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Naruto Gremory

Ice_Bear041 · Anime & Comics
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6 Chs

capítulo 5

–5 de febrero de 2012–

(2 meses y algunos días antes del canon)

En Ucrania, más exactamente en uno de los bosques dentro del área de Chernóbil, donde todo era oscuridad gracias a los frondosos árboles — que impedían la entrada de la luz de la luna — se podía apreciar como una silueta humanoide, de al menos 1.69 m y masculina, corría desesperadamente en busca de escapar de algo…o de alguien.

Acercándonos más podemos ver que la silueta es un "joven", de tal vez 15 años, con cabello blanco y ojos rojos. Vestido con un traje formal blanco con camisa negra y guantes negros con palmas rojas, que en su espalda lleva los restos de una guadaña blanca con toques negros y rojos y una rosa en la anilla que une la hoja con el mango.

[ Eber — Bestia del abismo, segundo capitán del ejército del abismo ]

Eber es un agente del abismo enviado por Manus a hacer reconocimiento del mundo sobrenatural y que en estos momentos se encontraba huyendo o intentando huir de sus perseguidoras.

"(Diablos, se suponía que sería fácil)" pensó con frustración mientras aceleraba el paso y detrás de él varios borrones, en los cuales solo se distinguían líneas celestes brillantes, lo seguían como si nada.

Mientras corría e intentaba buscar o pensar en una ruta de escapé al abismo Eber tenía una mirada totalmente diferente a cuando llegó al mundo, atrás quedó el joven de mirada arrogante y egocéntrica, dejando ahora solo una mirada de temor puro.

Él no sabía que había pasado con sus compañeros de escuadrón, ni le importaba, solo suponía que habían sido igualmente cazados por un grupo de sus perseguidoras actuales al momento de separarse.

"(Mierda, sin salida…y mis reservas están vacías)" pensó nervioso viendo que por estar pensando en encontrar una manera de escapar no vió que entró a una ¿fábrica? ¿O era una planta nuclear? bueno no sabía, lo único que importaba es que ahora estaba atrapado y sin salida.

Flush…Flush…

"¿Qué?" Eber apenas sintió como algo atravesaba el aire a gran velocidad y se dio la vuelta nervioso, en la oscuridad logró visualizar como borrones con líneas azules entraron en la habitación y rápidamente se camuflaron en la oscuridad del lugar.

Su nerviosismo y miedo sólo pudieron aumentar cuando vio como 4 pares de ojos — bueno 3 y medio — brillaban en la oscuridad, todos enfocados en él. Pero detrás de todo su miedo crecía una gran irá y odio junto a frustración, esos ojos lo miraban con aburrimiento, como si él — el gran segundo capitán del abismo — no fuera nada para ellas.

Pasaron unos minutos donde las perseguidoras solo se dedicaban a observar los movimientos de su objetivo, para ver qué intentaría nuevamente para escapar de ellas, el silencio reinó durante esos minutos hasta que…

"¡¿Qué esperan idiotas?!" Gritó Eber "¡Venga, matenme si pueden mierdas insignificantes!" Siguió con sus gritos esta vez provocando a sus perseguidoras mientras tomaba la guadaña rota de su espalda y empujaba lo último de sus reservas al arma haciendo que está brille en un color púrpura bastante fuerte.

Clink…

"¿Qu..? ¡Ahg!" Eber no sabía que ocurrió, en un momento estaba a punto de dar su último ataqué y hacer explotar todo en el área en un radio de 2 km y al siguiente se da cuenta de que su guadaña se hace polvo y recibe un golpe demoledor que lo hizo volar contra la pared detrás de él agrietando la misma por el impacto.

Clap…Clap…

Clap…Clap…

Clap…Clap…

Numerosos pasos resonaron en la oscuridad acercándose a Eber, él cual vio como poco a poco se acercaban siluetas femeninas que no podía distinguir más allá de sus ojos brillantes y las tallas azules neón en su uniforme, dichas siluetas siguieron tranquilamente hacia él ignorando todo lo demás — incluido el techo que había caído en pedazo detrás suyo — cuando finalmente llegaron frente a él coincidentemente las nubes que ocultaban la luna se despejaron permitiéndole ver a sus perseguidoras.

La primera la recordaba perfectamente, era una mujer joven de cabello plateado con orejas y cola de lobo.

[ Lyall Gremory (apellido honorífico) — Chaos wolf, demonio clase alta/youkai lobo/reina de Rose ]

A su lado, estaban otras tres que no conocía, pero suponía que la más importante era la mujer pelirroja frente a él. Era alta, 1.78 m, con su cabello rojo atado en una coleta alta dejando algunos mechones enmarcando su rostro, sus ojos, o bueno, su ojo era de un brillante amarillo ámbar que lo ponía nervioso, parecía que podía ver su alma, mientras su ojos izquierdo era cubierta por un parche blanco.

[ Rose Gremory — super demonio, emperatriz de la destrucción. Rey y líder del grupo mercenario FIRE FORCE ]

La siguiente era una muchacha joven, bonita y hermosa de altura media — 1.65 m — y de cuerpo muscular con el pelo negro largo, liso y ojos púrpuras. Con sus flequillos cuelgando justo encima de sus cejas.

[ Maki Oze — Alfil de la ceniza, Demonio clase alta/ alfil de Rose ]

La última era una joven de estatura media con cabello rubio corto y ojos azules junto a una figura esbelta pero curvilínea y bien dotada que es ocultada por sus ropas.

[ Iris Gremory (apellido honorífico) — monja de las cenizas, Demonio clase media—alta, alfil de Rose ]

Las 4 féminas vestían prácticamente igual, usan equipo de búnker de bombero negro grisáceo, compuesto por pantalones anchos grises con lienas negras en la parte de los muslos y en la parte más baja tienen líneas azul neón, usan camisillas (o suéter sin mangas) negras ajustadas encajadas a su pantalón junto a un cinturón negro, y sobre esto usan una chaqueta grande con blindaje que tiene líneas azul neón en las muñecas y el área del estómago. También la chaqueta cuenta con un "collar" que puede ser usado como máscara anti—gases, además de todo usan guantes blancos semi—blindados.

Aunque claro estos están personalidades con el de Lyall teniendo un parche en su hombro con la palabra reina y el símbolo de la pieza de ajedrez, junto con una capucha que tiene los espacios para sus orejas de lobo.

Maki por su parte en lugar de usar una camisilla usa un top deportivo y actualmente tiene su chaqueta atada en su cintura, junto a tener un sombrero de bruja con un parche donde al igual que Lyall tiene el nombre de su pieza y su símbolo.

Iris por su parte en lugar de pantalones usa una falda larga que cubre hasta sus pies junto a un hábito de monja.

Y Rose al igual que maki usa un top deportivo pero mantiene su chaqueta abierta y no usa ningún sombrero o algo que le cubra la cabeza.

"Ja, ja…¡Jajaja!" Se empezó a reír Eber como un maníaco bajo la atenta mirada de las cuatro féminas "cobardes, todas ustedes no son más que cobardes, atacar a un indefenso en grupo ¿Dónde está su honor?" Decía tratando de provocarlas y que lo dejen escapar, lástima que su tonta estrategia no funcionará.

Eber solo podía enfadarse más al ver cómo lo ignoraban;

Aunque, se quedó viendo con curiosidad cuando la chica con ropa de monja empezó a juntar sus manos formando una especie de triángulo y empezaba a ¿Orar? ¿Que no eran demonios? Su curiosidad solo creció cuando vio a la pelinegra y la peliplata hacer lo mismo seguido de la pelirroja.

La llama es el aliento del alma

Escuchó Eber la voz melodiosa de la monja rubia, su voz parecía resonar en todo el lugar, fuerte y claramente a pesar de no ser más que un susurro.

El humo negro es la liberación del alma

El capitán del ejército abismal se puso nervioso y nuevamente temió por su existencia al sentir como una gran cantidad de magia empezaba acumularse en la zona, era mucha magia además de ser muy cálida, incluso se atrevería a decir que gentil y si tuviera que ponerle un sentimiento sería como la piedad.

Cenizas fuiste y cenizas serás

Un gran círculo mágico empezó a extenderse por la zona y Eber al ver que todas estaban concentradas en la oración tomó la opción que más lo beneficiaba, escapar, en un estallido de velocidad llegó a la salida pero antes de que pudiera salir se sintió ingrávido y en un parpadeo estaba nuevamente en su posición anterior.

Que tu alma regrese a la gran llama de primordial

Aquí fue donde Eber supo que no podía escapar y estaba en el centro del círculo mágico e intentó atacar a iris que era la que guiaba la oración, solo para ser repelido por Rose que de una patada lo devolvió al centro del círculo del cual salieron cadenas que se apretaron fuertemente a su cuerpo quemándolo de paso.

¡LÁTOM!

Gritaron todas para que el círculo mágico brillará con intensidad y más cadenas apresaran a Eber.

"Mi señora, está listo ¿Quiere que lo terminé ya?" Hablo/preguntó Iris respetuosamente a su rey y amiga.

"Aún no Iris, dame un segundo, necesitamos información" dijo Rose acercándose a Eber que mantenía la cabeza baja.

Lentamente Rose se quitó el parche manteniendo cerrado su ojo izquierdo, se acercó a Eber y tirando de su cabello hizo que levantará la vista.

"¡Ja! Patética demonio ¿En serio piensas que hablaré?" Dijo burlonamente tratando de mantener su imagen, aunque Rose y las demás podían ver y oír claramente su miedo, bueno literalmente podían olerlo pero meh detalles.

"Eso no será necesario" hablo Rose impasible, y su voz sedosa y arrogante hizo que Eber tuviera un escalofrío y cometió su último error, cruzar miradas con Rose.

"¿Qué es ese oj…?" ¡Clap! "AHHHHHH"

Eber no pudo terminar de pronunciar su última pregunta cuando Iris recibió la señal de terminar el ritual, dando un pequeño aplauso que resonó en toda la planta nuclear las cadenas que lo ataban atrajeron el círculo mágico y múltiples círculos más empezaron a rodearlo para de inmediato grandes llamaradas de un fuego rojo carmesí lo cubrieran.

Lo último que Eber vio antes de ser consumido por las llamas fue el ojo izquierdo de Rose, un ojo rojo como la sangre con un shuriken curvo de 3 aspas que giraba lenta e hipnóticamente.

Rose simplemente cerró su ojo nuevamente volviendo a ponerse su parche antes de darse la vuelta y sonreírle a su nobleza/amigas

"Misión completada chicas" dijo tranquilamente.

"Fue mucho más fácil de lo que esperaba" dijo Maki con Iris asintiendo de acuerdo.

"Si, solo espero que no todos sean iguales a él, ya fue aburrido pelear con 4 de ellos" dijo Lyall quejándose de su enemigo.

"Ya, tranquila Lyall, ya verás que los próximos si serán un reto para nosotras" habló Rose tomando un cubo de 30 cm³ totalmente negro, este cubo era ambrosía oscura, parecida a la comida de los dioses pero a diferencia de esa que si alguien no divino las consumía moría, ésta ambrosía solo podía ser consumida por demonios dándoles también un plus en su poder — aunque eso último solo cuando la consumían por primera vez —

"Chika, informe de las demás" dijo la pelirroja a través de un intercomunicador en su oreja derecha.

"Oh, claro. El escuadrón 2, 3 y 4 informaron hace unos minutos que habían exterminado a sus objetivos y volvieron a la base hace poco" sonó una voz alegre a través del intercomunicador de las 4.

"Bueno ya lo oyeron, es hora de volver" dijo Rose para que todas desaparecieran en cenizas que fueron llevadas por el viento.

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— 3 meses después —

"Ahh~ siii~ mashh~"

"Oh Naruto—sama~"

"Ah~ Naru~ no~ paresh~"

Esos y más gemidos eran los que resonaban en una hermosa mansión que parecía combinarse con un castillo, hecha de ladrillos y pintada de blanco con un tejado rojo oscuro con decoraciones doradas.

Este hermoso híbrido de castillo y mansión moderna era pertenencia de Rose; la mansión funcionaba como hogar principal de Rose y su nobleza así como su base de operaciones principal.

Y en este momento en medio de la amplia habitación de Rose se llevaba a cabo un gang bang entre ella, su nobleza y Naruto.

Resulta que el pelirrojo mayor había prometido a Rose y su nobleza darles una recompensa de su elección, solo tenían que retener efectivamente a los múltiples exploradores del abismo, tarea que cumplieron perfectamente y más con el hecho de que asesinaron a un capitán.

Entonces el pelirrojo había decidido darles dicha recompensa ese día, él esperaba que le pidieran su bendición o que les enseñará algún hechizo pero lo que pidieron fue que tomara sus virginidades—algo que él como dios demonio de la lujuria no se negaría a cumplir— y así es como llegamos a este escenario donde Rose se encuentra actualmente montando a Naruto mientras a su alrededor —en su cama de 1m x 1m— yacían todas sus piezas y amigas que hace poco habían sucumbido ante el libido del pelirrojo cayendo en una dulce y placentera inconsciencia.

"Ahh siiii~" gimió Rose fuertemente mientras enterraba su uñas en los hombros de Naruto por el placer que le dió su orgasmo.

Después de un minuto el orgasmo de la pelirroja había terminado y ésta cayó sobre el pecho de Naruto con una sonrisa de satisfacción y éxtasis mientras poco a poco cerraba los ojos en busca de dormir un poco para descansar de sus actividades sexuales…o eso era su plan.

"¿Qué pensabas hacer?" Susurró Naruto al oído de Rose en un gruñido profundo mientras sus manos recorrían su hermoso cuerpo para terminar agarrando sus nalgas con algo de fuerza.

Rose por su parte se estremeció de placer y excitación al sentir su cálido aliento golpear su oreja y sus manos sujetar firmemente su retaguardia aún sensible y un poco enrojecida por las nalgadas que había recibido

"Iba a dormir ¿Por?" Respondió la pelirroja en un susurró somnoliento.

"Ohh me temo que eso no se podrá, aún no hemos terminado" le respondió Naruto para morder el lóbulo de su oreja sacando un dulce y suave gemido de la pelirroja.

"¿A qué te refier…? Ahh~" empezó a preguntar Rose antes de ser interrumpida cuando su voz se rompió en un gemido gutural al sentir como Naruto volvía a entrar en ella una vez más "es—espera, es—estoy…shenshimmm~"

La pelirroja no tuvo tiempo a protestar cuando Naruto empezó su vaivén nuevamente, enviando una y otra vez descargas de placer a su sensible cuerpo.

El pelirrojo rápidamente había cambiado la posición en la estaban y dejó a Rose en cuatro con espalda arqueada y su trasero al aire para su disfrute; agarrándose firmemente de sus caderas empezó a aumentar la fuerza y velocidad de las embestidas que daba aumentando el placer de Rose quien ya tenía la mente en blanco mientras mordía su almohada para amortiguar sus gemidos y sus ojos pasaban —sin darse cuenta— de su habitual azul marino a un tono rojo brillante, y lo mismo ocurría con el pelirrojo mientras ambos se dejaban llevar por el amor y la lujuria que se tenían.

—Al día siguiente—

La pequeña sección de sexo había durado hasta las 2 de la mañana —algo increíble incluso para estándares sobrenaturales consideran que habían comenzado alrededor del medio dia— Dónde las demás chicas habían despertado para unirse nuevamente y otra vez caer rendidas ante el placer.

Y esa escena fue la que recibió a Venelana después que ésta destruyera la puerta.

—15 minutos antes—

Venelana había llegado a la mansión de su hija, normalmente venía para hablar con ella y su nobleza además de pasar tiempo madre e hija o entrenar pero hoy era diferente, había decidido que Rose debía interactuar más con Rias, no para "mejorar" su relación sino para que Rias recibiera un golpe de realidad.

La tenía totalmente decepcionada el hecho de que a pesar de llamarse a sí misma "diablesa de clase alta" no llegará al título más allá del aspecto de reservas mágicas, aparte de eso no tenía nada de clase alta, no tenía entrenamiento cuerpo a cuerpo, no sabía más allá de hechizos comunes y poco comunes, no tenía creatividad al usar su PoD, y esos eran sólo unos pocos aspectos que destacar.

Ni hablar de su nobleza, no solo dependía demasiado de ella sino que todos sus integrantes tenían algún trauma que evitaba desarrollarán su máximo potencial, eso sólo demostraba su fracaso como rey, y su última "adquisición" su peon, no era más que un mocoso pervertido con un arma poderosa y ella estaba poniendo sus esperanzas de salir de su compromiso arreglado en él, era ridículo.

Suspirando Venelana salió de sus pensamientos al ver que había llegado a la puerta principal, normalmente se teletransportaria pero sabía que su hija había cambiado la barrera de seguridad y no había podido introducir su firma mágica para su acceso.

Tocando el timbre esperó a que alguien le abriera, cuando después de un minuto no pasó volvió a tocar el timbre, nuevamente 5 minutos después nadie le abrió, intentó una última vez y cuando no le abrieron simplemente destruyó la puerta, ya con su paciencia consumida y bastante molesta porque la hicieran esperar tanto.

Cuando entró esa irá que tenía fue reemplazada por curiosidad, la mansión estaba completamente vacía, caminando hacia la cocina la encontró igualmente vacía así como los pasillos por los cuales había caminado.

Ya esto se le hacía muy raro, normalmente habían un montón de copias de Chika —la secretaria de su hija— vestidas y actuando como maids pero hoy no había ninguna.

Paso tranquilamente revisando cada habitación en busca de las integrantes de la casa hasta llegar a la habitación de su hija, se preguntarán ¿Acaso no puede sentir su firma mágica? Pues la respuesta es no, la mansión bloqueaba las señales entre las habitaciones así que a menos que estuviera en la misma habitación no sentiría a los demás integrantes de la mansión.

Pensando que está —al igual que las demás habitaciones— estaba vacía simplemente intento abrir la puerta, pero cuando esta no se abrió simplemente decidió destruirla y cuando lo hizo abrió los ojos sorprendida por la escena frente a ella.

Y así es como llegamos a este momento, donde Venelana observa en silencio el panorama de la nobleza de su hija, junto a su hija y su secretaria están durmiendo todas en la gran cama de su hija, desnudas, bañadas en sudor y lo que supuso era semen y su hija estaba en el medio de la cama durmiendo sonriente en el pecho de Naruto.

"¡Rose!" Gritó Venelana para despertar a su hija, y no solo logró despertarla a ella sino también a toda la nobleza —Chika incluida— y a Naruto quienes se levantaron —en el caso de las chicas— un poco alteradas por el grito.

Todos voltearon a ver el origen del ruido y vieron a una sería Venelana en el marco de la puerta mientras los miraba a todos con una dulce sonrisa.

"Así que…¿Me dejaron esperando más de 10 minutos solo porque tuvieron sexo? Creo que necesitan más lecciones sobre cómo tratar a sus invitados, niñas" dijo la pelicastaña haciendo palidecer a Rose y su nobleza.

"Oh parece que alguien está en problemas, suerte hermanita" dijo Naruto divertido antes de darle un beso en la frente a la pelirroja y desaparecer en las sombras.

"¿Qué?...¡Traidor!" Rose se confundió por el beso pero se recompuso y gritó enojada al ver que su hermano/amante la dejó sola a ella y su nobleza para enfrentar la ira de su madre.

—una hora después—

"Y ¿Para que me necesitabas, madre?" Pregunta Rose, ahora bañada y vestida con algo diferente a su uniforme. Usaba una blusa manga larga con las mangas recogidas hasta los codos, con una blusa de cuello de tortuga negra por debajo, pantalones negros de semiformales y una gabardina blanca que casi parecía una bata de laboratorio.

(La ropa de la imagen de su apariencia)

Junto a Rose todas las demás vieron curiosas a la madre de su rey, no porque estuviera ahí —la mujer pasaba más tiempo con ellas que con su marido— sino por la mirada sería que está tenía, aunque también podían ver qué detrás de esa seriedad había bastante decepción, ni hacia ellas pero decepción al fin y al cabo.

Venelana se tomó un momento para ver a todas las chicas de la nobleza de su hija, guerreras poderosas y aún así eran damas con la mejor educación. Si alguien que las haya visto luchar las viera en una gala no podrían creer que esas hermosas chicas eran las diablesas más fuertes del último siglo.

La pelicastaña portadora del PoD dejó escapar un suspiro, como deseaba que la nobleza de su hija mayor fuera tan siquiera una cuarta parte de lo que es la de su hija menor, así no sería la decepción que es ahora.

"Madre, disculpe que interrumpa sus pensamientos pero ¿Por qué está aquí?" Dijo/preguntó Lyndis.

[ Lyndis (sin apellido) — la semi diosa demonio, demonio de clase alta/torre ]

(lastimosamente no puedo poner imágenes, lo siento)

"Es verdad, no esperábamos una visita tuya hoy, pensamos que estarías ocupada con toda esa mierda política" dijo Tamaki recostada en el sofá, vestido con una falda negra corta y un buso grueso de color rojo.

[ Tamaki Kotatsu — chaos cat, demonio clase alta/torre ]

Las demás sólo asintieron a las palabras de sus compañeras/hermanas no sanguíneas.

Se preguntarán ¿Por qué Lyndis llamó madre a Venelana? Fácil, está les permitió ésto después de un desliz de Iris donde la tímida monja la llamó así por accidente y a la pelicastaña le gusto que lo hiciera.

Venelana dejó de pensar en eso y suspiro nuevamente, dando un último vistazo a todas las chicas.

Vio a las gemelas vestidas con su ropa de exorcista…

[ Tsuki y Hikari (sin apellido) — las santas diablesas, demonios clase alta/caballeros ]

…Vio a ganyu mirándola con atención mientras comía un bote de helado ¿con pétalos de flores?...

[ Ganyu (sin apellido) — apodo desconocido, demonio clase alta/peón x2 ]

…Vio a Margarita jugando distraídamente con su espíritu guardián…

[ Margarita (sin apellido) — La druida oscura, demonio clase alta/ peón ]

…Vio a Jen jugueteando con su reloj como casi siempre que estaba desocupada y sola…

[ Jen Rhoades — La humana perfecta, demonio clase media (solo en título)/peón x2 ]

… Vio a Miku tomando té esperando a que hablará…

[ Miku Hatsune — La sirena maldita, Demonio clase alta/híbrida/peón ]

… Y por último vio a Yuji y Sukunai jugando cartas sin prestarle atención.

[ Yuji Itadori/Sukunai — las dos caras de la oscuridad, demonio clase suprema/peón x2 ]

Soltó un último suspiro — ¿Cuántas veces había hecho eso en la última hora? — y finalmente habló.

"Quiero que hagas tú presentación ante Rias y su nobleza antes de tiempo" dijo Venelana seriamente y rápidamente levantó la mano para indicarle a todas que guardarán silencio al ver que iban a opinar.

"Se lo que dije, pero es necesario. Las cosas cambiaron y los Phoenix, mejor dicho, su hijo quiere adelantar el matrimonio, la reunión será hoy en horas de la tarde, a las 1800 horas del mundo humano" hablo Venelana, finalmente contándoles porque estaba ahí indirectamente. Las chicas la entendieron, puede que esté decepcionada de Rias y que a ellas no les cayera del todo bien la hereda Gremory pero era la hija de la mujer que veían como una madre y sabían que ella no quería que sufriera ese destino.

"Está bien, estaremos ahí y tendremos nuestra gran entrada" dijo Chika que recién entraba a la habitación trayendo algunos bocadillos.

"¿Qué? Les recuerdo que soy la secretaria de esta casa y grupo, además siempre administró todo lo relacionado a nuestros trabajos y esto es técnicamente un trabajo" hablo con un puchero cuando todas las demás la quedaron viendo por decidir por ellas, aunque después le restaron importancia al asunto.

[ Chika Fujiwara — Secretaria, demonio híbrido ]

Venelana solo observó divertida la interacción de sus hijas, le gustaba como sonaba eso, además eran bastantes así que tenía un mini ejército de hijas como siempre había soñado cuando era una joven diablesa.

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(No pondré imágenes acá, ya todos saben cómo es grayfia, Rias, su nobleza y Raiser junto a su nobleza, así que no quiero que estén chingando por eso)

-club de ocultismo/kuoh town-

Rías estaba teniendo un mal día, no entendía en qué momento todo se fue por la borda.

Ella sabía que toda esa felicidad que había tenido durante los últimos dos meses era muy rara.

Al principio de las clases había contado con mucha suerte, había conseguido a un "poderoso peón" Issei Hyodou, el portador de la Booster gear, luego había eliminado a un grupo de caídos —cosa que podía poner aún más tensas las relaciones entre las facciones bíblicas cosa que ella no entendiste ni pensaba— conseguido un nuevo alfil Asia Argento, una monja con la sacred gear curación crepuscular.

Había estado tan contenta de saber que ahora podría liberarse de su matrimonio arreglado que no había pensado en que algo como esto pudiera ocurrir, pero nuevamente el pensar a futuro nunca había sido su fuerte, y su confianza en que tenía el tiempo para que su nobleza se "fortaleciera" la había hecho descuidar el entrenamiento de su nobleza —o eso creía ella, negándose a ver que desde siempre había sido una mala Rey— lo cual le pasaría factura.

Hace unas horas, después de que terminaran sus clases había recibido una llamada urgente de su hermano Sirzech, el maou lucifer, donde esté —en contra de las normas y políticas del inframundo, y una clara muestra de su favoritismo descarado— le había avisado que Raiser Phoenix, su prometido por un matrimonio político, se había cansado de esperar y había adelantado su matrimonio, eso la llevó a la situación actual.

Sentada en su silla en la sala principal del club de lo oculto, con su nobleza frente a ella —a excepción de su peón— con koneko, su torre, junto a Asia sentadas en un sofá doble, mientras Akeno, su reina, les traía unos bocadillos y dulces, y Kiba, su caballero, estaba apoyado en la pared con su sonrisa de falsa amabilidad siempre presente.

Justo al lado de ella pero a unos buenos 2 metros estaba Grayfia lucifuge — en secreto Gremory aunque no por su "esposo"— la reina de su hermano vigilando todo, aunque aún así podía sentir bajo esa mirada estoica la decepción que proyectaba cada vez que la miraba.

Y bastante justa la reacción de la maid peliplata, la noche anterior está había venido a hablar con la pelirroja para consolarla un poco por lo ocurrido; sin embargo, parecía que solo había llegado para encontrarse con nada más y nada menos que Rias, nuevamente, había intentado tomar el camino del cobarde, el camino fácil.

Al no encontrarla en su habitación rápidamente había rastreado su firma mágica y se había teletransportado a su ubicación en un destello, solo para ver cómo la heredera Gremory estaba en casa de su peón, en nada más que ropa interior mientras que le pedía a su pervertido súbdito que tomara su virginidad y el portador de la Booster gear parecía haber tenido un paro cardíaco por la petición junto a una sonrisa pervertida mientras murmuraba un montón de obscenidades.

Después de eso Grayfia había desmayado al chico pervertido con un hechizo de rayo leve cuando se le quedó viendo los pechos y se había tomado a Rias por la oreja antes de volver a teletransportarse a la casa de la pelirroja y darle un largo, largo y tortuoso regaño por lo que hizo, además de informarle a Sirzech y a Venelana, no es que supieran que había informado a esta última.

(Voy a resumir la reunión, esto no nos importa y a mí me da mucha pereza escribir esa mierda)

Después de unos minutos había aparecido su peón que hablaba de cómo cuando iba camino a la escuela había visto a lo que solo podía describir como unas diosas, parloteando sobre dos mujeres extremadamente hermosas y sexys, una pelirroja de un ojo amarillo con parche y una peliplata que parecía hacer cosplay de algún anime.

Sin notar como Grayfia tenía una minúscula sonrisa al escuchar las descripciones, reconociendo a Rose y su reina que de seguro habían estado dando vueltas por la ciudad, dando autógrafos y tomándose fotos junto al resto de su nobleza.

Algo que muy pocos sabían en el inframundo, más que nada porque ignoraban los eventos humanos en su mayoría, era que la oveja negra de la familia Gremory no solo era líder de un gran grupo mercenario, sino qué —como Sirzech por el hecho de que ella no toleraba sus idioteces había decido cortar todo financiamiento y acceso a las cuentas de Gremory para la joven pelirroja— para lograr conseguir fondos, al igual que su hermano y amante, había decidido entrar a la industria del entretenimiento infantil y juvenil, con un programa al cual llamó igual que su grupo y usando su magia camuflada de efectos visuales había creado un programa amado por todo el público. Por las madres porque le enseñaba a los niños múltiples cosas, por los niños, niñas y jóvenes porque era divertido y toda la acción que tenía los entretenía, y por los adultos y adolescentes por la belleza de las actrices.

Grayfia salió de sus pensamientos y vio cómo todos se centraban en un solo lugar, lugar donde apareció el círculo mágico de la casa Phoenix y luego de una llamarada reveló al heredero de está que con una sonrisa arrogante se acercó a Rías.

La peliplata suspiro, esto iba a ser largo y problemático.

-1 hora después-

Y justo como había pensado la maid peliplata la reunión entre ambos prometidos había sido menos que agradable.

El chico Phoenix era una caja de ego y arrogancia con complejo de playboy que quería a Rias como menos que una esposa trofeo, obviamente esto le agradaba a la pelirroja y mientras el heredero rubio trataba de "conquistarla" está estaba a la defensiva intentando alejarlo lo más que pudiera.

Así había sido durante los últimos 60 minutos e incluso ella estaba empezando a desesperarse por esta situación, esperaba que el heredero Phoenix al menos usará una máscara para intentar seducir a Rias pero solo estaba actuando como un idiota arrogante cómo lo era el peón de la pelirroja, aunque al menos el rubio tenía el poder político para portar un poquito de esa arrogancia suya.

Finalmente todo se había salido de control cuando el peón de Rias, Issei si no recordaba mal el nombre del pervertido, había empezado a discutir con Raiser sobre tener un harem y otras cosas que ella había estado ignorando.

Después de una humillación de parte del Phoenix para el castaño, estos habían vuelto a discutir y se habían lanzado a atacarse, ella estaba a punto de moverse pero sintió una presencia familiar y decidió no arruinar su entrada dramática.

"¡Esto no se quedará así maldito clase baja!" Gritó en cólera Raiser al ser golpeado por el castaño, podría haber esquivado el golpe pero era algo que no esperaba, así que con rabia ardiente se lanzó contra el peón que hizo lo mismo, mientras ambas noblezas veían el encuentro sin moverse; la de Raiser por saber que él podía destrozar al castaño y la de Rias por el shock de lo que hizo el pervertido.

"Vaya, no sabía aparte de Otaku fueras emo hermanita~"

Rías se puso rígido al escuchar eso, los demás sólo estaban desconcertados por saber de dónde vino la voz —menos Grayfia— y de repente se sintió un poder abrumador que hizo que la nobleza de Raiser cayera de rodillas mientras la de Rias, que se había levantado listos para defender a su rey, fueron nuevamente sentados en sus lugares, la maid peliplata no fue afectada por esto mientras veía como el rubio y el castaño caían de pecho al suelo.

En el suelo en el lugar donde estaba Rias apareció un círculo mágico que rápidamente se encendió consumiendo la silla y el escrito de la pelirroja, que había sido quitada a tiempo por Grayfia y ahora estaba sentada al lado de su nobleza, y cuando el círculo mágico desapareció dejó ver un trono de cuarzo con detalles dorados y cojines rojo sangre.

Esto confundió a todos pero segundos después, por dónde fuera posible, ventanas, grietas, agujero en la pared, empezó a entrar una gran cantidad de polvo, no, cenizas que se arremolino alrededor del trono y se empezó a juntar, formando dos figuras, una sentada y la otra de pie justo a su lado.

En menos de un segundo, dos siluetas femeninas estaban formadas y las cenizas se despejaron para dejar ver a las dueñas de dichas sueltas.

Y en shock/asombro/o sonriendo en el caso de Grayfia, ambas noblezas presenciaron a una mujer joven pelirroja y de un birllante ojo amarillo/naranja que los miraba con una sonrisa suave pero de superioridad y a una joven peliplata con orejas y coma de loba que vestía un tipo de uniforme de bombero de pie a su lado.

Ahí, sentada con un porte digno de una emperatriz, estaba Rose Gremory en toda su demoníaca gloria con su barbilla apoyada suavemente en su mano mientras en la otra tenía una copa que era llenada por vino gracias a una botella que sostenía Lyall.

"Ohh~ ¿Te comió la lengua el gato, hermanita?" Hablo Rose con burla, su voz sedosa hipnotizando a los varones presentes que no podían apartar la mirada de ella y Lyall, mientras Rias empezaba a enojarse cada vez más por la presencia de su bastarda hermana gemela.