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Dasvidania

Night Raven College, diez horas atrás.

Ninguno estuvo de acuerdo en que Dire se entregara, mucho menos que sus estudiantes fueran a pelear contra los esbirros de Walter, pero con más de 100 alumnos a su cargo, los profesores no tuvieron más remedio que confiar en que todo su conocimiento fuera bien empleado por los chicos.

Mientras liberaban el campus del mayor número de falsos fantasmas, cada profesor prometía en silencio que sin importar que, no dejarían que su excompañero se saliera con la suya.

Si usar la fuerza era necesario para hacerle entender que todo lo que él creía estaba mal, no dudarían en romperle los huesos.

—Draconia, tele transporta a los Shroud de regreso al colegio— pedía Mozus una vez que profesores, líderes, vice líderes y algunos de los chicos se reunían en la avenida principal de la escuela.

A pesar de las quejas de Sebek por la forma en que su amo era tratado, Malleus no dudo en seguir la orden del director interino, en un chasquido y brillos verdes los hermanos aparecieron.

—Creo que voy a vomitar…— se quejaba Idia mareado.

—Su mano, ¿están bien?— preguntaba Azul al ver el estado de los Shroud.

—Luke Laufey san fue duro, pero al final niisan logro detenerlo— explico Ortho mientras palmeaba la espalda de su hermano.

—Perdona que te pongamos a trabajar de inmediato Ortho, pero ¿Podrías usar tu radar para saber dónde se encuentran los de Onboro?— pedía Ashton.

—Descuiden, los vimos hace poco, aún tengo el seguimiento de su ubicación— respondía Ortho enseñando con un holograma el mapa de la isla y cinco luces.

—Ese/a chico/a— suspiraba aliviado Vil.

—Iremos por sus compañeros, ustedes quédense a vigilar a los demás— ordenaba Crewel.

—¿¡QUE!?

Las quejas no se hicieron esperar, con diferentes palabras, tonos y niveles de respeto la mayoría de los chicos alegaba el querer ir a rescatar a Mc y golpear a Walter.

—Uh, siento como si me hubiera atropellado un camión.

A todos se les cortó la respiración momentáneamente.

Con dificultad, una figura conocida por todos caminaba hacia ellos, si no fuera por cierto detalle, hubiera sido el regreso de la muerte más épico.

—¿Por qué tiene una bolsa de papel en la cabeza?— pregunto Kalim apenas logro salir de su asombro.

Mozus y Sam de inmediato socorrieron a Dire, quien se veía no podía estar por mucho tiempo de pie.

—¿No se había muerto?— decía Ace exaltado.

—¿Qué fue lo que paso?— pedía Crewel.

—¿Dónde había estado?— preguntaba Epel.

—¿De dónde saco esa bolsa?— aunque no era lo más importante, todos querían saber la respuesta a la pregunta de Floyd.

—Fue lo primero que encontré— respondía Crowley recuperando sus fuerzas gracias a la magia curativa de Sam.

—Sobre lo que paso…

—Tonterías para justificar sus malas acciones— restaba importancia Walter al discurso más emotivo que había dado verdaderamente de corazón, en realidad no esperaba hacerlo cambiar de idea, pero necesitaba tiempo para conjurar correctamente aquel hechizo.

Era una antigua magia que no requería de un usuario con maná para conjurarlo, pero era imprescindible cantarlo de forma correcta si quería salir vivo de esa.

—Te lo demostraré cuando tome tu puesto— mencionaba Walter altanero.

—Ah, sobre eso...

Explicar lo que había hecho y cantar la canción en su mente era complicado, finalmente Walter lo devolvió a su forma original, a tiempo que él terminaba de recitar el hechizo.

Sintió cómo su cuerpo internamente comenzaba a desvanecerse y formarse en otro lugar, pero cuando el cuchillo se clavó en su pecho temió por su vida.

Su cuerpo se desintegró, sentir cómo cada una de sus células se regeneraba en otro sitio de la isla fue uno de los dolores más grandes que había experimentado en su existencia.

No estaba seguro, no obstante creía que el proceso de teletrasnportanción y regeneración había llevado al menos unas dos horas.

—Genial, me rompió la máscara— lamento el director cuando su cuerpo estuvo completo.

—Magia arcana antigua, interesante— dijo Lilia cuando Dire termino su historia.

—¿Y de dónde saco la bolsa?— preguntaba Sebek.

—¡ESO NO ES IMPORTANTE!— le gritaron el resto de chicos de primero.

—Gracias por su magia— expreso Crowley a Sam y Mozus, no estaba del todo curado, pero al menos podría hacer su último movimiento.

—Director, por favor deje que vallamos con ustedes— pedía Riddle en nombre de todos los alumnos presentes, —Chicos, esta noche han hecho que este humilde director se sienta orgulloso de ustedes— sonreía Dire a los chicos, —No obstante…

Antes de que alguno pudiera reaccionar, Dire creo una barrera alrededor de toda la escuela, quedando solo los profesores fuera de esta.

—Vámonos, conociéndolos encontrarán la forma de salir— decía Crowley dándoles la espalda y caminando a la salida de colegio.

—Crowley espera— lo detenía Mozus.

—¿Pasa algo?— preguntaba Dire, suponiendo que sus compañeros quieran abogar por los alumnos.

—Con esa bolsa en tu cabeza no te podemos tomar en serio— el comentario de Crewel le quito la motivación que tenía.

Mozus, Crewel, Ashton y Sam juntaron su magia generando una nueva máscara, parecía estar hecha de obsidiana, además de tener detalles en dorado y siete diminutas gemas en la parte superior.

Dire se quitó con cuidado la bolsa de su cara, procurando que nadie viera su rostro.

—Andando.

Le dolía todo el cuerpo, aun así, ver a los fantasmas heridos y el que Grim no reaccionara le nublaba los sentidos.

Mc estaba absorto/a a la batalla.

—Prefecto/a… ¡Prefecto/a!— le llamaba Crowley sin resultado.

Los rayos del sol comenzaban a asomarse, confiaba en que los profesores retendrían a Walter hasta que el astro acabara con él, por lo que procedió a tomar al/ a la joven para llevarlo al colegio.

A) ¡NO ME TOQUE!

La violenta reacción tomó por sorpresa a Crowley, Mc a pesar de tener los ojos llenos de lágrimas lo miraba con una furia que nunca habría creído de el/ella.

—Mc por favor, tengo que ponerlo/a a salvo— trato de razonar el director tomando su brazo, sin embargo, Mc se soltó de un tirón.

A) Walter ha hecho demasiado daño a mis amigos, a los otros siete, a Grim…

Decía Mc poniéndose de pie y tomando su cámara.

A) Es mi turno de pelear.

B) Voy a detenerlo.

La determinación de Mc no daba cabida a peros, Dire se acomodó su máscara y le tendió la mano a Mc.

—Si eso desea, cuente con mi ayuda.

Los profesores seguían enfrascados en su batalla con Walter, a pesar de que ya no tenía el poder para dañarlos seguía peleando, una fuerza en su interior le permitía seguir luchando a pesar de que era más que evidente que había perdido.

A) ¡Walter!

El grito del/ de la estudiante sorprendió a los mayores, vieron al/ a la prefecto/a avanzar con ayuda de Crowley. 

—¿Qué rayos haces Dire?— grito Crewel mientras creaba algunos dálmatas de fuego para protegerlos.

—Deberías llevar al diablillo a la escuela— menciono Sam, quien intento curar las heridas de Mc, sin embargo, el/la chico/a se hizo aún lado.

A) Cura a Grim, yo terminaré con Walter, por favor.

B) Ese vejestorio es mío, por favor ve con Grim.

El sentido común les decía que eso era una mala idea, pero al mismo tiempo ver la seriedad y el apoyo que Dire mostraba en Mc hacía que una voz le dijera a cada un "ten fe". Aun así, no eran tan descuidados para alejarse demasiado.

—¿Crees que ya estoy acabado?— le grito Walter al ver que su último oponente era el/la alumno/a sin magia. Del ex profesor ya poco quedaba, su piel se había pegado a los huesos, un tono verde dominaba en toda su piel, además de que el cabello había desaparecido de su cabeza.

Mc tomo la cámara con fuerza y realizo seis disparos, los chicos de primero con sus uniformes escolares lo/a rodearon. Walter apretó el bastón, que brillaba con mayor fuerza que nunca, incluso a pesar de que el sol comenzaba a hacerle competencia en brillo.

Los ocho chocaron con fuerza, Mc dominaba los movimientos de las fotografías de sus amigos, no parecía como si él/ella les ordenara sus movimientos, era como si todos ellos fueran extensiones del cuerpo de Mc, extremidades que respondían al cerebro.

No solo la "magia" de Mc doblegaba a Walter, Crowley se aseguraba de que este no escapara a los ataques del/ de la prefecto/a de Onboro, él no atacaba, pero se aseguraba que ningún golpe de las fotografías fuera errado. 

—¿Cuándo aprendió Mc a pelear así?— preguntaba incrédulo Ashton. 

No es como si creyeran que el/la estuante sin magia fuera un inútil, todos y cada uno de los profesores conocían las fortalezas de Mc en sus respectivas materias, pero el poder hacerle frente a un enemigo como Walter era algo que nunca hubieran creído probable.

El efecto de las fotografías estaba por terminar, los chicos comenzaron a desvanecerse, haciendo que la confianza de Walter regresara.

—Te llevaré conmigo, cuando te entregue a él, mis sueños se harán realidad— exclamo el ex maestro intentando tomar el brazo de Mc, pero no esperaba que el chico hiciera un movimiento barbárico. Con toda la fuerza de su ira, Mc le quebró la cámara en la cabeza a Walter.

A) … Creo que me pase.

B) Ni yo me esperaba esa…

El profesor soltó el báculo, al verlo rodar Mc corrió a él y lo tomo con fuerza. Walter se paró con dificultad, buscando su artefacto, el horro se manifestó al verlo en poder del/ de la joven.

Ambos se vieron a los ojos.

A) Es el fin.

Reuniendo sus fuerzas Mc comenzó a estrellar el báculo en el piso, el cual comenzó a agrietarse, con rayos verdes saliendo de él. Walter corrió para tratar de detenerlo/a, pero unas garras lo tumbaron al suelo. Crowley se había convertido en un cuervo gigante.

—¡Detente!

A) Esto es por mi escuela.

Volvió a estrellar el objeto en el suelo, Walter se removía intentando escapar del agarre del cuervo.

A) Esto es por mis amigos.

Con el nuevo golpe una extraña magia comenzó a juntarse, un aura negra comenzaba a formarse alrededor de Mc, los profesores al notarlo intentaron detener al/ a la estudiante; sin embargo, una fuerza invisible los mantenía alejados.

—¡Crowley detén a Mc!— grito Mozus enojado.

—¡Algo no está bien!— añadió Crewel al ver que su magia se desvanecía al intentar romper la barrera invisible.

—No se preocupen— dijo con calma el cuervo, —Es lo que tenía que pasar.

Cuando iba a dar el último golpe Mc sintió su cuerpo pesado, la magia del báculo comenzó a escapar, —¡Mc, tienes que romper el báculo!— graznó Crowley. 

Walter tomó una roca que había cerca y la estrello contra la pata del ave, quien por el dolor lo soltó, comenzando a correr en dirección al/ a la menor.

Mc perdió fuerza y sintió cómo el báculo se resbalaba de sus manos, sin embargo, dos pares de manos lo/la ayudaron a sostenerlo. Al principio se asustó al ver las manos traslúcidas, sin embargo, al reconocer a Benoni y Heishan un alivio se instaló en su pecho.

El báculo comenzó a temblar, pero ahora las manos fantasmales de Santara y Malleforme le ayudaron a sostenerlo, y finalmente, cuando sentía que la energía del báculo lo/la hacía retroceder, unas manos lo/la sostuvieron por los hombros, Jareth le brindaba el último apoyo que requería.

La aparición de los chicos abrumo a Walter, quien solo podía ver como quienes habían empezado siendo enemigos ahora se unían para acabar con él.

A) ¡Y esta es por mí!

Con eso Mc estrello el báculo, rompiendo el objeto en miles de pedazos y liberando toda la magia. Esta se alzó al cielo y descendió con violencia contra Walter, él exprofeso solo pudo dar un breve grito antes de que su cuerpo se pulverizara, dejando solo sus ropas en el piso.

El sol salió finalmente, Mc volteo a ver a los chicos para agradecerles. Cada uno se despidió de el/ella en silencio, desvaneciéndose conforme los rayos de luz se hacían más fuerte.

Un ronquido llamó su atención, Grim estaba dormido mientras Sam terminaba de curarlo.

A) ¡Grim!

Todos tenían sueño, así que rogaban que aquella reunión terminara pronto. Las quejas de los alumnos por haber sido impedidos de ayudar a terminar con Walter cambiaron a gritos de júbilo al ver a los chicos de Onboro haber vuelto sanos y salvos.

No obstante, una noche de batallas, estrés y uso excesivo de magia comenzó a pasarles factura una vez todos sintieron que finalmente aquella pesadilla había terminado, ver a algunos chicos dormidos en la sala de lecturas no era ninguna sorpresa.

—Moo, necesitó mi cama— se quejaba Ace en voz alta.

—Si aún tenemos camas— comentaba Floyd echando un vistazo a la destruida escuela.

—Su atención por favor— mando a llamar Crowley a los alumnos, —en vista de los recientes acontecimientos, las clases serán canceladas por los próximos tres días— las palabras del director fueron seguidas de víctores cansados.

La mayoría de los alumnos se retiraron, algunos invitaban a sus amigos cuyos dormitorios habían sido destruidos a descansar con ellos, otros se organizaban para dormir en las habitaciones menos dañadas, poco a poco la sala se vació hasta solo quedar profesores y líderes de dormitorio.

—Mc, ¿no quieres retirarte a descansar?, debes estar agotado/a— mencionaba Malleus, a lo que nadie más se opuso.

A) Yo también soy un/a prefecto/a.

B) A mí no me vuelven a dejar fuera.

—Bien, unos anuncios rápidos para poder irnos a dormir también— comenzó a hablar Crowley, —Los veré a las cinco de la tarde para… ya saben que, después de eso tendrán el resto del tiempo libre— indicaba el director a los alumnos.

—La reconstrucción del colegio empezará en cuanto la policía termine la investigación, mientras tanto estudiaran en sus dormitorios, eso es todo.