—Bueno, que disfruten su desayuno —dijo—. Escuché de las damas anoche que habrá una sesión de zumba cada mañana en el parquecito.
—Abuela, eso está a más de 15 minutos caminando a tu ritmo.
—¿Me estás diciendo que soy vieja?
—Eh…
—¡Hmpf!
—Abuela… —murmuró Leon—. Pase lo que pase, mi abuela es bella.
Eso suavizó la postura de la abuela. Cuando un cumplido venía de un chico directo como Leon, uno sabía que era sincero. —Está bien.
Luego miró a Naia y después a Leon.
—¡Estoy esperando buenas noticias pronto!
Y colgó, dejando a la pareja confundida.
¿No le habían dicho ya la buena noticia? ¿La memoria de la abuela estaba fallando?
Leon anotó esto en la lista para verificar cuando fueran al hospital en un par de días.
De todos modos, la pareja terminó sus comidas a un ritmo pausado, tomando su tiempo para simplemente disfrutar el momento juntos.
Support your favorite authors and translators in webnovel.com