La Sobreprotección de Skavila

Retorno al Refugio

Frajesmate retrocedió rápidamente hacia el refugio, su corazón latiendo con fuerza y su mente llena de pensamientos tumultuosos. Las imágenes de la brutalidad que había presenciado se repetían en su mente como un torbellino de horror y desesperación. Al llegar al refugio, se dejó caer al suelo, temblando por la violencia y la injusticia que había visto.

Skavila, al ver su estado, se acercó rápidamente, preocupado por su bienestar. La angustia y el miedo en los ojos de Frajesmate le indicaron que algo terrible había ocurrido.

"¿Qué sucedió, Frajesmate?" preguntó Skavila con voz llena de preocupación. Frajesmate, con la voz temblorosa y los ojos llenos de lágrimas, relató lo que había visto afuera, describiendo con angustia la crueldad de los soldados Oftalmolecusanos hacia los Dominitianos. Sus palabras salían entrecortadas, mientras intentaba procesar el horror que había presenciado.

La Reacción de Skavila

Skavila escuchó en silencio, su rostro lleno de tristeza y preocupación. Sabía que la situación afuera era peligrosa y que la violencia del virreinato de Oftalmolecusamp era una realidad implacable para su pueblo. Con una mano reconfortante en el hombro de Frajesmate, le ofreció palabras de consuelo y aliento.

"Lo que has visto es una muestra de la crueldad que enfrentamos," dijo Skavila con voz suave pero firme. "Es por eso que debemos ser cuidadosos y mantenernos fuertes. No podemos permitir que el miedo nos paralice. Debemos encontrar una manera de luchar contra esta injusticia."

Frajesmate asintió, aunque todavía temblaba por la experiencia. Skavila sabía que debía ser más protector con él, para evitar que fuera testigo de más horrores y mantenerlo a salvo. Pero también comprendía que Frajesmate necesitaba enfrentar la realidad para fortalecer su determinación y prepararse para los desafíos que vendrían.

La Vida en el Refugio

En los días siguientes, Skavila se volvió aún más protector con Frajesmate. Le asignaba tareas más seguras y lo mantenía cerca en todo momento. Cuando Frajesmate salía a buscar provisiones, Skavila lo acompañaba, vigilando cada paso que daban. Si había algún indicio de peligro, Skavila intervenía de inmediato, asegurándose de que Frajesmate no se expusiera a riesgos innecesarios.

Frajesmate apreciaba la preocupación de Skavila, pero también se sentía frustrado por la falta de autonomía. Anhelaba demostrar su valía y su capacidad para contribuir a la causa, pero la sombra de la sobreprotección de Skavila lo mantenía constantemente a raya. Cada intento de tomar la iniciativa era recibido con una mirada severa y una advertencia de precaución.

Conversaciones Profundas

Una noche, después de una jornada particularmente tensa, Skavila y Frajesmate se sentaron junto al fuego en el refugio. El crepitar de las llamas llenaba el silencio, creando una atmósfera introspectiva. Frajesmate decidió aprovechar la oportunidad para expresar sus sentimientos.

"Skavila, sé que solo quieres protegerme," comenzó Frajesmate con cautela. "Pero también necesito aprender y enfrentar mis propios desafíos. No puedo ser útil si siempre me mantienes alejado del peligro."

Skavila suspiró, comprendiendo la frustración de Frajesmate. "Entiendo lo que sientes, Frajesmate," respondió. "Pero he visto demasiado sufrimiento y he perdido a demasiadas personas queridas. No quiero que te ocurra lo mismo."

Frajesmate asintió, apreciando la sinceridad de Skavila. "Lo sé, y agradezco tu preocupación. Pero si queremos luchar por nuestro pueblo, debemos hacerlo juntos. Déjame demostrarte que puedo ser fuerte y valiente."

Un Nuevo Pacto

Skavila reflexionó sobre las palabras de Frajesmate. Sabía que debía encontrar un equilibrio entre protegerlo y permitirle crecer. Finalmente, asintió con una mezcla de resignación y esperanza.

"Tienes razón, Frajesmate," admitió Skavila. "Te daré más responsabilidades y libertad, pero con la condición de que sigas mis consejos y permanezcas alerta en todo momento. Debemos ser una unidad, trabajando juntos para enfrentar los desafíos."

Frajesmate sonrió, sintiendo un peso levantarse de sus hombros. "Gracias, Skavila. Prometo ser cuidadoso y aprender de ti. Juntos, podemos lograr grandes cosas."

El Primer Paso Hacia la Autonomía

A partir de ese día, Skavila comenzó a darle a Frajesmate más responsabilidades. Le enseñó a rastrear a los soldados Oftalmolecusanos sin ser detectado, a crear trampas y a usar el entorno a su favor. Frajesmate demostró ser un alumno rápido y habilidoso, ganándose el respeto y la confianza de Skavila.

Durante una de sus expediciones, Frajesmate encontró un grupo de Dominitianos escondidos en una cueva, aterrorizados y hambrientos. Con la guía de Skavila, lograron rescatarlos y llevarlos al refugio, proporcionando comida y cuidado. Este acto de valentía y compasión solidificó el vínculo entre Skavila y Frajesmate, y fortaleció su determinación de luchar por la libertad de su pueblo.