Parte 63: Dudas

Volví a abrir mis ojos, no logré entenderlo del todo, nuevamente se repetía aquella situación, de nuevo me encontraba en una habitación donde el blanco de los alrededores y el olor a desinfectante eran lo único que podía percibir.

Mi cabeza me dolía demasiado al mismo tiempo que me sentaba con algo de dificultad sobre la cama que obviamente no era mía. No había nada en lo pudiera ver mi reflejo, pero si lo hubiera hecho, solo habría visto a alguien que supuestamente se trataba de mí.

Los alrededores estaban vacíos y en silencio haciendo que me sintiera todavía más extraño a la vez que intentaba recordar la razón por la que estaba ahí.

Dylan: ¿Qué hago aquí?, lo último que recuerdo fue... ¡¡Agrhhhh!!

Pero ni siquiera pude concentrarme cuando una fuerte punzada de dolor azotó mi cabeza haciendo que usara mis manos para agarrarla en un intento inútil de que parara, el dolor solo duró unos cuantos segundos, pero realmente no deseaba volverlo a sentirlo nunca más.

Sentía como el sudor caía por mi frente al mismo tiempo que trataba de calmarme, ni siquiera sabía qué hacía en un hospital nuevamente, y mis recuerdos no me ayudaban mucho.

Dylan: Lo último que recuerdo fue mi cita con Clara y después... ¿Por qué siento que falta algo?

Realmente mis recuerdos seguían ahí, pero me sentía extraño por alguna razón, era como si en mi mente faltara algo que no lograba recordar, además de que muchas cosas que supuestamente hice no tenían ningún sentido.

Dylan: ¿Por qué tengo tantos recuerdos de la azotea de la escuela?, ni siquiera hay algo que valga la pena de recordar en ellos, sólo estoy yo solo hablando conmigo mismo... Que extraño, supongo que esperare a que venga alguien para que resuelva mis dudas.

Y como si los astros se alinearan, la puerta de la habitación fue abierta repentinamente al mismo tiempo que me daba cuenta de la chica que acaba de entrar.

Dylan: Hola, puede sonar extraño, ¿pero sabes por qué estoy aqu...?

Pero antes de que pudiera termina de hablar, mi rostro dio un rápido giro hacia un lado y un dolor punzante quedó en mi mejilla en ese mismo instante al mismo tiempo que escuchaba los gritos que iban dirigidos hacia mí.

Clara: ¡¡¿Esta era la razón?!!, ¡¡¿por eso me dijiste que me alejara de ti?!!

No entendía por qué me hacía esas preguntas ni la razón de porqué estaba actuando de esa manera, todo sucedió tan rápido que ni siquiera tuve tiempo de recuperarme cuando más de sus palabras llegaban a mí.

Clara: ¡¿Crees que a mí me importa todo eso?!... Snif... Te dije que todo estaría bien... Snif... ¡¿Por qué tienes que actuar de esta forma?!

Todo era confuso para mí, pero eso realmente no me importaba cuando me di cuenta de la lagrimas que estaba soltando Clara en ese momento, podía ver como su rostro no expresaba otra cosa que no fuera dolor y tristeza, y todo eso estaba dirigido a mí.

Dylan: Clara, yo...

Clara: No... Snif... Era lo que querías, ¿no?, está bien, me alejaré, pero también te lo pido, no vuelvas a acercarte a mí, al fin me di cuenta de cómo eres en realidad... Adiós, Dylan...

No pude hacer nada, cuando me di cuenta, ni siquiera tuve tiempo de evitar que se fuera, nuevamente me había quedado solo, pero esta vez, un profundo sentimiento de culpa y confusión estaba llenándome profundamente al mismo tiempo que el dolor en mi mejilla persistía en todo ese tiempo.

"En serio, ¿qué está pasando?, mis recuerdos no me ayudan en nada, no sé por qué Clara se comportó de esa manera, ¿acaso pasó algo después de nuestra cita?"

Esos extraños pensamientos no dejaban mi cabeza, me había quedado viendo el vacío tratando de adivinar qué era lo que acababa de pasar, pero después de un tiempo tuve que volver a la realidad cuando escuché como una nueva voz me llamaba en ese momento.

???: ¡Dylan!

No tuve tiempo de reaccionar cuando sentí como unos brazos comenzaban a rodearme en un abrazo al mismo tiempo que me daba cuenta de quien era esa persona en realidad y su preocupada voz volvía a inundar mis oídos.

Dylan: ¿Papá?

Esteban: Menos mal... Menos mal...

Apenas podía escuchar lo que decía, su abrazo se había aferrado todavía más a mí como si por alguna razón estuviera a punto de desaparecer o algo por el estilo, pero algo que realmente no podía ignorar era como parecía temblar tratando de controlar sus emociones en ese momento.

Esteban: Lo lamento... Realmente lo siento... Por favor, prométeme que no volverás a hacer algo como eso, no sé lo que haría si te perdiera a ti también.

No sabía que decir, realmente no entendía las emociones que expresaba papá en ese momento, desde que desperté, todo se había tornado realmente extraño y más preguntas se estaban generando en mi cabeza, pero en el instante que me vio directamente a los ojos y noté como su mirada estaba llena de dolor, solo pude asentir inconscientemente ante sus palabras.

Pensaba que por fin iba a tener oportunidad de decir algo, pero cuando la puerta volvió a ser abierta, vi el claro ejemplo de la imagen de un doctor y este se acercó a nosotros, entonces supe que tendría que esperar.

Doctor: Esta es una sorpresa, ¿cómo te sientes?, Dylan.

Dylan: Creo que bien.

Doctor: Es bueno oír eso, si me disculpas, me gustaría discutir algo con tu padre unos momentos.

Siguiendo al doctor fuera de la habitación, papá me dio una última mirada y unas palmadas en el hombro antes de quedarme solo nuevamente, pero como las dudas seguían en mi cabeza, lo mejor que se me ocurrió fue acercarme a la puerta he intentar escuchar algo que me sirviera de pista, pero en verdad no esperaba que eso entrara en mis oídos.

"¿Sobredosis?"

La charla siguió su curso al mismo tiempo que varios fragmentos llegaban a mí haciendo que las cosas poco a poco se fueran aclarando, pero que al mismo tiempo me llenara de confusión todavía más.

"¿Qué es todo esto?, ¿acaso intenté...?"

Despejé ese pensamiento rápidamente cuando sentí como alguien se acercaba a la puerta y volví a la cama para disimular lo que acababa de hacer. No tardó mucho cuando tanto papá como el doctor entraron de nuevo a la habitación y este último se acercó a mí para después hacerme muchos tipos de preguntas relacionadas a cómo me sentía.

Doctor: Los últimos días parece que hicieron maravillas, Dylan está prácticamente como nuevo, la buena noticia es que solo se necesitaran hacer unas pruebas más y podrá volver a casa antes de que se dé cuenta.

Esteban: Muchas gracias, realmente no sé cómo pagarle por todo lo que hizo.

El doctor dijo unas pocas palabras más de modestia y se despidió por última vez antes de salir de la habitación. Yo aún no había aceptado lo que estaba pasando, pero quería evitar que esas emociones se mostraran en mi cara.

Esteban: ¿Cómo te sientes?, ¿necesitas algo?

Dylan: No, estoy bien, papá.

El silencio llenó la habitación, tenía mi mirada baja y realmente no sabía de qué hablar, podía notar como papá intentaba decir algo más, pero tampoco llegaba a hacerlo por algún motivo.

Esteban: Por cierto, Clara estuvo muy preocupada estos días, nunca se separó de tu lado, dijo que pasaría a verte hoy otra vez, pero supongo que no alcanzó a estar aquí cuando despertaste.

Con solo escuchar eso, me confundía todavía más por la forma en la que actuó en realidad una vez que me vio.

Esteban: Es una gran chica, realmente te quiere mucho, no puedes hacer que se ponga triste otra vez.

Y esas palabras parecían un golpe más que otra cosa.

Me limité a guardar silencio y solo responder cuando era necesario, había muchas ideas en mi cabeza, pero la que parecía que era la más posible entre todas, era la que en realidad me preocupaba demasiado.

Pasaron unos minutos más cuando papá tuvo que despedirse, tal parecía que tenía que volver al trabajo ya que había faltado todos los días que estuve en el hospital esperando a que despertara. Yo solo asentí y lo despedí, podía notar su mirada cansada que tenía en ese momento, pero no podía detenerlo.

Después de un tiempo, unas enfermeras vinieron por mí y me acompañaron para que realizara algunas pruebas entre otras cosas, no me negué e hice lo que me dijeron hasta que todo terminó y volví a la habitación para darme cuenta de que la oscuridad estaba afuera de la ventana.

Esa noche no pude dormir realmente, siempre que lo intentaba, me despertaba demasiado exaltado y respirando fuertemente al mismo tiempo que no podía recordar exactamente por qué pasaba eso, pensé que se trataba de una pesadilla o algo así, pero la sensación que tenía era muy extraña, realmente sentía que eso fue real y el no poder recordar nada de lo que era exactamente hacía que un malestar se generara en mi estómago.

Nuevamente me encontraba en la misma habitación, papá estaba a un lado de mí y ya me había cambiado la ropa del hospital por algo normal. El doctor nos dio los resultados ese mismo día y al parecer todo estaba bien conmigo, pude ver como nuevamente le dijo algo más en privado a papá, pero realmente no me importaba, lo único que quería era salir de ese lugar y volver a casa para descubrir si lo que creía era verdad o no.

El camino de regreso fue silencioso, yo me estaba preparando para el peor de los casos y no prestaba real atención a lo que me decía papá, ese maldito sentimiento no había dejado mi cuerpo desde el día anterior y el malestar que sentía se hacía más grande conforme pasaba el tiempo.

Dylan: Iré a mi habitación.

Esteban: Está bien, pediré algo para que comas, realmente quisiera quedarme contigo, pero...

Dylan: Descuida, no puedes simplemente dejar el trabajo de lado, no te preocupes, no volveré a hacer nada de lo que piensas.

Pude sentir como dudaba por unos segundos antes de abrazarme nuevamente y despedirse otra vez, yo solo miré a los alrededores y pude darme cuenta de que la casa estaba en un estado terrible, parecía que nunca la hubieran limpiado al mismo tiempo que veía todos los recipientes de comida que había por el suelo y las latas de alcohol que se acumulaban en diferentes lados de la cocina.

Simplemente lo ignoré y seguí mi camino entre todo el desastre hasta el segundo piso, las escaleras parecían nunca acabar cada vez que movía mis piernas, la idea que tenía se estaba fortaleciendo a cada paso que daba y una vez que abrí la puerta y me acosté en mi cama a la vez que recogía mi celular, tuve que convencerme a mí mismo sobre lo que estaba pasando.

Dylan: ¿Por qué está pasando esto otra vez?

La fecha era totalmente diferente, incluso las imágenes que tenía guardadas no se encontraban en ningún lugar, eso era lo único que me quedaba para convencerme realmente, y parece que al final resultó ser eso.

En mi mente había vuelto a aparecer ella, ni siquiera iba en molestarme en intentar llamarla, sabía que al final sería ignorado nuevamente y mis preguntas quedarían sin respuesta, por lo que lo único que me quedaba era sacar mis propias conclusiones.

Dylan: De nuevo acabé en otra realidad... ¿Por qué me hace esto?, ¿debo suponer que terminé con uno de los encargos que tenía que hacer?... Todo esto es una estupidez...

Solo me dejé caer en la cama nuevamente, lo que acaba de descubrir era lo menos que quería, ya había pasado por esto y logré acostumbrarme a mi nueva "realidad", ahora había sido obligado a repetir lo mismo otra vez, era demasiado injusto para mí.

Ni siquiera me di cuenta, pero mis parpados comenzaron a pesarme, todo el cansancio de la noche anterior parecía haberse acumulado y mi cuerpo me pedía un respiro de todo, y cuando mis ojos volvieron a abrirse, la luz de la mañana fue lo primero que entró en mi vista.

No pensé mucho en ello y bajé a la cocina al mismo tiempo que estaba planeado lo que iba a hacer en un futuro.

"No servirá de nada seguir lamentándome o culpando a alguien que ni siquiera le importa lo que pasa conmigo, tengo que averiguar muchas cosas y ver los cambios que hay en este mundo, aunque lo primero que debería hacer es descubrir cómo es mi relación con Clara, por lo que pasó, muy posiblemente la lastimé de alguna forma para que actuara así"

El desastre seguía en el mismo lugar, pero añadido a eso, pude ver como papá estaba dormido en la mesa de la cocina al mismo tiempo que más latas de cerveza estaban tiradas por el suelo.

"Bueno, puedo decir que este es uno de los cambios, nunca lo había visto de esta forma"

Me acerqué a él y lo moví repetidamente hasta que por suerte pude hacer que volviera a sí mismo.

Esteban: ¿Dylan?... ¿Qué hora es?

Dylan: Son casi las siete de la mañana, ¿estás bien?

Esteban: Sí, estoy bien... Lo siento, creo que lo volví a hacer...

Dylan: Bueno, creo que todos necesitan un respiro de vez en cuando, deberías ir a darte un buen baño mientras hago el desayuno.

Esteban: ¿Eh?, ¿estás seguro?

Dylan: Claro, no es ningún problema.

Podía ver como tuvo una cara algo extraña por unos momentos hasta que hizo caso de lo que dije y comencé a limpiar un poco para que al menos hubiera sitio donde comer para después buscar algo en el refrigerador.

Dylan: Me lo imaginaba, no hay casi nada que pueda usar, al menos hay huevos... ¿Qué rayos hace el control de la televisión aquí?

Hice lo mejor que pude con las pocas cosas comestibles que encontré y acomodé la mesa al mismo tiempo que veía como papá regresaba con una imagen menos deprimente que la de antes.

"Eso me trae recuerdos... Aunque algo borrosos"

Esteban: ¿En verdad lo hiciste tú?

Dylan: ¿Por qué se te hace extraño?, es lo menos que debería saber hacer, ¿no?, mejor comamos antes de que se enfrié.

Le indiqué que se sentara y simplemente comenzamos a comer, realmente no había mucho que mencionar, el silencio había vuelto a aparecer entre nosotros y seguía pensando en todo lo que me deparaba el futuro, pero eso solo duró unos minutos cuando pude ver como papá parecía haberse quedado estático mirando el plato del que solo había tomado un bocado.

Dylan: Lo siento si sabe mal, no había mucho de donde tomar ingredientes.

Esteban: ¿Qué?, no... Es solo, no sabía que podías cocinar tan bien, está realmente bueno.

Dylan: Gracias.

Esteban: ¿Por qué nunca lo habías hecho?, bueno, es cierto que estando en casa todo el tiempo se aprenden cosas, pero aun así me sorprendes.

"Así que este Dylan es algo especial, ¿y qué quiso decir con estar en casa todo el tiempo?"

Esteban: Bueno, tal vez te incómoda hablar de esto...

Dylan: No importa.

Esteban: En realidad, quería hablar de esto contigo... Ya sabes que el nuevo año ya empezó y aún tienes posibilidad de entrar si quieres, no sé realmente cómo te sientes, pero es el último año de preparatoria y...

Escuché esas palabras que poco a poco fueron llegando a mí y mi mente trabajaba a toda velocidad para descifrarlas solo para finalmente sacar mis propias conclusiones de todo eso.

"En verdad, parece que este Dylan va a ser algo problemático"

Dylan: Descuida, iré a la escuela, no quiero que te preocupes.

Esteban: Está bie… ¿Qué dijiste?

Dylan: Dije que iré, es el último año, ¿no?, no puedo simplemente echar todo a la basura.

Con solo escuchar mis palabras, me di cuenta de que lo sorprendió demasiado, era muy posible que el Dylan de esta realidad actuaria de una manera contraria a lo que estaba haciendo, pero yo no era él, bueno, al menos en la actitud.

Esteban: Ya veo... Es bueno oír eso.

El desayuno siguió de manera normal después de eso, hablamos de más cosas, algunas sin importancia y otras donde se mencionaba un poco sobre mi "accidente" sin especificar demasiado en lo que pasó.

Todo parecía ir de manera normal, pero después de pensarlo un poco, hubo algo que hizo que me sintiera extraño y papá se dio cuenta de eso.

Esteban: Parece que estas algo distraído, ¿qué estás pensando?

Dylan: No es nada, solo pensaba en mamá.

Era verdad que en todo este tiempo no la había visto ni una sola vez, lo cual era realmente extraño, pero tal vez estaba ocupada o algo así.

"Tal vez es ella la que hace los viajes de negocio en vez de papá"

Estaba juntando los platos y lavándolos, después de todo no quería que hubiera un desastre aun mayor, también me recordaba a mí mismo que limpiaría la casa de arriba hacia abajo, era difícil moverse entre toda la basura.

Ya había terminado y no sabía que hacer a continuación, pero no tuve que pensarlo mucho cuando llamaron mi atención.

Esteban: ¿Te gustaría acompañarme esta vez?

No sabía a qué se refería con esa pregunta, pero no tenía algo mejor que hacer, por lo que fui a vestirme rápidamente y bajé para después ambos empezáramos a caminar sin que supiera cuál era nuestro destino.

Mi atención estaba totalmente centrada en cualquier diferencia que pudiera identificar, pero parecía que los alrededores de la ciudad no cambiaban demasiado.

Esteban: No sé por qué, pero siento que hoy estás un poco diferente, hijo.

Dylan: ¿En serio?, tal vez estoy madurando.

Esteban: Hmm, quizás...

Las calles siguieron cambiando conforme avanzábamos, podía ver como el sol se había ocultado entre las nubes y hacía algo de frio por el otoño, aún seguía algo expectante por a donde nos dirigíamos, pero al final, fue algo que nunca entró en mi mente.

Dylan: Esto... Esto no puede estar pasando...

Continuará...