Capítulo 30: ¿Recibiste mi permiso para el asesinato?

Cuando el estallido de gotas de lluvia empezó, aparecieron destellos de luz.

Debajo de los sombreros de bambú, la intención de matar, tan fría como un iceberg, de repente envolvió todo el local. Cuatro rayos de luz destellaron con el ruido de metales chocando, reflejando la agudeza de las cuchillas a medida que apuntaban hacia el tercer príncipe refinado y suave desde todas las direcciones.

El zumbido de las espadas resonó dentro del pequeño espacio del local, asaltando sus tímpanos.

En ese instante, cuando aparecieron los destellos de luz, Bu Fang agarró el pequeño cuerpo de Ouyang Xiaoyi y la empujó detrás de él para evitar que se enredara en la carnicería.

¡Asesinato! ¡Este era un intento de asesinar a Ji Chengxue!

Ji Chengxue parecía haberlo esperado. Se sentó tranquilamente en la silla con una expresión indiferente.

En el momento en que los cuatro asesinos se acercaron, el largo cabello de Ji Chengxue se agitó repentinamente por sí solo. Sus ojos suaves parecían haber sufrido una gran transformación cuando se convirtieron en los ojos de un Asura; era como si montañas de cadáveres y un mar infinito de sangre se revolcaran en su interior.

—Haber enviado cuatro Reyes de Batalla de quinto grado para que me asesinaran, qué movimiento tan extravagante —Ji Chengxue resopló mientras una ola creciente de energía verdadera brotaba de su cuerpo y cargaba hacia los asesinos mortales.

Sin embargo, los asesinos se mantuvieron firmes y siguieron apuntando al corazón de Ji Chengxue. Eran profesionales que se enfocaban en matar con un solo golpe y definitivamente no serían afectados por ninguna de las acciones de Ji Chengxue.

La palma de Ji Chengxue aterrizó sobre la mesa. La energía verdadera del Rey de Batalla se liberó instantáneamente y generó un impacto que hizo que todo su cuerpo se elevara en el aire.

—¿Hmm? —las pupilas de Ji Chengxue se contrajeron ligeramente mientras miraba con horror hacia la mesa que golpeó con todas sus fuerzas. —Esta mesa soportó mi verdadera energía, ¡¿y en verdad está intacta?!

El sonido del choque de metales hizo eco.

Las puntas de las espadas de los cuatro asesinos chocaron. Un sonido melódico claro resonó cuando la energía de las espadas se dispersó y estalló dentro del local.

Sin embargo, la explosión de energía de las espadas de los cuatro Reyes de Batalla no causó ningún daño al local en lo más mínimo. Era como si la explosión fuera dispersada por una fuerza invisible.

La figura de Ji Chengxue flotaba en el aire y gradualmente aterrizó en la punta de las espadas; su túnica blanca estaba flotando y su cabello revoloteaba.

Los cinco se quedaron extrañamente quietos, pero la creciente energía que los rodeaba, sin duda, mostraba el peligro del momento actual.

El ánimo dentro del local estaba lleno de frialdad debido a este choque de intenciones de matar. Esto hizo que Bu Fang se sintiera muy insatisfecho.

Dentro del silencioso local, solo se podía escuchar la colisión de energía verdadera entre los cinco.

—Si están buscando una pelea, por favor, abandonen el local. De lo contrario, todos se verán como alborotadores —de repente se escuchó una voz serena.

La repentina aparición de la voz fue como un trueno dentro de esta seria atmósfera, causando que se sorprendieran.

La pequeña loli, Ouyang Xiaoyi, miraba a Bu Fang como si fuera un monstruo mientras caminaba lentamente hacia los cinco.

¡Eso era correcto!

En un momento tan peligroso, Bu Fang abrió inexpresivamente su boca y expresó su infelicidad. ¿Cómo iba a hacer negocios con ellos causando una carnicería dentro del local?

Los cuatro asesinos estaban enfocados en Ji Chengxue, pero se distrajeron por la interrupción de Bu Fang.

A pesar de que Ji Chengxue también estaba sorprendido, pudo aprovechar esta oportunidad. Con un gruñido, pisó con fuerza las puntas de sus espadas y las tiró. Al aterrizar en el suelo, golpeó rápidamente los pechos de los cuatro asesinos con la palma de la mano y los obligó a retroceder.

—¿Estás buscando la muerte? —uno de los asesinos miró fríamente hacia Bu Fang y dijo con voz ronca. Su voz era como papel de lija.

En sus ojos, Bu Fang, un simple Maestro de Batalla de segundo grado, era solo una hormiga que podía ser asesinada fácilmente con un solo golpe de su espada. ¡Un tipo parecido a una hormiga realmente se atrevió a perturbar su asesinato!

—Soy el propietario de este local. ¿Recibiste mi permiso antes de intentar asesinar a alguien aquí? —Bu Fang preguntó inexpresivamente.

—Que broma —el asesino negó con la cabeza. No podía molestarse en preocuparse por Bu Fang; un tipo parecido a una hormiga no podía afectar la situación. Su objetivo era el tercer príncipe del Imperio del Viento Ligero, Ji Chengxue.

Como Ji Chengxue también era un Rey de Batalla, no se atrevieron a ser complacientes. A pesar de que eran cuatro Reyes de Batalla de un lado, su oponente era un príncipe. ¿Cómo podría no tener ninguna carta de triunfo?

—¡Ya lo dije! Pelear está prohibido en el Pequeño Local de Fang Fang. Si continúan con esto, serán considerados alborotadores —dijo fríamente Bu Fang. Se dio cuenta de que estos individuos imperdonables en realidad lo estaban ignorando.

Como propietario del Pequeño Local de Fang Fang y el futuro Dios de la Cocina, ¿cómo podrían ignorarlo?

—¡Qué molesto! ¡Muere!

La mirada de uno de los asesinos de repente se volvió fría. Con un grito, rápidamente cargó hacia Bu Fang.

Bu Fang se vio envuelto en una ola de intenciones asesinas, como si se sumergiera en un charco de agua helada. La sangre en sus venas casi había dejado de circular y sus extremidades ni siquiera podían moverse un centímetro.

Este era el resultado del uso de la coerción de un Rey de Batalla de quinto grado. No era algo que el actual Bu Fang pudiera resistir. Su nivel de cultivación era simplemente demasiado débil.

La expresión de Ji Chengxue cambió y gritó enojado: —¡Cómo te atreves!

Quería rescatar a Bu Fang, pero fue interceptado por los otros tres asesinos.

Ouyang Xiaoyi ya estaba congelada de miedo por el atroz intento de asesinato del Rey de Batalla. Sus ojos se llenaron de horror y no pudo echar una mano. Por supuesto, incluso si ella pudiera intervenir, no habría ninguna diferencia en el resultado.

Y entonces, parecía que Bu Fang estaba atrapado en una situación letal donde ciertamente moriría… Al menos, eso era lo que pensaban todos en el local.

Que un Maestro de Batalla provoque a un Rey de Batalla, llamarlo intrépido no sería suficiente como cumplido.

Ji Chengxue y Ouyang Xiaoyi solo podían ver a Bu Fang ser completamente destrozado por la espada del asesino.

Bu Fang, por otro lado, estaba muy tranquilo. A pesar de que la fría intención de matarlo lo hacía sentir como si la sangre de todo su cuerpo estuviera congelada, no había ni un solo indicio de miedo en su rostro inexpresivo.

Esos ojos… parecían estar mirando a un simple matón que causaba problemas en su local.

—Esta hormiga… Es bastante bueno para actuar. Mi espada está a punto de aterrizar en él, y sin embargo, no parece que tenga miedo —el asesino se sorprendió un poco.

De repente, una figura gigantesca apareció en el camino de la espada del asesino. Cortó la línea de visión del asesino a la figura de Bu Fang e inmediatamente sobresaltó al asesino.

—¡Whitey! —Ouyang Xiaoyi gritó emocionada mientras sus ojos se iluminaban.

Era como si el asesino hubiera visto un fantasma. Vio a una gigantesca marioneta de hierro blanco que bloqueaba el camino hacia la hormiga y agarró su espada con un solo movimiento.

Intentó liberar su espada, pero no se movió ni un centímetro.

Bu Fang levantó la mano y le dio unas palmaditas en la espalda a Whitey y simplemente dijo: —Echa a estos alborotadores.

—Oh, y golpéalo casi hasta la muerte primero, luego desnúdalo y échalo. Lo odio mucho —agregó Bu Fang.

Los ojos mecánicos de Whitey se pusieron rojos de inmediato y se escuchó una voz mecánica: —Alborotadores, serán desnudados como ejemplo para otros.

¡¡Bang!!

Una enorme y aterradora fuerza salió del cuerpo de Whitey y el sombrero de bambú del asesino se rompió de repente, revelando una cabeza redonda y calva. Sus ojos se ensancharon mientras escupía un bocado de sangre.

El asesino fue golpeado en el abdomen por Whitey; la energía verdadera de un Rey de Batalla fue dispersada por este solo golpe.

La mano grande de Whitey agarró la cabeza del asesino y lo levantó en el aire mientras miraba a la marioneta de hierro con desconcierto.

¡Bang!

El puño de Whitey aterrizó en el cuerpo del asesino una vez más e inmediatamente se desmayó. El asesino, descuidadamente, yacía en el suelo, aferrado a la vida por un hilo.

—Se considera que está medio muerto. Ahora comenzará a ser desnudado como un ejemplo para otros —dijo Whitey mecánicamente.

Luego, se escucharon sonidos de desgarro cuando el impermeable de paja del asesino se rompió en pedazos. Fue inmediatamente desnudado por Whitey, dejando una pequeña tela para cubrir sus partes privadas. Whitey agitó suavemente su mano y el Rey de Batalla fue expulsado del local como un granizado.

¡Bang! El sonido del cuerpo chocando íntimamente con el suelo sonó y resonó dentro del pequeño local.

Los tres asesinos restantes, Ji Chengxue y Ouyang Xiaoyi quedaron aturdidos. Miraron a Whitey y luego a Bu Fang… Parecían haber visto un fantasma.