Leo, Nevellyn y Noelia.

Otoño un triste día.

Siglo XL, Isnian la bella ciudad habia sufrido una guerra. Todo estaba quemado y había muchos heridos.

Noelia era parte del gremio "Fuego negro" había salido a un trabajo qué duraba tres meses fuera de la ciudad y recién había regresado.

El trabajo era cuidar de una mansión el cual un heredero estaba enfermo y era débil para ocuparse de la mansión. No debía ser vista por los integrantes de la mansión (sirvientas, caballeros,...) excepto el joven amo heredero. Noelia también trabajo como médico privado del joven amo.

Mató a varios espías hasta incluso a un asesino de alto nivel, mostrando su capacidad le dieron una buena suma.

1 día antes.

Noelia tenía una familia que le esperaba en la ciudad, su hermana Laura apenas cumpliría 6 años al día siguiente para ello llegaria sin problemas al atardecer.

Noelia y Laura eran muy cercanas, su madre era cocinera en una mansión de duques.

Su familia antes eran de la nobleza cayeron en quiebra después de que todo empezaba a prosperar, fueron botados y arrastrados; a su padre lo decapitaron en la plaza.

Así quedaron los tres.

Noelia estaba tarareando una canción que les hacía reir a ella y su hermana.

- 1; 2; 3 das un paso y al revés...

Noelia saltaba; se veía una sonrisa en su rostro sucio y sudoroso.

Después de un día de caminata.

Ya estaba felíz por volver solo le faltaba un cerro para llegar.

Noelia caminaba sonriendo, cuando estaba apunto de voltear el cerro que impedía la vista.

¡BUMMM! Un temblor hizo tropezar a Noelia dejándole un raspón en la mano.

Desde el bosque.

Unos caballeros aparecieron montando a sus grandes mounstros los "percherones".

Noelia asustada preguntó que pasaba.

Uno le respondió frenando a su lado.

- Estamos en guerra y esta viendo resistencia, resguardate. Y el caballero partió enseguida.

Noelia sintió como todo su cuerpo se desplomó en el suelo.

Rápidamente pensó.

¡Mamá! ¡Laura!

La sonrisa de su familia apareció en su cabeza.

¡BUMMM! Otra explosión se escucho.

Noelia había caído de nuevo al suelo.

Noelia- ¡!!

Rápidamente empezó a correr y vio como todo se consumía por el fuego, ya llegaba el atardecer.

...

Cuando Noelia llegó por donde vivía lagrimas cayeron al ver como su casa estaba totalmente destruida. Utilizó su manos para retirar las paredes caidas.

No encontró a su familia adentró, un alivió pequeño sintió.

Justos cuando se iba pateo un juguete.

La muñeca de trapo que había hecho ella misma para su hermana estaba botada en el suelo cuando la agarro sintió una humedad en la parte de atrás de la muñeca, al voltearla vio sangre fresca.

Un miedo se apoderó en su cuerpo.

Todo el lugar estaba en silencio.

El miedo congeló a Noelia en el lugar dejando caer a la muñeca.

- ¡ Lauraaa!

Un gritó salió de Noelia.

- Donde estas hermana. - se veía el sufrimiento brotando de los ojos de Noelia.

Recogió la muñeca y salió corriendo donde trabajaba su madre.

Al llegar.

La mansión estaba quemada y las puertas estaban abiertas.

Entro corriendo todo aún estaba caliente mientras corría por el salón se escuchó pasos.

- ¿Mamá? ¿estás aquí?

Noelia no recibió respuesta.

Rápidamente todo se enfrió

Después se escuchó una canción que provenía de la sala principal.

Las melodías del piano hizo erizar a Noelia, se acerco lentamente.

Un hombre sucio lleno de ceniza estaba sentado tocando el piano su mirada parecia vacía.

De pronto los ojos del hombre se cayeron y una sonrisa se formo en su rostro, la imagen era aterradora.

Los huecos que ahora habían, empezaron a sangrar.

- ¿A quién buscas?

Noelia estaba paralizada del miedo y sentía como si alguien la ahorcara .

- Responde niña.

Noelia empezó a tartamudear.

- A... mi mi mamá.

- No está. -Respondió. Noelia estaba confundida, quien era ese mounstro en la sala.

- Se la llevaron la matarán para la ofrenda. No deberías estar aquí.

Su cabeza volteó hacia Noelia.

Una sonrisa cubrió su rostro y una boca muy grande apareció. Mandando un ataque a Noelia.

Noelia esquivo el ataque.

Noelia salio del lugar lo más rápido.

De pronto todo se derumbo.

La mansión se convirtió en un basural.

Rápidamente se escuchó pasos de soldados a lo lejos.

Por intuición Noelia se escondió.

- Rápido busquen a todas las mujeres y lleven al centro de la ciudad.

- ¡Si capitán!

Noelia no entendia lo que pasaba.

Los soldados que pasaron parecían del país vecino por su armadura. Se les veía aterrados.

Noelia tenía experiencia en pasar desapercibida.

Llego sin demora a la plaza se veía a muchas personas amontonadas todos eran mujeres y niñas.

Algo parecía extraño una barrera apareció alrededor de Isnian cubriendo todo.

Un sacerdote apareció en el centro.

- Hermanos empezaremos con la fiesta de nuestro Señor.

Noelia que se encontraba entre algunos escombros vio como el sacerdote empezaba a susurar unas palabras.

Al instante una luz apareció arriba de las personas amontonadas, la luz se partio en miles de pequeñas luces dispersandose.

Las luces formaron una circunferencia y empezaron a crecer luego se convirtieron en ojos.

Unos gigantescos ojos empezaron a mirar a las mujeres y niñas.

Cada ojo se acerco a su victima y empezaron a flotar llevandose a cada persona.

Noelia vio a su mamá en el centro seguía tirada.

Noelia susurró:

- Mamá.

El sacerdote preguntó.

-¿y esta mujer por que sigue ahí?

Noelia notó que todos los caballeros tenían los ojos cerrados incluso el sacerdote.

Todos dijeron al sonido.

-¡Murió!

El sacerdote abrió los ojos solo para notar que estaban vacios como aquel hombre de la mansión, ni siquiera se podría considerar un hombre eso era un mounstro.

Al instante entendió que todos eran esos seres que solo aparecian en las leyendas de los pueblos.

Las personas malas eran cazadas. Estas tenian opciones.

• Servir de ofrenda.

• Ser parte de la familia, el cual incluía dar tu cuerpo y alma.

La ida de ser parte de la familia te convertía en un ser sin sentimientos como un muerto solo los varones de cada familia podría ser.

Noelia esta vez mantuvo la calma y al mirar, vio a su hermana flotando su mano sangraba parecia que habia sufrido un corte. Noelia estaba paralizada no sabía como salvar a su madre y su hermana.

Aunque era fuerte aún no llegaba a la luz de sus poderes.

Esta era su cuarta vida .

Aún tenía miedo de morir su tercera vida fue muy dura, ahora seria más cuidadosa.

Noelia sabía conjurar algunos hechizos, estaba prohibido en esta ciudad aunque el hecho se desconocía.

Noelia y su familia habían vivido ahí después de ser botados de su casa ya tenían un año viviendo. Fueron aceptados rápidamente por esta ciudad, Noelia estaba feliz por ser aceptada. Sabía que no serian aceptados en otro lugares, ese mismo día que llego fue cuando prometió que ayudaría a Isnian en la batalla.

Ahora estaba arrepentida por su promesa.

Un dolor de traición de la gente que lo acepto lleno todo su cuerpo.

Había cosas raras en esta ciudad desde el principio. A todos los cuales recibieron solo eran mujeres y niñas.unos que otros eran varones.

En las mansiones estaba conformado por el jefe de familia, la señora de la casa y su hija que solo era de la madre; sirvientas, cocineras y un mayordomo junto con la caballería.

En el gremio solo aceptaban a los hombres. Noelia fue astuta al entrar se hizo pasar por un hombre; conjurando su propio cuerpo.

El gremio se conformaba de personas raras. A noelia no le hicieron un examen detallado normalmente se firmaba con sangre pero en ese lugar solo te miraban y te pinchaban en el brazo.

La unica pregunta que recibió fue:

- ¿Aún tienes sensibilidad en el cuerpo?

Noelia no sabía como responder a esa pregunta, no entendia a que se refería.

La unica respuesta que recibía de ella misma era que si era débil no podria estar en el gremio.

Respondió rápidamente.

-No ya no la tengo.

Una risa del gremio apareció.

- Bueno no es obligatorio que vayas realizando las misiones, igual te pagarán. Aunque si quieres más puedes realizarlos.

Aquí tienes para que entres y salgas cuando quieras. Le dieron un medallón con la imagen de un ojo.

Noelia estaba confundida al salir del gremio.

Rápidamente todas esos pensamientos estaban en la cabeza de Noelia.

Las conversaciones hizo despertar a Noelia.

- Señor aún falta la joven reciente que llegó.

- ¿Cómo que falta una?¡ busquenla!

Noelia sintió una gran preocupación.

Ahora que haría. ¿Le habían atrapado?