Capítulo 24. Letargo de un fin.

Marte.

Ese nombre era reverenciado por los marcianos por ser su hogar y por terranos por ser el hogar de todo el conocimiento de la Gran Alianza Terrana, siendo igual de Terra como la capital gemela del mundo hogar de la humanidad.

El mayor mundo forja de toda la humanidad, siendo que su anillo orbital poseía la mayor cantidad de diques secos jamás registrados. Contando con cinco millones de astilleros y muelles de inmenso tamaño con Huragoks e ingenieros marcianos que construyeron las maravillosas naves Terranas de la Battlefleet Solar y muchas otras naves.

Siendo la sede de construcción de los Mega Star Dreadnoughts clase Juggernaut que eran poderosos buques de guerra por sí mismo, así como los Battleships clase Patriarca. Buques que fueron construidos en muchos mundos forjas, siendo que el 5% de producción total sea destinado a su construcción cuando son necesarios para la conquista Terrana a través de las estrellas.

Era lo que el Fabricador General del Mechanicus del GTE pensaba en su mente mientras caminaba en los pasillos de su nave personal el Arca Mechanicus, La Estrella de Neutronio. Una vasija que ha estado en muchas expediciones a lo largo de los milenios en busca de la comprensión de la tecnología Precursora en base de la Física Neuronal y yacimientos de Noctilith para hacer los Pilones Negros y otros usos que los Terranos podian darle en conta de los seres disformes.

Hypadia caminaba con su escolta de Skitarii que tenía sus rifles cinéticos en sus manos. El séquito se dirige hacia una zona en específico del enorme navío marciano mientras estaban en el desliespacio rumbo hacia una zona recién establecida de un Mundo Forja llamado como, Madrón VI.

Siendo uno de los primeros mundos forjas en ser establecido en esta nueva realidad y además que el Fabricador encargado de su dirección era un buen conocido suyo, por lo que fue hacia allí con su nave personal a ver el progreso de este en cuanto la construcción de la infraestructura con sus propios ojos biónicos.

Al poco tiempo llegar logró hasta donde quería llegar, la sala principal de seguridad del Ark Mechanicus que comandaba. A sus lados estaban dos androides guerreros especializados en protección para cuidar de esta sala en caso de un hipotético abordaje enemigo.

Poseía armas avanzadas desarrolladas por las mentes marcianas desde la Segunda Edad de Oro hace milenios instaladas en el casco de casi 200 km de largo. Manejaba armamento formidable como aceleradores de tormentas Volkite, múltiples cañones Nova a lo largo de su quilla, ojivas Rad-Fusión y muchas de sus funciones estaban automatizadas por IA, lo que permitía una operación efectiva con una tripulación mínima. 

Pasando por las medidas de seguridad de rutina, el ex Gran Magos entró en la sala científica donde yacían varios aparatos Xenos de razas encontrados en ruinas de arqueotecnología que tenía bajo su estudio personal.

Una de las tecnologías que tenían eran escarabajos Necrones recuperados de las ruinas de Mundos Tumbas destruidas por los Forerunner durante la Guerra Necron-Forerunner en la antigüedad. Por lo que los marcianos y otros mundos forjas se han dado a la tarea de estudiar la tecnología necrona pérdida de su realidad durante muchos milenios, haciendo avances a la tecnología humana en el proceso. Como por ejemplo las hojas solares de los Purificadores de la Guardia del Solsticio.

También posee una Cryptek Necrona dañada que sobrevivió de la guerra ancestral contra los precursores de la humanidad moderna, por lo que mantenía en un campo de estasis y medidas de seguridad para evitar que se despierte de su ensueño eterno al menos que lo decida, y actualmente no lo era.

Se trasladó hacia una sección de la sala protegida en donde estaban varios artefactos exhibidos en campos de tiempo para mantenerlos en el mejor estado posible. Una de sus brazos mecánicos se estiró para coger una de las piezas arqueotecnológicas del estante.

Abriendo se reveló un relicario hecho de un material de Precursor Star Roads. Uno de los pocos que había quedado desde la era de los Precursores, encontrado por Hypadia en un sitio en Path Ketona, uno de los pocos sitios donde aún quedaban artefactos tecnológicos Precursores intactos lejos de los disparos de los Halos.

Por lo que se lo quedó como recordatorio de lo que una vez los creadores de la humanidad habían vivido entre ellos como iguales y ahora solo tenían a Su Majestad siendo el único Precursor con vida siendo el único "Real" que hay en esta realidad según el conocimiento de los Terranos.

Yendo por eso idea que la protección de Lord Kamier fuera de suma importancia por la Guardia Custodio en el Arca Mayor, y manteniendo un refuerzo del primer lote de Acorazados Mundiales clase Patriarca en ser terminados con los constructores marcianos que sumaron sus defensas a un nivel Omega -Prime, el nivel más alto que hay en la escala terrana.

Activo el relicario, una imagen de luz intensa se deformó del proyector desde una pequeña lágrima del relicario y mostró la imagen de una familia Precursora. Entre un Precursor y una mujer humana antigua, notando esto que los Precursores tenían atracción por las mujeres antiguas hace eones de antigüedad.

Siendo eso un tema debatido entre los filósofos terranos y científicos sobre el origen de otras razas a raíz del entrelazamiento de ambas razas a lo largo de millas de años en la Vía Láctea y otras galaxias.

Hypadia se vio interrumpido de su contemplación por un ligero temblor de la nave cuando sintió que salió del desliespacio. Más temblores se hicieron sentir y eso lo hizo molestarse.

"Por la grandeza del Omnissiah. ¿Qué está sucediendo?" grito a través de su modulador de voz.

Uno de los Skiitari le habló de pronto:" Mi señor, estamos bajo ataque. Una flota desconocida ataca el mundo forja, las fuerzas de defensa están siendo superadas y llamadas de socorro desde la superficie llegan por montones".

Hypadia se quedó reflexiva. Otra carrera Xenos se atrevía a atacar a ellos los Terranos, los legítimos sucesores del Manto de Responsabilidad. Solo los ignorantes o atrevidos lo harían, por lo que dio la orden de que el grupo comenzara su represalia de venganza por esta osadía.

Yendo rápidamente al puente del buque del conocimiento mientras que su séquito lo escoltaba a la vez que su buque se tambaleaba a su alrededor. Llegando en unos pocos minutos por los sistemas de transporte interno de tranvías. 

Una vez en el puente de mando, noto por las representaciones de luz dura de las cámaras del casco que una flota de naves diferentes a las habituales que estaban acostumbrados a ver atacar las fuerzas del Mechanicus.

Los buques de guerra poseían cierta naturaleza estética que le recordaba a los buques Covenant en cierta medida. Pero no usaban plasma sino armamento de materia oscura y de pulso bastante efectivo contra los deflectores de las naves ligeras que defendían la órbita del mundo forja.

"Disparen las lanzas de taquiones de proa. Fijar objetivos en los Acorazados enemigos. Tesla, revisa en los esquemas de las naves conocidas de nuestra base de datos si hay alguna información de estos nuevos Xenos" ordenó Hypadia mientras se adentraba aún más en el puente de mando hacia la mesa tactica en medio de este.

Siguiendo el pedido, la tripulación comenzó sus trabajos mientras que la nave se tambaleaba por los múltiples impactos de armas de pulso enemigas que drenan lentamente los deflectores ultrapesados ​​del Arca Mechanicus.

Las baterías de lanzas se fijaron y chorros de energía fueron desatados desde la proa del buque hacia los acorazados enemigos de los Xenos desconocidos. Soportando unos pocos impactos antes de ceder y ser destruidos en bolas de fuego naranjas.

Estos solo eran lanzas pesadas, por lo que la IA cambió de objetivos mientras reorientaba algunos macrocañones Nova de patrón Marte para comenzar un bombardero en contra de las fuerzas enemigas.

En cambio Tesla, se dedicó a buscar la información necesaria de quienes eran los Xenos que se atrevían a atacar a las fuerzas terranas. Una transgresión de este tipo no quedará impune para nada, Su Majestad no lo dejaría pasar sin más.

Obteniendo una coincidencia de los datos dados por Gaia y las seis Ladies reales. La IA del Mechanicus se dio cuenta que se trataba de los Xenos conocidos como Drukhari o Eldar Oscuros. Secuestraban a humanos y otras razas para su deleite personal, evitando así que sus almas sean llevadas por Slaanesh o como "La que tiene sed" entre los Aeldari.

Por lo que Tesla le pasó la información a Hypadia y envió un informe detallado hasta lo sucedido de la batalla a la capital para que Gaia le mencionara de esto a Su Majestad. Siguió recopilando información por los sensores de Taquiones para saber más acerca de toda capacidad del nuevo enemigo que ha decidido provocar a los Terranos, y el cruel destino que les deparará una vez el Emperador se encontrará enterado de esto.

La Estrella de Neutronio avanza hacia la fuerza enemiga con paso renovado, siguiéndolo de cerca estaban sus escoltas acorazados de la clase Damocles y Havoc disparando sus armas de largo alcance hacia los buques Drukhari presentes acechando a la flotilla terrana.

También los cruceros de batalla se desplegaron guiando a los buques más pequeños en manadas de caza y destrucción para los más ágiles buques de guerra enemigos. Solo que al integrar psiónicos y física neuronal a la mezcla, sus buques eran tan ágiles como los retorcidos buques oscuros.

Así que el conteo de muertos del bando enemigo comenzó a aumentar cuando las fuerzas imperiales comenzaron a ganar terreno espacial en la batalla. Librando ojivas nucleares a gran escala para erradicar a los enemigos por completo sin dejar ningún rastro de ellos en los cielos del mundo forja.

Hypadia analizó los datos mientras pasaba por su cabeza gracias al cordón neuronal en su nuca que pasaba grandes cantidades de datos en nanosegundos, por lo que las cosas se ponen más difíciles cuando un portal webway se abría y mas buques enemigos salían de lo que parecía una enorme ciudad negra. La malicia y muchos otros sentimientos se podían sentir emanando de ella. Un sitio de energía vil como nunca se hubiera visto por ojos terranos.

Repugnancia fue lo que sintieron todos los Terran sin excepción al percibir la vil energía que sudaba desde ese portal antes de cerrarse por completo. Un bombardeo completo fue ordenado, no dejar a ningún sucio eldar oscuro con vida sería la penitencia de estos Xenos esclavistas.

Los Drukhari no pudieron soportar mucho más aún con la llegada de sus refuerzos desde Commorragh. Por lo que al poco tiempo fueron barridos desde la órbita y las fuerzas terranas desembarcaron para ocuparse de los oscuros que caminaban por el sagrado suelo del mundo forja marciano. Exterminarlos de una vez por todas, no dejar ni un superviviente con vida.

Comenzando así la guerra silenciosa entre ambos grupos en la galaxia.

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Kamier apagó su terminal cuando terminó de leer el reporte de Hypadia acerca de la confrontación en contra de Drukhari que asaltaron el Mundo Forja recién fundado, por lo que ahora tenían un nuevo enemigo agregado a la lista.

Luego de los Orcos Negros y los Demonios. Siendo que estaban en el orden del Exterminatus Extremis de cualquier avistamiento a primera vista por cualquier fuerza imperial terrana que se topase.

Solo el mero hecho de que estos Xenos hayan incursionado en colonias humanas y esclavizado a sus poblaciones para su deleite en su ciudad dentro de la Telaraña Aeldari, solo sirvió para que ordenara buscar cualquier puerta de esta misma en territorio Terrano y cerrar permanentemente sin posibilidad de negociación.

El uso del Exterminatus sería observado por la inquisición como debía hacerse, pero siendo que él mismo lo ordenó. Solo se aseguraron de que el daño no fuera tan intenso a mundos que podrían ser repoblados en el futuro para el uso humano por parte de los marcianos con su tecnología de terraformación avanzada.

Continuó revisando los informes de los Astartes de la defensa de las fronteras contra las fuerzas del Caos, la guerra ya entraba en su tercer año consecutivo y no parecía tener un fin pronto a la vista. Y Slaanesh no estaba de los mejores humores estados días, si los chirridos de rabia en la disformidad eran una indicación de su estado de ánimo.

De pronto su puerta es tocada y da un pase, abriéndose y dejando pasar a dentro al Señor de la Fortificación, Lord Helios Dorn, Pretoriano de Iwit, Progenitor de la VII Legión y hermano de armas de Kamier.

Su armadura dorada tenía estampadas las siglas GTE en el pectoral izquierdo de la servoarmadura. Por lo que le hizo preguntarse a Su Majestad de lo que quisiera su hermano aquí en su oficina personal.

"Hermano" saludo Helios caminando hacia el escritorio.

"Hermano" devolvió el saludo Kamier.

Helios sacó una terminal de su armadura y se la pasó a su hermano, quien la cogió y comenzó a leer su contenido consumo detalle. Pasando varios minutos leyendo minuciosamente la información dada por la Inquisición y pasada a Helios para su opinión, más exactamente fue dada por la Ordo Alieni que solicitó una aprobación de una investigación acerca de los Mundos Tumba Necrones cerca al Territorio Terran. Todos los que habían estado en mundos del GTE (que solo fueron unas docenas) fueron eliminados por medio de bombas de fusión extremadamente controladas para no alarmar a la población sobre la verdadera naturaleza de sus hogares.

Dejo la terminal encima de la mesa de roble y miro serio a su hermano Pretoriano." El hecho que la Inquisición solicitara esto significa que la situación de una guerra contra los Necrones podría ser plausible en el futuro. Y actualmente estamos consolidando nuestras fuerzas con gente de este universo y con más llegados de nuestra realidad de origen. Dime Helios,¿qué opinas de todo esto?

"Creo que la guerra contra los Necrones ahora sería una inutilidad, eliminar mundos tumbas sería necesario para socavar sus fuerzas mientras nos enfocamos en aumentar nuestro poderío militar en la galaxia, aseguramos alianzas con los otros poderes humanos y buscamos si otro de nuestros hermanos han llegado a la galaxia. Gaia comentó que una cierta República humana ha tenido cierto contacto con humanos avanzados, pero las descripciones son muy vagas para suponer algo concreto" admitió Helios sinceramente.

Ese aspecto de su hermano era algo que Kamier apreciaba, con la actual guerra en curso en contra del Caos. Y arrasando las Jaulas de Hierro exteriores, debía encontrar una forma para terminar rápidamente esta guerra de cualquier forma y fortalecer sus fuerzas tan rápido como fuese posible para la amenaza que era la civilización de primer nivel como lo eran los Necrones, por lo que solo los terranos podrían hacerles frente en igualdad de condiciones en la batalla.

Solamente los Replicantes en Ida han desafiado a los Terran como civilización de nivel 0 como lo eran ellos mismos, su tecnología era sumamente más avanzada que cualquier otra civilización en su universo, superando a los Forerunner y Alteran bien entrado el 100º Milenio gracias a la tecnología Tyren que logró ayudar a superar los desafíos del primer nivel. 

Una guerra entre los Terran y los Necrones sería catastrófica para la galaxia. Según sabían por la información del Dominio almacenada en el Hyperion II, la guerra en su realidad engullo la Vía Láctea por milenios, e innumerables sistemas fueron destruidos por los dos lados hasta terminar con la destrucción completa de los Necrones o al menos eso supusieron los Forerunner.

Hubo claros ejemplos de Necrones que lograron escapar de la galaxia, lejos en el vasto vacío negro del universo para reconstruir su raza. Hasta el día de hoy nunca se supo de qué pasó con ellos por parte de los Terran.

Con la sangre Precursora corriendo por sus venas, los Terran eran los responsables de proteger la vida por el Manto. Por lo que lo que hacían los Necrones era algo que no dejarían pasar y la ira de los legítimos reclamadores y gobernadores del universo sería desatada por sus manos.

"Gaia- la IA se manifestó en medio de la sala, esperando órdenes- la Inquisición tiene luz verde para el Exterminatus de los Mundos Tumbas alrededor del espacio Terrano. El uso de los Torpedos Ciclónicos está autorizado, pero no quiero que nadie sepa de esto , asegurate de ello. No podemos dejar que la existencia de los Necrones se ha conocido a la galaxia en general, al menos por el momento", ordenó Kamier friamente, pasando a su estado de Comandante Supremo.

"Les avisaré enseguida" Gaia dijo y se esfumó tan rápido como apareció.

Kamier cambió de estado de ánimo y miró a su hermano. Tenerlo aquí con él había resultado muy tranquilizador con su presencia y su Legión ayudando a su Segundo Legado en luchar contra el Caos que martillaba en contra de sus fronteras estos últimos años en busca de las Emperatrices Terranas.

Hablando de ellas, las seis fueron movidas al Arca por razones de seguridad, y confinadas al Palacio con escoltas de Custodios por doquier para su protección y refuerzos en forma de Templarios que no estaban desplegados en la galaxia o en misiones secretas para el Imperio. Por lo que estaban muy seguras dentro del Palacio de Camelot hasta que la guerra terminara algún día.

Claro que no estaban muy contentos que digamos, pero comprendieron que el Arca con Kamier era el mejor sitio donde poder salvarse en contra de los sirvientes del Caos, por lo que solo pudieron guardarse sus frustraciones para sí mismas y pasar el tiempo en lo que mejor. Podrían, literalmente tenían todos los recursos del GTE a su disposición como novias y prometidas de Su Majestad por lo que solo pudieron entretenerse como mejor les pareciera.

"Si no hay nada más me retiró hermano. Debo supervisar la siguiente ola de mundos fortaleza" se disculpó Helios y se fue de la oficina, dejando a Kamier solo una vez más mientras que seguía con su papeleo.

...

Ammu miró con horror como todo a su alrededor se desmoronaba en fuego nuclear, lanzas de plasma y aceleradores tormenta Volkite por igual. Las naves de la Flota Natal de los Sciqal fueron devastadas por las naves de la Armada Terrana y los Grupos de Batalla Astartes de la VII y XI Legiones por igual.

Los enormes Acorazados de los Sciqal apenas y podían ser una amenaza para tal tipo de navíos enormes de docenas de kilómetros de largo, y no hablar del gigantesco navío de 550 km que lideraba esta fuerza pequeña pero letal para eliminarlos de la existencia.

Fue arrepentido. Todo era normal cuando las primeras señales llegaron. Interrupciones de comunicaciones con puestos y colonias exteriores, luego vino el cese de más y más mundos al cabo de los días hasta que ocurrió. La fuerza de ataque Terran llegó a Sciqal y comenzó a atacar las defensas extensas y avanzadas de la periferia del mundo natal de su raza.

Disparos de iones, fusión y cañones de riel fueron destacados en contra de las fuerzas enemigas, solo para que los escudos de energía apenas ondularan ante el enorme bombardeo sostenido. Solamente el enorme buque de medio millar de longitud mientras que disparaba sus armas terciarias, sin necesidad de disparar más de sus armas a la suma de eliminar tan insignificante fuerza de defensa.

Eran mosquitos molestando a un gigante megalodón, por lo que solo unas pocas rafagas de los láseres gamma serían más que suficientes para saturar sus débiles escudos de baja categoría, según los estándares imperiales actuales.

El Eternal Crusade fue desplegado como uno de los dos Mega Acorazados Estelares que los Terran poseían, por lo que por orden de Kamier fue designado para acabar con las fuerzas de la raza Sciqal por completo, su osadia en atacar a la actual Consejera y Regente Terran era imperdonable, por lo que los Templarios Negros siguieron a su líder Sigismund para lidiar con estos Xenos con todo el poder de los Terranos en nombre de Su Majestad que los bendecia en esta batalla.

Segismundo en persona comandaba el enorme buque de guerra Juggernaut desde su puente de mando y ordenaba la destrucción de toda la infraestructura orbital como estaciones espaciales, hábitats espaciales y satélites de comunicaciones, así como de las extensas defensas de la Flota Natal que con cada minuto que Pasaba era reducido cada vez más a un estado deplorable, uno de que nunca se recuperarán si los Terranos tenían algo que decir al respecto.

Por lo que la explosión de otro Acorazado Sciqal del tipo pesado, hizo a Ammu darse cuenta de que no habría ninguna salvación para su raza al haber provocado a los Terran. Su avanzada tecnología era muy superior a la suya por decenas de millas de años de comprensión del Universo, por lo que sus esperanzas sólo eran meras ilusiones que caían lentamente ante el abismo que los engullía cada vez más rápido.

Los disparos cinéticos apenas hacen algo en los deflectores de materia oscura ultrapesados, por lo que el Eternal Crusade disparó una andada de lanza medianas que atravesaron las naves Xenos cercanas a su rango de ataque de millones de kilómetros y estallaron en bolas de fuego.

Ammu solo ordenó seguir disparando sus armas de iones, partículas, fusión y cañones de riel al enorme acorazado más cercano a su posición, que era un Acorazado clase Havoc. Por lo que solo pudo mirar impotente cómo sus compañeros marineros luchaban en la patética defensa de su mundo natal y morir por el sueño de un imperio muerto antes que naciera oficialmente… Siendo que las fuerzas Sciqal ya estaban perdidas con sus números cayendo a menos de cien y las fuerzas Terranas aún intactas desde su llegada.

Acorralando lentamente a las fuerzas Xenos en sus últimos momentos, Segismundo ordenó preparar el bombardeo del Exterminatus. Naves se posicionan en órbita alta del mundo natal Xeno, alistando sus armas atómicas para desaparecer por completo a la raza Xeno de la faz de la galaxia, siendo solo una raza al pie de página de los Terran.

 Los cañones de plasma estaban también siendo alistados con las MK IX que surgen de los tubos de lanzamiento de misiles. Maximizar la destrucción de todos los asentamientos y dejar este mundo como un recordatorio de que con la humanidad no había que jugar, por lo que Sigismund dio una transmisión abierta a los habitantes de este mundo como recordatorio de su breve y miserable existencia en el Universo:

"A todos los Sciqal: Soy Sigismund, Paladín de Su Majestad el Emperador de la Humanidad,. Por su voluntad, y los crímenes de atacar a humanos, experimentación y otros más. Son condenados a Exterminatus Extremis, por lo tal su miserable existencia llegará a su fin. ¡Por Terra en Excélsior!".

Con aquellas palabras, las naves Terranas desataron el apocalipsis sobre aquella raza que se atrevió a intimidar a la humanidad y ahora pagaron el precio con su extinción completa.

Ojivas MK IX son lanzadas desde sus tubos de misiles y los cañones de plasma disparan ráfagas concentradas de calor y cinética hacia los asentamientos más alejados, así como a las ciudades submarinas en los mares.

Nubes de hongos se pueden ver estallando simultáneamente desde la órbita. Así como restos de quema de tierra por las lanzas de plasma que redujeron todo a su paso a suelo vidrioso todo asentamiento y edificación que hubiera.

Las plantas se quemaron. Los océanos se evaporan y la atmósfera respirable desaparece por completo en un invierno nuclear. Dejando nada más que un mundo apocalíptico de lo que una vez fue una raza próspera y arrogante en busca de conquistar las estrellas.

Y ahora era un recordatorio de lo que ocurriría a aquellos que se enfrentarán a los Terranos como los legítimos Gobernantes del Universo mismo.

Los Reclamadores no soportan a aquellos que se opongan a su reclamo legítimo como los herederos de los Precursores, muchas razas lo habían hecho en el pasado y habían pagado el precio con su purga a manos de los segundos hijos de Terra.

Añadiendo otra a la larga lista de Xenos que ya habían perecido a sus manos. Y más lo seguirán con el paso del tiempo.

….

Los Superportaaviones Astartes siguieron produciendo más y más ciclos de clones para la guerra contra las fuerzas del Caos que arrasaban contra los mundos Terran. Con incontables personas perdidas en esta guerra, los Astartes fueron más necesarios que nunca a la hora de lidiar con las cohortes demoníacas que salían de la disformidad para converger en contra de los Reclamadores.

Incluso fuerzas de avalonienses con armaduras de exterminador y Purificadores han sido mandados al frente de combate para lidiar con las fuerzas demoníacas y otras razas Xenos corrompidas por las energías de los Cuatro, por lo que la Armada Dorada fue desplegada por orden de su misma Majestad para lidiar con las naves corrompidas que poseen tecnología avanzada y tácticas que necesitaron de los Templarios para lidiar contra ellos.

Almirantes clon (y el Almirante Alexander) se encargaron de lidiar con las fuerzas enemigas en el vacío mientras que la guerra llegaba a un punto muerto. Sin ningún bando que obtuviera una ventaja en contra del otro por mucho tiempo.

Muchos planetas fueron destinados a la Exterminación por naves Astartes, Imperiales o Inquisitoriales por igual para evitar la propagación de las energías caóticas. Siendo lo más minuciosos posibles en lograr ese objetivo en concreto por orden de Kamier mismo.

Mientras el GTE se enfrentaba a las olas del Caos que amenazaban sus fronteras y resisten apenas su embate. Al otro lado de la galaxia, cierto trío de sobrehumanos semidioses descendientes de los Precursores interceptaron una transmisión proveniente de un mundo que tenía mucha importancia para ellos y muchos otros.

…..

El mundo en el que se asentaron los tres Pretorianos fue nombrado Vindicación. Con las defensas de tres Juggernaut y grupos de batallas Astartes que defendia al planeta y el sistema Asylum, llamado así por Marcus, siendo que los tres gobernaron como un Tributario a todos los civiles presentes en Vindication que se contaban por varios millones presentes con sangre Terrana y una minoría de migrantes de la República cercana a su territorio.

Con el segundo mundo del sistema bautizado como Alejandría, en honor a la antigua ciudad de la Era de Terra. Por lo que hay se guarda conocimiento de parte de los Marcianos y se convierte en un Mundo Forja para ser el exportador de material necesario de parte los Terranos para sus futuras campañas.

En la superficie de Vindicación había asentamientos en constante crecimiento, con más y más personas que migran para buscar la seguridad necesaria bajo el ala de los Terran en este mundo. Los tres Mega Star Dreadnoughts en órbita denotaban la protección que los Pretorianos podían ofrecer a las personas de la República.

Un cierto edificio grande donde fue construido para ser vivienda de los Pretorianos en este. Desde donde gobernaban y transmitían sus órdenes para con sus hijos, su Segundo Legado respectivo en este pequeño Imperio propio hasta que lograran saber que hacer más en el futuro.

Una transmisión era reproducida en la sala principal donde los Tres Pretorianos estaban reunidos, escuchando atentamente aquella transmisión y viendo desde donde se originó, gracias a las IAs de los tres Juggernaut que lograron con suma facilidad debo agregar, calcular el origen preciso de esta señal enviada por la galaxia.

Terra.

"Vuelve a reproducirlo" ordenó Marcus a la asistente de IA.

"Aquí el Almirante… *interferencia* …extrañas formas de vida han comenzando su asalto…*interferencia* …hemos perdido la mitad de la flota…*interferencia*...han comenzado a asaltar el planeta…* interferencia*... millones han muerto, no tenemos contacto con las colonias…".

"Eso es todo Lord Marcus. Ninguna señal del Sistema Solar ha sido detectada luego de esta transmisión, por lo que es fácil suponer lo que ha sucedido y quien es el atacante de semejante ataque a la cuna de la humanidad", dijo la IA.

"Concuerdo con ella hermano. Solo los engendros del Caos podrían hacer tal locura para hacer algo como esto. Digo que vayamos Sol y retomemos Terra de sus manos" sugirió Tiberius con convicción pensando en todas las personas que han sufrido por la osadía de los seres se deforma.

"Debo estar de acuerdo hermano. Aunque no sea nuestra Terra que hemos jurado lealtad y defendido de amenazas Traidoras y Xenos, sigue siendo la cuna de la humanidad incluso en esta realidad. Yo digo que le debemos al menos defenderla por lo que representa" concordó el Ángel de Baal mirando a su hermano macraggniano.

Marcus meditó sobre el asunto por unos segundos antes de suspirar y mirar a sus dos hermanos. Combinados tenían una fuerza a tener en cuenta en su realidad, y más ahora que los clones estaban empezando a reponer sus números iniciales para las Legiones. Por lo que dar un salvavidas a Terra no era imposible para alguno de ellos.

"Esta bien, ambos tienen razón. Salvar Terra será importante para el futuro de la galaxia, eso lo puedo presentar. ¿Pero qué fuerzas llevaremos? No podemos dejar Asylum sin defensa alguna y sin algún líder presente para liderar a la gente sin nosotros" dijo Guilliman en voz alta.

Los tres irían, de eso no había ninguna duda. Pero alguien debía ser el líder temporal hasta su regreso seguro de Terra. Por lo que la IA dio varios nombres de oficiales militares que tenían a su disposición y tenían amplia experiencia en el manejo de gobernar y liderar.

Por qué el nombre de Franklin Cheek, uno de los generales que había sido hijo de una familia de un gobernador planetario ya muerto hace milenios. Siendo la mejor opción en cuanto a portar el cargo de Regente en la ausencia de los tres Pretorianos.

Una fuerza de las Tres Legiones se estaba alistando para partir hacia Terra con numerosos efectivos a la vista,

Millares de divisiones de clones se alistaron para partir hacia Sol, subiendo a sus naves y preparándose para la guerra. Aquel propósito por que fueron creados en primer lugar.

Guilliman dejó el mando a Franklin en una ceremonia pública donde lo coronaba como Regente de Asylum y le deja a cargo de todos los asuntos militares y civiles hasta su regreso de salvaguardar Terra.

El hombre juró defender el sistema hasta su último aliento, protegiendo a los civiles de cualquier amenaza ya sea interna o externa. Por lo que con eso zanjado, los tres Pretorianos partieron con sus naves hacia Terra a toda velocidad en su ayuda desesperadamente.

Solo que no fueron los únicos en recibir la llamada de ayuda de Terra.

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Desde el puente de una de las Arcas de la Armada Dorada, Kamier miraba la matriz celestial donde Gaia reproducía el mismo mensaje dañado desde la cuna de la humanidad. Por lo que a su alrededor en hologramas estaban el resto del consejo Terran que dirigía el GTE en su conjunto, por lo que todos los Terranos tienen expresiones sombrías al oír aquel mensaje desesperado de ayuda.

"Debemos ayudar a la Tierra. La cuna de la humanidad en manos del Caos no es algo que nos podamos permitir. Sus consecuencias serán sumamente catastróficas para la galaxia", dijo Gabriel a los demás.

Kamier solo se acercó de acuerdo con su abuela. Tener la cuna de la humanidad bajo manos enemigas era algo que nunca permitirían, preferirían cristalizarla antes de dejarla en sus viles manos, esa sería una última opción.

Ahora poseía en sus manos el mando de las fuerzas Terranas en esta realidad al completo bajo su ala. Numerosas fuerzas de la Armada, la Inquisición, el Mechanicus, y el Ejército llegaron y se unieron al creciente Gran Imperio Terrano bajo su mando como Imperator Regis, siendo que los recursos aumentaron exponencialmente para sostener las crecientes fuerzas del imperio mientras retenían al Caos a raya en sus fronteras.

Siendo que como Señor de la Humanidad su dirigencia de guiarla recae sobre sus hombros, como el Canciller lo hizo en su realidad, a él le toca en esta. Mientras los demás se sumergen en una discusión sobre qué rumbo tomar, él ya tomó su elección.

"Artanis, moviliza a 8 de las Arcas para partir. Helios, quiero a la Falange lista para la batalla. Gaia, contacta al Juggernaut que aún esta disponible y ordenarle al Comodoro que se aliste. Quiero a las flotas Astartes designadas para partir a Terra cuanto antes. Terra no caerá si tengo algo que decir al respecto" ordenó seriamente Kamier a sus compañeros.

Quienes comenzaron a emitir los pedidos necesarios por la red de batalla a los demás. Siendo que las tres mujeres Akimara lo miraron pero no dijeron nada sobre el asunto, siendo que él era el Líder absoluto de todos los Terranos ahora y por lo tal, su palabra era ley. Desobedecer sería visto como una renuencia a su gobierno como Regente Imperial.

Por lo que solo siguió las instrucciones que le dieron a cada una. Alfia actuaría como Regente Terrana en la ausencia de su amado hijo, Mavis sería la encargada de liderar la guerra contra el Caos y Gabriel sería puesta al mando de la purga de los mundos infestados con los Caballeros de Plata y la Inquisición como ayuda desde el Espíritu de Avalon como buque de mando y coordinación de tal obra a gran escala.

Lord Creed se encargaría de asegurar las fronteras Terranas y reforzar a sus aliados en caso de que el Caos intentese algo en contra de ellos. Cosa que podría ser ahora poco probable, y además de asegurarse de la seguridad de las seis futuras Emperatrices en el Arca. No permitiéndoles salir bajo ninguna circunstancia. Los esbirros de Slaanesh las buscaban, y hasta que el Caos no fuese derrotado una vez la red de pilones estuviese lista, no se les permitirá irse del Arca.

Además de que todos tenían los lujos de la sociedad Terrana como compensación, algo que no las tranquilizaba del todo pero era la forma de Kamier de compensarlas mientras él tenía que lidiar con las fuerzas del Caos y ahora con la ayuda a Terra en esta hora de necesidad del mundo natal de su raza.

Por lo que aceptaron que fuese, solo que se mantuviera a salvo, cosa que prometió hacer cuanto fuera posible para alguien de su posición como Emperador de la Humanidad, por lo que todo estuvo listo partieron.

Una gran Flota de Batalla se reunio con naves Astartes, Mechanicus, Armada, Armada Dorada por igual. Además de algunas millas de millones de Astartes, millones de Marines e Infantería así como Skiitari, además de Caballeros de Plata en forma de varios escuadrones de élite y miembros de la Guardia Custode con la Esperanza sumándose a esta campaña.

Siendo una gran flota solo para ayudar a Terra. Al frente estaban la Falange, el Calamity y las 8 Arcas Terran de la Armada Dorada de Avalon presentes.

Kamier vio desde el puente de mando la representación holográfica en la matriz celestial en luz dura. Sacándole una sonrisa al ver tal fuerza reunida para ayudar a la Tierra de esta realidad.

Un mensaje de Gaia le indica que Segismundo ha cambiado de curso y su fuerza se reuniría con ellos en Sol para la batalla venidera de liberación. Por lo que al menos los dos Juggernauts estarían disponibles para la batalla.

Dio la orden y la flota entró cada una en sus portales respectivos con rumbo a la cuna de la humanidad que estaba bajo el ataque de uno de los Dioses menores del Caos y sus secuaces.

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Desde el puente de su buque insignia, Narud miraba como las defensas de la Tierra caían antes sus naves humanas y xenos por igual con sus armas de largo alcance como los cañones Yamato V.

Su amo y señor Amon quería demostrar su superioridad a los demás Dioses del Caos reclamando la Tierra para sí mismo. Ya el resto de mundos colonias humanas han estado cayendo bajo su dominio en los últimos meses, por lo que subyugar la Tierra era el último paso a seguir en esta campaña.

Amon consolidaba su poder en la disformidad como aspirante al Quinto puesto del Panteón Ruinoso. Pero la luz del Anatema Precursor chocaba contra su reino mediante sus representaciones de Avatares Benevolentes que purificaban la disformidad como aquella entidad que reside en ese reino restante de aquellos que dieron nacimiento a algunos de los más mortíferos Avatares actuales desde su caída.

Por lo que tomar la Tierra como su sede de poder sería de suma importancia para reunir tanto poder para ascender como el Rey Oscuro de una vez por todas. Los demás Avatares en la Disformidad ya estaban hablando acerca del levantamiento del quinto Avatar clase Leviathan en la Disformidad.

Cosa que la Inquisición ya tenía muy presente, por lo que avisaron a Su Majestad cuanto antes. Y quien siendo consciente de este hecho se propuso a evitar este acto de parte de Amón para convertirse en un ser más poderoso que amenazara la estabilidad e inundara el plano Material de energía empíricas, por lo que los Terranos se propusieron a detenerlo a como dé lugar sin importar el costo. Sabiendo bien lo que podría pasar si no era detenido a como dé lugar cuanto antes.

Miles de personas eran sacrificadas día a día en el Templo de Jerusalén de la Tierra para este propósito, y donde Amon absorbe la energía para su eventual ascensión al Quinto puesto en solo poco tiempo.

Pero sentí que la luz del Anatema se acercaba a la Tierra desde la Disformidad, por lo que se propuso a evitarlo. Haciendo que Narud ordenara una defensa del sistema mientras que el resto de sus lacayos venían del resto de la galaxia para detener a los Terran de evitar su plan.

Solo que eran dos fuerzas y no solo una, la que venía para evitar su cometido. Cinco Guardianes de la humanidad y sus hijos venían a detenerlo.

Los cinco hermanos se reunirán una vez más. Que la Batalla por Terra de inicio.

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Lejos en el plano del Inmaterium en bajo gótico, un reino disforme que alguna vez fue algo más se presentó como solamente ruinas pero había algo más. Una fuerte energía verde esmeralda que se representaba en un enorme jardín de hermosa belleza natural.

Asumiendo lentamente los restos en algo más cercano a lo que alguna vez fue en verdad en el lejano pasado. Mientras repelia la energía disforme de la corrupción hecha por millones de años de muerte provocada por ellos.

En un árbol gigantesco en el centro de todo ese reino inmaterial, había una sola entidad sentada en un trono de madera y energía psiónica. Su belleza era en verdad encantadora para cualquier hombre que la viese en verdad, su ropa era sencilla y su expresión era de reflexión mientras sus ojos esmeraldas miraban a la nada.

Sonrió al sentir a sus descendientes cerca a ella siendo protegidas. 

Ella era Isha, Diosa de la Vida de los antiguos Aeldari y ahora única Diosa que quedó luego de la matanza de su pueblo y disolución del Panteón por Slaanesh en su nacimiento hace muchos eones atrás.

"Creo que es hora de que haga una visita. ¿No crees?"  mirando a una cierta persona suspendida en una burbuja de poder psiónico, que parecía estar en coma y tenía heridas resaltadas por la corrupción del Caos.

Suspiro de tristeza al ver que su poder sanaba tan bien como podía a aquella mujer que había llegado aquí desde otra realidad. Y quedó sumida en este largo sueño, siendo la única compañía que ha tenido desde el final de su raza.

"Ahora veamos como es este Precursor que llegó" dijo para sí mismo mirando hacia la luz en la Disformidad que era cada vez más brillante con cada alma que se le unía y la fe de la humanidad lo empoderó con cada día que pasaba.

Solo esperaba poder llegar a un acuerdo con aquel que su hija había profetizado que eliminaría a los Cuatro y devolverá el equilibrio a la Disformidad de una vez por todas.