webnovel

Capítulo OO6

En la sala médica, TaiYang convenció al enojado de Reich. Había olvidado que éste pequeño había estado encerrado durante cuatro años y como sus brazos estaban repletos de agujeros de agujas. No pensó en el miedo que esto podría provocarle.

Reich se negó a dejarse pinchar. Su cuerpo se encogió en una bola, escondido en la esquina de la habitación sin la intención de salir ni acercarse a nadie.

TaiYang se arrepintió, y mucho.

⎯  Reich.. Lo siento, lo olvidé. Por favor sal de ahí. Te prometo que no te obligare sino quieres.

La oficial también se sintió un poco culpable, no esperaba una reacción tan fuerte.

TaiYang sabía que no podría obligarlo a salir. La fuerza de Reich es casi la misma que la suya, si es que no era mayor.

Miró a la oficial y le sonrió en modo de disculpa. ⎯ Puedes probar conmigo primero.

La oficial asintió, luego sugirió.

⎯ La muestra de sangre no es necesaria. Un cabello también sirve.

Los ojos de TaiYang brillaron. ¿Como podría olvidarlo?, rápidamente volteo a ver hacía la esquina y susurro.

⎯ Reich, ¿Escuchaste eso?. Solo necesitas un cabello, sin sangre ni agujas.

Reich lo miro. En verdad quería acercarse a su madre, pero no le gustaba esta habitación. El olor era el mismo que el de aquel lugar.

Al escuchar que sólo necesitaba un cabello, extendió su garra y corto un mechón. Estiró su brazo para que TaiYang lo tomará, y de paso, a él también.

TaiYang agarro a Reich al instante y lo abrazo firmemente, acariciando su espalda y su pequeña cabeza. Reich se encogió en la zona de su estómago, como si pudiera esconderse en su vientre si lo hacía.

La oficial tomó el mechón de cabello y le pidió que esperarán afuera. Podía ver la incomodidad del pequeño y le provocaba mal de corazón.

Antes, hace siglos atrás. Se necesitaba más que un simple mechón. Sin embargo ahora eran capaces de hacer una prueba con lo poco, unos cabellos, por ejemplo.

TaiYang no fue cortes y salió de la habitación. Una vez fuera, podía sentir como el cuerpo tenso de su monito se relajaba visiblemente.

Los resultados salieron casi al instante, al mismo tiempo el alguacil entró en la pequeña habitación. 

Al ver a TaiYang, su rostro tenía una expresión complicada. ⎯ Oficial, deme el informe. ⎯ Dijo recuperándose.

Al leerlo, su mirada hacía TaiYang estaba llena de lástima y comprensión.

En verdad era Shi TaiYang, el pequeño maestro que fue vendido por sus familiares a un grupo ilícito.

La mirada del alguacil vago al pequeño cuerpo sobre sus brazos. La prueba decía que estaban relacionados por 99.9%, es decir, eran padre e hijo verdaderos.

El alguacil no quiso saber cómo nació el niño. Al ver sus rasgos étnicos y la condición física de ambos, no quiso averiguarlo.

Incluso si la familia Shi está en ruinas y sus miembros son una vergüenza y una humillación para sus compatriotas humanos, la juventud frente a él no lo es, es un superviviente y una víctima.

Su futuro debió haber sido brillante si no hubiera nacido en la familia Shi.

El alguacil suspiro. ⎯ La identidad ha sido confirmada. Lo ha hecho bien, joven maestro Shi.

TaiYang sintió que sus ojos ardían y su nariz picaba. Sintió que de su cuerpo se había quitado un gran pesar. Probablemente eran los sentimientos del antiguo anfitrión. ⎯ Gracias..

Murmuró.

Reich sintió su estado de ánimo y levantó su cabeza, frotándose contra la mejilla.

⎯ Mamá, no agua, no agua. ⎯Reich colocó su pequeña mano sobre el rostro de TaiYang y lo acarició.

El olor salado provenía de sus ojos. Reich no sabía que eran las lágrimas, pero recuerda que sus ojos se inundaban de agua salada cuando era pequeño. El cuerpo entero dolía y su pecho se oprimía. No quería que su madre se sintiera igual.

TaiYang sonrió al ver su pequeña consolación. Bajo la cabeza y beso su delgado rostro con amor.

⎯ Está bien, papá no llora. Todo está bien, gracias bebé.

Reich se aseguró de que no mintiera antes de volver a esconder su cabeza sobre el pecho de TaiYang, parecía una tortuga que se escondía en su caparazón.

TaiYang se tomó uno segundos, volvió su rostro hacía el alguacil y dijo.

⎯ Quiero pedirle ayuda.

—--

TaiYang consiguió una terminal y registró con éxito la identidad de Reich y la suya. El alguacil dijo que comunicaría con la sede de la estrella Xion y lo ayudaría a regresar de nuevo.

La condición de ambos todavía debía ser verificada a fondo para descubrir si existían heridas ocultas, pero la tecnología en el planeta Zathey no era tan buena.

⎯ TaiYang. ⎯ Llamó el alguacil.

TaiYang le dijo que no era necesario el 'joven maestro' y el alguacil se dirigió a él por su nombre después de su insistencia.

⎯ ¿Sucede algo, Alguacil Fenr?

Preguntó devuelta. Sus manos estaban ocupadas alimentando a Reich con una papilla de manzana. .

El alguacil Fenr sonrió hacía el pequeño Reich, siendo ignorado por el mismo a cambio. ⎯ La sede confirmó que enviará un empleado para recogerte, llegarán en el primer vuelvo. Quedan tres días todavía, ¿necesitas algo?.

TaiYang sonrió. ⎯ No, todo está bien. Muchas gracias.

⎯ Es mi trabajo. No tienes que agradecer.

TaiYang charlo con el alguacil un tiempo antes que tuviera que retirarse. No pudo evitar suspirar. Todo estaba llendo con la corriente.

Bueno, a excepción de la comida.

Tanto Reich como él tenían un gran apetito anormal. Sin embargo la gente de esta era ya no eran fanáticos de la gastronomía, o mejor dicho, habían perdido la emoción.

Cuando los humanos dejaron la tierra se enfrentaron a las criaturas del universo. No tenían tiempo de cocinar y la mayoría de los alimentos se perdieron. Con el tiempo, inventaron la solución nutritiva que era capaz de saciar el hambre y nutrir sus cuerpos.

Al pasar el tiempo, incluso cuando la guerra cesó y los humanos se establecieron. No abandonaron la solución nutritiva que había estado con ellos durante décadas y siglos.

Pará ser más precisos, la mayoría había olvidado el arte de cocinar. Hay equipos de cocina en algunos hogares, pero eso se debe a que algunos aún persisten en conservar aquella zona del hogar de sus antepasados. No porque realmente la utilicen.

Los pocos ingredientes que existen todavía tienen que ser investigados y pasar por una cuidadosa verificación por el instituto de investigación antes de lanzarle al público. Los alimentos son escasos.

Y por supuesto, en el planeta Zathey algo tan importante y caro como los ingredientes o restaurantes son imposibles de ver.

La misma papilla que estaba comiendo Reich no era más que una fruta salvaje. TaiYang lo llamó manzana debido a su semejanza, pero era mucho más grande que la de su memoria. Fenr también dijo que los humanos normales no pueden comerla ya que es demasiada dura.

La 'gran manzana' que era imposible de comer para todos se convirtió en un bocadillo para su hijo.

A quién TaiYang le negó permitirse comer solo soluciones. Reich era tan pequeño y todavía estaba herido, un niño necesitaba distintas vitaminas para crecer grande y fuerte. (sin mencionar que a TaiYang le disgustada el olor de la solución nutritiva tanto como su sabor)

Así que cada mañana TaiYang lleva a Reich al bosque para cazar liedros. Los ojos de Fenr fueron verdes durante mucho tiempo cuando lo descubrió la primera vez, ahora, de vez en cuando solía venir a visitarlos para robar un poco de alimento de Reich.

Reich era muy tacaño con su comida y quería golpear a Fenr cada vez que se acercaba con sus codiciosas manos.

Es una broma. Antes ni siquiera podía comer ni una cuarta de lo que necesitaba, sin mencionar que se trataba de un líquido espeso y de mal olor. Si no hubiera sido porque si se negaba a comerlo no lo alimentarían por días y luego sería inyectado directamente con ella, Reich nunca se hubiera atrevido a comerlo.

Ahora tenía a su madre. Cocinaba tan delicioso y nunca se quejaba por comer hasta estar lleno, aunque él mismo no lo estuviera.

Solo un tonto entregaría su comida a otro cuando es insuficiente.

Si su madre no hubiera dicho que debido a él podemos abandonar este lugar, ya le hubiera cortado las manos.