Capítulo 33 – Necesita un Matrimonio (3)

Los ojos de Mu Yuchen, tan profundos como el océano, rozaron a Xi Xiaye cuando tomó el teléfono para llamar a Ah Mo y poder decirle que viniera y se encargara de esto. Entonces, Xi Xiaye entró al auto un poco indefensa.

Después que Xi Xiaye se pusiera el cinturón de seguridad, Mu Yuchen arrancó el auto y condujo lentamente.

—¿Ya no quieres tu dibujo?

La voz profunda y repentina de Mu Yuchen rompió el silencio en el auto, y a la vez sorprendió a Xi Xiaye, quien se había recostado tranquilamente en el asiento del auto mientras miraba el paisaje nocturnopor la ventana.

Se dio la vuelta sin prisa y lo vio concentrarse en la conducción. Dudó por un momento y sus ojos silenciosos brillaron con una luz tenue cuando sus labios, delgados y apacibles se separaron suavemente para decir: —Te lo voy a regalar.

Él ya lo había visto de todos modos, asíque a ella ya no le importaba.

—Sé que esas palabras escritas en el dibujo no las hiciste tú, esa no es tu letra.

Mu Yuchen lo había pensado antes de decir eso repentinamente. Cuando lo hizo, Xi Xiaye inmediatamente levantó las cejas y lo miró con sorpresa.

Entonces él explicó: —En la propuesta del proyecto South River que entregaste anteriormente, tu nombre y firma estaban ahí.

—¿Cómo sabes que realmente no pienso de esa manera? ¡Me temo que realmente soy malvada!—Xi Xiaye se rió un poco amargada y suspiró decepcionada—. Al verlos felices juntos, no me siento tranquila por dentro. Sigo teniendo la necesidad de destruirlos, pero me reprimo…

—Eso significa que eres una persona normal. Deberías sentirte feliz por eso—respondió Mu Yuchen en voz baja. Luego hizo una pausa y de repente dijo con una voz suave—. Sin embargo, no niego que lo que dijo tu amiga tiene sentido. Dejar que el pasado sea el pasado, la forma más rápida sería comenzar una nueva vida, invertir los papeles a tu favor. Dejarque todo pase y luego olvidarlo.

Cuando ella escuchó su consejo, Xi Xiaye se calló de repente. Las palabras que Su Nan le había dicho antes aún resonaban claramente en su oído.

"¡Cásate con un hombre excepcional antes que ellos! ¡Demuéstrales lo grandiosa que puedes ser y obtén tu reinado en la cima! Obtén tu venganza…"

El plan sonaba bastante ideal, pero ¿Cuántas personas podrían encontrar las agallas para sucumbir a esta locura de autoexilio?

El matrimonio no era una carrera ¿Encontraría el coraje?

Además, ¿Dónde iba a encontrar a alguien que estuviera tan loco como ella, ser tan ingobernable y que aceptara ser enviado al exilio también?

Cuando pensó en esto, Xi Xiaye de repente bajó la mirada un poco triste. Inhaló e impotentemente apoyó una mano en la ventanilla del coche, sosteniendo suavemente su cabeza, que estaba un poco mareada, e inclinó su mirada ligeramente. Sus ojos estaban un poco aturdidos mientras veía a Mu Yuchen conducir. Su tenue voz dijo suavemente. —Me temo que no puedo soportar la consecuencia. Además, esto sería extremadamente injusto para la persona que esté involucrada en la relación. No puedo crear otra tragedia debido a lo que ocurrió, ¿Verdad?

—¿Cómo sabes que estarás creando una tragedia y no una comedia? No puedes seguir siendo tan pesimista sobre las cosas. De lo contrario, lo único que estarás atrapando será a ti misma.

De repente suspiró ligeramente, con su voz extremadamente baja. De esa manera, no sabía si estaba hablando con la chica que estaba a su lado consigo mismo.

Parecía que la vieja voz de Mu Yinan comenzó a hacer eco en sus oídos de nuevo.

"Chen, deja que el pasado sea el pasado. La vida tiene que continuar…"

De repente, se sintió un poco cansado.

Sí…

Se sintió cansado…

En estos días, las personas que se quedaron varadas en el tiempo deambulaban por años en esta ciudad solitaria y triste, llenas del daño que habían hecho, el cual permanecía por años. Sólo el tiempo podía borrar todos los recuerdos, así que tal vez, él también debería llegar a algún tipo de realización.

Entonces sintió una mezcla de emociones y pensó en ello por mucho tiempo, cuando de repente su corazón dio un vuelco. No sabía que lo impulsó a pisar repentinamente el freno. El Porsche que había estado avanzando a la velocidad de la luz, abruptamente se detuvo. De repente, volteó su mirada y observó a la chica que sostenía su cabeza con los ojos cerrados.

Su hermosa carita se veía un poco sombría bajo las luces tenues. Parecía como si hubiera una luz, un aire indescriptible de melancolía a su alrededor. También parecía un poco agotada y de repente se dio cuenta de que en realidad estaba muy delgada. Su cuerpo se encogía debajo de su cortaviento y parecía muy frágil.

—Xi Xiaye…creo, tal vez eres igual que yo. También necesitas un matrimonio.

Cuando Mu Yuchen dijo esto, Xi Xiaye, que había estado descansando de lado, de repente se sintió rígida. Abrió los ojos lentamente y giró en silencio la cabeza para mirar al hombre ligeramente distraído que estaba a su lado. Lo que vio fue sus ojos negros azabache que eran tan oscuros como el cielo de noche. Sus pupilas se condensaron con una luz cambiante. Ella no podía ver a través de él, sin embargo, parecía captar algo de eso.

Tanta sinceridad.

O digamos, cansancio y piedad.

¿Estaba él compadeciéndose de ella?

¿O de sí mismo?

Ella sabía que él también debía tener su propia historia, pero no quería preguntar demasiado. Después de todo, las relaciones de otras personas no tenían nada que ver con ella. Incluso, si ella lo supiera, no tendría mucha importancia.

—Tú…

Sus ojos brillantes empezaron a volverse brumosos mientras lo miraba con asombro. Su cabeza aún no había asimilado lo que él acababa de decir.

Mu Yuchen la vio un poco aturdida, luego sus labios apacibles se convirtieron repentinamente en una curva superficial. Su voz profunda tenía una rara ternura. —Si no te importa, cásate conmigo. Sé mi esposa, sé la jefa de Glory World. De esa manera, deberías poder salir adelante.

Sus palabras fueron contundente y directas, como un repentino trueno que cruzó el cielo nocturno y atravesaron instantáneamente la cabeza de Xi Xiaye. Ella estaba tan sorprendida por sus palabras que se quedó atónita.

Cuando vio a Xi Xiaye asombrada durante un rato sin responder, él sonrió con calma. Siempre fue el tipo de persona que cada vez que tenía un pensamiento, primero planificaba y después actuaba.

Los muchos años que había tenido como militar y la gran experiencia que había generado en los negocios le habían creado el carácter decisivo que tenía hoy en día, estableciendo aún más su personalidad tranquila e indiferente.

Como hombre de negocios, siempre priorizaría una situación en la que ambas partes ganaran. Si se casara con esta chica, tal vez sería algo bueno para ambos, ¿No es así?

—Te dejare dormir. Hazme saber tu respuesta en tres días ¿Bueno?

Él la miró en silencio. Su voz baja era suave mientras llevaba un encanto indescriptible…