Ya habían apagado las luces en el recinto real, pero las de la sala de curación seguían brillando intensamente, indicando que aún había actividades en curso dentro de la sala.
La mayoría de los sanadores, tanto aprendices como los demás, ya se habían retirado por el día, solo quedaban unos pocos y hasta ellos terminaban sus actividades y se preparaban para retirarse.
—Addie... ¿no puedes dejar eso para otro día? Tenemos que regresar a la academia de sanadores al amanecer y ya es tan tarde en la noche, incluso las patrullas de vuelo ya se han ido. —dijo una voz.
—Deberíamos volver ahora, apenas puedo mantener los ojos abiertos después de todas las actividades del día, necesito desesperadamente mi sueño de belleza no sea que me convierta de sanadora a paciente que requiere atención médica. —Rosalía se quejó con un tono agotado mientras apoyaba su cabeza en el respaldo de su silla.
Support your favorite authors and translators in webnovel.com