CAPÍTULO 20

Héroes por suerte.

CAPÍTULO 20

—Lista.- Dice Kim.

—Igualmente.- Dice Sara.

—Empiecen.

Kim se lanza contra Sara y la empieza a golpear en el cuerpo. Sara Intenta golpearla, pero Kim esquiva su ataque y la sigue golpeando.

—Vamos, esfuérzate más, no seas una inútil.

—¡No soy una inútil!- Dice Sara enojada.

Oh, es sensible a las palabras.

Sara golpea a Kim en la entrepierna.

—¡Hija de...!

Sara la golpea en la cara.

—¡Ahora tú serás la inútil!

Sara la toma de la nuca y azota la cabeza de Kim contra el suelo.

—¿Quieres más?

Golpea repetidas veces la cara de Kim contra el suelo.

—¿Aún quieres más?

Observa la máscara de Kim llena de sangre... Eso es asqueroso... Se está pasando.

—Creo que sí quieres más.

La Intenta golpear de nuevo, pero le doy una patada en su costado izquierdo, que la saca volando.

—Maldita loca. Lo siento, pero tuve que intervenir, se estaba pasando.

Cristina se dirige a mí.

—Ya la iba a detener yo. Bien hecho.

Cristina revisa a Kim.

—Vaya, su máscara está llena de sangre. Oye, ¿te puedes levantar?

Kim se levanta lentamente.

—Esperen, por favor.

Se voltea, se quita la máscara y se limpia el rostro con la mano derecha.

—Listo.

Se pone de nuevo la máscara y voltea con nosotros.

—Siento un poco de sangre en mi cara aún, pero en mi casa me voy a limpiar.

Me dirijo a ella.

—¿Ya te sientes bien?

—Siento mucho dolor aún.

—Espera unos minutos y se te quitará. Descansa.

Sara se dirige a nosotros.

—L-lo siento.

—Sara, solo estamos entrenando, no te lo tomes tan en serio como Miguel.

—Ella me provocó primero llamándome inútil.

—Lo hice para que te esfuerces más en la pelea, maldita loca.- Dice Kim.

Oh, acabo de recordar el golpe de esa chica.

Me acaricio la entrepierna.

—Y la golpeó en la entrepierna. Con nuestra fuerza, imagínense cómo le tuvo que doler.

Erick se acaricia la entrepierna.

—Hasta yo lo sentí.- Dice Erick.

—Y lo sigo sintiendo, maldita sea. No me pueden ver, pero estoy llorando ahora mismo.- Dice Kim.

—Lo siento, soy muy sensible con las palabras. Lo siento.- Dice Sara.

—Está bien, ya se me pasó.- Dice Kim.

—Sara, esos golpes los usaremos más adelante, cuando ya aprendamos a pelear y a usar los poderes mejor.

—Está bien.

—Con esos golpes contra el suelo me di cuenta de que el suelo no se puede romper. Cada vez más me sorprende este lugar. Qué buen poder me dieron.

Volteo a ver a Kim.

—Esos golpes te tuvieron que doler demasiado... Digo... Un golpe en los puntos nobles ya duele mucho, ahora combinada con nuestra fuerza, con solo imaginarlo me empieza a doler un poco la entrepierna. Ouch.

—Sí, me dolió mucho. ¿Lo quieres comprobar?

—¿Eh?

Me alejo poco a poco de ella.

—Muy generosa tu oferta, pero no, gracias.

Kim se acerca a mí y me acaricia la cabeza.

—Vamos, solo un golpe pequeño.

Se acerca demasiado a mí y me empieza a susurrar.

—No te dolerá demasiado.

Me pongo nervioso... ¡Ah, siento un mal presentimiento!

—N-no, graci...

Recibo un golpe en la entrepierna y caigo al suelo. Kim me golpeó usando su puño izquierdo... ¡¡Ahhhhhhhhhhhhhh!! ¡¡Duele demasiado!! ¡¡Pobres de mis espermatozoides!! ¡¡Quedaré estéril!!

—Mier... da.

Todos los hombres se acarician la entrepierna.

—¡Te pasaste!- Dice Erick.

—¡Eso no se le hace a un hombre!- Dice Patricio.

Me levanto y los observo.

—Me... tienen... que acariciar a mí. Demonios...

Me sonrojo y me río... Odio admitirlo, pero lo disfruté un poco.

—Aunque es la primera vez que una chica me toca la entrepierna. Valió la pena, jeje.

Esmeralda me toma de los hombros y me sacude.

—¡¿Lo estás disfrutando?!

—Jeje. Solo un poco.

—¿Solo un poco? ¡Pues toma más!

Esmeralda me da un gran golpe en la entrepierna con su puño derecho y caigo al suelo de nuevo. ¡Debo aprender a callarme!

—Estoy satisfecha, ya puede empezar el otro equipo. Siguiente equipo, ¿está listo?- Dice Esmeralda.