webnovel

Mi matrimonio forzado: la hermosa esposa no tiene memoria

Sun Hee es una joven de 18 años. Tras haber despertado de un largo coma, se enteró de que había perdido la memoria. Ese mismo día, su malvada madre la forzó a casarse con un hombre completamente extraño para ella. Sin poder negarse tuvo que aceptar aquella extraña orden. Su esposo Jin Seong es un hombre frío, rico, arrogante y poderoso, capaz de hacer desaparecer a cualquier persona del país. Ellos dos son completamente diferentes. Sus vidas cambiarán por completo y tendrán que intentar convivir juntos aunque no se conozcan. ¿Qué pasara en su relación, terminaran enamorándose? ______________________________________________ Nota de autor: La cubierta no es mía. Por favor, no resubir esta historia

Laurasiscoyote · Urban
Not enough ratings
132 Chs

Capítulo 115: Modo espía activado

Sun Hee asintió y le mostró una pequeña sonrisa a su esposo.

En verdad, le incomodaba un poco las miradas de las personas ya que para ella no era muy agradable ver como alguien la observaba de esa manera.

Enseguida dejo de prestar atención a lo que pasaba a su alrededor y se centró en ir a la mesa.

Nada más sentarse aparecieron varías personas dispuestas a atenderla, no pudo evitar asustarse cuando vio a esas personas, ni siquiera se había percatado de que estaban ahí.

Los camareros le mostraron el menú que había. Felizmente, empezó a observar detalladamente cada nombre, casi no pudo reconocer ninguna receta, aquellos nombres tan raros no los había escuchado nunca.

Cuando finalmente decidió lo que quería, su esposo la interrumpió al intentar hablar.

—¿Prefieres una sala privada?—preguntó cuando estaba apunto de levantarse.

Sun Hee arqueó una ceja y enseguida le llegaron varias ideas absurdas.

¿Ellos dos solos? Definitivamente, eso no entraría en los planes de ella.

Es más, sería incapaz de estar en una sala a solas con su esposo.

—No, definitivamente no, prefiero que cenemos aquí y no vayamos a...

En el momento que estaba finalizando su oración, vio a alguien que no se esperaba ver, tampoco quería que él estuviera allí en ese momento, no era la situación más indicada.

Justo detrás de Seong-Jin, en la otra mesa, estaba sentado Bon Hwa, parecía esperar a alguien ya que miraba repetidamente la hora en su reloj.

Bon Hwa tenía el ceño fruncido y era fácil de notar que estaba estresado.

Sin dudarlo, Sun Hee siguió observando a Bon Hwa, por alguna extraña razón pensó que tramaba algo, ella sin querer acababa de activar su modo espía.

Tuvo que inclinarse un poco hacia un lado ya que su esposo cubría a Bon Hwa, le resultaba imposible poder ver algo si no se inclinaba un poco.

Claramente, su esposo se percató.

—¿Qué haces?

—¿Qué? Y-yo no hago nada, simplemente quería ver la decoración, parece un lugar de clase alta, ¿no es muy caro?

No es necesario que gastes dinero por mi culpa.

En ese mismo instante Seong-Jin fulminó con la mirada a su esposa, como si acabara de decir algo prohibido, simplemente ella no quería que él gastará su dinero en ella, pero parecía no percatarse que cada vez que pronunciaba las palabras "no es necesario que te preocupes por mi." Lo único que ella lograba era molestarlo.

Sim embargo, Sun Hee no le prestó atención a la expresión de su esposo ya que seguía pendiente de lo que hacía Bon Hwa, parecía incluso más tensó, cada segundo hacía que lograra aumentar la tensión de él.

—Entoces... ¿no quieres ir a una sala privada?

La última pregunta de Seong-Jin logró captar la atención de Bon Hwa, este sin dudarlo se giró curioso, fue capaz de ver a Seong-Jin de espaldas pero no a Sun Hee ya que ella agachó su cabeza y colocó el menú frente a su cabeza para poder esconderse.

Bon Hwa se giró otra vez y dejo de prestar atención a esa pareja.

—¿Tampoco vas a contestar ahora?

Seong-Jin había comenzado a sentirse un poco molesto, daba igual lo que dijera, ella seguía ignorándolo inconscientemente.

—Perdón... Esta bien, vayamos a esa sala privada.

Rápidamente se levantó y decidida esperó a que su esposo se levantará para poder ir a la sala privada, realmente no quería arriesgarse y dejar que Bon Hwa la viera, no le apetecía nada hablar con él. Sus acercamientos repentinos la incomodaban y en este momento tampoco estaba sola... Junto a ella estaba su esposo, lo que realmente la incomodaba era que ellos dos solamente estaban a un metro de distancia.