La expresión de Mogensha se volvió grave ante tal provocación. Ese tipo negro obviamente no iba a aceptar eso sin hacer nada. Escupiendo su flema, erigió un dedo medio. Cuando comenzó el duelo, Mogensha explotó inmediatamente la debilidad del rango de tiro de una glock. Se giró y corrió hacia el bosque cercano, obviamente intentando usar su complicado terreno para tratar con Eros. Mientras corría, se volvió a disparar.
Tal movimiento era bastante común. El Príncipe Stalo expuso su admiración a través de sus ojos, y luego sacudió levemente la cabeza.
Apenas unos centímetros de la periferia de Eros se dispararon balas ardientes, que chocaron antes de rebotar en las ondas. Eros mantuvo una postura sin prisas, ¡avanzando con cada paso! Hasta que Mogensha entró en su campo de tiro, ¡entonces inmediatamente levantó su pistola y abrió fuego!
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