Capítulo 286: Aguas Termales (2)

༺ Aguas Termales (2) ༻

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[Hans McGregor]

Nivel: 161

Raza: Humana

Elementos: Fuego, Agua

Peligro: X

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[Van McGregor]

Nivel: 162

Raza: Humana

Elementos: Agua, Fuego

Peligro: X

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'Los Gemelos McGregor.'

Aparecieron por primera vez en ❰Caballero Mágico de Märchen❱「Acto 11」, pero no fueron particularmente significativos para el escenario principal.

Eran simplemente personajes que uno recordaría si tuviera curiosidad acerca de los individuos fuertes de otras academias en el Choque de Academias.

'Tenían la mentalidad de "somos más fuertes cuando estamos juntos", ¿no?'

Su historia los hizo así, lo cual era bastante común y predecible.

"Somos de la Academia Märchen".

Respondí con calma y una expresión amable.

Hilde y Edén estaban sumergiéndose en las aguas termales, por lo que sólo Dorothy y yo estábamos frente a los Gemelos McGregor.

Hans McGregor, el pelirrojo, aplaudió con admiración.

"¡Kyaa, por supuesto! Verte aquí significa que participarás en el Enfrentamiento de Academia mañana... como nuestros oponentes, ¿eh?"

"Eso parece. Espero con ansias…"

"Pobre de ti, pobre de ti~."

Hans pronunció sus palabras lentamente.

"¿Qué quieres decir?"

"Ahora me acuerdo de ti. Por eso es una desgracia para ti".

'¿Por qué es eso una desgracia?'

Hans levantó una ceja y me señaló con su dedo índice derecho.

"No soporto a los chicos que andan con mujeres hermosas como un gigoló. Especialmente a ti, con una cara que no olvidaré".

Hans se reclinó y apoyó los brazos sobre el respaldo de la silla.

Sus anchos hombros sobresalían y trataban de resultar intimidantes.

Luego se pasó los dedos por el cabello mojado, aparentemente convencido de su propio encanto.

'Este tipo… es un verdadero narcisista, ¿no?'

No lo recordé inmediatamente.

Pero sí, tenía una autoestima increíblemente alta.

'Parece que no sabe quién soy.'

Probablemente me vio como un extra más.

A pesar de la noticia de que el Soberano del Hielo había aparecido en la Academia Märchen, mi identidad exacta no había sido revelada.

Muy pocas personas podrían reconocerme como el Soberano del Hielo a primera vista.

"Has estado buscando pelea desde hace un rato. ¿Estás tan seguro?"

"Por supuesto. No hay nadie que pueda vencernos en el Choque de Academias. Mi hermano y yo no perderíamos contra nadie."

Hans se rió entre dientes mientras se acercaba a nosotros.

Su mano lasciva naturalmente se extendió hacia el hombro de Dorothy.

"Hola, linda niña. Has oído hablar de los Gemelos McGregor..."

Thump.

Me levanté inmediatamente y agarré el brazo de Hans.

"…¿Qué?"

Hans me miró con ojos feroces y una vena le sobresalía en la frente.

"Tú."

Este tipo tenía tendencia a conquistar a cualquier chica que le gustara, sin importar si tenía novio o no.

No le importaba usar amenazas, seducción o coerción.

Probablemente había docenas de estudiantes en la Academia Raizel a quienes él les había robado sus novias.

Fuera de la Academia, ese número sería aún mayor.

Al provenir de una familia Noble de Alto Rango y poseer un talento excepcional, pocos estudiantes de la Academia Raizel podrían enfrentarse a él.

Entonces, Hans, el mayor activo de la Academia y un mujeriego notorio, no estaba acostumbrado a situaciones en las que alguien lo desafiara.

"¿A quién crees que estás tocando?"

Una voz fría escapó de mis labios.

Hans intentaba rodear con el brazo los hombros de Dorothy para intentar coquetear con ella.

Dorothy no habría permitido ese contacto físico en primer lugar.

Lo que me molestó fue el mero hecho de que intentara tocar a Dorothy con intenciones impuras.

"Oh…"

Dorothy me miró con calma y admiró mi acción, sin mostrar signos de tensión.

Lo entendí.

Tanto para Dorothy como para mí, los hermanos McGregor eran oponentes fáciles.

Hans se burló.

"Parecías aburrido, pero ahora tus ojos se están volviendo interesantes. Pero ¿sabes con quién estás tratando ahora... ugh?"

Apreté más fuerte el brazo de Hans.

Su brazo grueso y musculoso empezó a tensarse contra mi agarre.

Un breve gemido escapó de la boca de Hans.

"¿Bastardo…?"

Sentí su mana.

Hans reforzó la [Magia de Protección Básica] que se había lanzado a sí mismo y añadió una magia de fortalecimiento físico a su brazo.

Su brazo se endureció, resistiendo mi agarre.

Nos miramos fijamente unos a otros, y los clientes que nos rodeaban, percibiendo una pelea, nos observaban con expresiones tensas.

Unos segundos después.

Hisss.

Los cinturones de nuestras túnicas, que estaban atados alrededor de nuestra cintura, se aflojaron solos, dejando al descubierto nuestros cuerpos desnudos.

Fue un acontecimiento inesperado.

"¿Oh…?"

Hans y yo instintivamente miramos hacia abajo.

Los ojos de Hans se abrieron.

'…Gané.' (N/T: Jajajaja)

"¡Chist!"

Hans se sacudió la mano enojado, se acomodó la bata y salió de las aguas termales.

"Esto es molesto. Vámonos, Van."

"Lo entiendo, Hans."

Su hermano gemelo de cabello azul, Van McGregor, siguió a Hans.

"…Recuerda, esa no era toda mi fuerza en este momento".

Hans intentó disculparse con cara de enfado y se marchó con su hermano gemelo, Van.

El hecho de que sintiera la necesidad de dar explicaciones dejaba entrever su sutil sensación de derrota.

La máxima [Eficiencia de Entrenamiento Físico] se aplicó a todo mi cuerpo, incluido el orgullo de un hombre, lo que hizo que mi cuerpo fuera bastante formidable.

Incluso antes de que se aumentara su tamaño, su singularidad era evidente.

'Lo manejé bastante bien…'

A partir de mañana nos encontraríamos ante un escenario importante.

No podía permitirme ningún problema innecesario en este momento.

'Sin embargo…'

'Un adversario inesperado ha hecho que el mañana sea un momento que esperamos con ilusión.'

Hans intentó meterse con mi personaje favorito.

Lo pagaría muy caro.

Me ajusté la bata.

"¿Mmm?"

De repente sentí una mirada intensa.

Venía de Dorothy.

Estaba completamente congelada, su cara tan roja como una fresa madura.

"¿Señorita Dorothy?"

"¿Q-qué…?"

"Lo viste, ¿no?"

"¿Esa cosa? ¿De qué estás hablando? ¡No vi nada!"

Dorothy respondió dramáticamente, encogiéndose de hombros repetidamente.

'Ella lo vio.'

No me importaba que ella lo viera, ya que de todos modos planeaba mostrarlo con orgullo algún día.

"Bueno, entonces eso está bien."

Hilde y Edén todavía disfrutaban de las aguas termales con los ojos cerrados.

Me volví a sentar junto a mis familiares y dejé que el agua tibia me bañara.

Con los ojos cerrados, me sentí en el paraíso.

Se oyó el sonido del agua cayendo.

Pasó un momento de silencio pacífico.

"Ejem."

Dorothy siguió aclarándose la garganta, tratando de estabilizar su voz:

"Lo que acabas de hacer… fue bastante genial".

"¿Quién más te protegería de un tipo así…?"

"Pero no estabas fingiendo, ¿verdad? Nihihi. No te gustaba la idea de que un tipo me pusiera las manos encima, ¿verdad?"

Dorothy me dio un codazo en el costado y se rió con picardía.

"Soy tu fan, después de todo."

"Una fan, eh… Sabes, no planeaba decírtelo todavía".

"¿Qué?"

"¿De verdad te convertiste en el Presidente de mi Club de Fans?"

Entonces ella lo sabía.

Por eso me llamó "Presidente" antes.

"Ah, eso."

"Dime, ¿cómo sucedió eso?"

"Utilicé un poco de mi Autoridad como Soberano del Hielo".

"¿Estás usando la Autoridad del Rey Elemental para cosas tan triviales…?"

Dorothy parecía realmente nerviosa.

"Para mí fue importante."

"Eres muy gracioso..."

Nos miramos y compartimos una risa.

***

Fue tal como dijo Isaac.

Dorothy se sintió renovada después de salir de las aguas termales.

Su cuerpo se sentía más liviano.

Este lugar tuvo los mejores efectos en comparación con cualquier fuente termal que había experimentado hasta ahora.

Sin embargo, el calor no había disminuido desde antes.

Fue porque no podía dejar de pensar en Isaac, quien la había estado protegiendo de cualquier insinuación masculina.

"Qué lindo, ni siquiera intenta ocultar que le gusto…"

Dorothy soltó su característica risita "Nihihi".

No había nada que ocultar.

Ninguna mujer odiaría que el hombre que le gustaba hiciera eso.

Mientras se vestía, Dorothy de repente dejó escapar un "Hmm..."

Otro recuerdo llenó la mente de Dorothy.

Extendió su dedo índice derecho y lo dobló ligeramente.

"No es suficiente…"

Un dedo endeble no fue suficiente.

Dorothy extendió toda la mano.

Tal vez esto estaba más cerca.

Dorothy colocó su mano completamente extendida sobre su abdomen inferior.

Sus ojos se abrieron de par en par por la sorpresa.

"¿N-no moriré con esa C-cosa…?"

Un sonido áspero se le escapó sin darse cuenta.

Medirlo correctamente la había aterrorizado.

Las invitadas cercanas miraron a Dorothy, pero no podían entender qué estaba murmurando.

Por primera vez, Dorothy sintió una mezcla de emoción y miedo.

***

A altas horas de la noche, en una habitación de la residencia de la facultad.

El instructor Ronzainus estaba tomando una bebida en una habitación oscura.

Miró por la ventana.

Una gran luna colgaba en el hermoso cielo nocturno, esparciendo una luz tenue.

"Es mañana."

El regalo que preparó para el Soberano del Hielo sería revelado mañana.

Tal vez fue la anticipación, pero al instructor Ron la bebida le sabía más dulce de lo habitual.

Mientras tanto, en el área de alojamiento de los participantes.

Una niña estaba sentada en su cama, mirando la gran luna fuera de la ventana.

Contrariamente a su apariencia intelectual, sostenía una lanza temible y larga, tan alta como ella misma.

Su cabello azul oscuro ondeaba.

Aunque cubría deliberadamente la mitad de su rostro con su cabello, la fresca brisa otoñal reveló la larga cicatriz de su ojo izquierdo bajo la hermosa luz de la luna.

"Soberano del Hielo…"

Pensó en el rostro del Soberano del Hielo.

Se imaginó su lanza cortándole profundamente el cuello y brotando sangre roja.

"Te veré pronto."

Su único objetivo en este Choque de Academias era simple...

Matar al Soberano del Hielo, Isaac.

***

Al día siguiente.

Con una gran inauguración en Aldreque, comenzó el Choque de Academias.