio por qué los pilares angostos se veían sospechosos: era porque entre algunos surgían murallas de fuego cuando Link se acercaba. Teniendo cuidado de los pilares que escupían fuego, las murallas de fuego y unas rocas que rodaban por ahí, Link llegó a una puerta pegada a la pared. Entró a otro pasillo en el que al final había un cofre con la Brújula. Salió a la sala anterior y siguió explorando el terreno. Se dio cuenta de que las murallas de fuego no lo dejaban ir más allá, de modo que se dirigió al camino de la izquierda.

Link miró el mapa y vio que ésa sala era casi un círculo y que al parecer se conectaban entre sí por una sala que había al centro. Quiso ver si por el lado izquierdo se podía. Esquivó más rocas rodantes, más murallas de fuego y hasta un pilar que escupía fuego sólo si Link se acercaba. Llegó a una puerta pegada a la pared del centro y entró. La sala era circular y tenía dos repisas altas a ambos lados.

En lado derecho, a nivel del suelo, había un goron encerrado temblando, pero Link no veía ningún interruptor, de modo que decidió salir a la puerta del fondo. Llegó a la misma sala de los pilares, en el lado derecho, pero ahora por detrás de las murallas por las que no podía pasar. Al fondo vio una repisa con una muralla más alta de fuego y cerca de ahí un interruptor. Link primero exploró el terreno, que tenía más pilares, para ver entre cuáles se alzaban más murallas y no perder tiempo.

Medio se memorizó el caminó y fue a activar el interruptor. Al hacerlo, la gran muralla de fuego se quitó y Link corrió lo más rápido que pudo siendo precavido con las murallas entre los pilares y alcanzó a llegar antes de que la gran muralla volviera a aparecer. En la pared del fondo había un hueco y dentro una puerta, pero cuando Link trató de abrirla, ésta se empezó a mover y Link, recordando lo que un goron le dijo, se apartó.

Después, siguiendo los consejos del mismo goron, colocó una Bomba junto a la puerta y cuando explotó, la puerta y la pared detrás se rompieron mostrando una puerta diferente al fondo. Ahora Link sí pudo entrar, pero la puerta se cerró con barrotes detrás de él. Llegó a una habitación cuadrada con una plataforma envuelta en llamas al centro y del cual salió un enemigo con forma humana pero de llamas rojas y con una panza negra que se llamaba Bailafuego.

Entonces Link recordó lo que un goron le dijo sobre esos enemigos que atacaban bailando, de modo que sacó una Bomba y se le arrojó. El Bailafuego empezó a dar vueltas y entonces la Bomba le explotó mientras lo hacía. La panza negra salió huyendo mientras el cuerpo en llamas se deshacía. Link también salió huyendo tras la panza negra y, tras darle unos espadazos, ésta regresó a la plataforma envuelta en llamas y, después de un rato, salió con otro cuerpo en llamas de color blanco.

Link repitió el mismo proceso y de nuevo la panza negra se metió en la plataforma y salió nuevamente pero ahora con un cuerpo de llamas verdes. Link volvió a repetir el proceso, pero ésta vez la panza negra se infló un poco tras un espadazo y después de unos segundos explotó. Entonces los barrotes de la puerta se quitaron y la plataforma quedó normal. Como no había otra puerta, Link subió a la plataforma para ver qué encontraba y ésta lo subió un piso más arriba. Llegó a una sala rectangular con una única puerta, por la cual entró.

Llegó a una habitación cuadrada con una repisa, en cuya base estaba la puerta por la que Link entró. A un lado de él había un diamante y supo que era un mecanismo, pero no sabía qué activaba. Caminó un poco rodeando la repisa y vio una reja pegada a una pared de ésta. Subió y al fondo vio un haz de fuego cubriendo otra reja, de modo que sacó una Bomba y la soltó sobre el diamante. La Bomba explotó activando el diamante y Link aprovechó para subir la reja que tapaba el haz. Como había pasado en la sala de las repisas altas, la reja daba vuelta a la izquierda a una plataforma pegada a la pared, donde había una puerta, por la cual entró.

Accedió a una sala circular y lo que vio al principio fue un gran agujero en el suelo. Se asomó y vio que era la sala donde dejó al goron temblando. Sabía que aún no era tiempo de rescatarlo, de modo que regresó a la sala circular. A un lado de donde entró había una plataforma pequeña en el suelo con una cara extraña, pero no supo para qué serviría. La sala tenía varias repisas a varios niveles que bordeaban la habitación, además de un camino angosto que bordeaba el agujero que subía hasta una repisa en donde había un haz de fuego con cuatro antorchas encendidas cubriéndolo. Entre las repisas y el camino se abría un espacio por el que rodaba una roca.

En la primera repisa había un interruptor, el cual Link activó y vio que el haz de fuego desaparecía mostrando un cofre. Como las repisas estaban a desnivel, Link pensó en usar el camino angosto, pero corría el peligro de caer y además se oía un golpeteo de que el interruptor era a contrarreloj. Link quiso usar el Gancho para engancharse al cofre, pero la cadena no llegaba, de modo que se esperó a que el haz de fuego volviera a aparecer para activar otra vez el interruptor y arriesgarse a irse por el camino angosto.

No fue tan difícil, aunque por poco no llega. Abrió el cofre y descubrió un martillo muy pesado. Según la inscripción que tenía se llamaba Martillo Megatón. Desde esa repisa, Link saltó a donde estaba la plataforma pequeña y probó a usar el Martillo en ella. La plataforma se sacudió un poco y cayó a una habitación rectangular pequeña. Ahí había un tótem igual al que había en la primera sala; entonces Link recordó que había pasado por alto las puertas a los lados de la escalera de esa primera sala, pero decidió ir hasta el final.

Link vio que el tótem tenía dos piezas y era frágil, así que decidió usar el Martillo contra él. Cada pieza desapareció mientras avanzaba horizontalmente debido al golpe del martillo, mostrando una puerta que había detrás del tótem. Link entró a una sala que daba vuelta a la derecha y mostraba un desnivel en el suelo. Había unos Keese de fuego volando ahí que Link mató con la Espada. En un rincón había unas cajas y un pilar pegado a una pared del desnivel.

Como no había más puertas, Link decidió pegarle al pilar con el Martillo, y al hacerlo, el desnivel comenzó a descender formando una escalera y mostrando una puerta con barrotes hasta abajo con un interruptor azul. Link ya sabía cómo funcionaban esos interruptores, de modo que tomó una caja y bajó hasta el interruptor. Colocó la caja en él y los barrotes de la puerta se quitaron. Link entró y llegó a un cuarto muy pequeño con una reja en el suelo y una plataforma pequeña a un lado. Link miró hacia abajo y vio la sala con los pilares angostos, así que usó el Martillo contra la plataforma y ésta cayó a la sala en un hueco junto al pilar que daba a la habitación de Darunia.

Gracias a la plataforma que ahora servía como bloque, Link pudo subir a una repisa para poder llegar al pilar y así averiguar cómo ir con Darunia, pero en esa repisa había un interruptor que parecía oxidado y una puerta con barrotes pegada a la pared. Como Link no podía activar el interruptor, usó el Martillo y el interruptor se activó, abriendo la puerta. Link entró y accedió a la sala donde dejó al goron temblando, pero ahora en las repisas altas.

Enfrente de la repisa en la que él estaba había un bloque con el símbolo del Portal del Tiempo, de modo que saltó hacia allí, aunque casi se cae, y tocó la Canción del Tiempo. El bloque desapareció y volvió a aparecer junto a la celda del goron, mostrando un interruptor oxidado que había detrás del bloque. Link usó el Martillo y así se abrió la celda. Bajó con el goron y éste le dijo:

—¿Me estás liberando? ¿Puedo irme? ¡Voy a contarte un secreto por haberme salvado! ¡Hay una puerta oculta tras el tótem situado a la entrada de éste templo! Por desgracia, la "cosecha especial" de los goron no sirve... Por casualidad, ¿no tienes algo más potente? —y se fue.

Link pensó para sus adentros que antes de salvar a Darunia, tendría que regresar a esas habitaciones para ver si no se pasaba algo por alto. Detrás del goron había otro cofre con una Llave Pequeña. Una vez con ella, Link subió a la repisa gracias al bloque con el símbolo del Portal y salió hacia la sala de los pilares. Ahora, como no creía tener ningún pendiente, saltó al pilar encima de la habitación de Darunia y decidió usar el Martillo contra el pilar, el cual cayó muy deprisa, dejando a Link en el aire.

Era demasiado tarde para sujetarse a algo. Creyó que moriría muy fácilmente y que Hyrule nunca se salvaría, pero increíblemente aterrizó en la plataforma sin hacerse ningún daño. Definitivamente eso era lo más asombroso que le había pasado en su vida. El pilar aterrizó entre las plataformas que tenían las puertas en donde Link y Darunia se había visto, pero como Link no tenía la Llave de la cerradura donde entró Darunia, regresó a la primera sala del templo.

Una vez ahí, se dirigió al lado derecho de la escalera donde estaba el tótem y usó el Martillo contra él. Detrás había una puerta con cerradura que Link abrió con la Llave que tenía. Llegó a una sala que empezaba como un pasillo y se convertía en una sala cuadrada. Enfrente de donde había entrado había otra puerta, pero con barrotes y en toda la sala había varios Llamababa y algunos Keese de fuego. Al centro había una antorcha encendida. Link eliminó a todos los enemigos y los barrotes de la puerta se quitaron, de modo que siguió por ahí.

Accedió a una sala donde otra vez salieron algunas baldosas del suelo y volaron hacia Link, el cual se protegió. También había un Like Like, pero ésta vez Link no se dejó atrapar; y, al fondo, una Skulltula dorada. Los eliminó y siguió por la puerta que había a la izquierda de la sala. La puerta se cerró con barrotes tras él y llegó a una sala cuadrada con una plataforma envuelta en llamas. Link sabía qué le esperaba ahí.

El Bailafuego se veía más poderoso, pero no fue problema para Link, quien usó el mismo método que con el otro y así lo derrotó. Los barrotes de la puerta por la que entró y de otra que estaba a la pared de al lado se quitaron y las llamas de la plataforma desaparecieron y, en su lugar, apareció un cofre con Bombas. Link las tomó y salió por la puerta opuesta. Llegó a un pasillo donde había otro goron encerrado y un interruptor oxidado. Usó el Martillo contra éste y cuando las celdas se quitaron, Link vio un cofre decorado como el que había visto en el Templo del Bosque y supo que ahí estaría la Llave de la habitación donde entró Darunia. El goron, incorporándose, dijo:

—¿Me estás liberando? ¿Puedo irme? ¿Entonces el gran jefe Darunia te pidió que me rescataras? ¡Te debo una! ¡Por favor, ayuda al gran jefe! —y se fue.

A Link le pareció gracioso que todos los goron le dijeran la misma frase cuando los rescataba, pero no perdió más tiempo y abrió el cofre. Efectivamente estaba la Gran Llave. Una vez con ella, salió por la puerta opuesta al final del pasillo y llegó al lado izquierdo de las escaleras de la primera sala. Rápidamente se dirigió a la sala donde había visto a Darunia y ahora, gracias al pilar, pudo llegar a la puerta con la gran cerradura. La abrió y entró precipitadamente.