218 Capítulo 201: No soy tan Imbécil como para Creerte

"¡Mi brazo!" - gritó Hidan mientras se tomaba su hombro ensangrentado - "¡Devuélveme mi brazo, bastardo!"

"Hmm... esto es interesante... el brazo está tratando de volver donde su dueño..." - murmuró el pelirrojo mientras aparecía al lado de Yugito con el brazo de Hidan en su mano que estaba tratando de escapar - "Una lástima que tu maldición no se compara con todas las emociones negativas que mi mitad ha estado absorbiendo todo este tiempo"

Kurama lentamente le prendió fuego al brazo que parecía estar gritando mientras era incinerado.

"¡NOOOOOOO!" - gritó Hidan al sentir como su conexión con su brazo se perdía completamente - "¡¿Que le hiciste a mi brazo?!"

"Solo lo incineré a nivel molecular" - respondió el pelirrojo con neutralidad - "En otras palabras, no más brazo"

"¡Voy a matarte!" - gritó Hidan mientras tomaba su guadaña con su único brazo disponible, solo para ser a mandado a volar con suma facilidad.

"Enserio... siempre es lo mismo" - suspiró Kurama mientras miraba con desdén al Sacerdote loco - "Ustedes siempre gritan 'voy a matarte' o algo por el estilo y no hacen nada..."

"Jejeje" - Hidan solo rió con demencia mientras observaba su guadaña y ver como había logrado cortar a su atacante - "Tu condescendencia te mató, Kyubi no Yoko... me importa una mierda los planes del nuestro líder... ¡YO SOLO QUIERO MATARTE CON MIS PROPIAS MANOS!"

"Te voy a dar un consejo de persona que ha matado a cientos, a persona que ha matado a cientos... si quieres matar a alguien... hazlo de inmediato... no le des la oportunidad de matarte antes..." - dijo Kurama desde detrás del Sacerdote loco - "Jigoku Rasengan..."

"¡ARgh!" - Hidan solo rugió en dolor mientras sentía como era consumido por las llamas del infierno. Él estaba sintiendo como su cuerpo era consumido y regenerado constantemente mientras rogaba por una muerte rápida que lentamente estaba llegando - "¡MoNstrUo!"

"Todos me llaman de esa manera cuando están a punto de morir en mis manos..." - murmuró el pelirrojo mientras agachaba sus rostro con una sonrisa sádica presente - "Y no está muy lejos de la realidad"

"!" - Kakuzu solo tembló mientras sentía que el mejor plan era salir corriendo fuera del lugar. Su misión había fallado en el momento en que no terminaron con su caza rápido y dejaron que Yugito ganara el tiempo necesario.

"Lo siento Hidan, pero estás solo" - murmuró Kakuzu mientras desaparecía con un Shunshin - "Fuiste un buen compañero..."

"¿Quien dijo que podías escapar?" - preguntó el pelirrojo mientras aparecía frente a su oponente con su dedo indice extendido - "Rasen Shotto (Disparo en Espiral)"

Una bala de rayosa salió dispara desde el dedo del pelirrojo mientras penetraba el cuerpo de Kakuzu quien salió volando hacia atrás por el impacto - "Ugh..."

"Nada mal, ¿eh?" - sonrió el pelirrojo mientras miraba con diversión a su presa - "Tengo que admitir que esta técnica es fácil de moldear cuando tienes el elemento y el control suficiente para hacerlo"

". . ." - Kakuzu lentamente se levantó mientras miraba al monstruo que estaba frente a él. Hidan estaba aullando en dolor como música de fondo, haciendo que la situación fuera más perturbadora, aunque para alivio del Sacerdote loco, poco a poco empezó a perder la consciencia, soltando su último aliento luego de unos segundos, dejando en silencio el lugar.

"Una lástima... quería escuchar la melodía de sus gritos un poco más" - dijo Kurama mientras soltaba una carcajada desquiciada. Él podía sentir como absorbía el odio de Hidan, así como el de todas las personas que él había matado durante los años, una de las muchas desventaja de ser el Kyubi no Yoko - "En fin... dime, Kakuzu-san..."

"!" - el Mercenario inmortal lentamente sintió un tirón en su cuerpo, notando como una de sus máscaras había desaparecido sin darse cuenta - "¿Cómo?"

"¿Buscabas esto?" - preguntó el pelirrojo mientras le mostraba una máscara celeste y la destruía - "Ahora me pregunto si las demás también contienen un corazón~"

"!" - Kakuzu retrocedió por el miedo. Por primera vez en su vida, él estaba sintiendo un profundo terror, uno que lo estaba consumiendo lentamente pero antes de que pudiera hacer algo más, él nuevamente sintió un tirón, solo que esta vez fue su máscara de tigre - ". . ."

"Dos fuera... supongo que te quedan 2 corazones más, sin contar el que tienes dentro tuyo, claro está~" - sonrió Kurama mientras miraba con locura al Nukenin - "¿Lo sientes? El miedo de enfrentarte contra alguien que tiene tu vida en sus manos... el frío de la guadaña del Shinigami cada vez más cerca de tu garganta, así es como se sentían todos aquellos que mataron..."

". . ." - Kakuzu nuevamente retrocedió mientras buscaba una ruta para escapar y al mismo tiempo ideaba un plan para distraer el pelirrojo lo suficiente.

"¿Sabes? Incluso ahora puedo escuchar los gritos de todos lo que mataron, gritándome que te destruya de la forma más sádica y lenta posible" - dijo Kurama mientras ignoraba los esfuerzos de Nukenin.

"¡La Jinchuriki!" - exclamó en sus pensamientos el Mercenario Inmortal - "Si la uso para distraerlo, podré escapar con facilidad"

"¿Ya ideaste un plan?" - preguntó Kurama con curiosidad, solo para notar como Kakuzu se lanzaba contra la aún agotada Yugito - "Esperaba algo mejor..."

Kurama rápidamente se puso en medio del camino y se lanzó contra su oponente, solo para notar la sonrisa en el rostro de este.

"¡Esperaba que hicieras eso!" - rugió Kakuzu mientras la máscara de ponía encima de su cabeza - "¡Raiton: Gian (Liberación de Rayo: Oscuridad Falsa)!"

Kurama recibió el ataque de Kakuzu de lleno mientras este salía corriendo, solo para sentir como su cuerpo parecía temblar sin control - "¡ARGH!"

"¿En verdad pensabas que sería tan fácil?" - preguntó Kurama mientras le daba una mirada llena de desdén a su oponente - "Te presento una nueva variante del Jutsu de Minato, Gura Rasengan (Bola Espiral de Temblor)"

"¡Ahhhhhhh!" - Kakuzu rugió en dolor al sentir como el corazón dentro de su cuerpo era destruido completamente, así como todos sus huesos y órganos internos.

"Una de las desventajas de ser 'inmortal'... el dolor es un infierno ya que no puedes morir de manera natural o por el defecto de tus órganos" - sonrió el pelirrojo para luego mirar a Yugito - "Será mejor que retrocedan hasta donde están los demás"

"¿Eh?" - Yugito le dio una mirada llena de sorpresa pero aún así le hizo caso. Matatabi le había informado que Kurama le mandó un mensaje a través de su conexión única diciéndole que las cosas se volverían explosivas - "Oh... Ok..."

"Vamos, Kakuzu-san... te quedan dos vidas" - dijo Kurama mientras miraba al Nukenin - "También sé que todavía puedes mover con tus hilos"

". . ." - Kakuzu lentamente se levantó a regañadientes mientras miraba con odio al pelirrojo porque era obvio que él estaba jugando con su presa.

"Si puedes mirarme de esa manera, supongo que todavía te queda energía para seguir jugando" - sonrió el pelirrojo mientras esquivaba el ataque de rayo de su oponente, así como el de tierra con unos pasos hacia atrás - "Deberías de dejar hablar a la gente... no es de muy buena educación el interrumpirlo"

"¡Jódete, monstruo!" - exclamó el mercenario inmortal.

"Es irónico que le tipo con 5 corazones me llame monstruo" - respondió Kurama mientras concentraba chakra en su mano, formando un pequeño shuriken de viento - "¡Rasen Shuriken!"

"!" - Kakuzu rápidamente usó los hilos de una de sus máscaras para esquivar el ataque, solo para ver como su máscara que contenía su afinidad Doton, desaparecía completamente.

"Ok, buenos reflejos" - asintió Kurama - "Una lástima que eso te costara tu última posibilidad de continuar esquivando, ya que puedo sentir como tu cuerpo no resiste el flujo continuo de tu jutsu, eso significa una sola cosa, que tu último corazón no tendrá más remedio que volver a tu destruido cuerpo"

". . ." - la expresión de Kakuzu se puso horrible mientras veía como los hilos que antes formaban a su avatar, volvían a su espalda - "¿Cómo es que puedes saber tanto de mis técnicas?"

"Las almas que te rodean me contaron todo... todas ellas te quieren muerto, Kakuzu" - respondió el pelirrojo mientras sentía como el odio de las persona que el Mercenario Inmortal había matado, lo estaba afectando cada vez más - "Supongo que mejor termino esto antes de que me salga de control..."

Kurama rápidamente apareció frente al Nukenin y lo empaló en sus extremidades contra una roca - "¡ARGH"

"Estoy seguro de que disfrutarás esta última vista..." - dijo Kurama mientras empezaba a caminar en el cielo como si estuviera subiendo una escalera hasta llegar a una distancia prudente - "Veamos... creo que este es el lugar perfecto..."

"¡E-Espera!" - exclamó Kakuzu con miedo al ver como el chico de cabello rojo empezaba a acumular una gran cantidad de chakra corrupto en su mano - "¡D-Déjame ir!¡Prometo que volvere al buen camino!"

"Lo siento... no soy tan imbécil como para creerte, tampoco siento que todos merecen una segunda oportunidad" - dijo Kurama con neutralidad mientras continuaba concentrando chakra en su mano, formando una pequeña esfera negra con anillos blancos - "Supongo que este es nuestro adiós, Kakuzu-san... salúdame a Hidan, Deidara y Sasori en el infierno... diles que pronto tendrán aún más compañía..."

"¡No!¡Por favor perdóname la vida!" - exclamó el Nukenin mientras intentaba concentrar su chakra para poder escapar pero sin éxito - "¡Seré bueno!¡Donaré todo mi dinero a la caridad!¡Incluso te prometo que trabajaré gratis para los pobres!"

"Adiós..." - murmuró el pelirrojo desde arriba en el cielo - "Dai Rasenringu (Gran Anillo en Espiral/ Gran Rueda de Miedo)..."