capítulo 9: definitivamente le tengo terror a esa chica.

Al llegar a casa veo a una muy despeinada Alice,ella al notar mi presencia corre hacia mí y me abraza.

—me asustaste pendeja...no me vuelvas a hacer eso. —dice apretando el abrazo que cabe destacar que aún sigo en los brazos de Quellán,ella se separa y lo mira. —gracias por ir a buscarla.

—no fue nada. —dice el sonriendo.

—llevala a su habitación,el piso está muy frío y la señorita decidió salir sin abrigo sabiendo que a esta hora puede congelarse. —dice mirándome fijamente.

—lo siento.

—no la regañes,me dijo que quería coger aire pero no dijo nada por que pensó que la regañariamos. —dice Quellán guiñandome un ojo y desvío la mirada sonrojada,¿cómo hace para afectarme tanto con un sólo movimiento?

—oki,mejor me iré a la cocina a prepararles algo. —dice y se va hacia la cocina Quellán no dijo ni una sola palabra en todo el camino hacia la habitación y agradezco internamente por eso pero se que algo viene,al llegar me pone en la cama y habla:—¿me puedes guardar el secreto?

—¿de qué? —pregunto pensando en todo lo que había sucedido,el al escuchar mi pregunta suelta una bocanada de aire y habla:

—sobre lo del callejón y los tipos que te querían hacer daño.

—ah...eso... —digo desviando la mirada y dándole la espalda para luego arroparme con la sabana. —si,no te preocupes...te guardaré el secreto. —escucho un suspiro relajado.

—gracias.

—no,gracias a ti...si quieres te puedes ir,no te causare más problemas. —escucho sus pasos caminar hacia la puerta y luego la puerta siendo cerrada así que cierro los ojos pero no duró mucho cuando siento como al lado mío en la cama se hunde entonces siento como un brazo se posa en mi cintura y una respiración cálida en mi cuello y abro los ojos como platos.

—no me pienso ir así Liamna...no con todo lo que acabas de pasar por mi culpa. —puedo jurar que en este preciso momento estoy más que sonrojada.

—n-no fue t-tu culpa,yo decidí irme así enferma y sin decir nada. —digo tratando de regular mi respiración que en éste momento se encuentra a mil por segundo. —Q-Quellán.

—sí. —dice muy calmado¿acaso no ve que estoy a punto de desmayarme?

—mi...espacio p-pers-sonal. —entonces me aferra más a su cuerpo.

—Necesitas dormir,Liamna no te voy a hacer nada no soy como esos tipos y se que tampoco quieres que me valla.

—está bien. —digo entonces cierro mis ojos y poco a poco caigo en los suaves brazos de morfeo.

....POV QUELLÁN.....😍😍🕊

AL OTRO DÍA....

—padre...quiero que la dejes en paz...

—no eres nadie para decirme que hacer,sólo eres una vergüenza para el negocio. —saca el arma.

—¡no! ¡Sueltala!...

—si tanto la quieres ven por ella... —sonido de un disparo.

Me despierto y agarro la mano de Liamna la cual está apunto de quitar el cabello de mi rostro...

—¿qué haces Liamna? —digo tratando de controlar mi tono de voz pero no lo logro y terminó hablándole fríamente entonces veo como su semblante sorprendido cambia a uno triste o quizás a uno decepcionado.—lo sien-

—tengo que ir a ducharme...estoy mejor y puedo ir a la escuela. —dice desviando la mirada.

—liamna...

—lo siento. —trata de irse a una puerta que supongo es un baño,así que rápidamente me paro de la cama,la agarro de la muñeca para detenerla al lograrlo la acerco a mí y veo su rostro...tiene las mejillas coloradas entonces pongo mi mano en su frente y siento que está ardiendo.

—no vas a ir a la escuela así.

—sueltame. —dice fríamente entonces entendí que soy un idiota por que en primer lugar no debí hablarle de esa manera sólo por no querer mostrar como soy y lo que me pasó cuando llegué a casa luego del viaje...la suelto.

—lo siento,me iré...pero no vallas al colegio así.—digo bajando la cabeza y marchándome,esto es malo...no quiero sentir lo que estoy empezando a sentir por ella,al salir de su habitación veo a una Alice con el ceño fruncido y luego levantando una ceja.

—¿debo preguntar?

—no,por que no pasó nada.

—lo sé. —dice sonriendo. —¿ya te vas?papá y mamá dicen que te quedes a desayunar con nosotros.

—oki,pasaré en un momento.

—si buscas un baño al fondo del pasillo hay uno.

—gracias. —digo mirándola,ella y Liamna son muy diferentes pero a la vez es como si fueran la misma persona.

—de nada,ahora iré a ayudar con el desayuno. —dice sonriendo y se va corriendo cual niña de 5 años entonces nuevo con la cabeza.

Al salir del baño me dirijo hacia el piso de abajo entonces veo a Liamna en las escaleras recordando lo que sucedió decido ignorarla por completo se que en estos momentos debe odiarme por cómo la traté pero juro que fue un movimiento completamente involuntario.

Ella parece notar mi presencia y me ve,así que para no hacerla enojar sigo de largo y bajo...—¡buenos días! —dicen los padres de Liamna.

—buenos días.

—Quellán te quería agradecer por cuidar a Liamna ayer,se que no fue fácil así que te quisimos invitar el desayuno...un pajarito me dijo que te enojarias si te pagamos. —ese pajarito tiene razón,sonrío.

—gracias...

—bueno,bueno,toma asiento. —dice sonriendo,la felicidad de ésta familia se me contagia y sonrío.

Minutos después de haber desayunado nos quedamos conversando es entonces cuando entra Liamna y me tenso...

—bueno se me hace tarde. —dije parandome de la mesa.

—¿ya te vas? —dice el padre de Liamna.

—si...tengo trabajo.

—oye Quellán,estábamos pensando mucho y debido a lo que sucedió el otro día queríamos saber si podrías cuidar a Liamna dentro del cole. —veo a Liamna de reojo y me mira como si tuviera el mismo infierno en los ojo.

—lo voy a pensar. —definitivamente le tengo terror a esa chica.