3 Capítulo 3: Infancia 2

Me encuentro sentado en una raíz que sobresale del suelo perteneciente a un árbol a las afueras de la casa Lovegood mirando como Ginny y Luna juegan a atrapar un pequeño caballo de peluche que parece estar encantado para dar vuelas al rededor de ellas.

Se ve que se divierten. No sé si compiten en ver quien lo atrapa primero, tal vez solo lo persiguen por diversión, cuando uno es niño no se necesitan competencias ni objetivos que cumplir para poder divertirse, solo terminas haciendo las cosas porque si y terminan siendo las más divertidas.

A veces extraño esa libertad infantil con tanta ingenuidad. Como adulto antes y con mis problemas psicológicos actuales mi vida ya no puede ser así de simple, una vez te das cuenta del mundo que te rodea ya no puedes ser tan inocente y no hay vuelta atrás, pero me pregunto si podría intentar recuperar esa sencillez, digo, mis emociones ya son de lo más simples, quizás debería intentarlo.

Veo venir a Luna corriendo hacia mí con el peluche entre sus manos junto con Ginny atrás de ella haciendo un puchero ¿Puede que haya perdido tal vez?

"Tu hermano parece serio y ya no sonríe" le dijo luna a mi hermana en vos baja, pero aún pude escucharlo.

"Él nunca ríe" le contesto Ginny dándome una mirada a escondidas.

"Pero sonrió cuando vinieron"

"Si pero eso fue raro, era la primera vez que lo veía así"

"¿Está triste?"

"No, siempre esta así, él es así"

"Le preguntaste"

"Heee... no...?"

Luna se me acerco y mientras manoseaba lentamente mi rostro me pregunto

"¿Estás triste?"

"No"

"¿Entonces porque no ríes?"

"No puedo"

"¿Por qué?"

"Me cuesta sentir y expresar emociones"

"¿Te molesta?"

"Mayormente"

"¿Duele?"

...

Ginny a su lado estaba un poco sorprendida. Pocas veces vio a su hermano hablar con alguien por tanto tiempo, a pesar de ser pequeña es bastante inteligente y notaba algunas cosas. Usualmente, cuando alguien me hace tantas preguntas consecutivas y que no tienen una importancia práctica suelo dejar de responder e irme a otro lado.

La pequeña Luna aunque no tan peculiar como su contraparte mayor aún era bastante interesante, tal vez su color de ojos con su mirada de interés por todo, o quizás como yo ella también tenía cierta aura a su alrededor que la hacía ser diferente a los demás, creo que hasta puedo sentirlo, como si fuera una bruma intangible a su alrededor.

Siento que podría gustarme poder estar cerca de ella, hablando con ella me doy cuenta de que la dificultad para comunicarme con los demás no existe entre nosotros, pienso que es alguien con la que puedo entablar una comunicación real, en su propia forma particular, pero funciona para alguien que solo puede darles unas pocas palabras a los demás.

"Puedo subirme a tu espalda" pregunto casualmente con una sonrisa a la cual no me pude negar.

"Si"

Me baje de mi asiento y me agache para que pudiera subirse, una vez arriba me sujeto el cuello con sus manos y grito "corre" como si fuera un caballo, y empecé a correr, no había un porque, simplemente quería ver si yo también pudiera divertirme como ellos, sujetándola desde su trasero para que no se caiga di varias vueltas con mi hermana siguiéndonos desde atrás.

En un momento la bajé y para que Ginny pudiera subirse también porque sabía que estaría triste si no lo hiciera. Las deje montarme dos veces a cada una antes de parar. Aunque tenga un cuerpo mejorado por mis habilidades aun así fue mucho para mí y termine tan agitado que pensé que se me saldrían los pulmones.

No pude sentir que me divertí tanto como ellos, pero sí que se sintió bien el simplemente correr por ahí cargándolas, el verlas felices también me dio cierta sensación de satisfacción.

Si no me equivoco, Luna también mastico un poco mi pelo mientas me montaba, creo que tengo un poco de baba en el cabello, pero no quiero averiguarlo.

Sudados y cansado regresamos a buscar a nuestras madres mientras empezaba a teñirse el cielo de rojo con el ocaso.

Nuestras madres nos miraron asombrados, parece que mama no esperaba que en realidad jugara con ellas debido a como me comporto y me alejo de los demás en mi casa cuando quieren jugar, pero luego de su asombro pude ver que estaba un poco feliz.

Nos marchamos poco después porque mama tenía que cocinar y los Lovegood también tenían prepararse para cenar.

Cuando llegamos a casa mama me pregunto que me pareció el viaje a lo que respondí solo con "interesante", a diferencia de Luna todavía me es difícil hablar con los demás, aunque Ginny al escucharme hablar tanto hoy también trato de hablar conmigo, me esforcé mucho para poder tratar de poder responderle, aunque no estuvo tan bien como hoy en la tarde todavía puedo decir que hice todo lo posible.

Mama ya quería ponerse a organizar reuniones con otros niños para que juguemos o que salga con mis hermanos, es prácticamente "das la mano y te agarran el codo" solamente me vio hoy comportarme más normal y ya esperaba que me volviera el chico popular, entiendo el por qué actúa así, pero aun así es molesto.

Rechacé todo lo que quería que hiciera, pero le dije que si va a la casa de los Lovegood en el futuro yo estaría interesado en ir. Acepto tal vez comprendiendo que se había emocionado de más y estaba pidiendo mucho.

La cena de esa noche fue principalmente hablar de que, el día de hoy, el extraño Red parece haber conseguido por fin un amigo y haber jugado como un niño normal. Eran en su mayoría bromas de mis hermanos y comentarios de mis padres esperando que siguiera así, yo solo seguía comiendo mi comida en silencio.

...

Mientras tanto en la Casa Lovegood la familia de tres estaba cenando cuando la señora Lovegood le pregunto a su hija.

"Como la pasaste hoy mi amor"

"Bien, jugamos mucho" Respondió la niña alegremente

"¿Qué te pareció el hermano de Ginny?" Quiso saber, intrigada de lo que pensaba su hija de ese niño tan peculiar.

"Su pelo sabe curioso" Dijo antes de volver a poner comida en su boca.

...

Hoy fue mi cumpleaños y el de Ron, nuestra familia celebro como todos los años, no hubo invitados además de la familia Diggory y Lovegood. Durante la fiesta únicamente hablé con Luna un poco y luego estuve apartado de los demás, principalmente porque no respondía a los intentos de iniciar charlas de nadie cuando venían a felicitarme.

Termino relativamente rápido y los invitados se fueron antes de las diez de la noche y para las once ya estaba acostado en mi cama. Estoy por activar mi habilidad [Dormir] para tener un sueño seguro, pero ante mí volvió a aparecer una ventana, lo que significa que una nueva habilidad está disponible. Puede que no pueda tener muchos momentos de alegría gracias a mi condición, pero cada vez que aparece una de estos avisos siento que puedo sentir un poco de emoción en mi interior.

[Auxiliar: Habilidad "Mercader" obtenido]

-Un mercader aparecerá en ciertas áreas cercanas en días aleatoriamente durante la noche, podrás comprar y vender objetos con él. Solo tú o personas que te acompañen mientras lo buscas podrán percibirlo-

'Bien, por fin abrí la tienda' justo cuando pensé en la tienda apareció un mensaje en la parte superior izquierda de mi visión.

-Faltan 13 días para la llegada del mercader-

Bueno es un poco largo, pero tampoco tengo dinero ni cosas para vender así que lo dejaré por el momento y me iré a dormir...

Pasaron casi dos semanas y sucedieron algunos eventos.

El día siguiente a nuestro cumpleaños nuestros padres nos llevaron a todos a conocer el Callejón Diagon, nunca antes habíamos ido todos porque éramos muy pequeños y seria difícil controlar tantos niños. Cuando llegamos paramos en una dulcería y nuestros padres nos dieron un par de knuts a cada uno, cosa que era raro por la economia familiar, pero supongo que era un dia especial.

Lo que sucedio es que cuando recogi mis dos kuts aparecio una ventana.

[Auxiliar: Habilidad "Monedero" obtenida]

No se preguntaron nunca como los personajes del videojuego no necesitan algunos caballos para arrastrar los carros con las 30.000 monedas de oro que carga, porque yo si, no es lógico poder cargar tanta cantidad solamente en tus bolsillos.

Así que esta habilidad sería una respuesta. Es prácticamente un espacio infinito solamente para el dinero, cada vez que quiero puedo guardar y sacar efectivo de él sin ningún límite. De esta forma ya no tengo que preocuparme de obtener mi propia bóveda en Gringotts, ya que ahora yo soy mi propia bóveda andante.

Sucedió otro evento destacable. Fue un día en el que me pelee con mi familia debido a... mi personalidad principalmente, creo que les estresa un poco mi forma de ser y terminan explotando cada tanto, principalmente mis hermanos mayores posiblemente la rebeldía de su entrada a la adolescencia no combina bien con mi completa indiferencia.

Ese día me escapé de casa y fui a buscar a Luna porque quería alguien con quien hablar y era ella la única con quien podía compartir más de unas pocas palabras.

-Flashback-

Cuando llegue a la puerta de la casa Lovegood, que debo decir no estaba tan cerca como uno podría pensar, vi como pandora abría la puerta sorprendida con mi llegada.

"Hola Red ¿Has venido solo el día de hoy?" Pregunto un poco confundida.

"Si"

"¿Tus padres Saben que estás aquí?"

"No"

"¿Te escapaste?"

"Si"

"... Voy a avisarle a tu madre que está aquí para que no se preocupe"

"¿Luna?" Dije luego de un rato sin responder a su afirmación anterior.

"... sí, puedes buscarla en su cuarto"

Pandora se puso a escribir en un pergamino para mandarlo con su búho a su amiga y avisarle de mi llegada. Mientras, yo subia a ver a la unica con quien podia hablar...

Ahora estábamos los en el jardín de la casa, yo recostado en la raíz del árbol en la que me había instalado las veces anteriores mientras que Luna se estaba meciendo en un unicornio de madera.

"¿Estás triste?" Pregunto, sin embargo, también afirmo al mismo tiempo.

"Un poco" respondí abatido.

"¿Por qué?"

"Me peleé con mi familia"

"¿Fue su culpa?"

"No"

"¿Fue la tuya?"

"Tampoco"

"¿Y por qué pelearon?"

"Tal vez, fue culpa de ambos, somos muy distintos y no nos llevamos muy bien"

"¿Los odias?"

"No... ellos no me odian a mí con todo lo que hago, me es muy difícil odiarlos cuando todavía me quieren después de ser como soy"

"Tú los quieres también"

"Si, bastante la verdad, me han dado un hogar y con todos los conflictos siguen siendo mi familia. Pero no sé si lo saben, ni siquiera puedo entablar una conversación completa con ellos como lo hacemos tú y yo"

"¿Crees que te odiaran si no hablas con ellos?"

"Tal vez se cansen de mí en algún momento. No los culparía, y aunque quisiera, tal vez no pueda sentirme mal por eso, no recuerdo el haber llorado o haberme entristecido fuertemente en ningún momento ahora que lo pienso"

"¿No te gusta no estar triste?"

"No me gusta no poder sentir todo lo que debería. No puedo estar del todo triste aunque quiera, no puedo estar feliz, y lo peor, no puedo explicarles ni hacerles entender mi situación a nadie porque no puedo expresar la más insignificante emoción y no puedo decir más que unas pocas palabras para hacerles entender lo mínimo, me hace sentir que estoy rodeado de gente pero que a la vez estoy muy solo" surgió en mí una leve ira y desesperación pero casi imperceptible

"Pero puedes hablar conmigo"

"Si, tú eres la única con la que no me siento incapaz de comunicarme, poder sacar todo lo que pienso al exterior para que no exista solo en mi mente" suspire.

La pequeña Luna se bajó del unicornio y se acercó a mí, me abrazo fuertemente mientras me dijo "Entonces no estás solo". Pude sentir como sus palabras me quitaba un peso de encima y la agradable calidez de su abrazo. Quizás no lo haya sido mucho, pero sé que hasta el momento, fue una de las emociones más agradables que he sentido.

Seguimos abrazados un rato hablando de muchos otros temas de niños que, a pesar de mí madures, pude disfrutar bastante. Pase un tiempo más en nuestro mundo sin saber que cierta bruja rubia que había usado un hechizo de camuflaje para escuchar la conversación de los niños volvía a su casa para escribir otra carta.

Deje a Luna al atardecer sin avisarle a sus padres de mi partida y termine volviendo a oscuras a mi hogar. Cuando llegue mi madre se acercó a mí y me abrazo sin decir ninguna palabra, le devolví el abrazo y nos quedamos así un rato.

Tuve una charla con ella de que nunca debía dudar que me amaban y luego me dejaron irme a dormir. Es muy agradable poder pertenecer a una familia que te ama.

-Fin Flashback-

El día siguiente de ese evento me llevaron con un medimago, que nuevamente, no encontró nada malo en mí. Para luego llevarme con un experto en Legilimancia que les pregunto a mis padres si había estado practicando Oclumancia, a lo que negaron junto conmigo. Dijo que cada vez que trata de entrar en mi mente doy la sensación de poder alcanzar algún resultado, pero que nunca es capas de llegar a él realmente y que sería imposible hasta para los mejores poder ver algo dentro de mi cabeza, no podía encontrar ningún problema o el origen de mi peculiaridad.

Regresamos con mis padres abatidos, pero mostraron una sonrisa diciendo que todo estaba bien. A mí no me preocupaba, ya me había acostumbrado, además sé algo nuevo, no necesito aprender Oclumancia para proteger mis recuerdos, ya que son inaccesibles.

"No hay mal que por bien no venga"

...

Es en la noche de hoy en la que llega el mercader. Me he preparado para esto, mientras nadie me veía recolectaba cosas que nadie notaria si desaparecieran. Un libro casi irreconocible, unos tomates sin madurar, una cuerda, una taza rota...

También me tome el día de hoy para cazar a un gnomo, quería saber si el mercader aceptaría seres vivos, quizás pueda deshacerme de algunas alimañas. Fue algo difícil hacerlo sin que se den cuenta mis hermanos, pero lo conseguí, mi magia de sangre sigue fortaleciéndome dándome buenas habilidades físicas; para un niño. Termine dejándolo atado dentro de un baúl roto que estaba tirado en el patio.

También case algunas arañas y las coloque dentro de un frasco, Ron debe de estar agradecido desde que Fred y George lo asustaron con una cuando era pequeño, casi no las puede ver.

Se acerca el momento, todos están durmiendo y estoy esperando en la cocina lo más silencioso posible. Es hora de salir así que tomo todas las cosas que recolecte en una bolsa y salgo de la casa sin hacer algún ruido.

Creí que me tomaría algún tiempo en encontrarlo, ya que la habilidad solo decía en 'áreas cercanas' pero ni bien salí al patio, a la distancia pude ver una luz junto a lo que parecía un carruaje, que en medio de la noche sería muy notable si es que alguien además de mí pudiera verlo.

Fui al baúl en el patio y tome al gnomo, casi se había liberado de las ataduras, pero llegue justo a tiempo. Lo arrastré con lo demás y llegamos al frente del carruaje. Tenía bastante estilo, era largo con cuatro pares de ruedas, paredes de una madera fina con un techo circular de color verde brillante, estaba siendo tirado solo por dos caballos y junto al lado de una de las paredes laterales del carro se encontraba parado un hombre vestido con una túnica de mercader de videojuego al cual no se le podía distinguir bien el rostro. No es que fuera por la oscuridad de la noche, simplemente no podías distinguir su cara de cualquier otra, lo único que podías saber es que parecía tener una perpetua sonrisa.

El hombre se acercó a una de las paredes del carruaje y la levanto hacia arriba formando un pequeño techo. En el interior del carruaje se podían ver varios estantes, los cuales la mayoría estaban vacíos, además a un lado parecía haber una caja registradora junto a una gran bandeja rectangular.

Trate de preguntarle al vendedor, pero no dio ninguna respuesta solo abría sus manos hacia los costados en señal de saludo cada vez que le hablaba y mantenía esa eterna sonrisa. Prácticamente, era como hablarle a la pared y empece a entender por qué se enojaban mis hermanos conmigo. 'Por dios, si soy muy molesto si soy igual a este comerciante'.

Viendo lo que había en los estantes, que no eran muchas cosas, me di cuenta de que nada más eran dulces, particularmente los dulces que había visto en el Callejón Diagon, supongo que es porque es la única tienda que visite cuando estuvimos allí. 'Mierda' si supiera que el mercader vendería cosas de otras tiendas que conozca me habría esforzado por visitar las demás cuando salimos.

Esto es algo más para hacer en el futuro. Me coloqué frente a la bandeja rectangular, si no me equivoco aquí se colocarían los objetos para vender... Coloque primero el libro estropeado, cuando lo hice apareció una ventana que decía "1 Knut" perece que estaba muy maltratado como para valer más. Presione aceptar y pude ver como en la imagen de mi habilidad monedero se sumó uno a mis knuts.

Seguí colocando las cosas que traje, algunas de ellas ni siquiera me valían un knut, pero obtuve un poco por los demás. Cuando vendí el frasco de arañas me dio 20 knuts, pero cuando desapareció, quedaron en la bandeja tres de las trece arañas del frasco, supongo que algunas cosas se venden por múltiplos de diez u otras cantidades.

Lo que más me dio ganancias fue el gnomo, me dieron un galón por él. Rápidamente, fui a buscar otros gnomos por la noche, fue muy difícil, pero conseguí atrapar uno que dormía en su madriguera. Me mordió en el proceso, pero aun así lo lleve al carruaje, no pude venderlo cuando lo puse en la bandeja, supongo porque a diferencia del anterior este no estaba inmovilizado, así que lo golpea hasta que quedo inconsciente, y así si pude venderlo, solo que esta vez solo obtuve 14 sickles y medio. 'Maldita sea, no podre aprovecharme de vender repetidamente el mismo producto'.

Sin nada más que hacer simplemente compre unos dulces para tener conmigo y volví a mi casa. Pero cuando llegue me sorprendí al darme cuenta de que Ginny estaba mirando desde la puerta abierta y consiguió verme venir desde lejos, me esforcé por hablarle lo mejor que pude y le pregunte.

"¿Ginny que haces despierta?"

"Te buscaba para dormir¿Que haces afuera?¿De donde vienes?"

"Sali un rato" luego saque un caramelo de mi bolsillo y se lo ofreci "¿Secreto?"

"Si, secreto" Tomo feliz el caramelo. Me alivie un poco, de todos mis hermanos confió más en Ginny para guardar mis secretos.

"Vamos" dije mientras la llevaba adentro y la acostaba en su cama. Use mis habilidades para hacerla dormir y me dirigí a mi habitación.