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Mi exmarido me quiere de vuelta después de 3 años de divorcio

—Conozcan a Erika Walters, una mujer que dejó su adinerada familia y un estilo de vida lujoso, escondió su identidad solo para casarse con el único hombre que amaba. Un hombre a quien su familia le advirtió que no persiguiera si no quería sufrir un desengaño amoroso. Haciendo oídos sordos a su familia, Erika se casó con Adrian Hart. —Adrain estaba en contra del matrimonio debido a que nunca tuvo sentimientos por Erika. Sin embargo, los dos terminaron juntos debido a la Matriarca de la familia Hart. Abuela Elizabeth. —Se supone que un matrimonio debe ser un dulce viaje para una mujer que acaba de ser aceptada por su familia política, pero el de Erika fue todo lo contrario. Ser tratada como una sirvienta no era uno de los roles de una mujer casada. Todos sus parientes políticos la trataban como a tierra. Su marido continuamente le era infiel con su amante, Felicia Evans, a quien su abuela siempre había despreciado. —Después de presenciar a su esposo teniendo relaciones sexuales con su amante en la cama conyugal, Erika no pudo soportar más la tortura. Alcanzó su límite de resistencia. No podía permitir que continuaran jugando con su corazón como si fuera algún juguete. —Erika tomó los papeles de divorcio, firmó su nombre y dejó la mansión Hart con la promesa de que volvería y los haría perder todo por lo que habían trabajado duro en conseguir. —¿Amor? Ella tiene tres hermanos mayores que la adoran. —Erika volvió a su familia y comenzó a tramar su venganza contra sus ex parientes políticos hasta que se encontró con Ethan, su amigo de la infancia con quien se había encontrado hace años. —Extracto —Realmente eres una zorra —Adrian escupió con asco—. Erika lo miró tranquilamente. —La última vez que revisé, Sr. Hart, ya no estamos relacionados. Así que, ¿por qué le molesta si soy una zorra o no? —Le preguntó fríamente—. Ya que tienes un buen ojo para identificar quién es una zorra, ¿por qué aún no has descubierto a la principal zorra en tu familia? —Le devolvió la pregunta. —¿Logrará Erika su venganza con éxito? ¿Cómo reaccionará Adrain cuando vea que ella ha seguido adelante? ¿Tendrán Adrain y Felicia un final feliz? ¿Sentirá Erika algún remordimiento después de obtener su venganza? ¿Habrá más secretos que descubrirá en su camino hacia la venganza? —Descubre más haciendo clic en el libro: «Mi ex marido me quiere de vuelta después de 3 años de divorcio». —Hola chicos. Este es mi primer libro. Aún soy nueva en esto. Así que espero que disfruten este libro. Pero no olviden darme su apoyo y aliento. Gracias."

Sour_corn · Urban
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¿ELLA PUEDE LUCHAR?

"Erika miró a su Felix y dijo:

—Sí, solo somos conocidos.

Felix dijo:

—Oh, ya veo. Bueno, Erika, vamos a salir, ¿te interesa?.

Erika nunca había ido a un club antes, así que aceptó. Todos se prepararon y entraron en el ascensor privado que conducía directamente al estacionamiento subterráneo. Usaron el auto de Felix ya que él y Erika irán a casa juntos y Ethan llamaría a su conductor.

Felix fue quien conducía y Ethan estaba sentado en el asiento del pasajero mientras Erika se sentaba en la parte trasera. Hablaban de cosas al azar y Ethan no dejaba de mirar a Erika a través del espejo retrovisor, pero no sabía que Erika lo había notado.

Llegaron al club y entraron directamente. Como aún era temprano, no había mucha gente, lo cual era bueno, porque cuando el club está lleno, las cosas solo se complican.

El gerente rápidamente organizó un stand VIP cuando vio que todos los clientes eran personas poderosas. Se sentaron en la cabina que estaba cerca de la pista de baile, la música era fuerte pero las ventanas cerradas lograron obstruir algunos de los ruidos.

Felix se sentó primero y Erika se sentó después en la silla opuesta y Ethan se sentó junto a Felix. Quería sentarse junto a Erika pero pensó que eso la haría sentir incómoda.

Pidieron bebidas mientras observaban a la gente en la pista de baile y Felix preguntó mientras esperaban que las bebidas llegaran:

—Así que dime en serio ahora, ¿cómo se conocen ustedes dos?.

Erika no le estaba dando una respuesta directa y él pensó que algo estaba pasando. Erika miró a Felix y dijo:

—Nos conocimos hace unos dos años debido a algunos problemas..... Erika narró todo el incidente y dejó fuera la parte en la que él despidió al asistente de cliente porque pensó que no era necesario.

Felix miró a Ethan un poco sorprendido, ¿este amigo frío suyo ayudó a su hermana? Ethan estaba mirando a Erika, sonriendo y Felix también se dio cuenta.

Sus bebidas llegaron y Felix recibió una llamada, así que se excusó dejando solo a Ethan y Erika allí. Erika miró a la gente bailando y sintió que alguien la estaba mirando, así que se giró y enfrentó a Ethan:

—Sí, ¿necesitas algo?.

Ethan era amigo de Felix y Erika trató de ser tan educada como fuera posible ya que lo había visto robándole miradas de vez en cuando, lo cual la hacía sentir realmente incómoda.

—Sí, tú, fue lo que casi dijo Ethan, pero se contuvo. —Lo siento, solo me preguntaba si te gustaría bailar. Eso fue lo único que se le ocurrió, y se sintió aliviado al decir eso.

—Sí, claro. A Erika le pareció extraño que él la mirara como si fuera un acosador solo porque quería bailar.

Dejaron su cabina y se dirigieron a la pista de baile y llamaron mucho la atención de la gente. Los hombres miraban a Erika con lujuria y Ethan los fulminó con la mirada y estos de inmediato apartaron la vista.

Empezaron a bailar como todas las demás personas en la pista de baile. Todos saltaban. Ethan intentaba seguir el ritmo de Erika, quien parecía estar llena de energía, ¿o era el alcohol que empezaba a hacer efecto?"

"Erika estaba yendo muy alocada en la pista de baile y Ethan empezó a preocuparse de que ella se pudiera lastimar, por lo que la llevó desde allí mientras ella se quejaba de que quería seguir bailando. La hizo sentarse en uno de los taburetes y dijo:

—Quédate aquí mientras voy a buscar a Felix para que podamos irnos.

Se fue a buscar a Felix para decirle que era hora de irse.

Erika se sentó en el taburete tambaleándose ya que se sentía muy mareada debido a los saltos. Pidió un vaso de agua al barman y luego bebió todo el vaso de un trago. Tenía mucha sed, así que pidió otro vaso de agua.

Mientras estaba en medio de beber y esperar, un joven que parecía estar en sus veintitantos se acercó a Erika con una sonrisa de playboy y dijo:

—Hola, cariño, ¿estás sola? ¿Quieres un poco de compañía?

Erika ni siquiera le prestó atención y dijo:

—Vete a la mierda.

El hombre no se retiró y en cambio se acercó aún más:

—Vamos, baby, no seas grosera. Ves que estoy solo y ya que tú también estás sola, ¿qué tal si nos hacemos compañía? —susurró lo último en sus oídos y la miró con lujuria.

Erika podría estar borracha, pero definitivamente entiende lo que el joven está intentando hacer. Erika lo miró con enfado y dijo:

—¿Estás sordo, te dije que te largaras?

El joven se asustó un poco por su mirada, pero luego pensó en su objetivo. La dama frente a él era una chica joven y no se irá hasta que pueda probarla, por lo que agarró la mano de Erika y empezó a tirar de ella hacia él.

Erika perdió la paciencia y torció la mano del joven que la sujetaba. El hombre gritó de dolor. Erika no se detuvo allí y giró al joven para que estuviera detrás de ella y luego lo hizo dar una vuelta para que cayera fuertemente en el suelo frente a ella. Gritó aún más fuerte de dolor. Luego Erika lo pateó y le dio golpes por todas partes.

La pelea atrajo la atención de muchas personas y el barman llamó a los guardias de seguridad y Ethan y Felix llegaron al mismo tiempo que los guardias de seguridad y vieron al hombre que había sido golpeado hasta quedar negro y azul en el suelo gimiendo de dolor.

Felix fue a ver a Erika primero:

—Erika, ¿estás bien? ¿Te lastimó en algún lugar? —El barman miró a Felix como si fuera ciego. ¿No ve el que está en el suelo sufriendo de dolor?

—Sí, estoy bien. Intentó acosarme, así que le di una paliza —dijo ella casualmente como si estuviera hablando del clima.

Felix miró a los guardias de seguridad:

—¿Están sordos, no escucharon lo que dijo? llévenlo a la estación de policía ahora —les gritó.

Los guardias de seguridad rápidamente arrastraron al joven, ya que estaba demasiado golpeado para caminar. La multitud también se dispersó.

Felix miró a Erika con orgullo:

—Parece que mis enseñanzas están dando resultado.

Erika respondió:

—De nada, maestro

y ambos se rieron.

Ethan, que había permanecido callado todo el tiempo, miraba a Erika en shock, ¿así que puede pelear?"