147 Capitulo 134: Es hora de Cazar (2)

* * * [17: 05] * * *

"¿Cuanto tiempo más crees que logre resistir?" - preguntó Mikoto mientras tomaba un poco de té y le daba una mirada a su amiga.

"Probablemente logre completar el juego pero terminará tan mal que no podrá moverse por el agotamiento" - sonrió la pelirroja mientras tomaba un poco de té.

"¿N-Necesita algo más, Kushina-sama?" - preguntó Tina con un rostro pálido por el miedo.

Las enfermeras estaban vestidas como sirvientes y formadas una detrás de otras, con la clara excepción de Hikari que todavía estaba inconsciente.

"Hmm... se me antojaron unos pastelillos" - murmuró la matriarca Uzumaki con una pequeña sonrisa mientras veía como las enfermeras corrían a cumplir su deseo como si fueran pollos sin cabeza.

"Veo que estás disfrutando de todo esto" - dijo Mikoto mientras miraba a su amiga.

"Luego de escuchar todas sus versiones, no tengo planeado torturarlas o algo por el estilo" - respondió la mujer de cabello rojo - "Pero eso no significa que no las castigaré por lo que hicieron"

"¿Qué hay de la que está inconsciente?" - preguntó la matriarca Uchiha.

"Digamos que tuvo suerte y se salvó" - bufó Kushina.

"Entonces... ¿el castigo solo será de tenerlas como tus sirvientes?" - preguntó Mikoto.

"No... también les apliqué un sello que impide que lleguen al orgasmo" - respondió Kushina mientras le daba una mirada a su amiga - "El sello está conectado directamente con los receptores de placer y estará activo hasta que lo decida... un buen castigo para unas mujeres roba maridos... ¿no lo crees?"

"Como mujer activa sexualmente, te temo, Kushina" - suspiró Mikoto mientras negaba con la cabeza.

¿Ella estaba furiosa?

Sí, pero no al punto de quitarle una parte de su vida a una mujer.

"Tranquila, no planeo mantener el sello por mucho tiempo" - respondió Kushina - "También les explicaré la situación cuando el día termine para que comprendan que está pasando"

"¿Algo más que tenga que saber sobre tu castigo?" - preguntó Mikoto.

"Nope~" - sonrió la pelirroja - "¿Donde quedaría la sorpresa si te revelara todo?"

Mikoto nuevamente negó con la cabeza pero su expresión cambió cuando notó la expresión de su amiga - "¿Qué sucede?"

"Creo que alguien logró encontrar a Kuro-chan~" - sonrió la pelirroja - "Porque uno de los sellos fue activado"

* * * * *

"¡Mierda!" - rugió Kurama mientras corría a toda velocidad.

"¡No puedes escapar de mi, Foxy-kun~!" - exclamó Anko mientras se lamía los labios. Ella había sido la que más veces había estado cerca de atrapar a su presa pero para su molestia, él siempre escapaba de alguna forma u otra.

"¡Ni pienses que seré atrapado por ti!" - exclamó Kurama mientras sentía como su cuerpo se paralizaba por unos milisegundos antes de ver como su chakra quedaba estancado - "¿Eh?"

"Te presento el sello de Kushina-san" - dijo Anko mientras sus ojos brillaban. Ella estaba aprovechando el momento para acercarse donde estaba el pelirrojo porque solo tenía 3 segundos.

"!" - Kurama apretó los dientes con furia mientras volvía a correr. Él rápidamente concentró todo su chakra y lo hizo explotara para poder romper el sello, aunque las consecuencias eran obvias.

"Mala idea, Foxy-kun" - dijo Anko al ver que el sello había sido roto - "Ahora todas sabrán donde estás"

"Es mejor que ser capturado por ti" - dijo Kurama con frialdad.

"Ow~ me lastimas~" - dijo Anko mientras lloraba lágrimas falsas, solo para notar que el pelirrojo había desaparecido - "Tch, esperaba ganar más tiempo"

"Lo siento, maestra" - dijo Iris mientras se enroscaba alrededor de su brazo - "Luego de liberar su chakra, el desapareció de la zona y no puedo detectar su chakra..."

"Supongo que ahora que él no puede controlar bien su chakra por todos los sucesos que han trascurrido, las que tienen más probabilidades de capturarlo son Hinata y Hanabi" - dijo Anko mientras negaba con la cabeza - "En fin, creo que ya fue más que suficiente"

"¿Nos retiramos?" - preguntó Iris.

"Exacto, estoy un poco hambrienta luego de perseguir a Foxy-kun por toda Konoha por tanto tiempo, así que creo que me merezco un buen plato de Dangos" - dijo Anko mientras se preparaba para retirarse, solo para detenerse al notar como las chicas estaban llegando - "¡Hola!"

"Anko... supongo que no lo lograste" - dijo Kurenai mientras fruncía el ceño.

"No... pero creo que les di una gran ventaja a las hermanas Hyuga" - respondió la encantadora de serpientes - "Y viendo que no están aquí, significa que están dirigiéndose en dirección donde está Foxy-kun"

"Tampoco veo a Tsume-san" - dijo Ino mientras fruncía el ceño. Ella quería pensar que la madre de Kiba no estaba en una relación con Kurama pero viendo su expresión cuando estuvo en la reunión, ella no podía negar que la probabilidad de que sea cierto era extremadamente alta.

"Ella es la segunda con más posibilidades de encontrar a Kurama-kun" - respondió Kurenai - "Mejor regresemos, estoy segura de que no tendremos posibilidades de capturarlo"

"¿Quieren acompañarme?" - preguntó Anko mientras se encogía de hombros - "Estaba a punto de ir por unos dangos"

Kurenai e Ino se encogieron de hombros mientras seguían a la mujer hacia la tienda de dangos.

* * * [17:30] * * *

"¡Mierda!Mierda mierda mierda mierda!" - exclamó Kurama mientras corría por el Bosque de la Muerte. Él había estado escapando de Hinata, Hanabi y Tsume durante más de 20 minutos y tenía que admitir que ellas eran como un tiburón asechando a su presa.

La gran mayoría de sus Kage Bunshin habían desaparecido porque habían sido descubiertos y su concentración estaba tan baja que no podía moldear bien su chakra como para impedir que el Byakugan de las hermanas Hyuga lo encontraran.

"¡Lo que lo hace peor, es que las 3 empezaron a unir fuerzas!" - gritó el chico en sus pensamientos mientras sacudía la cabeza - "Mejor me mantengo en movimiento"

* * * * *

"Es escurridizo" - murmuró Tsume con frialdad mientras olfateaba los alrededores - "Y por algún motivo no puedo detectar su aroma... lo cual hace que mi sentido del olfato sea inútil"

"Lamento no poder ayudarte a capturar a tu presa" - dijo Kuromaru, el enorme perro negro con parche en el ojo.

"No es tu culpa, viejo amigo" - suspiró la Inuzuka - "La presa es mucho más molesta de lo que pensamos"

"Tsume-san... Kurama-kun está a unos 500 metros más adelante" - dijo Hinata mientras el sudor corría por su frente.

"Onee-chan... no creo poder resistir más..." - dijo Hanabi con cansancio. Ella al igual que su hermana, había estado usando su Byakugan durante toda la casa y ya estaba empezando a pasar factura.

"Chicas... desactiven sus Dojutsu" - dijo Tsume con preocupación - "Si siguen forzándose, solo terminarán lastimándose"

"Hanabi puede descansar... yo no voy a detenerme" - dijo Hinata con seriedad mientras respiraba con cansancio.

"Onee-chan..." - Hanabi estaba impresionada y orgullosa de la fuerza de voluntad de su hermana, pero eso no le quitaba la preocupación que sentía al ver su estado.

"Se detuvo..." - dijo Hinata mientras entrecerraba los ojos - "Parece que está descansando... no... ¡está calmándose!"

"Esto es malo... si no lo encontramos ahora y dejamos que se recupere, entonces será extremadamente difícil de encontrar con ustedes dos agotadas" - dijo Tsume mientras le preguntaba a Hinata una ubicación más precisa para poder ir a encontrarlo, solo para salir corriendo a toda velocidad cuando recibió la información que necesitaba.

* * * [17:55] * * *

". . ." - Tsume estaba con el ceño fruncido porque no encontraba rastros del pelirrojo por ningún lado.

Hinata estaba estirada en en el suelo mientras traspiraba sin control por el sobreuso de su Byakugan mientras que Hanabi estaba a su lado mirándola con preocupación.

"El Sello dice que está cerca pero no se ve por ningún lado" - dijo Tsume mientras fruncía el ceño - "Esto sería más fácil si el Sello tuviera un medidor de acercamiento..."

"Lo siento..." - dijo Hinata con cansancio.

"No tienes que disculparte, esto no es tu culpa, sino del estúpido de Kurama" - dijo Tsume con irritación. Ella no estaba molesta con Kurama por tener sexo con otras hembras, después de todo, un buen macho atraía a las hembras, lo que la molestó, fue le hecho de que Kurama favoreció a unas perras callejeras en vez de a su manada.

"Tan cerca pero a la vez tan lejos..." - dijo Hanabi mientras negaba con la cabeza - "Aunque sigo sin poder comprender por qué todas ustedes están molestas con Kurama-san"

"Cuando seas mayor lo comprenderás, Hanabi" - dijo Tsume con seriedad mientras veía como la niña inflaba las mejillas en molestia.

"¡Soy grande!" - exclamó Hanabi con molestia.

"Claro que sí, camarón" - dijo Tsume mientras le giraba los ojos, solo para ver su reloj y nota que ya eran las 18:01 - "Ok, tu ganas Kurama, el juego terminó"

Pero para su irritación, Kurama no apareció por ningún lado.

"¿Qué es eso?" - preguntó Hanabi mientras apuntaba en una dirección.

Tsume miró en esa dirección y se maldijo por no notar como en medio del bosque, había una caja de cartón que parecía estar casi nueva.

"Esto nunca falla.. ¡Ahora pueden llamarme Solid Fox!" - se escuchó una voz desde el interior - "Aunque sigo sorprendiéndome de que por alguna extraña razón, esta caja impide que no solo me detecten, sino que también es inmune a visión de Rayos-X"

Tsume lentamente se acercó y levantó la caja, mostrando a un pequeño gato vistiendo ropa estilo militar junto a una bandana - ". . ."

". . ." - Tsume le dio una mirada casi neutral.

"¿H-Hola?" - dijo Kurama con una sonrisa nerviosa.

Tsume solo se tronó los nudillos mientras una pequeña sonrisa aparecía en su rostro - "¿Vienes por las buenas o te tengo que 'convencer'? Y no intentes decirme que no puedo derrotarte, en la condición que estás hasta Kiba puede lograrlo"

Kurama suspiró con pesar pero se rindió, después de todo, él tenía que aceptar su castigo como todo un hombre.