Adiós, Buenas Noches (Parte 1)

Tyris tenía una difícil decisión que tomar, pero la respuesta llegó de manera inesperadamente fácil.

—Gracias, Lith, pero no. —Ella negó con la cabeza—. Has visto cuánto sufrió Juria al estar aquí. Probablemente preocupé a Valeron durante siglos al nunca soltarlo.

—Obligarlo a regresar sería tan cruel como peligroso.—

—¿A qué te refieres, peligroso? —Dijo Lith.—

—Valeron era un núcleo blanco y convertirse en uno de tus Demonios le daría un núcleo negro. —Respondió Tyris—. Si logra fusionarlos, es posible que ya no necesite tu ayuda para quedarse aquí.—

—¿En serio? —Los ojos de Lith se abrieron de par en par con incredulidad.—

—Es un riesgo que no voy a tomar. —Tyris asintió—. El dolor de volver a la vida y su amor por mí también podrían volverlo loco. Conjunto de Saefel o no, no querrás tener a Valeron como enemigo.

—La forma que adquirió después de alcanzar el núcleo blanco fue realmente poderosa. Digna del Rey de la humanidad.—