Capitulo 14: Una simple discusión

Sara se quedó conmocionada por lo que realizó Light hace un momento. Ella quedó un poco en trance al intentar procesar el movimiento que el niño de tan solo 5 años hizo.

Ailyn le había comentado sobre lo bueno que era su hijo, pero ella no pensó que seria algo increíble. Fue tan rápido cuando llegó hacia su hija y fue tan gentil al sostenerla, ademas de que Light tenia el cabello un poco largo y se sacudió al llegar hacia Sofia.

Su mirada era algo indiferente y sus ojos eran oscuros pero con un brillo que lo hacia ver "genial". Sara de repente volvió en si y rápidamente reviso a su hija y le hizo un sin fin de preguntas.

—Hija, ¿estas bien?, ¿como te sientes?, ¿quieres algo de tomar?, ¿quieres descansar un rato?

—Madre estoy bien, no te preocupes, no es nada —comentó Sofia en un intento de calmar un poco a su madre.

—Parece que si esta enferma —comento Light, quien la veía con algo de preocupación.

Después de todo, el seguía siendo un niño y los sentimientos de pena y lastima, aun estaban presentes. Ademas, intento analizar la situación en la que se encontró la madre. Sin duda seria alarmante y preocupante ver a su propio hijo estar de esa forma.

—Así están las cosas, mi querido Light —hablo Susan para explicarle un poco sobre la situación en la que se encuentra la niña—. Ella tiene una enfermedad en la sangre desde que tenia 5 años, tanto Sara como su esposo no tenían idea, y los efectos empezaron a surgir un año después, la cosa es que ellos me enviaron una carta hace unos días para ver si podía diagnosticar a su hija.

—Entiendo, pero, ¿por que esperaron a tanto? ¿no pudieron venir antes? —preguntó Light.

—El problema esta en que ellos no son de aquí, Light, son de otro pueblo. El lugar en donde viven se encuentra a casi un día del nuestro —comentó Albert.

Como bien se sabia, el pueblo donde vive Light esta alejado de otros pueblos y sobre todo, de la ciudad. La misma situacion estaba presente para los otros pueblos. El unico pueblo que era cercano al de Light, era de donde vino Sara y su hija.

El nombre de ese pueblo es Vereda. Se ganó ese nombre debido a su localización y al echo de que la población era un poco menor al pueblo Nion donde vive Light.

—Su pueblo no tiene a ningún mago y mucho menos uno curandero como yo, así que las cosas llegaron hasta este punto. Sara se tomó la molestia de realizar ese largo viaje hasta aquí. Llegó hoy, y se quedará unos días mientras intento curar a su hija —terminó de explicar Susan.

—Ya veo, bueno, supongo que dormiré en la biblioteca, no hay problema con eso —dijo Light en respuesta de lo mencionado.

—No hay necesidad de eso, hijo. Sofia dormirá contigo en tu habitación.

La reacción de Light fue, ¿ah?, ¿dormiría con una niña en su habitación?, Light estaba algo confundido, su privacidad seria invadida y sobre todo, no podría meditar tranquilamente y mucho menos manifestar el control del elemento de fuego.

Light no podía mencionar nada de eso, solo pudo realizar una pregunta normal y aceptable para la sociedad.

—¿No hay ningún problema con eso?, digo, soy un niño, y ella una niña, la privacidad tiene que ser respetada. No lo digo por mi, lo digo por ella —señaló Light a Sofia quien solo estaba cansada y apenas escuchaba la conversación.

—Tienes razón con eso, no lo había pensado tan a detalle —respondió Sara.

'¡Ella fue la de la idea!' exclamó con sorpresa Light en su mente.

—No hay necesidad de pensarlo tanto, yo dormiré en la biblioteca con mamá. Tu duerme en tu habitación —dijo Sofia mientras se acomodaba bien en el sofá.

—Espera, ¿y Sara donde pensaba dormir? —preguntó Light un poco alarmado.

—En tu habitación también —agregó Ailyn.

Light solo negó con la cabeza y soltó un suspiro. La simplicidad de su familia y la de los invitados era algo nuevo para él. Como todo un niño con mentalidad de caballero, no podía dejar que su familia se hiciera responsable del alojamiento, e hizo lo que tenia que hacer.

—Pense que no estaría envuelto en esto, pero debido a lo que he analizado y observado. Las cosas no están bien para ustedes, tuvieron un largo y estresante viaje, y están pasando por un mal momento. No dejaré que su mala vida siga aumentando —dijo Light de una forma segura y decisiva—. Dormirán en mi habitación y yo en la sala, no hay oportunidad de discusión.

—Ya oyeron al caballero de la casa, su decisión ya fue tomada —apoyó Albert a Light—. Tampoco quería que la jefa del pueblo Vereda y su hija durmieran tan mal.

—¿La que? —dijo sorprendido Light.

—Ah, si es cierto, hijo, ella es la jefa del pueblo Vereda junto a su esposo —le confesó Albert a Light con una sonrisa.

—No puede ser, vaya mente la de mis padres —suspiró Light—. Bueno, ya las cosas están dichas y todo esta explicado. Solo dejen que tome un baño y después pueden subir.

Después de todo, lo único que quería Light era tomar un tranquilo y relajante baño. Ahora solo tomaría un baño rápido y para nada relajante. Light subió las escaleras y desapareció por un momento.

—Tu hijo es absolutamente sorprendente, Ailyn. Definitivamente su talento en la lucha y su inteligencia son increíbles. No solo eso, su madurez superan a muchos niños de incluso 12 años.

—Lo se, es tan lindo y educado mi bebe precioso. Me deja siempre orgullosa —respondió Ailyn mientras sonreía.

Sofia se sentía un poco mejor, por lo que pudo entender y escuchar todo lo sucedido, sintió un poco de interés en ese niño llamado Light, por lo que se le quedo mirando hasta que dejo la sala.

—Bien, Sara, por los momentos le haré un tratamiento rápido a tu hija para que pueda sentirse un poco mejor y pueda dormir bien, mañana por la mañana empezaremos el verdadero tratamiento —dijo Susan.

—Esta bien, muchas gracias por atenderme y por recibirme en tu casa —agradeció profundamente Sara.

—Sabes que no hay problema, tenemos una buena amistad, así que es lo mínimo que podemos hacer por ti, tu hija se recuperará pronto, ya lo verás —comentó Ailyn de forma agradable.

Después de un rato más de charla y de realizar el tratamiento, la familia y los invitados cenaron y se fueron a dormir. Light estaba acostado en el sofá más grande de la sala, pensando en lo que haría para mañana.

Light se encontraba en un dilema, si arriesgarse a ir al bosque en la mañana o dejar escapar un día de entrenamiento. Light tenia en mente fortalecerse de forma rápida y segura, su motivación a hacerse mas fuerte provenía de su corazón.

Sentía una sensación que lo impulsaba a hacerse mas fuerte, y a la vez, el deseo de querer explorar los territorios que se encontraban más allá de su remoto pueblo. Light quería ver cosas que aun no había visto. Sus planes para el futuro eran hacerse mas fuerte y salir a explorar sin miedo a enfrentarse a los peligros.

Light apenas y había explorado solo una parte de su pueblo, y ni hablar del bosque que los rodea. Quería ver que cosas habían allí, y tal vez enfrentarse a ellas.

Desde pequeño, Light siempre se había interesado por las luchas, las espadas, y sobre todo, le encantaba la magia. Al leer lo básico de todo, sentía que su sed de conocimiento necesitaba mucho mas, quería aventurarse a lo nuevo.

Pero, para eso tenia que entrenar duro desde pequeño. Light también sabia que desde que nació, tenia un talento que sobrepasaba lo normal, pero a pesar de eso, su ideología le decía que no importa si tienes talento. Si no lo haces relucir, y no lo fortaleces, ¿para que tenerlo?

Light aprovechaba su talento para aprender todo y entrenar al máximo. Light tampoco quería hacer muy conocido su talento y no quería que nadie supiera sobre su gran progreso, puesto que eso llamaría mucho la atención y, no sabe que podría pasar.

El solo quería seguir como estaba y explorar su pequeño territorio por los momentos.

Por lo que eso lo llevaría a su primer pensar. ¿Ir o no ir al bosque?, después de pensarlo un rato, decidió no ir. Su casa estaría un poco activa en la mañana, puesto que no solo estaría Susan, si no que también estará su madre y las invitadas.

Su padre por otra parte aun iría a atender a los nuevos guardias, pero ese no era el caso. La que más molestaría y lo llamaría seria Ailyn. Si ella llegara a necesitar algo de Light, y este no estuviese, levantaría sospechas y todo se iría a bajo.

Su madre se preocuparía al saber que su hijo va solo al bosque. donde hay criaturas y mucho peligro, ademas de exponer la razón por la que iba.

Una mañana sin entrenar no lo afectaría mucho, total, antes duraba hasta un día sin hacerlo. Estaría en la mañana en su casa, atendiendo las necesidades de su madre, y en la tarde iría para que el jefe del pueblo para hablar con el.

Tanto pensar lo dejo agotado y con mucho sueño, Light solo soltó un suspiro y cerro sus ojos para dormir. Lo único bueno era que el sofá donde dormía era muy cómodo y suave, por lo que no pasaría una mala noche.

La mañana llego y Light aun dormía en la sala, su madre bajo y lo vio tan cómodo que no lo quiso despertar.

—Se ve tan lindo cuando duerme, aun me sorprende que sea hijo de Albert también —comentó Sara mientras reía suavemente.

—Oye, todo el carisma y su lindura lo sacó de mi, no lo dudes —se defendió el pobre en voz baja.

—Si, si, sobre todo la inteligencia la sacó de ti —también se burlo Susan.

—¿Como durmió Sofia, Sara?, ¿pudo dormir tranquila? —preguntó Ailyn.

—Si, gracias a los dioses y a Susan, mi niña pudo descansar bien. Tenia tiempo que no la veía dormir tan tranquila —respondió Sara con una sonrisa y un rostro nostálgico.

—Me alegra saberlo —dijo Ailyn.

Después de unos minutos y de que Albert por fin se había ido al campo de entrenamiento, y Susan salio rápidamente a buscar unas hierbas y otras cosas que necesitaría, Light se despertó y lo primero que vio fue a una Sara sonriente.

El rostro de Light se mantuvo indiferente y con una mirada vacía. Lo único que pudo pensar fue: '¿Y esta que?'.

—Buenos días, Light —saludó Sara.

—B-buenos días —contestó un poco extrañado, Light.

—Oh, cariño, ya te levantaste. ve a cepillarte, el desayuno ya esta casi listo —le dijo Ailyn a su hijo.

Light hizo lo que le dijo su madre y subió al baño para cepillarse y lavarse la cara. Cuando iba llegando al baño, paso inevitablemente por su habitación y en ese momento escucho la cama rechinar un poco.

Light lo primero que pensó fue que Sofia se había caído por lo que abrió la puerta y se recostó en el marco observando a una Sofia luchando para levantarse de la cama.

—Si no te sientes en condiciones para levantarte, deberías de quedarte acostada —le advirtió Light a Sofia.

La niña se alarmo un poco, puesto que no escucho cuando Light abrio la puerta.

—Estoy bien, ¿cuantas veces tengo que decirlo?, yo puedo estar de pie sin ningún problema —fue lo que le respondió Sofia, pero lo que dijo no respaldaron sus actos.

Sofia cuando estaba a punto de ponerse de pie, cayó sentada en la cama nuevamente. Light solo soltó una pequeña y corta risa burlona.

—La terquedad no le queda bien a una linda señorita como tu. Solo quédate acostada y espera a Susan —Eso fue lo último que dijo Light y después se retiró de su habitación.

El comentario que hizo Light dejó un poco sonrojada a Sofia. Después de que él la sostuviera ayer, y le dijera un comentario para animar un poco su autoestima, la pobre se sintió un poco apenada.

Sofia no intentó levantarse nuevamente y solo se quedó acostada mientras hacia la típica escena de acurrucarse con una almohada.