CAPITULO I: El chico de los hombros anchos

Quizá fue una primavera cuando vi por primera vez esos hombros anchos, fue muy fugaz, y sin importancia pero el olor de su fragancia y lo bien que se veía su espalda se quedó grabado en mi mente, estaba decidida a hablarle, fuera como fuera tenía que entablar conversación con el, hasta que el choque con alguien completamente irrelevante en todo esto hizo que la maqueta de arquitectura en mis manos saliera volando y se estrellara contra el piso destruyéndose y aboyándose en algunas partes

-¡Carajo!- maldije en mi lengua nativa, el coreano

-¡Oh por dios!- escuché en un perfecto acento francés, algún nativo, son muy comunes sobretodo porque estamos en Canadá- ¿Estás bien?- la preocupación en su

quevoz era evidente

-Yo si, pero...mi trabajo no tanto- señale mi proyecto destruido

-Oh...yo- iba a ofrecerse a hacer algo pero algunas voces apurándolo interrumpieron

-Esta bien, ve- dije amable, aunque realmente yo no lo quería cerca.

Junte todo lo que pude de mi magullado proyecto y me dirigí a la sala de clases, digamos que mi maestra no es muy piadosa.

Apenas llegué Marina me recibió con

-¡Diablos!, ¿que ocurrió?- su tosquedad me hacía sentirme respaldada, es una persona muy masculina, y fuera de este mundo

-Choque con alguien- comenté sin más

- ¿Por lo menos era guapo?- soltó tan de la nada que lo único que atiné a hacer fue reír

-Fue molesto, mira lo que causó el idiota- solo asintió entendiendo que aunque hubiera sido guapo ni atención le prestaría- ¿Alguna noticia de la bruja loca?

-Ninguna, Malén dice que se intoxicó y que está internada en algún hospital- otra cosa es que siempre se entera de todo lo que pasa, entre alumnos o maestros, no hay excepción, conoce todo

-¿Malén?, ¿Quién es Malén?- y aquí se hace obvio que yo estoy siempre en las nubes

-Mmm...Malén es la chica alta, vamos, la que me gusta

-¡AH, ESA MALÉN!- grite muy alto que Marina literalmente salto sobre mi para taparme la boca

-¡Si, pero no lo grites!- susurró en tono molesto, aunque yo supe muy bien que estaba apenada, nadie más que yo sabe que es lesbiana

-Bueno, bueno, ya esperemos que sea cierto- y para nuestra fortuna lo fue, le costará una semana de asistencia- Oye- la llamé y al instante volteo

-¿Que paso?

-¿Habrá en arquitectura algún chico con los hombros anchos?- pregunté muy ambigua

-Mmm, si- contesto sincera

-¿Y como se llama?- pregunté un tanto emocionada

-Luke, Alexey, Haimerich...

-Ok, ok, eso fue muy ridículo lo acepto...pero ¿alguien que sea alto, que tenga el cabello rubio largo hasta los hombros y no se, que se vista como metalero?- mi esperanza de encontrarlo se estaba esfumando, Marina conoce a la mitad del mundo y la otra mitad la conoce a ella, como celebridad que es, debe conocer si o si a alguien así

-Pues...Haimerich cabe muy bien en tu descripción, aunque Frederick su hermano también y Alexey, todos alemanes , ¿Porque?- si seguía hablando y dándole lo que quiere su curiosidad puede explotar

-Vi alguien así- trate de no especificar

Estoy segura que diría algo que mejor huí de ahí diciendo que lo buscaría; afuera es todo tan estético, tan elegante, parece algún patio de algún castillo francés

-¡Alexey!- gritaron a lo lejos y cuando reconocí el nombre voltee, pero ninguno de los dos chicos eran el chico de los hombros anchos, estuve a nada de darme por vencida hasta que lo vi correr con una camisa que decía Haimerich, bueno...al menos ya se su nombre, y que está en el equipo de baloncesto