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Mi viaje a través del multiverso

Hola a todos, vengo aquí a traer este fantic con mis ideas y deseos. El MC será OP no esperes un desarrollo lento por qué no me gusta y no lo habrá. El MC hará de todo para conseguir a todas las mujeres, habrá mucho sexo así que si no les gusta simplemente no lo lean XD. Aquí el enlace a Dis cord: https://discord.gg/gy4wBXFbgx

Obsidian6789 · Anime & Comics
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47 Chs

Capítulo 34

—!Por favor, tú aquel que derrotaste a Zeus, te pido que por favor recuperes a mi hija!—Una hermosa mujer de pelo rubio y aura maternal se arrodilló frente a mí ni bien terminé de bajar la escaleras.

Al hacer contacto visual con ella, podía ver la esperanza en sus ojos.—Levántate, no me gusta que una mujer se arrodille frente a un hombre.

La diosa en cuestión se sorprendió por mis palabras y lentamente se levantó del suelo para proceder a sentarse en el sofá y empezar a explicarme su situación.

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—Así que quieres que vaya al Infierno y traiga a tu hija Perséphone.

—Si.

Suspiré ante el pedido de la diosa de la fertilidad, Démeter, quien me rogó hasta más no poder que le traiga de regreso a su hija.

—Si tu lo haces, estoy dispuesta a ofrecerme a tí como pago por hacerlo—Sus palabras sorprendieron a las otras diosas que estaban sentadas en la sala escuchando nuestra conversación.

—No tienes que hacerlo y yo no te estoy pidiendo nada a cambio.

—Lo sé, pero aún así, estoy dispuesta a darme como pago—Demeter habló con una voz sería, dándome a entender que no se retractaría de su palabra.

—Esta bien, iré y traeré a tu hija—Démeter sonrió de alivio al escuchar mis palabras. Supongo que tendré que dar una visita al dios del Infierno.

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Terminé de tomar desayuno, me despedí de Afrodita, Hera y Anfitrite y decidí salir al infierno, ya que tenía que cumplir la promesa de traer a Perséphone.

Llegué a una cueva que estaba por debajo del Monte Olimpo, en ella estaban talladas escaleras de piedra que llevaban hacia una profunda oscuridad.

Sin perder tiempo empezé a descender por las escaleras y al cabo de un par de minutos sentí que el ambiente empezaba a cambiar a uno de muerte y desesperación.

Y luego de unos cuantos pasos más, ví cara a cara a Cerbero, el perro del Infierno. Pero había algo extraño ya que no sentía poder alguno en dicho Cerbero.

Era uno similar a los que trajo Kokabiel cuando atacó Kuoh. Decidí acercarme al perro de tres cabezas, este al sentir mi presencia, abrió y los ojos y me atacó sin dudar.

Pero he aquí lo que me pareció extraño, ya que el guardián del Infierno no aguantó ni un solo golpe mío.—¿En serio este es Cerbero?—Pensé mientras miraba el cadáver del perro.

Seguí con mi travesía y crucé la puertas del Infierno. Al otro lado se podía ver una cuidad similar a Atlantis o al mismo Olimpo.

—¿Quién eres y cuáles son tus motivos para entrar al Infierno?—Los guardias que custodiaban la puerta me rodearon rápidamente. Pero para evitar problemas simplemente les borre la memoria sobre mí y seguí con mi camino.

A diferencia del Olimpo y Atlantis dónde las construcciones son de color blanco y azul marino, aquí son de color plateado o gris. Sin duda a Hades no le gustan las cosas coloridas.

Según los papeles de Atlantis, esta cuidad se llama Érebo, la neblinosa cuidad de los muertos, que a mis ojos parecía una cuidad como cualquier otra, salvo que no había luz solar, pero tampoco era todo oscuridad.

Estiré mis alas y empezé a volar para buscar la mansión del Dios de los Infierno, la cual fue bastante sencilla de encontrar ya que era un enorme edificio que resaltaba a leguas.

Puse rumbo al castillo del Dios del Infierno, pero cuando estaba a punto de llegar fui detenido en seco por tres hermosas mujeres.

—¿Quién eres, cómo entraste a los dominios de la muerte~?—Una de las mujeres habló con un tono sensual mientras se lamía los labios al final.

—Eso no importa, solo tenemos que matarlo, todos saben que es un delito el entrar aquí sin permiso de Hades—Otra de las mujeres habló con un tono agresivo.

—!Cálmate Megara!, habla chico ¿Qué haces aquí?—La última de las tres mujeres habló de forma calmada mientras la primera de las mujeres me empezaba a rodear con incontables círculos mágicos.

Según el nombre que tiene una de ellas, me hallo frente a las Furias, entidades que no sirven a los dioses pero si persiguen a aquellos que faltan su palabra con ellos.

—Bueno mi objetivo es rescatar a alguien, pero a la vez.....matar a Hades—Al terminar de hablar los círculos mágicos empezaron a disparar rayos de magia a mi posición sin aviso alguno.

—Vaya~así que quieres matar al dios del Infierno, lo siento pero no podemos permitir que hagas eso, por eso yo Tisífone, te castigaré~—Tísifone, la furia del castigo apareció detrás mío y me lanzó un enorme rayo de poder.

Rápidamente use mi [Vacío desintegrador] para contrarrestar el potente ataque y Tisífone al ver que su magia era desintegrada se sorprendió y se aparto de la dirección de mi contraataque.

—Tch....es más fuerte de lo que creí, ¿Que demonios era ese poder?—Tisífone regreso al lado de Alecto, quien me miraba de forma cautelosa, como si me estuviera analizando.

—!No era nada, simplemente tú eres muy débil, déjamelo a mí!—Megara hizo crecer las uñas de sus dedos, estas tomaron la forma de cuchillas y se lanzó contra mí.

Pero otra vez, esquivé sus ataques y le dí un golpe en el estómago que la mando a estrellarse contra el bosque cercano a la mansión de Hades.

—Es inútil que me ataquen, así las tres combinen fuerzas no me derrotaran y por la forma en la que me vez lo sabes muy bien—Hice contacto visual con Alecto, la única de las tres que no me había atacado hasta el momento.

La belleza de pelo blanco, seguía mirándome de forma seria, hasta que cerró los ojos reconociendo su derrota.

—Lo acepto, somos más débiles que tú.—Alecto termino rindiéndose sin pelear y rápidamente envío a Tisífone a buscar a Megara.

—¿Entonces, impedirán que cumpla mis objetivos?.

—En absoluto.—Alecto negó con la cabeza mientras Tisífone regresaba a su costado con una Megara algo sonrojada.—Nosotras no trabajamos para los dioses ni somos sus sirvientes, tienes carta libre en el Infierno.

Con eso dicho, Tisífone creo un portal detrás de ellas y a los pocos segundos las tres bellezas desaparecieron del lugar sin dejar rastro.

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POV ALECTO:

—Dime Magara, ¿Se activo tu decreto?—Pregunte a mi hermana que seguía sonrojada pese a ya no estar en frente de aquel chico.

—S-Sí....n-no me puedo calmar....—Respondió mientras frotaba sus piernas y respiraba de forma algo jadeante.

—Es la primera vez que veo a Megara así, ¿Alecto, crees que~?—Habló Tisífone con una expresión sorprendida. Bueno, puedo entenderla, ya que nunca se había activado un decreto nuestro.

—Sí, lo creo, el chico al derrotarla activó su decreto de nacimiento, lo cual ahora está obligando a Megara a aparearse con él.

—!No digas.....t-tonterías!—Espetó Megara.—Y-Yo nunca.....buscaría aparearme con alguien.

—Sabes que eso no es cierto Megara, mírate cómo estás ahora, si el chico estuviera aquí, prácticamente lo asaltarías en el acto—Megara desvío la mirada no queriendo darme la razón.

—Vaya~asi que el chico activó su decreto, ¿Me preguntó si podrá activar el mío~?—Tisífone se lamió los labios mientras miraba la figura del chico en la fuente de las visiones.—Pero más importante aún, ¿Podrá activar el tuyo, hermana~?.

—No lo sé Tisífone, habrá que observarlo—Respondí de forma seria pero a la vez me hallaba algo emocionada. Ya que sentía que el chico al cual mirábamos era más especial de lo que pensábamos.

FIN ALECTO POV

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Luego de ver desaparecer a las tres mujeres , yo también seguí mi camino y entré en la enorme mansión de Hades. Usando los recuerdos que tome de Poseidón y de Zeus y con la ayuda de System, entré directamente a la sala de reuniones de Hades.

—!Mi señor Hades, ¿No creo que.....

—!Cállate de una buena vez Orcus, tú y tu hija son unos incompetentes!.

En la sala de reuniones había cuatro personas, uno era nuestro amigo esquelético Hades.

Había otro hombre parado al lado de Hades parecía ser su mano derecha, mientras que delante de su escritorio habían otras dos personas.

Uno era un hombre adulto, con cabello azul que expulsaba un aura noble. A su costado estaba una mujer pequeña de peli de color azul.

Rápidamente logré reconocer a la mujer, ella era Bennia Orcus, una Grim Reaper que estaba en contra del gobierno del Hades.

—Plutón, ve a Cocytus y encárgate de la tarea que el incompetente de Orcus no pudo hacer.

—Mi señor si el líder de los angeles caídos interfiere ¿Qué debo hacer?—La parca al lado derecho de Hades respondió de forma muy respetuosa.

—Llevate un escuadrón de parcas de clase alta y otro par más de clase suprema. Que ellos mantenga ocupado a Azazel.

—Asi se hará mi señor.—La parca desapareció en una explosión de humo negro dejando solo a Orcus y a Bennia con el esqueleto andante.

—Sal de mi vista Orcus, la siguiente que falles tú y tu hija sufrirán un severo castigo.

—Si....señor Hades.—Orcus se levantó junto con su hija y salió del despacho de Hades, dejando solo al dios del Infierno.

Bueno es momento de encargarme del último de los tres hermanos. Sin perder tiempo hice aparecer mis cadenas doradas y aprese al dios, quien fue tomado totalmente por sorpresa.

—Bueno, bueno, así que al fin nos podemos ver dios del Infierno y hermano de Zeus y Poseidón. Hades.