Mundo Shinobi - Señores de la guerra - 424

Era lunes y tocaba reunirse con Kaoru para ver el estatus de las píldoras de cultivador, pero esta semana comenzó el sábado con Kain entregándole su último avance.

Kain se trasladó a las instalaciones bajo la mina de mineral de chakra, en la nación de los Pastizales. Ya no quedaban minerales y todo lo que había era una enorme cueva a cien metros bajo tierra con una torre conectando el piso y el techo. Además, más de la mitad de la cueva estaba bajo el agua.

Kain apareció en el corredor que llevaba a la habitación de entrenamiento de Kaoru. Del lado izquierdo estaba la muralla de concreto pintada de blanco con una superficie lisa y perfecta. Del lado derecho se veían los paneles de vidrio reforzado, el agua y toda una fauna marina.

Kain avanzó mientras los pasos de sus sandalias de madera reverberaban en el pasillo. El techo estaba a tres metros del suelo con amplios focos empotrados que proyectaban luz clara y limpia.

Kain camino durante un par de minutos y se detuvo frente a una puerta metálica doble de aspecto robusto. Él miró a la parte baja de la puerta, por donde se filtraba el frio, no había hielo, así que eso significaba que el control de Kaoru sobre el hielo había mejorado, pero no era perfecto. Todavía se sentía una brisa congelada, lo que indicaba que el cuerpo de Kaoru filtraba energía.

Kain acercó su mano a la manilla, la giro y abrió la puerta. Entonces una brisa gélida lo golpeo de frente y lo hizo tiritar. La luz de la habitación se encendió y la sala de entrenamiento quedó visible. Era un lugar amplio con un piso y techo de concreto. Solo había una pared que separaba la habitación del pasillo. Las otras paredes eran paneles de vidrio reforzado que le permitían a la dueña de la habitación mirar el agua que rodeaba la torre y la fauna marina. Kain dio un paso al interior de la habitación, su traje negro bajo la ropa regulo automáticamente la temperatura corporal y todo fue más acogedor. Su simple respiración producía vaho.

Por otro lado, en el centro de la habitación estaba la cultivadora sentada en posición de loto. Había una ligera capa de hielo a su alrededor, pero ya no se formaban los montículos de hielo.

Kain asintió, como supuso, el control de Kaoru sobre el hielo había mejorado.

—Muestra análisis del proceso desde el sábado— dijo Kain, el dispositivo susano en su brazo izquierdo con la forma de un brazalete negro se conectó a la unidad Guardián y trasmitió los datos a la interfaz visual de Kain. Entonces apareció el cuerpo de Kaoru en posición de loto en cuatro recuadros diferentes. Uno era el físico, normal, solo se veía su rostro, el cabello oscuro cayendo a los lados como una cascada de seda. Llevaba puesto el traje negro complementario para llevar un mejor registro de las activades del cuerpo.

El segundo recuadro tenía una visión en infrarrojo. El tercer recuadro mostraba una visión del flujo de la energía con un cuerpo azul y los puntos de chakra, donde se destacaban los siete puntos de chakra principales por encima de los otros 354. Por último, el flujo espiritual del cuerpo y la conexión con el alma. Esto último se mostraba como un diminuto sol en el centro del pecho conectado a todo el cuerpo a través de una ramificación.

El proceso en la interfaz lo mostraba a tiempo real.

—Aumenta la velocidad a una hora por segundo— dijo Kain y el proceso se aceleró.

Kain vio como la píldora que consumió Kaoru entró a su cuerpo, la digirió y eso a su vez se transformó en sustancias que viajaron por su torrente sanguíneo. Eso más el chakra, produjo un flujo de energía que viajo al punto de chakra ubicado en la coronilla (parte superior de la cabeza). Eso a su vez, fortaleció el punto de chakra durante un día, después de eso, el chakra fortaleció los canales de chakra cercanos y eso a su vez, fortaleció la masa ósea y por último los músculos a su alrededor. Eso a su vez produjo en cambio en el cerebro reforzando las conexiones y mejorando las habilidades motrices.

Al final, todo el proceso de cultivación era para tener un cuerpo poderoso que pudiera albergar y controlar el poder divino. Sin embargo, la cultivación no estaba pensado para utilizar el poder divino de forma creativa o inteligente, sino más como una fuente de energía para ocasionar destrucción y aumentar la longevidad.

—Kain-sama— dijo Kaoru con voz suave

Kain apartó la mirada de la imagen de su interfaz y se concentró en Kaoru. Ella estaba en posición de loto, pero no se movía porque el flujo de energía en su torrente de chakra tuvo un pequeño problema al momento de llevar la energía de la píldora al punto de chakra en la coronilla.

Kain se acercó a Kaoru, extendió su mano y le dijo —no te preocupes, lo sé—

Kain apoyo su mano derecha en el pecho de Kaoru y la ayudo a recostarse. Kaoru frunció su rostro en una mueca de dolor. Kain la recostó en el suelo, desarmo su posición de loto y estiro sus piernas y brazos. Él llevó su mano derecha al pecho de Kaoru, apoyo la palma de la mano y canalizo ninjutsu médico fortalecido por el chakra del tipo madera. Kaoru cerró sus ojos con fuerza y soltó un gemido de dolor, pero dicho dolor se fue atenuando hasta desvanecerse. El ninjutsu médico era algo maravilloso.

Cinco minutos después, Kaoru se pudo levantar del suelo y miró a Kain. Su cabello caía a los lados de su rostro enmarcando su bonito rostro y esos ojos color malva.

—Dejando de lado el desperfecto ocasionado en tu torrente de chakra ¿Cómo funciono la medicina?— preguntó Kain con tranquilidad mientras la interfaz visual se llenaba de los datos de Kaoru a través del traje negro que ella llevaba puesto.

Kaoru levantó su rostro para mirarlo a los ojos y respondió —muy bueno, pero demasiado débil. Por lo general, una píldora tiene un efecto más prolongado y no ocasiona estos problemas a menos que sea defectuosa. Sin embargo, considerando que usted no sabía nada y de alguna manera se las arregló para conseguir sustitutos, es un excelente intento—

—Sí, lo sé— dijo Kain con tranquilidad, como si realmente no le importara mucho los elogios. Él miró en otra dirección y siguió mirando su interfaz visual revisando donde estuvieron los errores.

Kaoru frunció su ceño y lo quedó mirando enojada. Ella solo quería ser amable, pero él actuaba como si no le importara —Kain-sama— dijo

Kain la miró a los ojos y al ver esa expresión molesta, dulce expresión molesta, sonrió —mis disculpas, Kaoru-sama— dijo —solo estaba concentrado en como seguir mejorando. Con los datos que recibí es más que suficiente—

—¿Eso que quiere decir?— preguntó Kaoru con el ceño fruncido, sus ojos color malva emitían una mirada llena de reproche.

—Bueno, con esto quiero decir que podemos proceder con nuestro otro proyecto—

Kaoru parpadeo un par de veces y abrió los ojos amplios, después volvió a fruncir el ceño, pero se ruborizo.

Kain curvo la comisura derecha de su labio hacia arriba, miró al suelo y después miró a Kaoru. Esta última suavizo su mirada y dio una profunda respiración. Kain estiro su mano y toco las mejillas. Su piel se sentía suave como la de un bebé, pero por haber estado tanto tiempo cultivando se sentía tan helada como el hielo. Así que Kain transmitió chakra a su mano y lo inyecto en el rostro de Kaoru. Eso afecto al cuerpo por completo elevando poco a poco la temperatura. Kaoru cerró sus ojos y apoyo su rostro en la mano de Kain sintiéndose como cuando era niña y se acostaba en el pasto para mirar al cielo bajo los árboles. El sol se veía tan luminoso como un punto que atravesaba el follaje y trasmitía su calor. Casi podía escuchar el susurro del viento, las hojas agitándose y el sonido del roce del pasto.

Kain retiro su mano y Kaoru sintió el cambio de inmediato. Ella parpadeo un par de veces y miró a Kain. Este último sonrió mostrando dos corridas de dientes blancos y le preguntó —¿Qué tal la función del traje para mejorar tú técnica de cultivo?—

—Muy bueno, pero ahí estuvo el problema— dijo Kaoru con seriedad —donde no estaba acostumbrada a realizar esa secuencia, me produjo confusión y los músculos se contrajeron—

Kain frunció el ceño, se agarró el mentón y continuo —pero solo tenías que seguir la secuencia que el traje te iba indicando con pequeños estímulos eléctricos. Ni siquiera tenías que pensar—

—Ese fue el problema, se vuelve algo tan mecánico que da sueño y te puedes descuidar. Con la cultivación normal siempre hay que estar atento, pero esto es demasiado—

—Mmm, entiendo—

—Además— continuo Kaoru —da miedo. De repente sentí que, si continuaba así, con el tiempo perdería mi habilidad para cultivar y dependería totalmente del traje—

—Por eso estás estudiando las cosas que yo sé, para poder confeccionar esto— dijo Kain señalando el traje oscuro que llevaba Kaoru puesto —y mucho más. Para eso existe la ciencia, para facilitar procesos que son complejos y demasiado difíciles de llevar a cabo sin un régimen inhumano—

—Pero ser cultivador—

Kain se adelantó y respondió en su lugar —es solo un proceso de mejora física para tener un cuerpo que pueda albergar una divinidad. Porque si los cultivadores poseyeran cuerpos fuertes, no necesitarían la cultivación y solo se dedicarían a las artes marciales ¿O no?—

—También existen los cultivadores espirituales que cultivan energía de conceptos como la destrucción—

—Vaaaaa— dijo Kain de forma despectiva y agito su mano como si apartara dicho argumento superficial —eso son solo ideas de gente que ni siquiera entiende lo que hace y solo se inventan un cuento plausible porque sería demasiado vergonzoso decir que no tienen idea de cómo llegaron a ser tan fuertes—

—Kain-sama, usted solo cree en lo que ve—

—Por supuesto, si algo no es medible o cuantificable, no existe, así de sencillo—

—Pero la forma espiritual—

—Existe, pero no es algo intangible como piensa la mayoría de la gente, es solo que se mueve en una frecuencia diferente y por eso la mayoría no lo puede ver o tocar, pero se pueden dar cuenta de su existe por sus efectos—

Kaoru fruncia el ceño, pero no discutió con Kain. Ella solo conocía a una sola persona en el universo que sin divinidad o un sistema de cultivación, podía dominar los elementos. Kain lo llamaba resonancia. Armonizar al mismo nivel de vibración que el elemento. Para él parecía tan claro como el sol, pero para Kaoru era como magia oscura ¿Cómo rayos ella iba a saber a qué nivel vibraba el hielo? Incluso entender que llevando chakra a los órganos para fortalecer la resistencia se sentía más lógico, pero ¿Resonar? ¿Qué rayos era eso?

Kain miró a Kaoru y la vio un poco enfadada. Él soltó un suspiro y le dijo —lo siento, me deje llevar por el calor del momento—

Kaoru asintió.

Kain cerró los ojos y se presionó el tabique con la mano, soltó un suspiro. Últimamente entrenaba menos y estudiaba menos, pero se había vuelto terco en algunas cosas. Era solo que la gente trataba de explicar algo de forma mediocre y superficial para evitar las preguntas importantes. El mundo era un milagro, llenó de misterios y cosas que descubrir.

Kain sintió un abrazó y apartó su mano del tabique. Miró hacia abajo y vio una cabecita con un cabello oscuro. Kaoru lo abrazaba. Ella levantó su bonito rostro y lo miró con esos ojos color malva. Kain se relajó de solo ver esa expresión, se agacho un poco y los dos se besaron.

Kain apartó su rostro de Kaoru y le dijo —por ahora, eso es todo. Con los datos que obtuve es más que suficiente, seguiré experimentando y llevando un control del desarrollo de tu cuerpo—

—Kaoru entiende— dijo Kaoru

Kain sonrió con dulzura, así era como ella hablaba cuando era niña, refiriéndose a sí misma en tercera persona.