Capítulo 113: Ustedes son clientes, pero él no

—Esta carne…¡huele tan bien! ¡¿Cómo puede ser tan fragante?!

Los ojos devastadoramente hermosos de Ni Yan estaban llenos de incredulidad mientras se agrandaron ligeramente. El rico olor a carne flotó hacia ella y fluyó hacia su hermosa nariz. De repente, todos los poros de su cuerpo parecían haber explotado.

Como alguien que era tanto una chef como una glotona, el pasatiempo de Ni Yan era probar e investigar todo tipo de comidas. Una vez intentó cocinar un plato usando una bestia espiritual de sexto grado, pero desafortunadamente fracasó. La carne de una bestia espiritual de sexto grado estaba llena de una gran cantidad de energía espiritual. Sin embargo, una vez que estas bestias espirituales morían, la energía espiritual se quedaría atrapada dentro de su cadáver. Si una persona cortara un trozo de carne del cadáver, la energía espiritual contenida dentro de ese trozo de carne se disiparía rápidamente.

Con su experiencia, Ni Yan era capaz de analizar instantáneamente la composición del aroma flotando en el aire. No solo detectó un aroma a carne, sino que también una fragancia medicinal y una gran cantidad de energía espiritual.

La concentración de energía espiritual en el aire la hizo sentirse incrédula.

Qian Bao estaba tragando saliva continuamente. Pensó: «Esta fragancia… Ni siquiera el plato más delicioso de nuestro restaurante, el pato de flor asado, se puede comparar con este olor. Como se esperaba, las habilidades culinarias del propietario Bu son extraordinarias. Definitivamente debo probar de su cocina hoy».

Las expresiones de Tang Yin y Lu Xiaoxiao, que estaban parados detrás de Ni Yan, estaban llenas de euforia. Esta no era la primera vez que se encontraban con un aroma a carne tan rico. Anteriormente, cuando estuvieron en las tierras salvajes, Bu Fang también había cocinado una carne asada con una fragancia fuerte. Hasta ese día, el sabor de la carne asada seguía siendo inolvidable para ellos.

Bu Fang estaba llevando un plato de porcelana con tres pedazos cortados de salchicha esparcidos encima. Una ligera calidez estaba flotando alrededor de la superficie de la salchicha. También había una oleada de fragancia que estaba cerca de solidificarse con la energía espiritual.

Bu Fang no podía esperar para probar esta salchicha abrumadoramente fragante. Acababa de salir de la cocina cuando vio a las cuatro personas paradas en la puerta con expresiones eufóricas. Un rastro de duda apareció en su rostro cuando exclamó: —¿Eh? ¿Alguien está aquí tan temprano hoy?

Normalmente, no había clientes tan temprano. Incluso el Gordo Jin, que siempre llegaba a tiempo, usualmente tardaba un poco más en llegar.

—¡Señor! ¡Somos nosotros!

Cuando Tang Yin vio esa apariencia familiar y ese olor familiar, sus ojos inmediatamente se iluminaron mientras agitaba su mano con emoción hacia Bu Fang.

—¿Hmm? —Bu Fang miró a Tang Yin.Luego de pensar por un rato, finalmente reconoció al hombre que lo estaba saludando tan temprano. El encuentro en las tierras salvajes le había dejado una impresión bastante profunda.

—Oh, eres tú. Ha pasado un tiempo. ¿Están aquí para comer? Pasen —Bu Fang dijo inexpresivamente antes de colocar el plato en sus manos sobre una mesa.

Los ojos de los cuatro humanos, además de un perro, siguieron las acciones de Bu Fang y aterrizaron en la mesa. El sonido de tragar saliva resonó en la habitación.

Todos entraron subconscientemente al local. Sus ojos estaban fijos en Bu Fang, que ya se había sentado en la mesa. Estaba sosteniendo un par de palillos y estaba por empezar a comer.

Bu Fang no estaba preocupado por las acciones de los demás. Los palillos de madera en sus manos se abrieron y Bu Fang pellizcó suavemente uno de los tres pedazos de salchicha. En el momento en que los palillos se apretaron, una grasa aromática naturalmente goteó de la salchicha.

La fragancia flotando en el aire de repente se volvió incluso más fuerte.

Bu Fang observó cuidadosamente el pedazo de salchicha. El lugar donde se había hecho el corte era extremadamente suave y la carne adentro era tierna y fragante. El apetito de Bu Fang estaba siendo estimulado con solo mirar la salchicha.

Cuando Bu Fang dio un mordisco a la salchicha, se pudo escucharel sonido de sus dientes chocando con la cubierta crujiente de la salchicha.

Mientras Bu Fang estaba dando un mordisco, Qian Bao y los demás también abrieron la boca ligeramente y subconscientemente se lamieron los labios…

La textura de la salchicha era muy elástica, y la envoltura crujiente de la salchicha, así como el relleno tierno de carne, instantáneamente envolvieron la boca de Bu Fang. La fragancia permaneció en su boca como una niebla pesada que era imposible de disipar.

Como la salchicha estaba algo caliente, Bu Fang intentó enfriarla abriendo su boca. Exhaló una bocanada de aire caliente junto con la fragancia de la salchicha.

Gulp…

—¡Guau!

Sonidos de rugidos resonaron desde los estómagos de los cuatro, y Blacky ladró una vez mientras se lamía los labios.

Sin embargo, en ese momento, Bu Fang estaba completamente inmerso en el sabor delicioso. Solo después de empezar a masticar, fue capaz de experimentar a la perfección el sabor de la salchicha. Como un poco de azúcar de piedra estaba mezclada en la salchicha, la cobertura de la salchicha no era solo crujiente sino que también un poco dulce. Se volvió incluso más sabrosa e hizo que el aroma a carne brotara como una explosión y saliera instantáneamente de las fosas nasales de Bu Fang.

—¡Es delicioso! —exclamó Bu Fang. El sabor familiar de la salchicha lo hizo sentirse nostálgico. La salchicha hecha de la carne de vaca dragón errante, así como de varias hierbas espirituales, sabía incluso más magnífica.

Después de todo, era la carne de una bestia espiritual de séptimo grado. Como se esperaba, no era algo que pudiera compararse con carne ordinaria.

Luego de tragar una bocanada de salchicha, Bu Fang se lamió los labios sintiéndose insatisfecho. Sus ojos parecían algo borrosos…

—¿Hmm? ¿Por qué me están mirando así? —cuando Bu Fang se despertó de su estupor, miró confundido a los demás. El aspecto babeante de los cuatro humanos más un perro, hizo imposible que Bu Fang no se sintiera divertido.

—¿Eres el que cocinó esta salchicha? —Ni Yan preguntó mientras sus hermosos ojos miraban fijamente a Bu Fang.

Bu Fang asintió mientras metía el resto de la salchicha mordida en su boca.

—Yo…¿Puedo probarla? —Ni Yan dudó por un momento antes de preguntar.

Los demás también miraban a Bu Fang con expresiones llenas de expectativa. El olor de la salchicha era simplemente demasiado tentador. Era tan fragante que no eran ellos mismos.

Bu Fang la miró y dijo indiferentemente: —No.

Ni Yan estaba sorprendida. Tang Yin estaba sorprendido. Todos estaban sorprendidos… Oh, Blacky no estaba sorprendido. Seguía lamiendo sus labios y mirando a Bu Fang con ojos llenos de expectativa.

¿Alguien en verdad la rechazó? Ni Yan estaba algo desconcertada. ¿Cuántos años habían pasado desde que se enfrentó a semejante situación?

Ni Yan se quitó su velo y reveló su apariencia devastadoramente hermosa y sin igual. Sus delicados y rojos labios se curvaron ligeramente hacia arriba y sus bellos ojos miraron fijamente a Bu Fang y preguntó: —Ahora…¿Puedo probar la salchicha?

Ni Yan estaba más confiada de su belleza que de su fuerza. Estaba segura que nadie sería capaz de mantener su compostura luego de presenciar su apariencia.

Sin embargo, esta vez estaba equivocada. Cuando Bu Fang le dio otra mirada, se reflejó el asombro en sus ojos y luego volvió a responder indiferentemente: —No.

—Tú…—Ni Yan estaba furiosa. ¡¿Cómo podía hablarle así a una belleza como ella?!

—Entonces, por qué no me dices, qué debo hacer para probar la salchicha…—Ni Yan en verdad se sentía tentada a golpear a este tipo frente suyo hasta la muerte. Sin embargo, cuando pensó en que la deliciosa salchicha solo podía ser preparada por este tipo despreciable, fue incapaz de hacerlo.

—¿Eres estúpida? Mira el menú—Bu Fang frunció sus labios y tomó otra salchicha. Metió encantado la salchicha en su boca y la masticó con gusto.

Cuando Ni Yan vio la expresión exasperante de Bu Fang mientras disfrutaba la salchicha, realmente se sentía tentada a patearlo en la cara. Mientras soportaba la tentadora fragancia de la salchicha, levantó su cabeza y miró hacia el menú colgado en la pared del local. En el momento en que miró, sus hermosos ojos se agrandaron una vez más.

—¡¡Guau!!

¡Blacky estaba furioso! Pensó: «¿Cómo se atreve este bribón a ignorar a este gran perro! ¡¿Cómo no ofreces una salchicha tan deliciosa a tu gran perro?!».

Bu Fang se sorprendió por un momento. Acarició la cabeza del gran perro y dijo suavemente: —Deja de tontear.

«¡Quién está tonteando con quién!»,Blacky pensó mientras rugía una vez más. Este rugido estaba lleno de una tremenda ira así como su anhelo hacia la salchicha: —¡Guau!

Bu Fang suspiró en su corazón. Sabía que no sería capaz de comer este último pedazo de salchicha. Acarició a regañadientes la cabeza de Blacky y le dio la salchicha.

Los ojos de Blacky brillaban y su lengua colgaba hacia afuera mientras tragaba emocionado la salchicha de un solo bocado. Después de eso, entrecerró sus ojos y tenía una expresión llena de satisfacción.

Ni Yan acababa de voltearse. Quería interrogar a Bu Fang sobre los precios irrazonables. Sin embargo, antes que pudiera decir algo, presenció la escena donde Bu Fang le estaba dando la salchicha a un perro…

Bu Fang le estaba dando de comer la salchicha que era tan deliciosa, que ellos era incapaces de controlarse, a un gran perro negro… Un perro negro…¡Un perro!

—Qué significa eso…¿Cuál es tu base para permitir al perro comer cuando yo no podía? —Ni Yan preguntó con una expresión fría.

Bu Fang se había levantado y estaba recogiendo el plato y los palillos cuando escuchó la pregunta de Ni Yan. De inmediato la miró confundido y dijo: —No hay una razón en particular. Ustedes son clientes, pero él no.

Luego de terminar de hablar, se dirigió hacia la cocina. Cuando alcanzó la puerta, de repente recordó algo y volteó su cabeza hacia los demás.

—Un recordatorio, solo se proporcionan tres porciones de salchicha de vaca dragón errante cada día. Si quieren comerlas, deberían ordenarlas rápidamente.