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Después de convencer con éxito a Xiang Wuying para que uniera fuerzas, una mezcla de nervios y emoción me llenó. A pesar de sus retorcidos procesos de pensamiento, parecía haber algo parecido a la justicia que impulsaba sus decisiones.Con un gesto de mi mano, invoqué un portal que conducía al mundo de Tearmoon. Habían pasado muchas cosas desde que me comprometí con Nanako y Akari, lamentando las consecuencias que mi lujuria había lastimado a Nanako.Por eso no la volví a tocar en estos días, pero sabía que la razón por la cual el Emperador dijo eso era para que no hubiera marcha atrás en la decision tomada cuando el acto se consumara.Al cruzar la puerta resplandeciente, prometí no repetir esos errores y, en cambio, centrarme en construir una asociación sólida con Xiang Wuying. Nuestro viaje a través del portal inició un nuevo capítulo en nuestras vidas, marcado por la conquista, el descubrimiento y la redención potencial.Al pasar por el portal, observé a Xiang Wuying que mostraba expresiones de asombro mientras contemplaba la pintoresca escena que teníamos ante nosotros. Se quedó quieta, contemplando el majestuoso castillo que pertenecía a la familia real, maravillándose de la grandeza de este nuevo mundo. Por un momento, me recordó a alguien que acaba de estar expuesto a posibilidades ilimitadas, sin saber por dónde empezar, pero rebosante de curiosidad y ambición.Mi corazón se aceleró de emoción ante la perspectiva de mostrarle los alrededores, descubriendo los tesoros y secretos que se esconden dentro de los límites de Tearmoon. Y tal vez, solo tal vez, en el camino, encontraremos la redención por nuestras transgresiones pasadas y forjaremos un legado digno de los libros de historia.Respirando hondo, compartí mi historia con Xiang Wuying: cómo me comprometí con la princesa Nanako Griterra del Imperio de Griterra y Akari Nishina, hija del duque. Para mi sorpresa, parecía conmocionada por las revelaciones. Mientras miraba su pecho plano, una mirada de decepción cruzó su rostro.Estaba claro que sus expectativas con respecto a nuestros atributos físicos diferían mucho de la realidad.Sintiendo una extraña mezcla de empatía y diversión, puse una mano reconfortante sobre su hombro. —No dejes que te moleste —le aseguré con delicadeza—. "Nuestra asociación no se define solo por nuestros atributos físicos. Tenemos cerebro, habilidad y ahora, la oportunidad de conquistar este mundo uno al lado del otro. Concentrémonos en alcanzar la grandeza en lugar de pensar en lo que ninguno de nosotros puede cambiar"Al entrar en el bosque, Xiang Wuying parecía más feliz. Mientras caminábamos, le conté mi encuentro con el Tigre Negro y le expliqué cómo había mejorado mis armas de fuego en función de su conocimiento. Le entregué una de estas armas mejoradas, contándole sobre los esfuerzos secretos del Emperador para crear más armas de este tipo para nosotros. A su vez, había mantenido la mayoría de ellos escondidos, y actualmente poseía más de cien en mi colección.Sus ojos se iluminaron de interés mientras inspeccionaba el arma, apreciando el poder que tenía. El potencial de dominar a nuestros enemigos con una tecnología tan avanzada solo alimentó su deseo de seguir trabajando para mejorar nuestras capacidades. "Con estas armas", declaró con fiereza, "Ningún enemigo se levantará contra nosotros"Le dije a Xiang Wuying que, si bien estas armas eran efectivas contra los humanos, no eran tan potentes contra los monstruos. Continué describiendo la existencia de monstruos inspirados en la ciencia ficción como dragones y espíritus. La idea de enfrentarse a criaturas tan míticas no hizo más que aumentar su entusiasmo y su determinación de reforzar aún más nuestras defensas.A medida que continuábamos por el bosque, discutiendo estrategias y tácticas para combatir a estos diversos enemigos, se hizo evidente que nuestra asociación se estaba convirtiendo en algo verdaderamente formidable. Nuestra experiencia combinada en magia y tecnología prometía una victoria tras otra sin precedentes, forjando un camino de destrucción para cualquiera que fuera lo suficientemente tonto como para oponerse a nosotros.Xiang Wuying revelo que tenía muchos talentos, por esa razón también era una científica destacada a tan temprana edad, sinceramente me sorprendió.Mientras seguíamos caminando por el bosque, nos topamos con una vista intrigante: un carruaje lujosamente decorado rodeado de hombres vestidos con armaduras extravagantes. El carruaje llevaba una cresta que indicaba su inmenso estatus, lo que indicaba que pertenecía a alguien bastante poderoso. Sin dudarlo, el vehículo giró hacia la capital del Imperio Griterra.Despertada la curiosidad, le sugerí a Xiang Wuying que lo siguiéramos discretamente desde la distancia. Ella asintió con la cabeza, ansiosa por aprender más sobre esta misteriosa persona o grupo dentro del lujoso carruaje. Cautelosamente, los seguíamos, manteniéndonos ocultos entre el follaje mientras manteníamos una distancia segura.A medida que nos acercábamos a la capital, nuestra curiosidad se intensificó, preguntándonos quién podría merecer suficiente protección como para justificar un séquito tan opulento.Continuando con nuestra cautelosa persecución, seguimos la elegante procesión hasta que nos condujo a la ciudad capital. A medida que nos acercábamos a las residencias nobles, surgió una figura pomposa, claramente el hijo de un duque, con cabello castaño rojizo y una mirada ensimismada.En el momento en que Xiang Wuying lo vio, se erizó visiblemente, sintiendo claramente animosidad hacia él, no lo conoció, pero su instinto le gritaba que era peligroso y una escoria. Comenzó a considerar tomar el asunto en sus propias manos, insinuando la posibilidad de matarlo sin dudarlo. Levanté una ceja sorprendida, curiosa por ver cómo planeaba manejar esta situación dada nuestra reciente discusión sobre centrarnos en la conquista en lugar de las venganzas personales.Pero por ahora, decidí permanecer en silencio y observar sus acciones de cerca, listo para intervenir si era necesario.Dada la fuerte seguridad que rodeaba al hijo de un duque, rápidamente nos dimos cuenta de que era imposible acercarnos a él directamente. Sin embargo, a Fang Zheng se le ocurrió un plan astuto: deberíamos dirigirnos rápidamente al palacio imperial y presentar a Xiang Wuying como mi guardaespaldas personal frente al emperador Hiroyoshi Griterra. Esto le otorgaría una presencia legítima en la corte y ofrecería una ventaja inesperada, de esa manera tendrá el estatus para acercarse sin sospechas al tipo.Asintiendo con la cabeza, Xiang Wuying siguió mi ejemplo, con sus agudos sentidos atentos a cualquier señal de peligro mientras navegábamos por las bulliciosas calles de la capital. Finalmente, llegamos a las impresionantes puertas del palacio imperial, presentándonos a los guardias apostados en el exterior.Los guardias nos permitieron la entrada, y me presenté ante el emperador Hiroyoshi Griterra, inclinándome respetuosamente. Me saludó calurosamente, reconociendo los acontecimientos que me habían traído a su corte una vez más. Después de intercambiar cumplidos, presenté a Xiang Wuying como mi guardaespaldas personal, explicando sus habilidades excepcionales y por qué era esencial para mi seguridad durante mi estadía en el imperio.Su Majestad pareció complacido con mi decisión y le concedió el reconocimiento oficial, permitiéndole acompañarme durante las audiencias y otras reuniones importantes.Después de describir la cresta del carruaje y la pomposa llegada de Hideki Byacuya, el emperador Hiroyoshi Griterra pensó por un momento antes de responder. "Ese joven es Hideki Byacuya, el hijo de un duque muy respetado. Si bien tiene una influencia considerable debido a su linaje, su comportamiento arrogante y su tendencia a causar problemas entre los demás son preocupaciones para la corte". Las palabras del emperador revelaron tanto la amenaza potencial que representaba Hideki como la limitada autoridad que la familia real podía ejercer sobre nobles tan prominentes.Pero no es como si no pudiera tratarlo.