La pasión se siente

[Un par de días después] [Lunes — 10:00 a.m.]

Luego del primer y segundo día de entrenamiento de Doryoku, este tuvo algunos avances ya que ahora podía mover el cubo de Rubik sin que volara en pedazos o su muñeca se quemara con relativa normalidad, pero cada vez que pensaba en cómo resolverlo todo el progreso desaparecía.

Doryoku estuvo toda la noche de ambos días intentando pensar en alguna solución, pero no tenía nada, además de que ahora estaba mucho más cansado por dormirse tan tarde.

Este tomó su descanso para almorzar y fue hacia el interior de la academia para buscar su almuerzo.

Esto llamó la atención de todos los estudiantes de los otros cursos, ya que ver a un alumno con ropa deportiva era muy extraño y mucho más sabiendo que el demonio Last laser podía encontrarte.

Doryoku estaba demasiado cansado como para ponerse nervioso por la mirada de todos, por lo que simplemente pidió su Yakitori (ya que estaba muy cansado para luchar contra la endemoniada ensalada de remolacha) y se sentó en la misma mesa de siempre.

Doryoku puso su comida frente a él y ni siquiera tenía hambre, por lo que simplemente golpeó su cabeza contra la mesa con frustración.

'Piensa maldita sea, como destruyo el cubo' pensó Doryoku con molestia dándose por vencido con el cubo y buscando alguna manera para eliminar ese artefacto del demonio de manera definitiva.

"Suzuki-kun, ¿estás bien?" Doryoku escuchó una voz preocupada frente a él, reconociéndola rápidamente como Azami.

"No es nada Wisteria, cosas del entrenamiento" dijo Doryoku con tono calmado levantando la vista para mirar a Azami.

Y al mirar al frente vio a Azami con su típica sonrisa tranquila junto a... la demonio rubia.

'Dudo que pueda soportar sus gritos hoy' pensó Doryoku llorando cómicamente a sus adentros ante su infortunio.

Mirai se sentó frente a Doryoku sin decir nada y Azami junto a ella, aunque esta última parecía estar un poco nerviosa.

"Escuché que estás entrenando para ser parte de las clase de héroes" dijo Mirai con tono más calmado de lo que Doryoku esperó haciendo que este se sorprenda un poco.

"Así es" dijo Doryoku bastante impresionado y hablando casi automáticamente ante el extraño comportamiento de Mirai.

"¿Por qué tienes esa cara? Parece que un camión te pasó por encima" dijo Mirai con confusión y tono burlón al ver las ojeras de Doryoku.

Al ver la actitud más normal de Mirai, Doryoku salió de su impresión y decidió contestar más normalmente.

"Supongo que el entrenamiento me tiene agobiado, además aún no encuentro ninguna clase de pasión y no puedo pensar en nada nuevo" dijo Doryoku con cansancio mientras recordaba todo lo que ha hecho últimamente.

Mirai pareció visiblemente molesta por esto y se levantó de su asiento bruscamente haciendo que Doryoku se sorprenda y Azami se sienta más nerviosa.

"¡Serás idiota emo fantasmagórico!" dijo Mirai con bastante molestia mientras apuntaba a Doryoku y Azami intentaba detenerla.

"¡¡La pasión no se encuentra baboso, se siente, eres un gran prospecto a héroe en la mejor academia de héroes, disfruta de lo que haces y vive tu profesión o simplemente no lo hagas, por eso odio a los emos!!" dijo Mirai con ira armando una escena y llamando la atención de todos.

"¡¡Disfruta de cada momento de tu pasión, vívela y no pienses en cómo, esa es la forma en la que debes hacerlo!!" dijo Mirai aun en voz alta y haciendo que Azami se detenga y sorprenda ante sus motivadoras palabras.

Doryoku abrió sus ojos en shock y se dió cuenta de que... ella tenía razón.

Sentir la pasión y la emoción por lo que haces, algo demasiado simple pero que simplemente no salía de un pensamiento de Doryoku.

"Tienes razón Itō, supongo que está vez me venciste" dijo Doryoku con una leve sonrisa agradecida y aceptando su derrota en este pequeño debate.

Ante esto, Azami sonrió levemente y con orgullo por las palabras alentadoras de Mirai y esta última tenía una gran sonrisa en su rostro.

"¡Jaja, tómala emo!" dijo Mirai apuntando a Doryoku con una sonrisa victoriosa y dándose cuenta de todas las personas que la miraban a su alrededor.

Ante esto, Mirai de calmó un poco y se sentó para empezar a comer tranquilamente intentando hacer que el resto no empiece con sus chismes.

"¿A qué vino toda la ayuda por cierto?" preguntó Doryoku con un poco de curiosidad y bastante más cómodo con la presencia de Mirai.

"Aún recuerdo que me salvaste la vida, te debo mucho aún" dijo Mirai mirando a otro lado un poco apenada.

"No te preocupes, somos amigos, los amigos no se deben nada entre ellos" dijo Doryoku con una gran sonrisa agradecida en su rostro como pocas veces sorprendiendo a ambas.

Ante esto Mirai también devolvió una sonrisa igual mientras Azami parecía bastante feliz también.

'¡Ya se llevan mejor es un triunfo!' pensó Azami con bastante expectación ante el entendimiento entre ambas partes.

Pero para su desgracia ambos seguían igual entre ellos, solo que ahora, eran debates y peleas entre amigos.

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Luego del almuerzo y de despedirse de Mirai y Azami, Doryoku volvió a la sala de entrenamiento Gamma e intentó resolver el cubo de Rubik de nuevo sentado en las gradas.

'Sentir ¿eh? Es una buena idea, pero hace mucho tiempo que no sé cómo hacerlo' pensó Doryoku un poco triste mientras volvía a armar el cubo Rubik e intentaba resolverlo con una mirada perdida.

Desde el despertar del quirk de Doryoku siempre estuvo esa voz que solo le repetía un frío 'ya veo' y nada más.

Esa a sido siempre la meta de Doryoku, volver a sentir como cuando era un niño, pero sus pensamientos simplemente hundían cualquier sentimiento en la nada o como mínimo lo hacían mucho menos fuerte.

Esa era una de las razones por las que quiso entrar a la UA, la vez que salvó a Mirai y el festival deportivo, ambos momentos en los que Doryoku se sintió vivo de nuevo y aquellos fríos pensamientos lo dejaron tranquilo por un momento.

Ver feliz a los demás es la forma más fácil de sentir algo para Doryoku, ese pequeño momento de calidez cuando su madre vuelve a casa o cuando comparte tiempo con Oboro y deja de pensar, todos ligados a los sentimientos de los demás.

'Okā-chan me dijo que nunca olvide quién soy, ¿pero quién soy en primer lugar?' pensó Doryoku perdiéndose en sus pensamientos de nuevo y haciendo que el cubo de Rubik estalle.

Doryoku soltó un suspiro cansado mentalmente, y luego empezó a buscar todas las piezas para armar el cubo de Rubik de nuevo.

'¿¡Ahhhh qué hago!?' pensó Doryoku bastante frustrado mientras se sostenía la cabeza.

Tampoco podía dejarse llevar demasiado por sus sentimientos ya que eso lo conduciría a perder la estrategia en una batalla, en resumen, un asco.

Doryoku armó el cubo de Rubik de nuevo y volvió a intentar resolverlo como siempre.

Y justo en ese momento, las palabras de Mirai le dieron en la cara como una bofetada.

La pasión se siente.

Sentir.

Los sentimientos y la lógica se repelen el uno al otro.

'¿Cómo me tarde tanto en llegar a esa conclusión?' pensó Doryoku un poco decepcionado y entendiendo lo que hacía mal mientras hacía movimientos en el cubo de Rubik casi inconscientemente.

No estaba mal dejarse llevar por sentimientos a menos que estés en combate, y pensar demasiado las cosas solo le traían más preocupaciones que otra cosa en este momento.

Doryoku respiró profundamente e intentó algo que no había hecho en mucho tiempo, solo sentir, mientras seguía haciendo movimientos en el cubo de Rubik.

El olor de la madera en la sala de entrenamiento, el sonido de voces a la distancia, el sentimiento de estar sentado o la simple brisa, todos sentimientos leves pero que hacían que su mente dejara de pensar al darles más atención.

Doryoku se sentía... tranquilo, era un sentimiento, bastante agradable a su parecer.

Algo tan simple como sentir, le daba bastante calma y hacía que pudiera disfrutar de las pequeñas cosas.

'Tal vez, debería darle más atención a mis sentimientos' pensó Doryoku sonriendo levemente ante la tranquilidad de ese pequeño momento.

Aún con todo esto, la mente de Doryoku siempre estaba en movimiento y ese pequeño momento en el que disfrutó de un sentimiento, fue opacado por sus pensamientos de nuevo.

Doryoku soltó un pequeño suspiro decepcionado ante esto, aún le faltaba mucho para tener control de sus pensamientos y sentimientos, pero al menos, lo hizo bastante feliz descubrir esto, saber que sus propios sentimientos aún existían dentro de él.

Doryoku siguió con la mirada perdida e intentando no pensar demasiado hasta que hizo un último movimiento en su cubo de Rubik.

Y al mirar más de cerca, Doryoku abrió sus ojos sorprendido al notar que, lo había resuelto inconscientemente.

'Ya veo' pensó Doryoku sonriendo levemente y luego riéndose a carcajadas por lo idiota que podía ser a veces.

Aunque no pudiera sentir en todo momento, él estaba ahí, solo debía volver a ser Doryoku Suzuki, y hacer florecer sus sentimientos otra vez.

Él era feliz, por si mismo y por este fugaz momento, por algo tan simple como lo era saber que aún podía sentir por si mismo después de tanto tiempo.

Y aunque sería difícil, hizo que Doryoku no tuviera ningún arrepentimiento al elegir la clase de héroes hasta ahora.

Y mientras Doryoku disfrutaba de su descubrimiento y volvía a resolver el cubo una y otra vez, Last laser quien lo había vigilado, parecía bastante satisfecho también con su progreso.

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"Y dime Akira-san, qué tal va el nuevo aspirante a héroe" preguntó el director Nezu con curiosidad, sentado y bebiendo té junto a Last laser como de costumbre.

Luego de clases era muy entretenido hablar entre ellos, siempre tenían algo interesante que decir, por lo que luego de varios debates el director decidió preguntar acerca de Doryoku.

"En palabras simples, el mocoso es un monstruo, a diferencia de los requisitos post-quirk comunes como la fuerza o la agilidad, el tiene un entendimiento ridículo de todo, básicamente es como una esponja en todo aspecto" dijo Last laser con tono calmado mientras recordaba lo que había visto hasta ahora de Doryoku.

En aspectos físicos Doryoku era estándar, ni muy débil ni muy fuerte sin su quirk, pero en aspectos mentales, era simplemente aterrador lo rápido que entendía todo lo que lo rodeaba.

"¡Jajajaja, un verdadero diamante en bruto, ansío ver qué tan lejos llegará!" dijo el director Nezu riendo en voz alta y con bastante expectación acerca del chico.

"Incluso diría que se parece un poco a ti en tu juventud Akira-san" dijo el director Nezu retomando un poco la calma y con una sonrisa tranquila.

"Sí, solo espero que no cometa los mismos errores" dijo Last laser bastante serio y soltando un suspiro cansado.

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Al día siguiente en el comedor de la UA...

"Me gusta, el Yakitori" dijo Doryoku de repente haciendo que Mirai y Azami se exalten bastante.

"¡¿Dijiste que te gustaba algo?!" dijo Mirai bastante asustada y mirando a Doryoku de cerca para ver si estaba muriendo.

"¿Es tan raro?" preguntó Doryoku levantando una ceja y con una expresión de confusión un poco más expresiva de lo normal.

"¡Suzuki-kun, estás siendo más expresivo!" dijo Azami apuntando a Doryoku también en shock.

Doryoku nunca decía nada o iniciaba una conversación, solo se movía por consecuencia como una hoja en un río, pero que hablara de sus gustos, o que cambiará su expresión por si mismo, era una locura para el resto.

"¡Ahora tiene emociones por si mismo y hace comentarios cotidianos, tengo miedo!" dijo Mirai exagerando bastante y alejándose de Doryoku.

"Supongo que me lo merezco, no me haces sentir triste" dijo Doryoku encogiéndose de hombros sin darle importancia y haciendo que Mirai se asuste aún más y Azami tengan una sonrisa nerviosa.

Y esto era un paso, más cerca a lo que Doryoku siempre buscó volver a ser.