Zoológico

-"No sabía que puedes conducir un automóvil muggle, papá" comenté mientras me sentaba en el copiloto y observaba la conducción estándar de Gareth. Al escucharme levantó la barbilla con orgullo como si quisiera presumir y pidiera elogios.

-"Por supuesto, aprendi cuando tenía tu edad".

-"¿No es ilegal conducir a los 11 años?".

-"..." -su orgullo se desinfló al instante- "Solo estaba bromeando cariño, por supuesto que aprendí cuando era mayor de edad" respondió firmemente como si estuviera realmente seguro de que decía la verdad, pero por su expresión podía adivinar que estaba pensando 'tal vez si deba ir a clases de actuación'. Solo sonreí y fingí que creía en sus palabras.

-"¿Falta mucho para llegar?".

-"No, llegaremos en unos 5 minutos si el tráfico sigue igual que ahora" respondió aliviado de que cambiara de tema.

Finalmente llegando al zoológico, bajé a toda prisa y esperé que él también lo hiciera para que fuera a pagar los boletos de entrada.

Ya dentro no fue difícil encontrar al hijo del destino, después de todo, su familia es bastante llamativa. Con un helado en cada mano, me acerqué inadvertidamente hacia él.

-"Hola, noté que eres el único en tu grupo que no tiene helado y a mi padre no le gusta este sabor, ¿Te gustaría tomarlo?" mentí descaradamente y estiré mi mano ofreciendo el helado. Ya podía sentir la mirada rayos x de mi padre mirando mi espalda y escuchando mis palabras.

Harry parecía sorprendido y un poco asustado por mi acercamiento, miró a su alrededor para verificar si los Dursley le prestaban atención, al ver que lo habían dejado atrás como si no existiera se sintió complicado. Estaba triste y al mismo tiempo ansioso y expectante por probar el helado pero vacilante, parecía no estar seguro de si debía o no aceptar el helado de una niña desconocida.

-"Se que mi acción es un poco grosera y repentina pero no puedo evitarlo, es la primera vez que salgo de casa y esperaba hacer amigos de mi edad..." dije con leve tristeza. Puede parecer que es fingida pero en realidad lo dije desde el corazón. Nunca tomé la iniciativa de hacer amistades en ningún mundo, no quiero terminar como mis antecesores.

-"E-está bien" con voz temblorosa y nerviosa, Harry aceptó mi helado y estiró su mano vacilante para tomarlo. Luego de una probada, me dirigió una brillante sonrisa.

-"Soy Glynis ¿Cómo te llamas? ¿Quieres ser mi amigo?".

-"...Harry, Harry Potter... ¿Puedo?".

-"¡Oh! Glynis Renée Ollivander, mi nombre es un poco largo, puedes llamarme Glynis o Renée, cualquiera de los dos está bien... ¿Puedes? Claro que si, eso solo depende de ti ¿Quieres que sea tu amiga?...".

-"Sería un placer... Mi primer amiga ¿A qué escuela vas? ¿Cómo podremos encontrarnos la próxima vez? ¿Tienes teléfono?".

-"Ah... Yo... Comenzaré la escuela en septiembre, es un internado y está un poco lejos... ¿Teléfono? No, no tenemos en casa pero podremos escribirnos cartas, ¿Quizás?...".

Harry parecía un poco decepcionado al escuchar la primer parte y la mitad de lo que dije pero al llegar al final volvió a levantar la mirada con una expresión feliz.

-"Vivo en...."

-"No es necesario" -lo interrumpí antes de que me diera irresponsablemente su dirección- "Harry no puedes dar tu dirección a extraños, ¿Entiendes? Hay personas peligrosas y nunca sabes lo que harán al saber donde vives" -dije seriamente- "No te preocupes, tengo una lechuza mensajera que siempre puede enviar cartas a quien le pida que envíe, pronto te enviaré una y puedes responderme con ella". Sin mencionar que conozco dónde vive perfectamente.

Harry parecía asustado al escuchar mis palabras y un poco autocrítico, él entendía su error, pero la emoción de finalmente hacer una amiga hizo que su coeficiente intelectual disminuyera. De repente se asustó aún más ¿No estará decepcionada de él y creerá que es estúpido y no querer seguir siendo mi amiga?.

Noté la reaccion exagerada de Harry y lo interrumpí.

-"No estoy enojada, solo me preocupa un poco sobre si has hecho ésto anteriormente, lo siento, ¿Te asusté?".

-"Ah... No... Solo ésta vez estaba un poco eufórico de emoción por tener una amiga y no lo pensé bien. No te preocupes, no ha pasado antes..." -hizo una pausa de unos segundos y continuó vacilante- "Glynis el mes que viene es mi cumpleaños... Me preguntaba si.. ¿Te gustaría enviarme una carta ese día?".

-"Eso es bueno..." -suspiré- "¡Claro que sí! ¿Que día es tu cumpleaños? De hecho el mío fue el jueves, que lástima, no te conocía entonces...".

-"¡31 de julio!" exclamó emocionado.

-"Renée, ya es hora de que vengas conmigo" la voz de mi padre nos interrumpió.

Giré mi mirada hacia él expresando insatisfacción y volví a mirar a Harry.

-"Lo siento, tengo que irme, mi padre me llama".

-"Está bien... Entonces... Esperaré tu carta..." dijo decepcionado por el hecho de que tenga que irme tan pronto. Levanté mi mirada para observar a los Dursley dirigiendoles una mirada significativa.

-"Definitivamente te escribiré, Harry. Nos vemos pronto" le di un pequeño abrazo tomándolo por sorpresa y corrí hacia donde estaba parado mi padre.

-"¿Cuántos años tienes y ya coqueteas con niños? Te lo diré ahora, no permitiré que tengas novios hasta que te gradúes de Hogwarts" dijo seriamente como si hubiera cometido la peor de las faltas.

-"...Papá... No estaba coqueteando" -apoyé mi mano en mi frente, impotente- "Solo estaba haciendo un amigo... Me pareció un niño interesante y creo que es bueno..." -me detuve para respirar profundamente y continué- "Además... Ya verás... En las vacaciones de esta Navidad traeré a mi futuro novio a casa" dije arrogantemente solo para desafiarlo. Gareth se ahogó con su saliva al escuchar mis últimas palabras.

-"¡Glynis Renée Ollivander! ¿Qué acabas de decir? Repítelo".