Lin Che miró a Mu Feiran.
—¿Qué vas a hacer ahora?
Mu Feiran se rió. Aunque esa sensación de orgullo ya no se veía en su rostro, había ganado la compostura.
—Definitivamente me quedaré con el niño y lo criaré. Oh, sí, ¿cuál es tu dirección? Deberías estar quedándote por aquí, ¿verdad? Si no, ¿por qué vendrías a este centro comercial? ¿Gu Jingze vino contigo?
Lin Che levantó las cejas. Se rió mientras agitaba la cabeza.
—Está ocupado con sus propios asuntos y yo también tengo cosas que hacer. Te daré mi dirección. Cuando tengamos tiempo, podremos salir juntos a divertirnos, ya que vivimos tan cerca la una de la otra.
—Eso sería genial. También me estaba aburriendo yo sola.
Lin Che no estaba aburrida. Sirvientes, chefs, guardaespaldas, tenía mucha gente a su alrededor. Sin embargo, poder hablar con Mu Feiran la hizo sentir muy bien.
Ambas podían acompañarse mutuamente hasta el momento del parto. Sería muy interesante.
Support your favorite authors and translators in webnovel.com