Un Nuevo Día

La noche transcurrió con normalidad, la mayoría de marineros se desmayó en sus redes ,no había espacio para llorar la muerte de otro marinero. Solo 6 marineros quedaban con vida y el trabajo no hacía más que complicarse para los supervivientes, haciendo que sus posibilidades de llegar a puerto con vida disminuyeron aún más.

Ya habían pasado 3 semanas enteras desde el motín, según las estimaciones brindadas por el capitán necesitan aguantar con este ritmo otras 3 semanas más para lograrlo, pero ya habían perdido a uno de los marineros, y el desgaste no hacía más que acumularse.

Ricardo se pasó toda la noche pensando en las palabras de Taras, conociéndolo y por el tono que había usado, era muy probable que fueran sus últimas palabras. Si Taras no sé equivocaba y moría esta noche entonces, Ricardo tendría que preparar un plan por su cuenta para sobrevivir estas 3 semanas.

'Un plan... si de verdad ocurriera todo lo que dijo el viejo, hoy tengo que dormir como siempre, si no notarán que sé algo ... Como mierda voy a dormir sabiendo que dentro de 3 semanas voy a morir si no hago nada, incluso si Taras se equivocó y no muere, mi cuerpo está cada vez peor y eso es innegable ...' Reflexionaba Ricardo mientras trataba de dormir.

Ricardo sabía que la situación era complicada, Ron era un bestia inmortal, si iba contra él, lo aplastaría como una ballena que caía del cielo arriba suyo. Wiliam era una tortuga vieja que tenía más de 60 años de experiencia en el mar. Dima es un zorro astuto y traicionero, al punto que ya lo había utilizado como cebo en una ocasión.

Ricardo finalmente se quedó dormido, ahora lo único importante era aparentar no saber nada por un tiempo, luego continuaría con su plan, si William dudara de él, sería el próximo en recibir los latigazos.

"Hora de despertarse!" Grito Ron en el pasillo del camarote.

Ricardo se despertó de golpe, se contuvo de tratar de mirar a Taras para ver si seguía con vida y se fue a la cubierta como lo haría con normalidad.

Para su alivio, Taras se encontraba también en la cubierta, pero siguiendo sus palabras sería mejor no hablar del tema y menos en el medio de la cubierta, parecía que Taras también lo ignoraba, por lo cual ambos mantuvieron el silencio y distancias tácticas .

"Los dos grumetes pónganse a limpiar, todavía hay sangre de Calix por el piso, el resto a trabajar" Ron dio la orden y se fue a desplegar la velas para empezar otro día largo de navegación.

Ricardo escuchó la orden y buscó al trapeador, junto con Taras , ninguno de los dos habló en el camino.

"Ricardo, ve para la parte del timón a limpiar, yo iré a la cubierta" Dijo Taras mientras agarraba el trapeador, no parecía estar de muy buen humor por el tono.

"Bueno, suerte con eso " Dijo Ricardo, agradecido, la parte de la cubierta era bastante más complicada de limpiar que la del timonel

Limpiar la sangre de un compañero de viaje nunca te ponía de buen humor, pero si era más sencillo que la tarea que tenían que hacer los otros marineros, por lo cual Ricardo bendijo su suerte de tener su identidad como grumete y no marinero. Aunque ya no sabía si estaba limpiando la sangre de Calix o la de otro marinero… o su propia sangre.