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Entre Dioses y Titanes

Desde el día que nació fue destinado a ser alguien extraordinario. Recibió un legado de sangre milenario que lo llevará a la cima. Pero todo poder tiene un precio, ¿estará dispuesto a pagarlo? ¿La cima realmente lo vale? Los mortales adoran a los dioses. Los dioses reveran a los Titanes. Y los Titanes obedecen a los creadores. Yo? Estoy por encima de ellos. En toda historia hay dos caras de una moneda; cuál tu crees que verás?

Xerstoren · Fantasy
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3 Chs

2- Dorado

Después de los sucesos de esa noche Sandor y Elena permanecieron inconscientes durante nueve meses, durante estos nueve meses la barriga de Elena creció mes a mes. Tywin preocupado por ambos los cuidó día y noche, alimentarlos fue realmente difícil ya que ellos no podían hacerlo debían y recurrir a comidas fáciles de consumir. Pero por extraño que parezca, la pareja no perdió peso y tampoco la complexión de ambos cambió. Dejando de lado que Sandor tenía un pelo azul eléctrico y que el cuerpo de Elena parecía estar habitado por un rayo. Estaban completamente sanos y el embarazo de Elena iba excelente.

Este suceso extraño fue estudiado por los médicos de la ciudad de Telwim, donde la familia Von Valheimn vivía. Varios rumores circularon desde aquella noche. Desde el coito más explosivo desde el origen de los tiempos, hasta que los Von Valheimn fueron maldecidos por los cielos. Claramente Tywin hizo oído sordos a todos esos rumores ridículos dedicando día y noche a su hijo y cuñada.

Lo que el no sabía es que desde esa noche su familia ha sido observada en detalle por la familia imperial, el evento aquella noche fue visto por todo el continente de Zaroth, aunque el detalle del haz de luz y la consiguiente explosión de rayos sólo la pudieron observar aquellos en la ciudad de Telwim. Pero aún así los rumores llegaron a oídos del emperador de Zagrev, Carlomagno II. Tomando este evento como un presagio. Dándole una gran relevancia.

Los días pasaron y finalmente llegó el día del parto, este día fue otro suceso extraño ya que la ciudad de Telwim se llenó de una luz dorada, como si un Buda cantara sus mantras.

Tywin estuvo en la habitación junto a la matrona, esperando el nacimiento de su nieto y esperando al mismo tiempo una mejoría en la pareja. Sin embargo lo que recibió fue que al momento de nacer su nieto, éste estaba bañado en una luz dorada, sus ojos y pelos eran dorados, y su piel era de un blanco jade, el recién nacido tampoco lloró.

Al mismo tiempo, como si despertaran de una pesadilla Sandor y Elena saltaron de sus respectivas camas gritando.

Los gritos parecieron causar algo en aquel recién nacido que logró hacer que riera.

"Mi señor desde mi primer parto hasta el anterior, es la primera vez que veo a un recién nacido nacer con un color dorado, y más aún que lo primero que haga es reír y no llorar" La matrona shockeada le dijo a Tywin, ella ya sabía que desde aquella noche cosas extrañas sucedieron en esta familia, pero esto superó todo aquello con creces.

Tywin aún estaba aún más perplejo, la situación lo superó por completo

'¿Qué se supone que debo hacer? ¿¡QUÉ DEMONIOS SUCEDE!?' pensó Tywin hacia si mismo, luego volvió a la realidad al escuchar el grito de la pareja, rápidamente se acercó a Sandor.

"Sandor, dime, ¿estas bien? ¿Tu tampoco te bañaras en una luz dorada ni explotaras verdad?" Dijo Tywin preocupado, al mismo tiempo miro a su cuñada y dijo

"Elena, ¿tu como te sientes? Cuida de no hacer movimientos bruscos,ah y felicitaciones por ser madre, ¿que nombre le pondrás?"

Elena se quedó quieta mirando a la matrona, luego gritó de dolor

"AAAAAH~~~ duueele demasiado, ¿moriré? Y QUE DEMONIOS QUIERES DECIR CON FELICITACIONES PADRE!?"

Mientras que al mismo tiempo Sandor desconcertado dijo.

"Padre, ¿que ha pasado? ¿que pasó con el rayo?"

Tywin sin saber a quién responder primero dijo:

" Por favor calmense, primero, ambos estan bien? Se qué esto es muy extraño pero han estado inconscientes durante nueve meses, ¿saben? ha sido muy difícil para mi cuidar de ambos, especialmente de ti Elena, quiero decir, durante tu embarazo estabas inconsciente y tu cuerpo parecía poseído por el espíritu de un rayo, admito que pensé en algún momento que no saldría un humano si no más bien alguna especie de avatar del trueno, pero lo único que ha salido es un niño, un niño dorado, no se que demonios haya sucedido esa noche en su habitación pero por favor, no lo vuelvan a hacer, siento que he envejecido varios años y mi corazón no podrá soportarlo" Tywin exclamó mientras lágrimas estaban en sus ojos

"por cierto Elena, se qué no has vivido tu maternidad pero este pequeño es tu hijo, miralo, desde que ambos despertaron se ha estado riendo, ¿es una dulzura no?" Dijo mientras reía y miraba con afectó al pequeño recién nacido.

Elena se quedó perpleja, mirando al pequeño de color dorado.

"HEEEEEEEEE!?"

"Quieres decir que he estado embarazada durante todo este tiempo? y que aquel bebé es mío?" Tal vez por lo repentino, la cara de Elena mostraba que no podía procesar lo que estaba sucediendo, y finalmente cayó inconsciente nuevamente.

Más tarde Tywin explicó lo sucedido a Sandor y cuando Elena volvió a despertar, con paciencia, volvió a explicar nuevamente hasta que ella pudo finalmente aceptarlo.

"M-Magnus, quiero que se llame Magnus, es un nombre que he pensado hace mucho, aunque no se que decir pero espero cuidar bien de ti pequeño" dijo ella mientras reía torpemente y miraba de forma afectuosa al pequeño, que estuvo despierto durante todo este tiempo hasta escuchar las palabras de Elena, finalmente cerrando sus ojos y cayendo en la oscuridad placentera de los sueños.

Lo siguiente en suceder fue el que Sandor y Elena aceptaran los cambios en sus cuerpos, principalmente Sandor, en el momento que abrió sus ojos, rayos salieron de ellos y una luz brillante los bañaba, esto lo dejó bastante perplejo. Elena por otra parte lo único que notó además de las venas turquesas junto con el brillo, es que podía invocar rayos con su mano, algo que jamás le había sucedido.

Sin embargo los Von Valheimn no fueron los únicos que tuvieron una situación extraña el día del nacimiento de Magnus, en una mansión aledaña a la casa Von Valheimn, La familia Reiss dio nacimiento a la hija del primer hijo del Duque Reiss, Angela, que también estuvo envuelta en el mismo baño de color dorado que Magnus, sin embargo a diferencia de Magnus, ella solamente presentó el fenómeno de luz dorada y que sus ojos sean dorados, sin embargo esto no evitó que su nacimiento tomara la misma relevancia que Magnus, ambos fueron llamados 'Los Hijos Divinos de Telwim'.

Cuando las noticias llegaron al emperador Carlomagno II su reacción fue de incredulidad para más tarde tornarse serio.

Luego ordenó a sus subordinados mantener especial atención a los dos recién nacidos.

Mientras todo esto sucedía los Von Valheimn y Reiss tomaron conciencia de que tal vez el nacimiento de ambos podría atraer atención innecesaria de algunas personas y acordaron ayudarse mutuamente. En el pasado ambas familias tenían un buen trato a pesar de que eran neutrales. Esto se puede notar aún más en la familia Reiss ,ya que la familia Von Valheimn debido a Tywin tenía una gran reputación en el ambiente militar. Mientras que los Reiss destacaban en el ámbito político, vieron que la cooperación con Tywin y su casa podría traer otros beneficios que en el pasado no lograron acaparar.

Lo mismo podría decirse de los Von Valheimn, siendo Sandor en único en toda la familia con poco más de talento además de lo militar, con los Reiss podían asegurarse de que el joven amo de la casa Von Valheimn pudiera abrirse paso en la política y consolidar su poder de forma definitiva.

Aún así era claro que este movimiento de estas dos grandes familias no iba a pasar desapercibido. Tomando las familias enemigas de las dos casas mucha más precaución.

Sin embargo los pequeños que desencadenaron todas estas acciones vivían una vida pacífica llena de afecto por sus padres. Magnus y Angela estaban inconscientes de que su nacimiento fue un gran acontecimiento para toda la ciudad.

Sandor tenía sentimientos encontrados con su hijo, por alguna extraña razón cada vez que estaba cerca de el tenía un sentimiento de reverencia que salía desde el fondo de su alma. Le era difícil explicar esto a Elena ya que al parecer ella no mostraba ningún tipo de otro sentimiento que no sea amor hacía el pequeño.

Sin embargo eso no era todo, a medida que pasaron los días, cada vez que Sandor pasaba más tiempo cerca de Magnus sentía que su sangre alzaba su temperatura y sentía un hormigueo en todo el cuerpo, como si algo recorriera por cada arteria.

Un día mientras Sandor estaba en su estudio, escuchó que alguien tocaba su puerta, dejando a un lado lo que estaba haciendo alzó la voz.

"Adelante, está abierto"

Un hombre de mediana edad alto, de cabello negro azabache con unos rasgos finos y delicados que hacían ver que en su juventud era atractivo estaba en la puerta, era Tywin quien entró, sin decir nada fue a sentarse en la silla frente al escritorio de Sandor, luego siguió manteniendo el silencio por varios segundos.

Sandor al ver que su padre permanecía en silencio, se sintió un poco incomodo, era común que su padre tenga algo que decir cada vez que se acercaba a el, por lo que preguntó.

"Sucede algo Padre?"

Los ojos negros de Tywin recorrieron la cara y cabello de Sandor mientras pensaba así mismo.

' Ya han pasado varios meses desde que Sandor tiene ese aspecto pero sigo sin acostumbrarme' Tywin carraspeo y dijo.

"Verás, aquel día luego de entrar a la habitación encontré una alabarda clavada en medio de donde debía estar tu cama, había ordenado a los sirvientes que la recogieran, sin embargo no pudieron siquiera moverla un centímetro; tuve que ir personalmente yo a retirarla y aún así tuve una gran dificultad para moverla"

Tywin pauso unos momentos mientras Sandor lo miraba extrañado.

"Sé que aquella alabarda jamás estuvo en esta casa en el pasado, se qué tu tampoco podrías sostenerla con el peso que tiene. A lo que quiero llegar con esto es, ¿Hijo has hecho algo extraño esa noche? Te lo pregunto puesto que no encuentro otra forma de entender como llegó allí, y eso teniendo en cuenta todo lo demás que sucedió." Tywin finalizó y miró fijamente a los ojos de su hijo.

Sandor intento permanecer serio mientras Tywin habló, aunque su mente era un caos, al ver a su padre mirándolo y esperando su respuesta dijo.

"uhm, padre, como decirte esto, aquella noche fue normal sabes? Apenas terminé con mis tareas fui con Elena y... bueno, cumplí mi rol como marido ¡Pero todo fue normal! no hubo nada extraño, menos una alabarda."

Aunque sin darse cuenta, Sandor alzó la voz en un tono extraño.

Tywin estrechó sus ojos y luego suspiró mientras alzó la cabeza mirando al techo.

"Lamento preguntar, se qué para ti tampoco ha sido fácil todo esto, pero espero entiendas mi posición, todas las familias en Telwin tienen los ojos puestos en nosotros, han circulado varios rumores y aunque ninguno tenga sentido, tampoco tiene sentido nada de lo sucedido por lo que no sé que demonios pensar."

Luego volvió la mirada a Sandor.

"Respecto a Magnus, bueno, ¿que decir de él? Ese niño nació siendo dorado, no se como explicar aquello, supongo que aquellos rayos y luces aquella noche han tenido algo que ver en su nacimiento. Por lo pronto espero y cuides bien de él, por más extraño que el sea es tu hijo y también mi nieto. Quiero que crezca y hacer un buen hombre de el, te lo estoy diciendo por que he escuchado todo tipo de rumores, tales como que es un niño bendecido. Ciertamente creo en esto ya que has visto la actitud de aquel pequeño, parece un ángel." Tywin al recordar a su pequeño nieto se relajó y sonrió.

Sandor miro a su padre fijamente y dijo

"Padre sé que tienes muchas preocupaciones por lo que ten por asegurado que cuidaré bien de Magnus. Espero y puedas encargarte de los demás asuntos que tengan que ver con las otras familias, aún estoy intentando aprender de ti padre, lamento seguir dependiendo de ti en cuanto a esto. Pero te aseguro que en unos pocos años podrás confiar plenamente en mí. Intentaré enfocarme en que Magnus tenga una infancia normal para evitar que hayan rumores extraños a su alrededor.

Respecto a la alabarda, ¿no será mejor traer a alguien que pueda estudiarla? siento que ésta puede llevarnos entender lo que sucedió aquella noche" luego quedó callado por unos segundos mientras dudaba algo para finalmente decir.

"Algo extraño me ha estado sucedido con Magnus, cada vez que estoy cerca de el siento que mi sangre hierve y no puedo evitar sentir un respeto hacia él, se qué es muy extraño y realmente no se que hacer con esto, por lo qué quería pedirte un consejo"

Sandor miró a Tywin mientras le dijo con preocupación.

"Bueno supongo que tendrá que ver con todo lo que ha sucedido con el pequeño; quiero decir a todos nos produjo un sentimiento de reverencia hahaha, ese pequeño brillaba como la luz de un Buda, ¿como no sentirás eso? deberías relajarte sé que luego se pasará."

Tywin sonrió sinceramente a su hijo.

'Aunque cada vez lo siento más fuerte' Sandor pensó a si mismo

"Sandor" Tywin rápidamente se puso serio y dijo con una voz solemne.

Al ver a su padre de esta forma Sandor erigió su postura en la silla.

"El señor de la ciudad ha preguntado por Magnus y por ti, el Duque Reiss me ha informado que sucedió lo mismo con Angela. Reiss y yo pensamos que deberíamos hacer algún acto público para evitar que nos supriman, he escuchado que varias familias han dicho que Magnus y Angela traerán desgracia para Telwin. Aunque sé que el señor de la ciudad es un hombre razonable, uno nunca sabe como va a reaccionar frente a lo desconocido e incierto. Por lo que planeo usar aquel título de Hijos Divinos y decir públicamente que ambas familias fueron bendecidas. Ya lo hablé con Reiss y me ha dado su aprobación así que he venido a informarte. En tres días haremos un banquete y bendeciremos a los pequeños."

Sandor asintió con cara preocupada y luego dijo en broma

"Nunca pensé que buscar un heredero haya traído tantos problemas"

Luego ambos conversaron hasta tarde, la conversación pasó su mayor tiempo en los cambios físicos de Sandor y Elena. Finalmente se despidieron.

Rápidamente los días pasaron y el día donde presentarían al público a los recién nacidos llegó. Durante ese día ambas casas estuvieron ocupadas con la recepción de varias familias nobles y figuras importantes. La gran mayoría de quienes llegaron al banquete sabían que ese evento tenía cierta relevancia debido a los acontecimientos ocurridos con anterioridad.

El señor de la ciudad de Telwim, Lord Gustav hizo presencia en el banquete junto a su familia. El banquete ocurrió como Tywin y Duque Reiss esperaron; ambos niños fueron autoproclamados por sus casas, como "Los Hijos Divinos de Telwim".

Magnus particularmente llamó la atención del público debido al color de su cabello y ojos, ya que en la familia Von Valheimn el color negro era predominante, sin embargo no hubo ningún rumor sobre alguna infidelidad, ya que el mismo padre de Magnus, Sandor, se presentó al público mostrando los cambios físicos sufridos, al igual que Elena, haciendo entender al público que el nacimiento del pequeño tuvo algo que ver con el cambio de la joven pareja.

Así rápidamente finalizó el evento, luego de enviar a los Reiss. Sandor se dirigió al estudio de su padre.

Tywin estaba de pie frente al ventanal de su estudio, perdido en sus pensamientos, hasta que escuchó pasos acercarse y luego el llamado en la puerta.

Sin darse vuelta Tywin dijo

"Adelante"

Sandor entró a pasos firmes y quedó de pié frente al escritorio de su padre, observandolo.

Aclaró su garganta y dijo.

"Padre, estuve conversando con los padres de Angela y creemos que arreglar un matrimonio entre ambos pequeños sería conveniente para ambas casas"

Tywin quedó en silencio un momento para luego decir.

"El pequeño no lleva en este mundo ni un mes y ya piensas en su casamiento, aaah, Sandor no digo que sea una mala idea pero es muy temprano para hablar sobre esos asuntos, espera que pasen algunos años y recién allí hablaremos sobre eso, quiero ver como ambos pequeños se llevan antes de decidir algo como eso" Tywin suspiró, pero seguía sin darse vuelta y mirar a Sandor.

"Escucha Sandor, puedes quedarte tranquilo sobre la seguridad de ambos, nada les sucederá. Deberías preocuparte por tí" Finalmente Tywin dio la vuelta y miró a Sandor.

"Tu aspecto no ha cambiado desde esa noche, te has comportado de forma extraña estos días. También he notado un cambio en tu fuerza, creo que debes buscar ayuda ya que no sabemos que te sucedió y si esto repercutirá en tu futuro, piensa que tal vez puedes morir en poco tiempo por alguna razón desconocida, por lo que espero que antes de pensar un futuro, puedas ordenar tu presente que está caótico" Con voz firme y una mirada autoritaria Tywin finalizó.

Sandor se sorprendió por un momento y luego miró a los ojos de padre y dijo

"pensé que podría ocultar los cambios por un tiempo" Luego río amargamente.

"Entiendo padre, pero no tengo idea alguna de donde comenzar, el doctor Ryze no ha encontrado ninguna respuesta y tengo entendido que es uno de los mejores en todo el Imperio"

Tywin asintió "Fumu, ciertamente es así, sin embargo Ryze es alguien que está a luz de todos, hay muchos otros expertos en la oscuridad que tal vez sepan que te sucedió a ti y Elena" Dijo con cierta autoridad en su voz. Luego se volvió a dar vuelta y mirar al ventanal

"Mañana buscaré a alguien que te pueda ayudar, espera mi llamado. Ahora puedes ir a descansar que este día ha sido largo" Sin dejar hablar a Sandor, Tywin ordenó.

Sandor abrió su boca para luego cerrarla y finalmente dijo

"Entendido padre, que tengas una buena noche"

"Hmm" Tywin asintió

Sandor se retiró con una cara llena de vicisitudes.

Esa noche en Telwim una furiosa tormenta se desató, las calles rápidamente se inundaron y limpiaron todo lo que había a su paso, los rayos merodeaban por los cielos. Un ruido hacía eco en los cielos, como si una batalla se librara en ellos. Entre las nubes y rayos; se podían ver dos siluetas humanoides.

Su batalla era sin cuartel, cada vez que ambos chocaban los cielos rugian y los rayos bailaban a su alrededor. Finalmente una de las siluetas tuvo un descuido momentáneo pero ya era muy tarde, la otra figura dió un golpe fatal en su pecho y un rayo lo golpeó de lleno, cayendo finalmente y poniendo fin a la batalla. La otra figura finalmente rugió de jubilo, finalmente cayendo el también. Mientras caía luchaba contra la oscuridad para no perder la consciencia, los rayos le hacían compañía, bailando a su alrededor, finalmente impactando uno contra el y estrellandolo desde los cielos hasta el suelo.

Las gotas caían sobre su rostro, su complexión no se veía bien, su consciencia existía simplemente por su voluntad, tomando varios minutos logró reunir fuerzas para ponerse de pié. A su alrededor logró ver que lo rodeaba, eran casas, al parecer la batalla lo llevó a una zona civilizada. Cerca de él estaba el cuerpo de la otra persona con la cual batalló, viendo su cadáver sonrió amargamente. Para vencerlo le tomó demasiado tiempo.

Mientras se preparaba para moverse de esta zona y buscar cobertura para curar sus heridas sintió un aura, un aura que no podría olvidar por el resto de su vida ya que esta aura era muy familiar para él. Dirigió su mirada hacia donde detectó como el origen del aura y avanzó lentamente.

Agatha cumplía su turno este día, la mayoría de los criados de la casa estaban descansando debido al largo día que tuvieron por el banquete. Debido a que el día anterior ella había tenido su día libre hoy le tocaba cumplir el rol de sereno.

En lo profundo de la madrugada Agatha escuchó que alguien tocaba la puerta, asustada debido a que el lord de la casa no esperaba a nadie fue a pasos lentos hacia la entrada. Las luces estaban bajas, los relámpagos iluminaban fugazmente, el corazón de Agatha latía rápidamente mientras estrechaba su mano para abrir la puerta, una vez abierta lo primero que la recibió fue el fuerte ruido de la lluvia, frente a ella se encontraba una silueta de gran altura, la figura vestía una armadura que ella jamás vio en la ciudad de Telwim. La figura estaba empapada, finalmente un gran relámpago iluminó todo el cielo y ella pudo ver el rostro de la figura, era un hombre con unos rasgos delicados, sus ojos tenían un color ámbar, su largo cabello tapaba gran parte de su rostro pero ella podía aún así verlo correctamente, tenía varias heridas en el rostro y una mirada completa a su cuerpo dejaba ver que el hombre estaba malherido, sangre adornaba el suelo mojado donde el yacia de pie.

Agatha intento vencer el miedo que su cuerpo y mente sentían para decir con voz tímida y temblorosa mientras mordía su lengua.

"H-hay algo en l-lo, lo, que p-pueda ayuda-a-arlo?" sus piernas no dejaban de temblar mientras maldecia mentalmente a sus compañeros de trabajos por su aparente infortunio.

El hombre la miró un momento y luego dijo con una voz ronca y áspera.

"Estoy buscando al lord de la mansión... ¿puede decirle que un caballero está en sus puertas buscando asistencia para sus heridas? Pagaré si es requerido, de antemano espero y disculpe las molestias"

Agatha sintió escalofríos por todo el cuerpo al escuchar su voz, pero aún así respondió.

"D-Disculpe lamento informarle que el lord n-no podrá atenderlo a estas horas" Luego pensando que si tal vez su respuesta enfurece al hombre decidió añadir.

"S-s-sin embargo, t-tiene suerte de que lord Tywin sigue d-despierto, i-i-iré a dejarle su mensaje, espere un momento" Agatha no espero la respuesta del hombre y cerró rápidamente la puerta mientras corrió como si su madre estuviera por morir hacia el estudio de Tywin. Cuando estaba a pocos metros de la puerta del estudió resbaló y cayó de espalda, luego torpemente se puso de pie y tocó la puerta mientras alzaba la voz con urgencia.

"Lord Tywin, lamento molestarle a estas horas, hay un hombre aterrador en la puerta que dice ser un caballero, está malherido y pregunta si puede pasar y pedir asistencia para curarlo"

Tywin, quien estaba sentado leyendo un libro mientras tomaba un té, alzó la mirada hacia la puerta y pensó a si mismo

' Que demonios hace alguien a esta hora con esta tormenta por las calles'

Luego alzó la voz.

"Puedes entrar"

Inmediatamente después de escuchar la voz de Tywin, Agatha entró en apuro.

Tywin al ver el aspecto de Agatha alzó las cejas, para que la criada tenga ese aspecto al ver al hombre debió tener una fuerte impresión en ella.

"Dime como lucia el aspecto del hombre"

"Si mi Lord, respondiendo a su pregunta, es alto; tiene un cabello oscuro y largo, también luce una armadura muy extraña que jamás he visto, tiene heridas en todo el rostro, parece que por el cuerpo también pero no he podido ver correctamente debido a la capa que el hombre lleva, que debemos hacer mi señor? el hombre está todavía en la puerta esperando su respuesta" Agatha quien lucia pálida, dijo sin ningún error mientras también hacía ver su apuro.

Tywin frunció el ceño al oír la respuesta de Agatha.

' Que no haya visto la armadura de ese hombre no es bueno, prácticamente todo tipo de hombre y general ha estado en mi hogar y mis criados fácilmente reconocerían sus armaduras, al parecer tendré que ir en persona a ver quien es este sujeto'

Una vez afirmado su pensamiento, se puso de pie y empezó a avanzar hacia la puerta de su hogar.

"Acompáñame" Dijo mientras caminaba frente Agatha.

'NOOOOOOO, ¿POR QUÉ DEBO MIRAR A ESE HOMBRE OTRA VEZ? lo he servido de corazón lord Tywin, ¿por que debe ser tan cruel?' Mientras Agatha pensaba esto, sonrió de manera triste mientras decía.

"Si mi Lord"

Una vez ambos estaban en la puerta, Tywin ordenó que la criada abra la puerta. Lo que recibió fue el mismo hombre que Agatha vió, sin embargo en el rostro de Tywin había sorpresa y miedo. Tywin no pudo sentir el aura del hombre, no podía si quiera tener idea de que nivel era el hombre frente a el. Lo que sorprendió más aún e intrigó a Tywin fue que el tampoco pudo reconocer la armadura que el hombre llevaba. Era negra con finas líneas doradas, en el lado derecho la figura de un dragón dorado se mostraba, la capa que lo cubría era grisáceo, estaba en varias partes destrozada.

El hombre también observó a Tywin mientras pensó a si mismo

'Este hombre tiene rastros del aura, supongo que no es quien busco, pero debe ser cercano a esta persona, de igual forma necesito ayuda y buscar algo de información. De igual forma deberé evitar exponerme lo menos posible, no sé si los Nefilim tienen poder en este lugar"

Luego dijo con su voz ronca y de forma solemne.

"Lamento molestarlo Lord Tywin, es una mala hora en un mal día para visitar su hogar y llamarlo; pero espero y entienda la urgencia de mi situación" luego sonrió y bajo levemente la cabeza en forma de cortesía.

Tywin recuperó la compostura rápidamente y contestó.

"No se preocupe, está herido y en estas situaciones no es necesario tomar en cuenta tales modales sin sentido. Disculpe si soy un poco rudo, pero ¿Quien es usted? no logró reconocer su rostro y menos aún la armadura junto al blasón que lleva, espero y entienda que no a cualquier desconocido se puede dar asistencia y asilo en el hogar"

El hombre al oír las palabras de Tywin asintió.

"Me disculpo por olvidarlo, mi nombre es Arkanto, y mi armadura y blasón serán desconocidas debido a que pertenecen a un reino lejano a este lugar. Verá, tuve un encuentro infortunio con un enemigo y tuve una larga batalla que me ha llevado hacía este lugar, soy desconocido hacia donde debo ir en mi situación. Añadiendo la intensa tormenta decidí venir al primer hogar que ví, por lo que lamento molestsrlo a estás horas y en esta situación" Dijo Arkanto concisamente de forma relajada.

Tywin al escucharlo pensó.

'Como demonios una batalla puede enviarte a un lugar lejano, bueno, lo estoy pensando acordé a mi poder, claramente el hombre frente a mí esta a otro nivel. De todas formas no es bueno hacerlo entrar, podría ser un maniático ¿Aunque que podría hacer yo? no tengo el poder para detenerlo en ese caso, supongo que añadir buen karma podría llevar a algo bueno si lo ayudo'

De forma resignada Tywin sonrió y dijo.

"Gusto en conocerlo, Arkanto, puedo ayudarle esta noche a cuidar de sus heridas para que al amanecer pueda ir tratar sus heridas con un médico o en algún templo acordé a usted"

Tywin miró hacia Agatha y ordenó.

"Agatha prepara una habitación y ungüentos para el señor Arkanto"

Luego volvió su mirada a Arkanto mientras gesturó con su mano.

"Puede acompañarme Arkanto"

Arkanto miró a Tywin y con pasos seguros avanzó mientras decía.

"Agradezco su hospitalidad Lord Tywin, con su permiso"

'supongo que se ha dado cuenta de la diferencia entre ambos, ahora deberé hacer uso del tiempo que tengo aquí para intentar encontrar a la persona que carga con el aura, es una lastima que exista una restricción a mi poder' Arkanto pensó a si mismo mientras rápidamente observaba su alrededor mientras seguís a Tywin.

De pronto sintió una presencia familiar que hizo que detuviera sus pasos.

'Es Fafnir, ¿que demonios hace aquí? Aunque tiene sentido ya que el aura lo acompaña, debo encontrar a esa persona de la forma que sea'

Tywin al notar que Arkanto se detuvo preguntó.

"Sucede algo?"

Arkanto recupero la compostura rapidamente mientras busco una escusa rápida.

"No sucede nada, simplemente recordé que he perdido mi arma. Supongo que es el precio a pagar por tener mi vida intacta"

Tywin hizo una expresión de "ya veo" luego siguió avanzando hacia la habitación donde quedaría Arkanto.

Arkanto volvió a caminar y seguir a Tywin mientras su mente formulaba situaciones en las cuales permitiera conocer la identidad de la persona que porta aquella aura familiar.

Una vez ambos llegaron a la habitación, vieron a Agatha en la puerta con la cabeza baja esperando a ambos.

Tywin ordenó.

"Te quedarás a cargo de las necesidades de lord Arkanto, procura que todo este bien"

Agatha tembló levemente pero dijo con voz resignada.

"Como usted ordené Mi Lord"

Tywin se dió vuelta y posó su mirada en Arkanto.

"Espero y pueda recuperarse Arkanto, a la mañana lo buscaré nuevamente para ver como esta su condición e informarle de los lugares que puede ir. Espero y descanse, si me disculpa volveré a mi habitación" Luego de ver a Arkanto asentir y agradecerle, Tywin volvió a su estudio.

Arkanto miró a Agatha y sonrió levemente.

"Espero no ser mucha molestia, estaré a tu cuidado"

Agatha lo miró frustradamente mientras sonrió de forma amarga.

"Si necesita algo puede decirme, dejé en la cama ropas para que pueda cambiarse, puede dejar la ropa mojada y su armadura en el soporte, el ungüento esta en aquel pote"

Arkanto entro a la habitación y luego de confirmar agradeció a Agatha, luego cerró la puerta y empezó a quitarse la armadura y ropas mojadas para ponerse las secas, finalmente empezó a ponerse el ungüento en las heridas. Generalmente no las necesitaría, pero como estaba en un lugar donde su poder se veía restringido debía usarlo, más aún teniendo en cuenta el poder en las armas Nefilim que evitaban la autoregeneración.

'Aunque en ungüento será en vano, sólo ayudará con las heridas superficiales y no quitará el efecto de esas armas'

Una vez terminó finalmente se acostó en la cama mientras cerraba los ojos, pensando nuevamente en los eventos ocurridos.

'Creo que ha pasado meses desde que descubrimos al enemigo, espero y Su Majestad esté bien, aunque si Fafnir está aquí y el aura también, no puedo esperar mucho'

Cuando recordó al hombre al que servía, Arkanto suspiró, su señor tuvo que enfrentarse a varios enemigos de igusl poder que él, fue un milagro que pudieran durar tanto tiempo luchando, sin embargo Arkanto tuvo que enfrentarse a tres enemigos, derrotando a dos y finalmente luchando de forma agónica contra el último, durante el transcurso de la batalla se separó de su señor y compañero, viajando por varios lugares hasta finalmente llegar aquí.

' De cualquier forma lo primero que debo hacer es verificar quien es el que posee el aura, después de ahí debo decidir el rumbo que debo tomar, sin embargo es necesario que deba volver al plano celestial, la guerra ha comenzado y debo cumplir con mi deber. Sin embargo con estas heridas poco y nada podré hacer por lo que debo buscar alguna forma de recuperarme'

Una vez decidido, cerró los ojos para descansar.

Agatha quien estaba en una silla sentada en en el corredor al lado de la puerta de la habitación de Arkanto, se estaba quejando en su mente por su mala suerte. Mientras hacia caras, notó por el rabillo de su ojo una luz, rápidamente giro su cabeza y noto que por el espacio de la puerta en la habitación de Arkanto, había una luz dorada.

Sus pupilas se contrajeron mientras dijo con una voz ahogada.

"E-es la misma luz que cuando nació el joven Magnus"

Luego se levantó mientras avanzó rápidamente hacia el estudio de Tywin.

Sin esperar a tocar u escuchar la orden de Tywin entró a la habitación mientras dijo de forma apurada.

"¡Es la luz mi señor, es la misma luz que el joven Magnus!"

Tywin se sobresalto con la irrupción de Agatha, en su rostro se podía notar enojo. Pero una vez que escucho lo que Agatha dijo no pudo evitar preguntar.

"Agatha, ¿que quieres decir con la luz? debes calmarte y decirme con claridad"

Agatha viendo la reacción de Tywin volvió a si misma y con vergüenza en su rostro dijo.

"Ah!, l-lamento irrumpir de esta forma mi señor, es que, ¡He visto la misma luz que cuando nació el joven Magnus en la habitación del señor Arkantos!"

Tywin una vez escuchado esto alzó sus cejas en sorpresa y con incredulidad preguntó.

"¿¡QUÉ HAS DICHO!?"