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Lo importante para mí (Pausado y en reescritura)

Un accidente, ¿cómo afectaría tu vida?, ¿fue algo bueno o malo?, ¿tal vez fue el destino?, ¿o solo es el juego de alguien? Una historia, con un buen cliché y destrucción de la cuarta pared. ... ... ... ... "Oye autor, ¿por qué quieres sonar profundo?, mejor escribe una verdadera descripción de la historia. Nadie se sentiría interesado por esas preguntas que ni tú sabes que significan" Autor: Nadie pidió la opinión de un personaje ficticio... Espera ¡¿qué demonios haces aquí?! "Pues... No sé, hace rato estaba cruzando la calle y..." Autor: ¿No me digas que te moriste otra vez? ... "¿Cómo que otra vez?" _________________________________________________________________________ P.D: Cualquier parecido con la realidad es mera coincidencia. Esta historia salió de mis retorcidas ideas y fantasías, solo espero que disfruten leyéndola. _________________________________________________________________________

CelestialAuthor · Realistic
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104 Chs

Parte 72: Odio

Alex: Y... ¿Me puedes repetir el por qué rayos estás aquí y a esta hora?

Dylan: ¿Acaso no puedo pasar por mi buen amigo para ir a la escuela?

Alex: No sé si cuando eras bebé te caíste de la cuna, pero no creo que seas tan idiota como para no darte cuenta de que apenas son las cuatro de la mañana.

Dylan: Ya sabes lo que dicen, el que madruga Dios le ayuda.

Alex: ¿Y si el diablo madruga?

Dylan:... Alex...

Alex: ¿Qué?

Dylan: Eso es profundo.

...

...

Sí, cualquiera que pudiera verme en ese momento podía describirme de una sola manera, incluso yo me sentiría extraño si viera a alguien así y simplemente lo ignoraría para seguir con mi vida de siempre, pero Alex tenía decirme lo obvio.

Alex: Tienes cara de idiota.

Dylan: El sentimiento es mutuo.

Alex: No, hablo en serio, ¿estás bien?

Dylan: ¿Por qué no lo estaría?, la vida es maravillosa.

Alex:...

Dylan: Con la primera entrada de luz a través de mi ventana me di cuenta de que no tengo nada por qué preocuparme, realmente me siento feliz, ¿acaso no puedes sentirte de esa manera?

Alex: No te duele nada en este momento, ¿verdad?

Dylan: Claro que no, me siento como si hoy fuera el día más feliz de mi vida.

Alex: Es bueno saberlo, entonces aprieta tus dientes, por favor.

Dylan: ¿Para qué...?

Pero antes de darme cuenta, mi conciencia inundada de pura felicidad de repente se volvió totalmente oscura conforme esta se iba desvaneciendo sin saber realmente qué había pasado.

...

...

Dylan: Ahg... ¿Por qué me duele tanto la cabeza?

Alex: Al fin despiertas, menos mal, las personas ya empezaban a verme raro por llevarte cargando todo el camino, por cierto, espero que eso que siento en mi espalda sea tu celular.

Aún confundido por la situación, simplemente me bajé de Alex para darme cuenta de que parecía que estábamos de camino de la escuela, estaba a punto de preguntarle qué había pasado, pero entonces... Lo recordé todo.

Dylan: ¡¿Por qué diablos me noqueaste?!

Alex: ¿Qué querías que hiciera?, me estabas dando vergüenza ajena y no parecías ser tú mismo, deberías darme las gracias.

Y después de varias discusiones sin sentido, y que escapáramos de la vista de todas las personas que nos veían con cara de lastima, tanto Alex como yo seguimos nuestro camino con algo más de calma a la vez que le explicaba algunas cosas.

Alex: Entonces, ¿ni siquiera pudiste dormir?

Dylan: Bueno... Podría decirse.

Alex: ¿Y te quedaste pensando en Clara todo ese tiempo?

Dylan: Mas o menos...

Alex: Amigo... Realmente eres un virgen.

Dylan: No te conté esto para que me digas eso... Pero creo que tienes razón...

Alex: De acuerdo, ahora entiendo un poco, pero te diré esto.

Dylan: ¿Qué?

Alex: Sinceramente, no te pregunté.

Dylan: Lo sé...

Alex: Y con eso puedo deducir algo.

Dylan: ¿Qué cosa?

Alex: Soy tu único amigo, ¿no es así?

Dylan: Sí...

Alex: Dylan, tu vida es triste.

Dylan: No me digas algo tan obvio...

...

...

El camino quedó atrás al igual que mi actitud deprimente después de que Alex terminara de decir todo aquello, llegamos al aula justo en el momento que sonó la campana y fuimos a nuestros asientos ignorando a los demás seres alrededor de nosotros que supuestamente eran nuestros compañeros.

Alex: No lo entiendo...

Dylan: ¿Qué exactamente?

Alex: ¿Por qué somos los solitarios?

Dylan: Hay muy buenas razones si lo piensas, creo que varias personas de aquí me conocían y se alejan de mí por alguna razón, mientras que tú pasaste el día de ayer pidiéndole matrimonio a cualquier chica con la que te presentabas y te peleaste con un pájaro que te quito un trozo de sándwich a la vez que maldecías a toda su familia y descendencia entera.

Alex: ¿Cómo te enteraste de esa parte?, creí que estabas en la biblioteca.

Dylan: Eso es porque lo subieron a internet... Mira, ya lleva dos millones de vistas.

Alex: ¿Realmente el humano evoluciona?, es un buen título.

...

Las clases de la mañana pasaron con normalidad sin nada interesante que mencionar, la campana había vuelto a sonar indicando que la hora del almuerzo había comenzado y yo me encontraba mirando el cuerpo dormido de Alex en su asiento, pero después de estar unos cinco minutos intentando despertarlo, simplemente me rendí y lo dejé ahí con la esperanza de que no le pasara algo realmente malo para después dirigirme al lugar donde estaba seguro que pasaría una buena temporada.

Dylan: Bien, creo que ya puedo dejar las matemáticas de lado, suficientes métodos que nunca usaré realmente en mi vida por el día de hoy.

El tiempo pasaba a la vez que la cantidad de información que mi cerebro absorbía se iba acumulando en una carpeta que borraría en un futuro, ya estaba por pasar al siguiente material que tenía pendiente, pero la figura de alguien llevando una enorme torre de libros que tapaban su vista fue suficiente para llamar mi atención.

Nuevamente me encontraba en el lugar escondido de la biblioteca sin una sola alma a mi alrededor, por lo que una vez que vi a esa persona, tuve una pequeña idea de quién podría ser.

???: Ya casi llego...

Esas palabras parecían haber sido dichas con algo de esfuerzo mientras yo me daba cuenta de que la misma pila de libros comenzaba a temblar y a moverse un poco para luego saber que estaba por pasar lo inevitable... Y así fue.

???: ¡Ah!

¡Tuummmm!

Ese pequeño estruendo acompañado del repentino grito ahogado fue lo que llegó a mí para después notar cómo la enorme cantidad de libros que formaban la antigua pila estaban cubriendo todo el suelo de la zona y yo me levantaba de mi asiento para brindar un poco de ayuda en ese momento.

Dylan: Realmente no sé si decirte que no deberías cargar con tantos libros, pero sería demasiado obvio.

???: Jeje, en realidad lo acabas de decir... Esa voz, ¿eres tú?, Dylan.

Dylan: Sí, déjame ayudarte a juntar los libros.

???: Te lo agradezco, por cierto, también podrías buscar mis anteojos, realmente no puedo ver mucho sin ellos.

Dylan: Claro, no debieron haber ido muy lejos.

Me había asegurado de levantar todos y cada uno de los libros para después ponerlos sobre la mesa, pero no hubo rastro de los anteojos por ningún lado hasta que los encontré en el cesto de la basura.

Dylan: ¿Por qué están aquí?, en fin...

Me aseguré de limpiarlos un poco, aunque no estaba seguro si debía hacerlo yo mismo, y regresé sobre mis pasos hasta llegar al lugar del accidente donde pude ver la misma figura de antes sosteniéndose sobre sus piernas mientras buscaba desesperadamente algo a su alrededor.

Dylan: No aparecerán por arte de magia a un lado de ti.

???: ¡Ahh!... Oh, volviste, Dylan. Dime que los encontraste, por favor.

Dylan: Descuida, parece que salieron volando, pero no les pasó nada.

???: Es un alivio, muchas gracias por tu ayuda.

Dylan: No fue nada, pero...

???: ¿Sí?

Dylan: Le acabas de dar las gracias a una silla, ¿sabes?

???: ¡L-Lo siento, re-realmente me es difícil ver sin ellos!

Dylan: Supongo que sí, ahora te disculpaste con una planta.

???: ¡Lo siento!

Quitando la peculiar escena por la que estábamos pasando, algo seguía en mi mente, realmente no me podía quitar la sensación de familiaridad que experimentaba en ese momento, en verdad sentía que había visto a esa chica frente a mí en alguna otra parte, pero ese no parecía ser el caso por más que lo intentaba recordar.

Milagrosamente estábamos lo suficientemente alejados para que nadie escuchara el sobresalto que tuvo en ese instante y que nos sacaran de la biblioteca, pude indicarle a donde girarse para que pudiera "verme" y le entregué sus anteojos mientras podía ver cómo su cabello estaba suelto en ese momento y era suficiente para cubrir su rostro.

???: Muchas gracias, Dylan, no sé cuánto hubiera tardado en encontrarlos por mi cuenta, tal vez debería llevarlos con un sujetador para evitar que suceda esto de nuevo.

Dylan: Esa es una buena idea. ¿Necesitas ayuda para levantarte?

???: Gracias, jeje.

Podía ver como seguía sosteniendo sus anteojos con su mano, pero solo tenía que tomar la otra para ayudarla, pude notar cómo se ponía de pie lentamente y limpiaba un poco su uniforme para deshacerse del polvo que quedó sobre é.

No estaba prestando mucha atención realmente, pero en ese preciso instante, pude ver algo que hizo que mi cerebro desenterrara un recuerdo que parecía demasiado lejano haciendo que una enorme duda se generara en mí.

Ambos tomamos asiento, después de unas cuantas palabras más, cada quien se sumergió en su lectura y no se escuchó una sola palabra, realmente quería terminar con lo que tenía planeado ese día, pero la duda que acababa de aparecer en mi mente no me dejaba concentrarme.

La había visto, esos ojos marrones junto al brillante y largo cabello oscuro además de la pequeña sonrisa que iba dirigida hacia mí. La había visto antes, pocas veces, pero esas pocas eran suficientes para que ese recuerdo quedara en mi mente y que me decidiera a comprobar si lo que pensaba era verdad.

Dylan: Esto...

???: ¿Sí?

Pude llamar su atención con éxito esa vez, aún seguía con mis dudas o que actuaría de una forma extraña por lo que estaba a punto de decir, pero después de unos segundos, no pensé demasiado en ello y simplemente dije lo único que apareció en mi mente.

Dylan: Lisa, ¿eres tú?

Un silencio que no era muy extraño que existiera en la biblioteca fue lo único presente después de mi pregunta, me estaba golpeando mentalmente por mi extraña pregunta y estaba a punto de decir que ignorara lo que acaba de decir, pero aquella voz que de un segundo a otro parecía que la había escuchado más veces de las que debería, llegó a mis oídos al igual que una cara de confusión por parte de la chica que estaba frente a mí.

Lisa: ¿Eh?... Bueno, creo que sigo siendo yo, es una pregunta algo extraña la que acabas de hacer, ¿no crees?

Dylan: Ah... E-En realidad, ayer sonó la campana justo cuando dijiste tu nombre y no pude escucharlo bien, solo quería comprobar si no me había equivocado, jaja.

Lisa: Ya veo, bueno, entonces un placer conocerte de nuevo, Dylan, jaja.

Dylan: Igualmente, Lisa.

Y una vez que esa duda quedó resuelta además de la pequeña confusión, el silencio nuevamente volvió entre ambos, pero para mí, un nuevo cumulo de pensamientos estaba llenando mi mente al mismo tiempo que pasaba las hojas frente a mí sin ponerles la suficiente atención.

"Esto es extraño de varias formas, y debo decir que ni siquiera sé que decir ahora mismo"

Todo había quedado claro para mí, la chica que estaba a un lado de mí y, que no había reconocido hasta ese momento, se trababa de Lisa. Los recuerdos volvieron a mí y aquellos días de aquel día infinito llenaban mi cabeza, pero en especial, los diferentes encuentros que tuve con ella.

Era cierto que al final había dejado de ir a la escuela cuando estaba en aquella situación, pero antes de eso, pasaba la mayoría de mi tiempo detrás de la escuela esperando a que cuando cerrara mis ojos todo volviera a la normalidad, y debido a eso, fue inevitable que me encontrara a la misma chica de siempre apoyada en el tronco de un árbol mientras tarareaba una alegre tonada que siempre llamaba mi atención.

Simplemente me acercaba a ella ya que no tenía nada que perder, muchas veces la conversación se convertía en un cumulo de disculpas ya que siempre chocábamos esa mañana por alguna extraña razón. Realmente no tenía nada increíble, solo se trataba una persona que había conocido en mi mundo original, pero, aunque nunca la había pensado, tal vez Lisa era como algún tipo de amiga para mí.

"Ahora entiendo por qué no pude reconocerla, en mi mundo no llevaba anteojos y su cabello escondía un poco más su rostro... Bueno, ¿y ahora qué?"

Esa pregunta llegó a mí de repente, ahora que sabía quién era Lisa en realidad, no sabía que hacer o cómo actuar, por lo que me estaba haciendo más preguntas innecesarias en mi mente.

"Ahora esto se siente algo extraño, ¿debería intentar hablar un poco más con ella?, no, ni siquiera sé que decir, pero siento esta necesidad de hablarle... ¿Creerá que soy raro?"

Ni siquiera yo mismo sabía qué me estaba preguntando, pero eso no pareció ser ignorado por Lisa.

Lisa: ¿Sucede algo?, Dylan, te ves algo inquieto.

Dylan: ¿Qué?, ah, no, es solo que...

Ya estaba a punto de iniciar una nueva conversación de la nada e intentar por así decirlo, conocer un poco mejor a la Lisa de esta nueva realidad, pero en ese preciso momento, una nueva voz se escuchó en el lugar.

Alex: Fwaaa... Por fin te encuentro, ¿en qué año estamos?

Dylan: ¿Por qué haces esa pregunta?

"Además que no sé la respuesta a ella..."

Alex: Es que siento como si hubieran pasado varios días desde que dormí, soñé que un gorila me estaba gritando por comerme sus bananas.

Dylan: Tal vez eran los gritos de profesor de historia cuando trató de despertarte.

Alex: Hmm... Ahora que lo pienso, se parecen un poco.

La conversación entre ambos me había distraído lo suficiente para que me olvidara de que no éramos los únicos presentes en ese momento, pero pude escapar de las tonterías de Alex y poner atención a la persona que parecía haberse quedado estática en su asiento.

Dylan: Lo siento, Lisa, realmente dudo que se conozcan, pero este es Alex, se podría decir que es amigo mío.

Alex: ¿Por qué eres cruel cada vez que me presentas con alguien?... En fin, es un placer, Lisa, ten cuidado con Dylan, creo que es un pervertido de closet.

Realmente quería golpearlo por sus comentarios innecesarios, pero no tuve tiempo para eso cuando vi como una extraña situación se desencadenaba frente a mí.

Alex había alzado su mano para saludar a Lisa, parecía que lo siguiente sería un pequeño intercambio para conocerse después de la presentación, pero cuando vi la figura de Lisa, ese no parecía que sería el caso.

Dylan: Lisa...

Podía verla, estaba temblando, pero no parecía ser algo normal, podía notar como su piel se había puesto algo pálida y con mucha dificultad se estaba levantando de su asiento. Mi primera idea era que tal vez sentía algo de frio, pero eso no parecía ser posible en el lugar donde estábamos ya que la temperatura no era nada exagerada.

Me estaba acercando a ella con algo de preocupación por lo que podría estarle pasando y saber si podía hacer algo para ayudarla, pero antes de llegar a ella, su voz combinada con un sentimiento como de miedo fue lo que llegó a mis oídos para después notar cómo su figura se alejaba corriendo de nosotros.

Lisa: ¡M-Me tengo que ir!

Dylan: ¡Lisa...!

Quería saber qué era lo que acababa de pasar, pero no parecía ser buena idea ir detrás de ella en ese momento a la vez que la misma cara de confusión que había tenido los últimos días volvía a mí.

Alex: Esto... ¿Acaso hice algo malo?

Dylan: No lo creo.

Alex: Si me lo preguntas, eso fue bastante extraño.

Dylan: También pienso lo mismo, tal vez se sentía mal o algo.

Alex: Puedo entender eso, recuerdo la vez que tuve que correr para encontrar un baño, casi no lo logro.

Dylan: Realmente no necesitaba saber eso.

Alex: Entonces... ¿Qué quieres hacer?, supongo que no has comido todavía.

Dylan: Ahora que lo dices... ¿Cuánto tiempo queda del descanso?

Alex: Unos diez minutos, si nos apuramos podremos conseguir algo.

Dylan: Entonces vamos, ¿tienes diner...?, no sé ni para que te pregunto, ahora entiendo por qué no comiste sin mí.

Alex: Me conoces muy bien.

...

...

Con velocidad y después de que evitara que Alex pidiera un sándwich de sardinas, ambos estábamos regresando al salón con el estómago lo suficientemente lleno para resistir lo que quedaba del día.

Alex: Debes admitir que se veía apetitoso.

Dylan: Hasta la vendedora te dijo que no sabía que existían.

Alex: Pero me lo daba gratis.

Dylan: No quería tener que llevarte arrastrando a la enfermería, pide uno cuando vayas tu solo.

Alex: Tal vez lo haga y te diré lo delicioso que sabe.

Dylan: Sí, si sigues vivo.

Alex: ¿Por qué dud...?, ¿esa no es...?

Y siguiendo su vista al igual que escuchando su pregunta, una figura a lo lejos apareció en mi vista y fue suficiente para que no pensara demasiado y me acercara a ella sin preocuparme por nada más.

Dylan: Clara.

Clara: ¿Eh?

Dylan: Parece que si pudimos encontrarnos después de todo.

Alex: Hola otra vez.

Clara: También me alegra verlos, pero...

Dylan: Por cierto, no creerás lo que estaba a punto de hacer Alex hace rato.

Clara: Me encantaría oírlo, pero...

Dylan: ¿Pasa algo?, espero no estarte molestando con algo.

Clara: No, es solo...

Podía ver la cara de nerviosismo que tenía Clara en ese momento, era algo extraño y pensaba que la estaba interrumpiendo mientras estaba ocupada con algo.

Estaba por escuchar lo que tenía que decirme, pero una nueva voz, que fue muy familiar, llegó en ese momento al mismo tiempo que sentía cómo era empujado hacia atrás y alejado de Clara lo suficiente para darme cuenta de las dos personas que acaban de llegar.

Clara: ¡Chicas, esperen...!

No sabía que estaba pasando, pero solo me tomó algunos segundos hacer que mi vista se aclarara y pudiera darme cuenta de las dos chicas que se interponían entre Clara y yo a la vez que las reconocía en ese instante al igual que las voces que salían de ellas.

Carol: Así que volviste, pensamos que por fin te habías rendido.

Sophia: No te acerques más a Clara, ya la has lastimado demasiado.

Esas frías palabras llegaron a mí, pero no pude entenderlas, todo pasó muy rápido y al no saber nada, no sabía que decir o tratar de preguntar algo.

Carol: No te hizo nada, ¿verdad?

Clara: No, es un malentendid...

Sophia: Sabía que no debíamos dejarte sola, volvamos al salón.

Clara: Pero...

Y sin dejarme escuchar otra palabra de Clara, pude ver como Carol y Sophia se la llevaban con ella no sin antes dirigir algunas miradas de odio hacia mí que hacían que la confusión que ya sentía se volviera varias veces más grandes.

"¿Qué demonios acaba de pasar?"

Continuará...