Capítulo 5 - Organizando el Banquete - Parte Dos

"La casa de la hermana Li Mei no estaba

lejos de aquí, está en el Puente Yuansheng a lo largo del río y su casa está cerca de la cabecera del puente".

Al ver un par de linternas rojas colgadas en la puerta, Sun Ji se dio la vuelta y le dijo a Tian Long: "Buena suerte parece que no hay invitados". Después de eso, abrió la puerta y entró al patio como una persona familiar. Gritando: "¡Hermana Mei! Sal a recibir a los invitados".

Al pasar un tiempo a ambos lados de la cortina de sedas, apareció una mujercita encantadora, de unos veinte años, alta y esbelta, de una figura curvilínea regordete, cejas seductoras y ojos de fénix. Estaba cubierta con una chaqueta de satén roja de manga ancha con doble tapeta, pero la tapeta no estaba abrochada, la blusa debajo estaba medio cubierta y las dos protuberancias abultadas en el pecho temblaban y perforaban el corazón, una falda de seda verde debajo y los dedos puntiagudos de satén quedaron expuestos mientras se movía ligeramente.

La mujercita con la fragancia encantadora se acercó, en sus manos sostuvo un pequeño abanico, se acercoy con sus dedos parecidos al jade blanco tocó a Tian Long.

Ella sonrió como una campana de plata y dijo: "Maestro Sun, no ha estado aquí por mucho tiempo, ¡veo que trajo invitados!"

Los ojos de Tian Long estaban un poco abiertos cuando la miró.

Esta mujer realmente se atreve a provocarlo, esta no es la dinastía Tang donde la gente se atrevía a mostrar la mitad de sus senos, desde que viajó en el tiempo ha visto muchos tipos de ropa de mujer, pero ya sean cuellos enrollados o abiertos, los cuellos son muy ajustados y algunos incluso tienen cuellos altos.

Hasta ahora no ha visto formas de vestir que se atreven a revelar tano, con sólo esta exposición, salen a relucir todo tipo de encantos.

Sun Ji bromeó un poco, le presentó a Tian Long y le dijo: "Este es el enviado Tian, que trabaja como oficial de investigación en el Yamen".

"Oh, resulta que es el enviado oficial, no está aquí para arrestar a la familia de esclavos, ¿verdad?", bromeó la hermana Li Mei con una mirada coqueta: "La familia de esclavos es débil y no puede soportar los estragos, por lo que los funcionarios deberían cuidarme bien".

Tian Long se río entre dientes y extendió la mano para atrapar a la hermana Li Mei, "Entonces hermana, por favor ven conmigo".

La hermana Li Mei se dio la vuelta suavemente y dijo: "La familia de esclavos es demasiado negligente con los invitados entremos a la habitación para hablar."

Justo hace un momento Li Mei evitó a Tian Long, esto lo había hecho por que antes cuando se acercó no sabía quién era, pero ahora sabía la identidad de quién estaba al frente suyo, en estos momentos se sentía muy nerviosa.

Li Mei tenía cierto conocimiento de las sectas, había visto el colgante que representaba a la Secta Seiyutan, por lo que sabía que Tian Long no era una persona ordinaria a la cual podía bromearle.

Los tres se sentaron en el vestíbulo y una linda muchachita de quince o dieciséis años se acercó para traer té y agua, puso algunas frutas y comida en la mesa. Sun Ji miró a la joven y dijo: "Li Huan se está volviendo cada vez más enérgica". Luego le dijo a Tian Long: "Esta es Li Huan, ella y la hermana Mei son hermanas completas".

La hermana Li Mei rara vez decía sus orígenes: "Las hermanas esclavas han sido reducidas a un estatus humilde, al ver que mi pequeño Li Huan ha llegado a la edad de abandonar la casa espero que el Sr. Sun la cuide y la presente a algunos buenos benefactores".

Hoy en día, las prostitutas también son llamadas a salir del burdel cuando reciben clientes por primera vez y a veces tiene que hacer el papel de una mujer casada.

Por supuesto, el dinero para casarse con ellas también es muy caro.

"Eso es todo, lo tengo hermana no te preocupes definitivamente le encontré un pez gordo", Sun Ji asintió.

Tian Long sacó un pequeño lingote de oro, lo puso sobre la mesa y le dijo a la hermana Li Mei: "Hermana por favor no acepte otros invitados estos días, un invitado distinguido vendrá a su casa, este es el depósito".

La hermana Li Mei felizmente tomó el dinero y volvió a sus viejas costumbres: "¿No es el invitado el que está presente? La familia esclava está muy decepcionada".

Sun Ji también la ayudó y dijo en tono de broma: "Hermano Tian, ¿no quiere probar primero las cosas de la hermana Mei? Luego podrá regresar e informar verdad".

¿Quién sabe cuál es la mentalidad de este príncipe?

Pensó Tian Long es mejor tener cuidado y no meterse con esta chica todavía. Después de discutir todos los asuntos con ellos dos, se levantado y se fue.

Después de regresar para informar, el Maestro del condado elogió a Tian Long por su eficiencia e inmediatamente corrió a su mansión para encontrarse con los invitados y concertó una cita para entretenerlos en la casa de la hermana Li Mei mañana por la noche, la tarde del día 14.