PRÓLOGO

El mundo tal como lo conocemos es una esfera achatada entre sus polos, con las especies más raras habitando allí. Pero entre todas ellas hay una especie que se destaca por su capacidad de razonar, aunque la usen pocos, los humanos somos las especies más peligrosas del planeta ya que la explotamos al máximo, extinguimos su bello paisaje y la contaminamos. Los humanos somos la raza más codiciosa, y es mucho decirlo, todo apunta a que lo son. Pues si en un pueblo habitan cien personas con pocos recursos, lucharán entre ellos por obtener más recursos; por ende el que supere a los demás no solo tendrá la una cantidad mayor de recursos sino que también tendrá el liderazgo sobre los demás. Ya lo decía Hobbes:

"El hombre es un lobo para si mismo".

Y esto nos da a entender que el hombre es individualista, por tener es capaz de acabar con los demás que interpongan en su camino.

Esas mentes brillantes nunca se equivocaron en definir al humano. Pues en la actualidad, cien personas de cada mil triunfan solo al utilizar su cerebro y pensar en la forma de crecer. Parte de esos cien lo consiguieron pisando a los novecientos que quedaron afuera, a eso se los conoce como el mundo que excluye e incluye. Donde en un círculo de bienestar pocos entran y muchos salen al exterior de incomodidad.

Los tiempos pasan y el humano se adentra al siglo XXI; época de ideologías y manifestaciones contra las instituciones públicas, momento de aceptar las nuevas formas de amar y la evolución de la ciencia y la tecnológica que avanza constantemente.

Las dos primera décadas fueron grandiosas pero también catastróficas hasta que ocurrió el acontecimiento que afecto a todo el mundo. A finales del 2019 y comienzos del 2020 un virus se originó en China que luego afecto a Italia, y de ahí a toda Europa. En marzo de 2020, todo el mundo estaba afectado por el covid-19 obligando a los humanos a estar en cuarentena por un año.

Comenzó 2021, bueno año de prosperidad pues la vacuna fue el descubrimiento que logro que los humanos siguieran haciendo sus vidas como antes. Pero parte del mundo se encontraba en una profunda crisis económica y no solo eso el covid-19 se había cobrado la vida del 70% de la población mundial. Ese treinta luchaba por sobrevivir en un planeta colapsado por la pandemia. A mitad del 2021, la ONU determinó un proyecto mundial que optaba en la creación de robots capaces de sustituir a párate de la población extinta.

El proyecto se llevó a cabo y en 2022 se fabricaron mil millones de robots distribuidos por toda la Tierra. Aquí comienza esta historia que nos dejara que la tecnología tiene su lado oscuro. Pues la ONU proclamó que los países no tendrán una potencia que los líderes, esto ocaciono una serie de guerras  entre las potencias mundiales y el tercer mundo. Todo acabo en una paz profunda aunque solo sea mentira.