NARRA T/N
Una vez en Jericó nos hicieron pasar a una especie de polideportivo y allí cada equipo se juntó en su vestuario. A nuestro cargo estaba la directora Duncan, quién solamente nos pidió que jugásemos limpio y no hiciésemos uso de nuestras habilidades para ganar. Básicamente nos estaba pidiendo que le diéramos oportunidad al equipo rival de vencernos, aunque obviamente eso no iba a pasar.
Cuando Duncan se marchó Xavier dió una charla para animarnos a todos y entonces empezamos a salir del vestuario para dirigirnos a la pista donde el evento se llevaría a cabo. Fue toda una sorpresa encontrarme de frente con Brooke, pues pensaba que se habría quedado en Nunca Jamás a cargo de la biblioteca. Más tarde me explicó que no porque al ser hija del alcalde y de la directora de la academia, era su deber estar presente en un evento de unificación entre normies y excluídos. Todo tenía sentido entonces, su padre estaba allí para oficiar el encuentro y por eso la directora Duncan se había ofrecido a ser nuestra tutora.
-Brooke: ¡Mucha suerte ahí fuera! - me animó - Aunque también quiero que gane el equipo de humanos - reconoció.
-Xavier: Lo siento mucho, pero vas a tener que ver el trofeo en las vitrinas de Nunca Jamás - pasó su brazo alrededor de mis hombros y entonces le hice una llave para lanzarlo al suelo - ¡T/N! - se quejó.
-T/N: Nada de tocarme, ya lo sabes - miré a Brooke - Es su culpa por no recordarlo.
Quizá también era un poco culpa mía el haberle hecho una llave tan agresiva, pero es que no me sentía de muy buen humor que digamos. No tenía ganas de participar en esa chorrada, pero ya me había comprometido a hacerlo y no me quedaba otra opción. Todos contaban conmigo, no podía fallar. El alcalde introdujo a ambos equipos y entonces cada equipo mandó a sus primeros lanzadores al frente. Xavier me escogió para ir la segunda después de él, pues quería asegurarse los puntos en caso de que fallase.
Caminé y me posicioné a su lado mientras observaba cómo apuntaba a su diana, no tenía mala técnica, lo tenía que reconocer. Decidí no quedarme atrás y cogí una de las flechas decidida a hacer diana, sin embargo un sudor extraño empezó a recubrirme todo el cuerpo y empecé a sentirme extrañamente tensa. No estaba para nada cómoda.
"Miércoles y yo habíamos convencido a Pugsley para que corriese alrededor del jardín con una manzana en la cabeza. Le habíamos prometido una recompensa si lograba que ninguna de las dos le diera a la manzana, cosa que era prácticamente imposible. Mi prima y yo nos encontrábamos cada una en una ventana desde donde disparábamos las flechas. Cada vez que miraba a Les, la encontraba sonriendo mientras disfrutaba del terror en los ojos de su hermano. Eso hacía que una sonrisa apareciese en mi instantáneamente, pues esos eran mis momentos favoritos, cuando nos divertíamos juntas"
¿Por qué me estaba acordando de eso en ese preciso momento? Tensé la cuerda y me posicioné firmemente apuntando al centro de la diana. No obstante, a la hora de dejar ir la flecha doble las piernas de más y esta no dió en el blanco. Eso provocó la sorpresa entre todos los presentes que me miraban como si hubiese cometido un asesinato. A decir verdad, yo tampoco me creía que hubiese fallado un disparo a un objetivo inmóvil. ¿Qué me estaba pasando?
-Xavier: Hey T/N. ¿Te encuentras bien? - dijo acercándose a mí - Ese lanzamiento no es propio de ti... Tú eres capaz de darle a una mosca sin siquiera mirar.
-T/N: Me sudaban las manos y se me ha resbalado la flecha en el último momento - dije quintándole importancia - No te preocupes por mí y concéntrate en no falla, yo no lo volveré a hacer.
-Miércoles: Más te vale porque nos has prometido el trofeo para nuestras vitrinas - dijo sentada en el banco ocupado por nuestros arqueros - Hazlo como sabes, o te rajaré en canal.
No entendía nada. ¿En qué momento había llegado Miércoles? ¿Y por qué estaba allí sentada? Miré a mis alrededores y pude distinguir al resto del grupo sentado en las gradas mientras nos animaban. ¿Habían venido por nosotros? ¿Por qué? No era necesario y en ningún momento se lo habíamos pedido. Si bien estaba ciertamente confundida, derepente me sentía más tranquila y con más seguridad. No me lo pensé dos veces y disparé haciendo diana. Ese era el rumbo a seguir, no iba a romper mi promesa de ganar el trofeo.
NARRA ENID
Unas horas antes...Tras seguir a T/N hasta el autobus escolar, me di cuenta de que en ningún momento se dirigieron palabra alguna. Me hizo sospechar que algo había ocurrido entre ellas porque desde temprano en la mañana habían estado actuando extraño. Se trataba de una de mis mejores amigas y de... Bueno, T/N. ¿No podía definir mi relación con ella? Qué extraño. En fin, esa no era la cuestión. La cosa estaba en que no quería ver a ninguna de las dos deprimidas y tenía que ayudarlas a resolver el problema. Ambas me importaban muchísimo como para dejarlo estar.
-Miércoles: ¿Vas a hablar o me puedo ir ya? Tengo hora de escritura - dijo cruzando los brazos - La segunda parte de mi novela no se va a escribir sola. ¿Sabes?
-Enid: ¿Tuvo buena acogida la primera parte? - sonreí impresionada.
-Miércoles: No quiero hablar de eso - supongo que no - Mejor dime qué es lo que necesitas de mí para que pueda irme lo antes posible.
-Enid: ¿Te ha pasado algo con T/N? - dije sutilmente temiendo su respuesta - Parece que os habéis peleado...
-Miércoles: ¿Y qué si ha sido así? Son asuntos de familia, no tienes por qué meterte - dijo intentando caminar de vuelta a nuestra habitación pero la detuve - Enid - me miró mal - Déjame ir.
-Enid: T/N también está rara, creo que aunque no lo diga... Está dolida porque habéis discutido - jugué con sus manos - Creo que lo mejor sería que hiciéseis las paces, sois familia después de todo.
-Miércoles: La familia no te deja cuando más lo necesitas - dijo de la nada sorprendiéndome - T/N no estuvo cuando sucedió lo de mi escorpión. Según me ha contado, la enviaron en una caja de manera hacia Japón... Entiendo que no estuviese en ese momento. ¿Pero por qué jamás llegó a contactarme? - apretó los labios.
Al ver la cara que puso Wends lo entendí todo, no era tan dura como hacía ver. La realidad era que la relación que tenía con T/N era tan personal y especial para ella que realmente se sentía traicionada. Y lo peor de todo era que ambas se sentían igual de mal pero se negaban a reconocerlo haciéndose las fuertes. ¡¿Es que no podían ver lo mucho que se querían?! Aún no lo sabían, pero tenía la sensación de que en realidad estaban mucho más unidas de lo que pensaban.
-Enid: Eso tendrás que preguntárselo tú misma - sonreí - Por el momento, podrías ir a apoyarle. Cuando me he despedido de ella, no la he notado con mucha confianza que digamos.
-Miércoles: Eso es imposible, T/N jamás fallaría disparando a un objetivo fijo - me miró - ¿Cuánto de importante es esta estúpida competición?
-Enid: Estarás el alcalde de Jericó, la directora Duncan, y nos jugamos el orgullo contra los normies. Es algo así como una batalla definitiva... Creo - dije un poco insegura.
-Miércoles: - se cruzó de brazos y desvió su mirada hacia Cosa.
-Cosa: "Creo que T/N se alegrará mucho si vamos a animarle"
-Miércoles: ¿Cuánto queda para que empiece? - me preguntó - ¿Llegaremos a tiempo si nos vamos ya?
-Enid: - empecé a dar saltos de emoción - ¡Así me gusta! La familia tiene que apoyarse - sonreí para mí misma al recordar mi relación con mis familiares - Tienes que valorar lo que tienes antes de perderlo.
-Miércoles: - suspiró - Odio estos estúpidos eventos - empezó a caminar hacia la salida de la academia - Llamaré a "Largo" para que nos lleve allí.
-Enid: ¡Perfecto! Avisemos también a Yoko y al resto - sonreí mientras caminaba a su lado.