Megalonia

Con la boca abierta de par en par, se veía la incredulidad de la cara del rey, hasta hace 1 segundo no entendía nada y ahora le entiende perfecto? Qué es esto? Vio que sus subordinados lo miraban intranquilos -¿Entendieron lo que dijo?- preguntó señalando a Borbo.

Ellos se miraron entre sí y negaron con la cabeza, entonces Borbo se explicó, -Ellos no podrán entender, solo puedo mantener una conexión entre nosotros-.

-¿Qué conexión, de que hablas?- Ahora estaba aún mas confundido, conexión de qué?

-Es una conexión telepática, es magia simple para magos en general pero a mí me cuesta mantenerla, por eso solo tú puedes entenderme-.

-Ya veo, bueno, tu nombre es Borbo, dime Borbo donde estamos, quiero que seas específico, si cooperas no tengo problemas en liberarte y que vuelvas a tu aldea. /Una vez que la seguridad de mi pueblo este garantizada claro/ pensó el rey-.

Borbo no le creyó tan rápidamente, pero entendía que su vida no estaba en peligro directo, y como su pregunta era bastante ignorante, decidió responderla sin pensar más en ello.

-Este es el bosque Lumen, y yo vengo de la Aldea con el mismo nombre-.

-Necesito que seas mas especifico, yo vengo de Esparta, sabes donde es?- Su cara radiante de orgullo al mencionar a su patria, la mas grande y poderosa de toda Grecia, ni Atenas podía compararse.

-Nunca escuché hablar de Esparta, pero si quieres que sea mas general.....-

-Adelante-.

Dibujó en la tierra un rectángulo e hizo un punto en los borde del lado izquierdo

-Estamos ubicados en las tierras del Marqués Servos, una mago de alto rango-.

-Para, qué es un mago?-

(Ahora sí que estaba perdido, estos tipos no conocían ni la magia eran completamente ignorantes de todo a su alrededor, de donde habían salido, donde quedaba Esparta, habrán cruzado la cordillera? Pero sin magia, cómo?)

-Todas las personas usan magia, como fuego, así- levantó su dedo y una pequeña llamita apareció, en ese momento una lanza se apoyó sobre su cuello, lista para rebanarlo.

-Alto, no pasa nada- Demófilo levantó su lanza intranquilo, el había presenciado como ese tipo con la capas gris había asesinado aquella criatura como si nada! Si no eran cuidadosos este tipo los aniquilaría a todos; ahora estaba mas alerta, si notaba un leve signo de peligro lo atravesaría con su lanza en un parpadeo, podría afrentar el castigo del rey luego.

La frente de Borbo resplandecía de gotas de sudor, (casi me mata por esa llamita! Que se cree que los voy a quemar) ya no sabía si estar enojado o reírse ante la ignorancia de estos tipos.

-Voy a hacer de cuenta que no entienden nada de sentido de común, todas las personas usan magia, hasta niños, es que algunos son mas aptos que otros, todo depende de como perciban el ambiente, la energía esta en todos lados y para algunos, usarla es muy sencillo mientras que para otros es mas complicado, eso que te mostré era solo magia de uso diario, el hechizo que uso para que nos entendamos también es normal y depende de quien lo use se puede extender a varias personas y varios metros.

Servos es un mago hecho y derecho, su capacidad mágica lo coloca entre los mejores de este imperio, consiguiendo así el puesto de general en el ejercito de magos-.

-¿Como se compara ese hombre con los tipos esos de túnica gris?-

-Esos son aprendices, no tienen comparación, en Lumen andan algunos en misiones, los buenos vuelven a la capital del territorio mientras que los demás buscan trabajo en aldeas o ciudades, como los guardias de Lumen. Claro que su magia es mucho mas poderosa que la mía, pero compararlo con el Marqués no tiene sentido-.

-Uno de mis hombres vio como destruían a una bestia color naranja con rayas negras como si fuera nada-.

-Un tigre, era una cría 100%, si hubiera sido un adulto haría falta un maldito ejercito. Cuando crecen desarrollan una resistencia increíble a la magia, es por eso que se necesita de magos mas experimentados y poderosos para matarlos-.

-Entonces en resumen, todos pueden usar magia, algunos mejor que otros, la magia de combate solo la usan aquellos con túnicas grises, la magia no solo es el uso del fuego sino de otros elementos... que mas?-

-Hasta donde sé, todos usan los 4 elementos, agua-tierra-fuego-aire, algunos tienen la habilidad de controlar las plantas, pero son mas raros, ¿quieres saber con cual elemento tienes mas afinidad?-

-Podemos utilizar esa magia también?-

-Todos pueden, solo tenemos que hacer una prueba-.

-Bien, que hay que hacer-. Leónidas estaba eufórico, si ellos podían usar la magia, más sus habilidades físicas, su supervivencia ya no sería algo de vital importancia, podrían empezar a integrarse con las personas de este mundo.

-Solo levanta tu mano y piensa en hacer una pequeña llama, así nada mas, hasta los niños lo hacen, los otros elementos son igual de sencillos, la cosa es "invocar" la energía a tu alrededor y que se forme en fuego.

Nada, después de minutos intentando, no podía ni crear una chispa, estaba sumamente frustrado.

Con un suspiro miró a los demás y ordenó que lo intentaran. No había caso, ninguno de ellos podía.

Leónidas estaba cabizbajo, si ninguno de su pueblo podría utilizar magia, como se defenderían de las injusticias de este mundo, serían ellos los nuevos esclavos? El valiente pueblo espartano, transformado a un pueblo de Ilotas sin poder, sin libertad. Tal vez este lugar sí era el infierno.

-Esto nunca había sucedido tal vez si alguien con mas experiencia se los explica puedan manifestar algún hechizo simple- (pero la verdad no lo creo, no, aún si lo hicieran en un futuro, tendrían el peor talento de todo Megalonia o incluso mas allá)-.

-Dejemos de lado la magia, dime que hay mas allá de este recuadro- dijo, apuntando al bosque lumen, la posición en la que estaban en ese momento.

-Si vas mas allá del bosque Lumen se encontrarán con la selva de Urtha, es un lugar en sumo peligroso, nadie se atreve a ingresar en los abismos de esa jungla, ni siquiera el emperador iría-.

-¿Emperador? ¿En qué imperio estamos?-

Con una palma en su frente dijo- Cierto... estamos en el imperio de Megalonia, Megalonia es el apellido de la familia real, son todos en extremo poderosos, no solo el emperador, incluso los 3 príncipes y la princesa, todos tienen talento, está en la sangre.

-Cumpliré mi palabra, pero tendrás que esperar unos días para volver a Lumen- Apenas terminó de hablar, se levantó y se fue seguido de sus hombres, dándoles instrucciones a los Krypteias de qué hacer con el prisionero.

Con una mano en su barbilla el rey estaba decidido, no podían quedarse allí, aunque sea un suicidio debían retirarse a esa selva, una muerte en busca de poder era mas honrosa que una vida de esclavitud, estos no eran persas, eran monstruos con poderes inimaginables, solo uno conquistaría toda Grecia, sus escudos no servirían, sus flechas no llegarían a su objetivo, ni hablar de lanzas y espadas.

Ésta era la primer derrota que Leónidas aceptaba con vergüenza.