introducción

Era de tarde cuando todo eso sucedió, al menos lo era en el lugar donde me encontraba.

Mi nombre es Cesar y recuerdo todo muy bien, al menos eso es lo que mi mente me dice, pues he de reconocer que hay sucesos que quiero olvidar y hay sucesos que se supone que no debo recordar.

Era un 30 de junio del 2019 y exactamente me encontraba en el centro de la ciudad en donde vivía, Talara. Una ciudad pequeña que últimamente se volvió peligrosa. Pero eso no es lo que vengo a contarles, en ese momento un ruido estruendoso rompió la calma del lugar. La mirada de todos fue dirigida al cielo, creo yo que todos pensamos en el ruido que hacen los aviones, pero ese ruido fue muchas veces más potentes.

El cielo estaba resquebrajándose. No sé exactamente cómo explicarlo, pues una parte del cielo empezó a quebrarse y se ponía de color negro, hasta que fue lo suficientemente grande como para que del interior salga una nave tan grande que su sombra cubrió toda la ciudad.

Entonces una voz gruesa se escuchó en todo el mundo.

"humanos, escuchen. Durante años se les ha observado y hemos llegado a la conclusión de que no merecen seguir existiendo. Sus actitudes hacia sus semejantes, sus acciones hacia los demás habitantes de este planeta, su degradación y aniquilación de sus riquezas nos ha decepcionado. Por más oportunidades que les hemos brindado, por más advertencias que les hacemos llegar ustedes se niegan a cambiar. No mejoran sus acciones, y por ello solo nos queda una opción.

Su total destrucción. Pero nuestra benevolencia nos hace querer darles una última oportunidad. Ríndanse ante nosotros y vivirán. O Sigan su mismo pensar erróneo y malvado, luchen y mueran todos."

Ese mensaje fue el que nos dieron, un mensaje algo vago y que demuestra que lo único que ellos querían era tener una excusa para atacarnos o mejor dicho para exterminarnos.

El tiempo que nos dieron para pensar fue de aproximadamente un minuto. De esas naves cientos de objetos empezaron a caer y el caos inició por completo.