Un descanso

Luego de un descanso de una hora y de recibir tratamiento para su muñeca derecha, Doryoku intentó escapar del festival ya que después de todo no tenía nada que hacer ahí.

Pero, resulta que se debe estar presente para la premiación del director Nezu y frente a un montón de personas, por lo que Doryoku tuvo que ir casi obligado a recibir su medalla.

Y en medio de todo el estadio, frente a todos los héroes y personas que daban su apoyo a todos, Doryoku se encontraba en un podio en el primer lugar, Oboro en el segundo mientras saludaba a la multitud alegremente y Aizawa en el tercero luego de vencer a Hizashi con su típica expresión somnolienta.

Doryoku parecía muy tranquilo pero en realidad era un manojo de nervios internamente como siempre, además de que nunca le gustó tomarse fotos o salir en cámara, por lo que era doblemente incómodo y agobiante.

El director Nezu luego de terminar con sus cosas pendientes y sobre los hombros de Ectoplasm, se acercó a Aizawa con la medalla de bronce en manos mientras Last laser sostenía el resto.

"¡Lo hiciste muy bien joven Aizawa, incluso con la simpleza de tu quirk llegaste al tercer lugar con ingenio, espero mucho de tí en el futuro!" dijo el director Nezu con una sonrisa satisfecha mientras Aizawa recibía la medalla y hacia una pequeña reverencia en señal de respeto.

El director Nezu tomó la medalla de plata de Last laser y se acercó a Oboro para luego ponerla sobre su cuello y decir...

"¡Felicidades joven Shirakumo, eres todo un experto en combate por lo que me dijeron, espero que la UA este a la altura de tu talento completo!" dijo el director Nezu sonriendo orgullosamente mientras Oboro recibía su medalla con orgullo también.

"¡Muchas gracias director Nezu, es todo un honor!" dijo Oboro emocionadamente mientras hacía una pequeña reverencia en señal de respeto y el director Nezu asentía con satisfacción.

El director Nezu tomó la última medalla de oro y se acercó a Doryoku mientras esté parecía notablemente más nervioso al ser el centro de atención de todos.

"Juju, míralo parece un gelatina en un terremoto, vaya campeón" dijo Mirai con una sonrisa burlona al ver la actitud nerviosa de Doryoku después de todo el festival.

"¡Fuerza Suzuki-kun sé cómo se siente!" dijo Azami con bastante entendimiento mientras daba su apoyo a la situación incómoda de Doryoku.

"¡¡Vamos amigo haz feliz al público y hazte con sus vítores!!" dijo Hizashi con una gran sonrisa como de costumbre y dando su consejo que solo le serviría a él.

El director Nezu se acercó a Doryoku y puso la medalla en su cuello con su típica sonrisa feliz como siempre para luego decir...

"¡Superaste todas mis expectativas joven Suzuki, disfruta del premio y espera por mi llamada cuando las clases comiencen de nuevo!" dijo el director Nezu con una gran sonrisa emocionada y con mucha expectación.

"¿Tienes algo que preguntar?" preguntó el director Nezu al ver que Doryoku parecía querer decir algo.

Doryoku dudó por un segundo para no seguir siendo el centro de atención, pero al final decidió preguntar.

"¿P-puedo vender esta medalla?" preguntó Doryoku con nerviosismo mientras tomaba la medalla de oro con sus manos.

"¡Jajajaja, eres todo un personaje joven Suzuki, fue una excelente broma!" dijo el director Nezu riendo en voz alta y sin tomar en serio la pregunta para luego alejarse.

'Jaja, era en serio' dijo Doryoku con una sonrisa nerviosa sin saber muy bien qué hacer con la medalla de oro en su cuello.

El director Nezu bajó de los hombros de Ectoplasm y caminó hasta su pequeño micrófono para decir...

"¡Fue un placer estar con todos ustedes público en casa y presente, estos serán grandes héroes del futuro, un futuro muy brillante ante las nuevas generaciones y que de seguro nos mantendrán a salvo de la maldad del mundo!" dijo el director Nezu con una gran sonrisa mientras todos los estudiantes parecían orgullosos además del público.

"¡Nos vemos el próximo año a todos, y Plus Ultra!" dijo el director Nezu terminando con su pequeño discurso y levantando su mano con emoción.

"¡¡¡Plus Ultra!!!" dijeron todos los héroes de alrededor, los participantes y todas las personas en las gradas y en sus hogares al mismo tiempo.

Y con todo esto, el festival deportivo llega a su final y Doryoku finalmente podrá descansar luego de tantas emociones y descubrimientos.

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"¡Fue emocionante amigo, una de las mejores experiencias de mi vida, además de las más alocadas!" dijo Oboro con gran emoción mientras caminaba junto a Doryoku hasta sus hogares, ambos con sus trajes de deporte y sus medallas aún.

"Quiero dormir" fue lo único que pudo decir Doryoku, el cual tenía cara de funcionario público por las mañanas, además de un leve vendaje en su muñeca.

"¡Yo también estoy un poco cansado, ¿se nota?!" dijo Oboro con una sonrisa emocionada aunque parecía un par de milímetros menos emocionada haciendo que Doryoku lo mire con los ojos en blanco.

Ambos amigos caminaron hasta llegar frente al hogar de Doryoku el cual se despidió rápidamente de Oboro para irse directo a dormir.

"Gracias por todo amigo, te debo una demasiado grande esta vez" dijo Doryoku con una sonrisa agradecida luego de toda la ayuda de Oboro.

"¡No te preocupes, somos amigos, los amigos nunca se deben nada entre ellos!" dijo Oboro negando con la cabeza mientras sonreía para luego irse a casa.

"¡Nos vemos mañana, puedes venir a casa si quieres, Okā-san preparará camarones para el almuerzo!" dijo Oboro mientras se despedía y corría a su casa rápidamente.

"¡Nos vemos!" dijo Doryoku despidiéndose con una leve sonrisa de Oboro para luego entrar a casa.

Con solo llegar frente al hogar, Doryoku se relajó bastante y el olor de la comida que salía de esta solo lo hacía sentir más feliz de volver a casa.

*Knock**Knock*

"¡Okā-chan, ya llegué!" dijo Doryoku en voz alta para llamar la atención de su madre.

Unos pasos se escucharon detrás de la puerta y al abrirse Doryoku fue rápidamente atrapado en un abrazo mortal de su madre.

"¡Dory-chan, estoy tan orgullosa fuiste el primero en el festival y superaste tus miedos!" dijo Nintai con una gran sonrisa orgullosa y feliz mientras abrazaba a Doryoku con más fuerza.

"M-me alegra que estés feliz Okā-chan" dijo Doryoku a duras penas el cual respiraba con dificultad pero también parecía bastante feliz.

Nintai dejó de abrazar por un momento a su hijo y tomó la medalla de Doryoku rápidamente y con ilusión para decir...

"¡La colgaré en la cocina así podré presumir a cualquiera que entre!" dijo Nintai mientras tomaba la medalla y corría a la cocina con bastante orgullo.

Doryoku solo pudo sonreír cálidamente al ver la actitud de su madre, para luego entrar a la casa y ayudar con la cena.

"¡A no señorito usted se queda sentado esperando por su comida, debes estar muy cansado!" dijo Nintai alejando a Doryoku de la cocina y dejándolo descansar.

"P-pero Okā-chan-" dijo Doryoku intentando razonar y siendo interrumpido por su madre.

"¡Sin peros, siéntate y espera!" dijo Nintai con seriedad haciendo que Doryoku simplemente se siente derrotado en el comedor y espere por su comida.

Y con todo esto, el día del festival deportivo termina, además de que Doryoku finalmente pudo dormir y comer una buena cena después de tanto ejercicio innecesario.

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"¡Okā-chan, voy a visitar a Oboro llegaré luego!" dijo Doryoku vestido con su camisa de color vino y de mangas largas favorita mientras salía por la puerta de su hogar.

"¡Ten cuidado Dory-chan y vuelve tempra-!" dijo Nintai desde la cocina hasta que se quedó callada de repente.

Doryoku pareció un poco confundido por el silencio abrupto de su madre hasta que...

"¡¡¡Wuahhhhhhh!!!" gritó Nintai de impresión para luego correr hacia Doryoku a gran velocidad.

"¡D-Dory-chan, 20, dinero, yenes, millones ¿cómo?!" dijo Nintai en shock sin poder articular una oración completa mientras sostenía su teléfono.

"Ya veo" dijo Doryoku con una mano en su barbilla intentando acomodar las palabras que su madre dijo al azar para darle sentido.

Nintai respiró profundamente para calmarse y le mostró su teléfono a su hijo para que este vea que habían 20 millones de yenes que salieron de la nada.

"Ohh, ese era el premio para el ganador del festival deportivo, sorpresa" dijo Doryoku con calma para luego sonreír levemente y hacer manos de Jazz a modo de sorpresa.

"¡Así que era por eso, ese es el motivo de que tú participaras en el festival Dory-chan!" dijo Nintai atando los cabos sueltos de todo con bastante impresión.

"Así es, al menos espero que con esto pueda ayudarte un poco por un tiempo" dijo Doryoku sonriendo levemente al ver la expresión de su madre.

Algunas lágrimas de felicidad cayeron de los ojos de Nintai y esta abrazó a su hijo con fuerza para luego decir...

"¡Buahhhh, ¿qué hice yo para merecerte Dory-chan?!" dijo Nintai mientras abrazaba a su hijo con orgullo y bastante cariño mientras este le devolvía el abrazo.

Después de algunos minutos de abrazo, Nintai soltó a Doryoku con emoción para decir.

"¡Mañana tenemos que salir de compras, hay muchas cosas que nos hacen falta, además de ropa para ti que siempre vistes igual!" dijo Nintai con una sonrisa y bastante expectación del día de mañana.

"En realidad esto es más una decisión que una necesidad, pero no importa supongo" dijo Doryoku el cual no parecía molesto con su camisa favorita.

"Nos vemos Okā-chan, ya se me está haciendo tarde" dijo Doryoku mientras se despedía de su madre con una leve sonrisa para luego caminar hacia el hogar de Oboro.

"¡Ten cuidado Dory-chan y diviértete!" dijo Nintai con una gran sonrisa mientras se despedía de su hijo.

Pero incluso con todo esto, había un poco de tristeza y decepción en Nintai, después de todo, ella creía que su hijo finalmente había tenido un deseo propio, algo egoísta por una sola vez.

También había alivio al ver que su hijo no quería ser un héroe, un alivio que la hacia sentir un poco culpable.

Doryoku siempre fue el mismo, solo se preocupa por ella y nada más, nunca lo vio ser egoísta o que algo en verdad lo hiciese sentir feliz o motivado al hacerlo, lo cual la preocupaba.

Ella pudo notar que Doryoku sentía emoción en situaciones difíciles, al igual que su padre, pero eso solo era un destello de lo que podría ser si algo lo llenara de pasión y sacara todos sus sentimientos al exterior.

Doryoku se parecía mucho a su padre en casi todos los aspectos, pero Daiki siempre supo lo que quería, ser un héroe y salvar a otros, un sueño que hizo realidad a pesar de todo y de lo que todos le dijeron.

Pero ese será un tema para otro día, después de todo, Doryoku aún tenía toda la vida por delante para saber lo que él quería en verdad.