Pecado 137: El poder de un Bijuu

Mientras Haru y Aelfwyn intercambiaban golpes arriba Shukaku por primera vez en su historia estaba dando todo para luchar contra su propio oponente. Aquel ciempiés invocado por Aelfwyn tenía al tanuki atrapado en su cola y Shukaku solo se mantenía usando la arena para evitar que las patas del insecto lo atravesaran.

"¡Molesto!" rugió Shukaku lanzando varias esferas de aire comprimido contra la cabeza del insecto forzandolo a retroceder.

"¡Ah!" desde el suelo varias manos monstruosamente grandes agarraron la cola del ciempiés dejando libre al cuerpo principal del bijuu "Esta ofensa no será perdonada, ¡restringir el cuerpo de Shukaku-sama es un delito capital!"

Los monstruosos brazos se movieron con velocidad hacia el insecto pero este solo se retrajo y se movió entre los brazos demostrando su increíble flexibilidad "¡Kuck!" se quejó Shukaku colocando sus brazos en el suelo

Shukaku extendió su chakra en el suelo y como si la naturaleza siguiera sus órdenes el suelo comenzó a partirse dando paso a toda la arena del suelo.

La arena formó una gran pared que cubría hasta donde llegaba la vista, aquella pared de arena tenía todos los minerales posibles dentro del infierno, incluso estaba los minerales recolectados en la cascada.

"¡Toma esto!"

Ryūsa Bakuryū (Tsunami de Arena)

La arena comenzó a cubrir el bosque mientras destruía todo a su paso, literalmente era destrucción pura y el responsable de aquello era solo un individuo.

Haru tuvo que retroceder y saltar entre la arena usando un poco de su elemento magnetismo, para utilizarlo tuvo que salir del área efectiva de Aelfwyn lo cual no fue difícil ya que el moreno también tuvo que evitar la arena.

Los miembros del consejo la tuvieron un poco más difícil ya que tuvieron que usar magia para limitar el avance de la arena sobre ellos.

"¡Oye ten cuidado hay otros más débiles en este lugar!" Saji gritó con furia mientras elevaba el brazo.

"¡¿Tienes algún problema con la forma de hacer las cosas de Shukaku-sama?!" Shukaku giró su cabeza para mirar a Saji y este solo retrocedió en silencio "Eso pensé"

Shukaku tenía su ceño fruncido ante la visión que estaba frente a él, desde el suelo había varias espinas negras que formaban un capullo. De la nada todas las espinas se enterraron en el suelo permitiendo ver al ciempiés envuelto en su propio cuerpo "Tsk.."

La cabeza del insecto se elevo un poco por sobre su cuerpo dejando que saliera un agudo sonido que obligó a todos a taparse los oídos.

"¡Realmente molesto!" gruño Shukaku tapando sus oídos pero antes de darse cuenta sintió como su cuerpo era atravesado en varios lugares "¿eh?"

En todo su alrededor habían espinas negras que crecieron desde el mismo suelo "¿cuan fue que?.... El grito fue solo para distraernos, lo usaste para camuflar el sonido de tus espinas, maldito insecto es más inteligente de lo que parece"

El ciempiés no espero que Shukaku se liberara de las espinas y simplemente usó su velocidad para acercarse, Shukaku intentó detenerlo usando la arena pero la movilidad del ciempiés era tal que lograba zafarse de todos los ataques con suma facilidad.

Cuando estaba cerca embistió a Shukaku enviando al bijuu a tierra "¡Hiiii!" rugió el insecto abriendo sus grandes mandíbulas para morder el pecho de Shukaku mientras este rugía de dolor.

Shukaku respondió usando su puños y varios brazos de arena pero era imposible, el ciempiés se negaba a soltar a Shukaku y mientras más tiempo pasaba agarrado, mas la arena que compone el cuerpo del tanuki se tornaba de un color oscuro.

Finalmente Shukaku usó su cola para agarrar la cabeza del ciempiés y enviarlo lejos mientras dejaba caer miles de estacas hechas de arena hacia el suelo pero sin lograr darle a su oponente.

Shukaku puso su mano en su abdomen sintiendo un dolor que nunca antes había experimentado "Eso es veneno..... pense que no habia forma de envenarme.... tengo que acabar con esto rapido" el veneno comenzo a expandirse lentamente por la arena del cuerpo de Shukaku "Si no acabo con este idiota terminare como el cuervo...."

En medio del campo de batalla, una pequeña pila de arena en el lugar mantiene el cuerpo de Ikki flotando.

El ciempiés se volvió a retorcer para volver a comenzar su ataque contra Shukaku, esta vez no usó su ruido y simplemente hizo que las estacas negras emergieron desde el suelo. Shukaku por primera vez tenía que ser serio en la batalla y dejar de ser perezoso, usó su cola y sus brazos como apoyo para evitar las estacas al mismo tiempo que enviaba esferas de aire comprimido, las arenas actuaban como su apoyo pero no era fácil mantener al ciempiés lejos mientras pensaba en un plan.

Otra vez se formó una ola de arena para enviarla sobre su enemigo, el ciempiés uso las espinas negras para protegerse esta vez como si todas formaran una cerca, corrió por el campo de batalla para alzarse contra Shukaku, sin esperar ni un solo segundo uso su mandíbula para morder al bijuu de una cola.

"¿quieres acabar usando veneno?" pregunto Shukaku riendo "Te concederé la batalla uno a uno pero esto es una guerra a muerte y yo soy el vencedor"

Shukaku abrió su mandíbula y en el centro se comenzaba a formar una pequeña esfera oscura con matices rojos.

El ciempiés rugió mientras luchaba por zafarse pero Shukaku usó sus brazos, su cola y la arena para atraparlo.

La esfera crece cada vez más y pronto Shukaku la metió dentro de su mandíbula haciendo que sus mejillas se extendieron como si luchara por detener su contenido.

Los instintos del ciempiés le decían que era peligroso y luchaba por retirarse pero el agarre de Shukaku era firme, usaba todo lo que tenía en el ataque.

¡BIJUDAMA!

Hubo una luz cegadora durante un par de segundo pero pronto todos sintieron la onda de choque al mismo tiempo que ciempies retrocedía lejos y todo era destruido. Fueron varias decenas de metros lejos de Shukaku donde ocurrió la explosion.

El consejo estudiantil que estaba en el suelo solo vieron la explosion a lo lejos y tenían sus bocas abiertas, en aquel momento se dieron cuenta del gran poder que tenían las bestias con cola.