Curt
Después de aquella noche en la que había cenado con la familia, Ático no había podido tener una buena noche de sueño.
La realización de que habían pasado realmente diecisiete años pesaba sobre él, llenándolo de culpa por disfrutar de su vida en este mundo mientras se preguntaba cómo debía sentirse su madre en la Tierra.
Se sentía mal. Sin embargo, en el fondo, sabía que su madre querría lo mejor para él.
Pero entonces, se coló un pensamiento que lo asustó aún más: ella podría haber seguido adelante. Habían pasado diecisiete años, después de todo, y si había logrado encontrar la paz, sería lo mejor para ella.
Pero la idea de que su madre lo olvidara le roía por dentro. Se sentía egoísta, pero no podía deshacerse de ese sentimiento.