Parte I
Parece que llegué a la escuela secundaria a las 09:30AM, ciertamente con ayuda del metro y un par de cuadras a pie.
Después de hacer lo que debía, supuse que sería rápido pero fue más lento de lo que pensé.
Me dijeron los datos a llevar y que estudiaría la próxima semana si se llegase a entregar los requisitos en el transcurso de ésta.
Actualmente son las 11:16AM y no parece que tenga nada mejor que hacer.
Quizá el mirar como la ciudad ha ido deteriorándose con el paso del tiempo sea reconfortante...
Pero... es deprimente...
Únicamente agita mi repugnancia por permitírsele llegar a tal estado. Pero desafortunadamente los jóvenes no somos más que víctimas de la estupidez de los adultos mayores.
Es mejor desechar esos pensamientos y aceptarlo, porque reparar en eso no cambiará nada en absoluto...
...: ¡Mikael!.
Escuché mi nombre gritar mientras deambulaba en el camino para volver a casa.
Ahora que recuerdo, esa voz me resulta familiar...
Mientras buscaba en mis alrededores aquel vago sonido, dí en la dirección a unos de mis amigos de la infancia.
Supongo que dibujar una leve sonrisa nostálgica de mi parte sea por deferencia.
Mikael: Pensé que ya no vivías por estos lugares, Guffy.
Como no solía estar exactamente en una pandilla la mayor parte del tiempo en los barrios bajos, yo no tenía un apodo oficial; al menos que yo sepa. (espero seguir sin uno)
Pero ese no es el caso de él...
Guffy: ¡Sí mi hermano! Escuché por ahí que volviste, pero yo estaba ocupado trabajando. Ya sabes, está difícil la calle últimamente.
No es como si no lo hubiera sido desde siempre...
Además que, si él fuese un consumado delincuente, sería irónico, porque lo mismo dirá un civil sobre el delito y su seguridad...
Guffy: ¿Y qué me cuentas sobre tí todos estos años?. "rodea mi cuello con su brazo mientras sonríe expresamente"
Mikael: Bueno, han pasado muchas cosas, pero mayormente estudiar y trabajar para ayudar a mi madre es lo que he hecho.
Guffy: Sí hermano, has crecido y estás más corpulento, el gimnasio es duro ¿cierto? Jajajajaj.
Mikael: Sí, supongo...
Mikael: Por cierto, ¿De qué estás trabajando?.
Guffy: Transportaba una mercancía por las zonas altas de Mildram... ¿Te interesa?.
No es que confíe ciegamente pero, él es un honesto y amistoso consumidor de metanfetaminas con joroba y mirada relajada; pero la mención de cierta 'mercancía' me hace concluir lo obvio.
La generación juvenil de este País, al tener que verse todo habitante en la desesperación económica, recurrió en su mayoría al tráfico de drogas ilegales.
Velenques sin duda es el mayor País traficante del continente sur.
Así como el de mayor contaminación social.
Tanto fuerzas nacionales como agentes privados trabajan para suprimir e imponer orden, pero es mayor la habilidad de los Conectes para traficar en sus narices y pasar desapercibidos.
Son consumados guerrilleros profesionales; y del ocultismo para tal engaño.
Ciertamente es loable o poco más plausible. Pero, esa generación de adultos mayores fue presa de un masivo exterminio.
Talvez sea traición de involucrados internos por parte de ellos, cayendo de uno en uno y de dos a tres; aquellos tan grandes Conectes.
Se corre el rumor de que los más renombrados de 'Los Chivos' (grupos de Conectes superiores) cuyo poder es influencia principal del País, están escondidos de tal forma entre las sombras, lugar que ahora es donde mueven los hilos de la sociedad; y cuya presencia ya ejerce una fuerza impensable.
Los actuales Conectes que son notoriamente más precoces que los anteriores, siguen su legado y han dado innegables resultados como jóvenes de nueva élite; aunque no están ni cerca de los talones frente a la generación pasada, son el futuro creciente de tal tradición y esperan a su desarrollo en la cúspide del poder.
¿Alguna diferencia entre Políticos y Conectes?.
Aquí y ahora, no parece haber distinción: porque solo uno de ellos es realmente superior y otro, un peón insignificante de fachada.
Podría examinar más a fondo pero...
Guffy: ¡¿Qué te pasó hermano?! ¡Te veo como si finalmente te hubieras fumado una varilla de mariguana!.
Oh... es cierto... parece que perdí nuevamente mi consciencia en pensamientos abstractos.
Mikael: Lo siento pero eso no va a pasar. Además, estaba pensando un poco.
Después de escuchar aquella respuesta, me da unas palmadas de consolación como si comprendiese un complicado asunto.
Guffy: Veo que sí necesitas trabajo, y sin que me hayas respondido a la pregunta, comprendo tu situación.
Después de sacar su teléfono, comenzó a presionar consecutivamente la pantalla de éste. Y luego de guardarlo pocos segundos después, me mira con su típica determinación.
Guffy: Iniciaremos un transporte de mercancía de un día a la semana durante tres semanas: son los jueves a las 23:00. Sólo se necesitaba a un miembro más para iniciar esta semana.
Es cierto que trabajar para ayudar con dinero extra para nuestra casa, sería un apoyo en los gastos médicos ante el frágil estado de salud de mi madre.
Y sería muy generoso de mi parte como necesidad de colaborar.
A pesar de que no está viviendo con algún esposo o novio por el momento. Sus ingresos no son suficientemente rentables; y además de su estado actual...
¿Uh? ¿Desde cuando le pedí ese trabajo?.
Guffy: te mandaré un mensaje mañana como recordatorio una horas antes para ir a tu casa a buscarte. ¡Te veré luego mi hermano, adiós!.
¿Eh~?
¿Cómo sucedió este desarrollo?...
No creo que pueda negarme después de lo que hizo. Sino hubiera enviado aquel mensaje antes de darme su explicación, podría haberlo detenido.
Ya que hacerlo en este momento podría volverlo parte de un grave problema. Según la seriedad en la palabra del código de la calle.
Y no llevaré esa culpa, supongo...
No hay opción...
Mientas me despedía tanto de Guffy, quien se marchó apresuradamente, como de mi libertad de elección, logré visualizar un poco a mi futuro yo; un cómplice de algo como aquello.
¿Cómo podría explicar una situación como esta mi mamá sin que salga mal?.
Bueno, no es como si no tuviéramos un historial un poco antiguo de nuestros peculiares días de dinero...