Capítulo 281 – Extraer...

Después de que Crab secuestró a Sanzi, impidió que Sanzi comiese algo; solo le sirvió agua, impidiéndole tener la fuerza para escapar. Sanzi estaba tan hambriento ahora, y todavía tenía que correr vigorosamente. Por lo tanto, después de una corta distancia, apretó su estómago con angustia.

—Hermano Yan, no puedo correr más, me muero de hambre.

Sheyan pidió un taxi y se dirigió directamente a Yau Ma Tei, antes de encontrar un restaurante al azar para que Sanzi le llenara la barriga. El apetito de Sanzi era tremendo, agarrando con sus palillos mientras se devoraba medio tazón de arroz, antes de hablar de sus experiencias traumáticas.