VENGANZA

NA: Ultimo capítulo del día ( ͡▀̿ ̿ ͜ʖ ͡▀̿ ̿ )

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Caminando por una calle solitaria en medio de la noche, Mike Johnson pensaba que este pais era un mundo completamente diferente a lo que le conocía.

Aunque, si hablaba con franqueza, el intentar comparar el vivir en Seven Mile Road con esta ciudad era algo inaudito.

No obstante, el vivir en uno de los barrios más peligrosos de Detroit hizo que él lograra hacerse un nombre entre las pandillas de su escuela, cosa que lo hacía sentir realmente orgulloso.

Pero todo lo que disfrutaba en su ciudad pronto acabaría, pues su padre le dijo que viajarían a una ciudad Japonesa por unos negocios.

Si cualquier otra persona le dijera que dejaría su ciudad y tendría que irse a un pais en lejano en donde ni siquiera hablan la misma lengua, Mike lo habría matado en el acto.

Pero la persona que lo dijo fue su padre, una de las pocas personas a quien Mike temía y respetaba.

Y es que su padre, al igual que él, se había hecho de un nombre en el mundo criminal, llegando a ser respetado y temido por todos.

Pero de un momento a otro le dijo que tenía 'negocios' en este pais, por lo que debían viajar.

Aunque fue una mierda el tener que adaptarse a este nuevo estilo de vida, Mike pronto se dio cuenta que no era tan malo como creía

A causa del trabajo de su padre, vivía prácticamente solo en su pequeño departamento. Es por ello que podía hacer lo que quisiera sin que alguien lo controlara.

Y gracias a eso es que ha podido disfrutar de todo lo que la ciudad tenía para ofrecerle.

En especial, las mujeres.

Mike nunca pensó que podría follarse a una jovencita japonesa con un cuerpo voluptuoso, y para rematar virgen, luego de haberle dado una paliza a un mocoso estúpido que lo había desafiado a una pelea.

Si no fuera por la advertencia de su padre de no hacer mucho alboroto para evitar los ojos curiosos, Mike habría matado al mocoso en el primer encuentro.

Pero al pensar mejor las cosas, decidió hacerle caso a la niña que le pedía perdón y que no lo siga lastimando. 

Claro que no lo hizo por bondadoso, sino porque aprovecharía esta oportunidad para pedirle a dicha chica que saliera con él en compensación ya que fue ese mocoso de pelo pintado el que empezó todo.

Y para su deleite, todo salió mejor de lo que esperaba.

Pensar que dicha jovencita aparentemente recatada era una tremenda puta que chillaba como una cerda cada vez que le metía su polla, convulsionándose por el placer que ella experimentaba con cada encuentro sexual.

Esa chica llamada Nao en verdad era una verdadera puta, pues en menos de un mes, pasó de ser una chica virgen sin experiencia, a ser una experta mamando su polla y abriendo las piernas.

En retrospectiva, Mike debía darle las gracias a ese mocoso de pelo pintado no solo por haberle ofrecido indirectamente a su amiga, sino porque en un futuro cercano, también le cedería a su hermana y su madre.

Mike casi lanza una carcajada el día de hoy cuando Nao le contó sobre la familia de ese mocoso y le enseñó las fotos en donde vio que tanto la madre como la hermana mayor eran unos productos de buena calidad.

¡Jamás pensó que su suerte sería tan buena como para encontrar no solo a una mujer que era una perra por naturaleza, sino que estaba ofreciéndole a las mujeres de la familia de sus mejor amigo!

Con esto, Mike pensó en que es verdad lo que se dicen de Japón sobre las mujeres insatisfechas dispuestas a ponerle los cuernos a sus parejas.

Aunque era lo mismo en su pais, eso no le importaba mucho.

"¿Humh?"

 De repente, casi a cincuenta metros de distancia, vio que alguien caminaba en sentido contrario a él, acercándose poco a poco.

Ahora mismo Mike estaba caminando por una zona industrial, una en donde solo se podían ver algunas fábricas, por lo que era raro ver a alguien caminando por aquí a estas horas.

Aunque era algo raro, no era lo suficiente para asustar a alguien como Mike.

Como alguien que creció en el mundo del crimen en una de las ciudades industriales más peligrosas de América, el cruzarse con alguien en medio de la noche era un pan de cada día.

Pero a diferencia de antes, cuando tenía que estar atento a si la otra persona sacaría una arma, aquí no tendría que hacer eso, pues Japón era un pais pacifico, demasiado para los gustos de Mike.

No obstante, mientras más se acercaba, Mike se dio cuenta que esa persona no era nada más ni nada menos que el mocoso a quien le dio una paliza el primer día en la escuela.

Era Hiroki.

"¿Qué haces aquí?... los niños deben estar durmiendo a esta hora" – con un japones terrible, Mike se burló de Hiroki.

El muchacho aludido se detuvo y no dijo nada, solo se quedó mirándolo por un momento.

"¿No hablarás?" – Mike exclamó burlonamente de nuevo.

Hiroki no dijo nada, pero comenzó a quitarse la casaca que tenía puesta, revelando su torso desnudo. 

Adoptando una pose de boxeo, alzó sus manos vendadas.

"¿Enserio? …je ¿enserio quieres pelear de nuevo? ¡Jajaja! ¡eres un niño divertido!" – Mike soltó una carcajada al ver al mocoso adoptar esa pose frente suyo.

¡Esto era inaudito, al parecer este chico se había vuelto un loco suicida!

Mike ya había olvidado la última vez que alguien así, a parte de este mocoso, intentó enfrentarlo, y no le había ido muy bien.

Por lo que sabía, aún seguía en sillas de ruedas y comiendo sus alimentos licuados a través de una pajilla.

Es por ello que en su preparatoria nadie era tan loco o suicida como para pararse frente a él y desafiarlo a una pelea a puño limpio.

¡Y si bien este chico no sabía esta información, era demasiado evidente la diferencia de contextura a simple vista!

"Bueno… creo que ya no seré amable contigo… te mandaré al hospital por una buena temporada… jejeje, aprovecharé tu ausencia para-"

"¿Solo sabes hablar? Cállate y pelea, maldito simio come bananas"

¡Antes de que Mike terminara de hablar, fue interrumpido por la voz monótona de Hiroki, quien lo insultó tan fácilmente!

¿Simio?

¡¿Acaso le dijo simio?! 

¡La última persona que lo llamó así no había sido encontrada hasta ahora!

"Motherfucker… ¡esta vez ya no jugaré contigo!"

¡Con un grito colérico, Mike avanzó rápidamente y lanzó su gran puño derecho en dirección a la cara del mocoso frente suyo con la intención de partirle la cara!

*Baam*

"¡Cough!"

¡No obstante, el sonido del golpe que se escuchó no se produjo por su puño chocando contra la cara del mocoso.

"¡Como… mierda… ¡hiciste eso!"

Mike exclamó con sorpresa en el rostro luego de darse cuenta que el mocoso frente suyo lo esquió rápidamente y lo contraatacó con una gran fuerza.

¡El sonido del golpe se produjo cuando el puño de Hiroki conectó de lleno contra el vientre de Mika, haciendo que todo su aire salga expulsado!

Mike no pudo evitar apretarse el abdomen debido a que sentía una gran dolor que le parecía retorcer las tripas.

El estudiante extranjero un había sido fuerte durante toda su vida, eso era un hecho. 

Cuando comenzó a pelear, tuvo varias pérdidas entre sus victorias. No obstante poco a poco las pérdidas fueron convirtiéndose en derrotas.

Ya hacía tiempo que alguien le había provocado dolor con un solo golpe.

Pero esto no era lo que le asustaba a Mike, pues sabía que en algún lugar existía alguien más fuerte que él, eso era lo que su padre siempre le decía. Por ello nunca se asustaría al volver a ser golpeado.

¡No obstante, lo que lo sorprendía en estos momentos era el hecho de que este mocoso, quien tenía una fuerza promedio en sus golpes, nunca le hizo algún daño. Pero ahora, uno solo de esos golpes lo había lastimado!

¡¿Cómo carajos es que ahora se había vuelto tan fuerte?!

"¿Prefieres hablar o volverás a peleas? Maldito simio come banabas"

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"Vaya, sí que está demostrando una buena cantidad de fuerza ¿verdad jefe?"

"Y que lo digas… parece que está utilizando su ira para catalizar esa energía y trasmitirla a sus golpes"

Sentados sobre un tejado, nuestro protagonista y su primer subordinado observaban la pelea con binoculares, mientras comían popcorn de unas bolsas.

Ellos habían estado junto a Hiroki hasta hace unos minutos mientras seguían la ubicación del estudiante transferido para que el chico pudiera enfrentarse a él sin ningún problema.

Era hora de que tomara su venganza, y que nuestro protagonista completara su segunda misión.

Como Hiroki aceptó ser uno de sus subordinados, Yuuma hizo lo mismo que le hizo a Yuukiteru, haciendo que el mocoso quedara inconsciente por una horas. 

No obstante, antes de ello ya habían hecho un plan para despistar a la madre de Hiroki con tal de que no sospechara nada.

Aunque el plan no contemplaba el que Hiroki despertara justo para la cena y barriera toda la comida que su madre había preparado.

No obstante, eso no causó ninguna sospecha en la familia del chico salvo algunos comentarios, por lo que dejaron que el muchacho se fuera a dormir. Fue en ese momento que salió por su ventana y se encontró con los otros dos, dirigiéndose en auto hacia la ubicación de su objetivo.

"Parece que los dos están igualados en fuerzas… ¿eso no es mucho para Hiroki?" – luego de un momento, Yuukiteru preguntó.

"Lo es, pero tú lo escuchaste" – Yuuma respondió – " A pesar que le dije que la modificación del cuerpo no le daría mucha fuerza al inicio, el me pidió que le diera toda la fuerza necesaria para vencer a ese tipo, no importa las consecuencias"

Si bien Hiroki había pasado por el mismo cambio que Yuukiteru, no quería esperar a que su fuerza aumentara de a pocos. Él quería tener su venganza lo más rápido posible sin importar el costo.

Esto era algo que no estaba dentro de los planes de nuestro protagonista.

Yuuma haría la misma jugada que con los tipos de la posada. Secuestraria al estudiante transferido, experimentaría un poco con él y cuando ya no le sirva le permitirá a Hiroki matarlo.

Pero la suplica del mocoso de pelo pintado lo hizo recapacitar.

Asi que en la modificación de su Núcleo adicionó una micromatriz para que pueda expresar más energía de lo usual, por unas horas aunque sea, la cual pueda transformarla en fuerza física y así poder derrotar a su contrincante.

Aunque eso le provoque un dolor terrible luego de terminar de usarla ya que su cuerpo no estaría para soportar dicha carga. Incluso podría llegar a tener tendones rotos y músculos desgarrados.

Si, sufriría bastante el condenado.

Pero esto a nuestro protagonista no le quitaba el sueño, pues podía curarlo fácilmente. Ahora, que lo quiera hacer es otra historia.

"Jefe, parece que ya va a acabar" – Yuukiteru exclamó luego de unos minutos al ver cómo es que la pelea, al parecer, estaba llegando a su fin – "Parece que Hiroki va a ganar"

"Pues claro que ganaría, ya que ese mocoso se ha entrenado como loco en diversos estilos de lucha. Lo único que le faltaba era la fuerza necesaria para lograr sus objetivos"

Yuuma sonrió y se puso de pie, cogió de la camisa a su subordinado.

"¿Humh? ¿Jefe? ¡J-jefe!"

Sin hacerle caso a los gritos de su subordinado, Yuuma saltó desde el techo que se encontraba a diez metros sobre el suelo, cayendo con lentitud, como si en vez de acelerar, estuvieran frenándose.

"¡Jefe! ¡avíseme cuando vaya a hacer eso!" – Yuukiteru habló con un tono nervioso y asustado.

"No seas marica, debes acostumbrarte a esto ya que en el futuro debes aprende a hacerlo también. No dijiste nada cuando te subí ¿Por qué te quejas ahora" – Yuuma respondió burlonamente – "Vamos, es hora de acabar con esto"

Yuukiteru solo resopló en silencio, no dijo nada más y siguió a su jefe.

Cuando llegaron a la zona de la pelea, todo ya había acabado. 

En un lado de la pista estaba sentado Hiroki respirando pesadamente y luchando por mantener su conciencia, con el rostro ensangrentado y con múltiples moretones en todo el cuerpo.

En medio de la pista estaba tendido Mike, quien tenía un solo ojo abierto, con el cual miraba fijamente a su contrincante.

Si pudiera hablar en estos momentos estaría maldiciéndolo, pero tanto su garganta como su boca estaba completamente destrozadas.

Su ropa estaba hecha trizas, y su cuerpo estaba lastimado por todos lados. 

Es por este motivo que Hiroki se había quitado la ropa, pues en esta pelea callejera sería una desventaja cogerte de una prenda para inmovilizarte.

No obstante, lo que más resaltaba era una protrusión blanquecina que salía de una de sus heridas en la pierna, la cual era su hueso tibia que había sido roto por una patada de Hiroki. 

"Bien hecho mocoso, lo lograste" – Yuuma habló mientras le daba un pulgar arriba a su nuevo subordinado.

Hiroki solo atinó a asentir y a levantar un pulgar también.

"Es hora"

Con estas palabras, Yuuma hizo aparecer un cuchillo en su mano y se acercó para entregárselo a Hiroki.

Yuukiteru reconoció esta arma ya que fue la misma con la que él mató a los tres sujetos el día de ayer.

Hiroki por un momento dudó en comer el cuchillo, ya que solo quería venganza. Pero luego recordó que ya había vendido su alma al diablo, por lo que no dudó más y lo tomó con fuerza.

A duras penas, se puso de pie y comenzó a caminar con lentitud hacia donde estaba tirado contrincante.

Mike, quien vio y escuchó todo, comenzó a gemir y a tratar de ponerse de pie, pero no pudo moverse, pues todo su cuerpo estaba lastimado.

Hiroki se le puso el pie encima de la cabeza de Mike, y lo vio con una mirada de desprecio.

"Te odio por haberme quitado algo precioso en mi vida…. pero agradezco por haberme mostrado el verdadero rostro de quien decía ser mi amiga"

*Splash*

¡Reuniendo toda la fuerza que le quedaba, Hiroki hundió la hoja del cuchillo en la cabeza de Mike, desgarrando el cuero cabelludo y rompiendo en pedazos sus cráneo!

"¡Pero el que intentaras algo con mi madre y mi hermana es algo que no te lo puedo perdonar imbécil!"

*Splash*

Hiroki sacó el cuchillo y lo volvió a estrellar contra la cabeza del moribundo Mike.

"¡Imbécil!"

*Splash*

"¡Escoria!"

*Splash*

"¡Basura!"

*Splash*

Con cada acuchillada, un poco de materia cerebral salía impregnada en la hoja de la cuchilla, además de las sangre que salpicaba por todas partes.

Esto siguió hasta que a Hiroki ya no le quedaban fuerzas, y Mike ya no tenía algo que podría llamarse cabeza.

[Segundo objetivo: evitar que la amiga de Mori Hiroki arruine su vida al hacer que su madre y su hermana caigan ante la depravación. Estos personajes provienen del hentai NTR 'Kokujin No Tenkousei NTR Ru'– ¡completado! Las ganancias se darán cuando anfitrión regrese a su mundo]

[Misión oculta 'llevar al lado oscuro un alma pura y convertirlo en tu subordinado leal' – ¡completado! Ganancias se darán cuando anfitrión regrese a su mundo]

[Misiones completadas: 2/5 misiones]

[¡Si completas las 5 misiones en menos de 5 días podrás conquistar este mundo!] 

"Jefe, ya se desmayó"

Mientras Yuuma veía las notificaciones del sistema, Yuukiteru lo llamó para informarle que Hiroki había perdido el conocimiento.

"Bueno, era de esperarse, fue demasiada carga para él" – nuestro protagonista se acercó y comenzó a utilizar su habilidad 'Control de Energía Interna' para sanarlo un poco.

Luego, con la misma habilidad, controló su energía para limpiar cualquier cosa que implique su participación en esta pelea, como huellas, cabellos o sangre.

"Toma, recoge su ropa y llévalo al auto, demoraré un poco con el resto"

Yuukiteru asintió y tomó al inconsciente Hiroki.

Luego de ello, Yuuma tocó el cuerpo sin vida de Mike y al instante siguiente comenzó a encogerse y comprimirse en una especie de masa de carne seca.

Con esto no quedó huella de que aquí hubo una pelea, menos un asesinato.

"Bueno, es hora de eliminar las cámaras que estaban apuntando aquí" – Yuuma estiró su cuerpo y comenzó a marcar sus objetivos.

Una de las razones por las cuales se había subido a una azotea a ver la pelea fue para vigilar y ver si había cámaras apuntando aquí.

 Sería bueno si no hubiera, pero como era una zona industrial había unas cuantas. No obstante eso no sería un problema para él.

Sin embargo, justo cuando estuvo a punto de moverse a una gran velocidad para a cavar con todo, el sistema le dio su nuevo objetivo.

*Ding, ding, ding*

[Tercer objetivo: ¡evita que Rinka Okino arruine la vida hermana de Otome Sakuragi, la amiga de su hermano Kazuki, al hacer que ella caiga en la depravación! Estos personajes provienen del hentai NTR 'Otome Dori']

"¿Eh? ¿Otome Dori?"

Yuuma se quedó quieto por la sorpresa que sentía en estos momentos, pues a diferencia de las otras dos misiones ¡él si conocía la trama de esta misión!