"Mu'er, tú fuiste la primera en no menospreciarme al conocer mi identidad de Rey Fantasma". Los labios de Ye Wu Chen se curvaron hacia arriba mientras observa con ternura a la joven en su abrazo.
Aún recordaba el brillo de sus ojos cuando la vio por primera vez, sin el más mínimo rastro de burla o sarcasmo. Además, ella no expresó lástima y en su lugar lo trató como a una persona común…. Todavía podía recordar lo que ella dijo en ese momento, que mientras él no pensara que él era un tonto, él no sería uno.
"Después, tal vez fue debido a mi curiosidad que fui a buscar tu historial… A pesar de que la Secta Qing Yun tenía un control estricto en lo que respecta a su información, ¿cómo podría ser incapaz para la Mansión Fantasma obtener esos datos? En ese momento, su esposo descubrió su prueba de talento innata y su reclutamiento por el Jefe Alquimista de la Secta Qing Yun. Para entonces, realmente entendí a mi esposa."
Tal vez fue debido a esas investigaciones que la mirada de Ye Wu Chen se hizo cada vez más suave, por lo que abrazó a la joven en sus brazos y dijo: "Si fuera otro, entonces cuando se conviertan en discípulos del Jefe Alquimista de la Secta Qing Yun, la mayoría de ellos querría mostrar su identidad e incluso si no lo hicieran, tomarían prestado ese poder para sus propios asuntos. Tú, por otro lado, querías que él mantuviera tu estatus en secreto, y en cambio elegiste ascender con tu propia fuerza."
A pesar de que sí hizo que el Anciano Zhao hiciera un viaje al palacio, si no fuera porque Ye Wu Chen estaba en el palacio en primer lugar, entonces podría no haberse dirigido al palacio y exponer su identidad.
A su chica no le gustaba depender de los demás, como cuando luchó con Ling Ye. Claramente ella podría haber dependido de la habilidad de él o Yan Jin para matarlo con facilidad, pero aún así eligió usar el método más arriesgado: derrotarlo con sus propias habilidades.
Sin embargo, ella no era una persona obstinada ya que entendía con claridad sus habilidades y límites actuales. Si ella conociera a un enemigo que obviamente era mucho más fuerte que ella, entonces permitiría que otros lucharan en su lugar. Por ejemplo, el maestro de Ling Ye y los expertos de la Secta Santa…
Si ella estuviera decidida a luchar contra esos fuerte expertos, entonces no sería valentía, sino idiotez. Dicho esto, ella sabía lo que estaba haciendo…
¿Cómo no enamorarse de una chica así?.
"Wu Chen, si te dijera que solo soy un alma persistente, ¿todavía te casarás conmigo?" Preguntó Mu Ru Yue con seriedad mientras enfoca su mirada en el hombre frente a ella.
"Solo soy un alma de una dimensión diferente, no sé cómo poseí el cuerpo de Mu Ru Yue así que técnicamente, no soy una persona. Incluso podría regresar a mi mundo original algún día… ¿Todavía me quieres ahora?."
Ye Wu Chen curvó sus labios en una sonrisa, demostrando una apariencia sin igual en solo un parpadeo. Este hombre era tan guapo que con solo una sonrisa, fácilmente podía cautivar el alma de una persona.
"¿No fue la suerte de tu marido el descubrirte, a ti, una existencia tan única?" Ye Wu Chen le acarició el brazo, luego la apretó con más fuerza. "Chica tonta, no importa si eres humano, demonio, monstruo o incluso un fantasma, no cambiaría en lo más mínimo el hecho de que eres mi esposa, la esposa de Ye Wu Chen. Mi esposa, por quien usaría toda mi vida para proteger, si realmente eres un alma persistente y los cielos quieren llevarte lejos, entonces iría contra los cielos, porque incluso si son los cielos, todavía no tienen derecho a obligarte a irte."
Como Ye Wu Chen dijo esto, levantó una ceja. Su voz dominante era diferente de su encanto habitual, como si llevara un aura excesivamente descarada.
¿Y qué si él iba contra los cielos? No le importaba destruir los cielos si eso significaba que ella podía quedarse con él…