Línea de batalla

Habían pasado semanas, pero Oberón no parecía tener ni idea. Todavía no había encontrado a la persona que había enviado esa nota.

Estaba en su sala de estudio, simplemente se sentó, mirando al vacío. Su mano reposaba contra su barbilla, aún estaba pensativo.

Nyx aún veía al extraño, pero solo de noche y seguía recibiendo esas notas. ¿Cuál podría ser exactamente la causa de todo esto?

Suspiró —¿Y si madre tenía razón? ¿Y si la nota realmente se refiere a Nyx?

—Pensándolo bien, Nyx es la única que ve a un extraño por la noche, ¿y si ese es el extraño que envía estas notas? Miró las notas apiladas en una esquina, todas con la letra desvanecida.

Suspiró y se recostó en su silla —Hay una posibilidad, Nyx es la 'sangre inocente' a la que se refieren estas notas. Se mordió el labio inferior.

Se sujetó la cabeza, ya tenía dolores de cabeza de pensar demasiado en esto. Una idea se le ocurrió.

—¡Nyx, Nyx es la clave! —Dijo con los ojos iluminados.

—Nyx es la única que lo ve y también la única que puede hablar con él. Definitivamente, Nyx puede obtener información de él —Sonrió.

Asintió satisfecho y se levantó dirigiéndose a la puerta. Su madre tenía razón después de todo, tenía que tomarse a Nyx en serio. Ella debía ser tratada como la reina que era.

Ordenó a algunos sirvientes que trasladaran las pertenencias de ella a su habitación. Eran una pareja, ¿por qué no actuar como tal?

Hicieron lo que se les ordenó.

—¿A dónde están llevando mis cosas? —preguntó ella a las sirvientas que habían comenzado a empacar sus cosas.

—Su Majestad nos ha ordenado trasladar sus cosas a su habitación —Una de ellas habló.

Ella arqueó una ceja —Oh, ¿él dijo eso? Sus mejillas se pusieron calientes.

—Sí mi señora —Asintió.

Nyx sintió mariposas haciendo una fiesta en su estómago, trató tanto como pudo de comportarse frente a las sirvientas.

Todas sus cosas fueron trasladadas a la habitación de Oberón. Pronto fue hora de que ella fuera a su habitación. Estaba emocionada y no podía evitar mostrar su felicidad.

Llamó a la puerta pero no obtuvo respuesta, abrió la puerta y no encontró a nadie en la habitación.

Exhaló profundamente y entró en la habitación, cerrando la puerta detrás de ella.

—Puedo finalmente dormir con él otra vez —Exclamó felizmente.

Giró y aterrizó en la cama, el aroma de él llenó su nariz, su corazón latía más rápido —Este sentimiento... Se sonrojó.

La puerta se abrió, ella se levantó rápidamente. Era Oberón. Entró en la habitación mirando alrededor con ojos inquisitivos, sus ojos se posaron en ella y se suavizaron.

—Ah, aceptaste volver —Sus labios se elevaron y caminó hacia la cama. La miró desde abajo.

—Es bueno que hayas vuelto, te necesito —Dijo suavemente y miró hacia otro lado.

Su corazón dio un salto, ¿realmente la necesitaba?

—Estaré muy feliz de ayudar —Sonrió.

Asintió —Eres nuestra clave ahora Nyx, parece que todo apunta hacia ti, me pregunto qué importancia tienes —Dijo la última frase en voz baja.

—Ayudaré en todo lo que pueda —respondió ella nerviosamente.

—Lo siento mucho, Nyx, sé que he sido una persona muy mala contigo —cerró los ojos y exhaló. Espero que puedas perdonarme en un futuro cercano.

—¿A qué te refieres?

—Solo espero que me perdones, las cosas podrían volverse muy complicadas más adelante —hizo una pausa, no había respuesta para eso.

—Está bien, todo estará bien —sintió una mano envuelta firmemente alrededor de la suya, la miró y sonrió.

Solo pudo suspirar, todavía no había encontrado la manera de decirle que ella no era su compañera. Simplemente asintió y sonrió.

—Te prometo Nyx, no te faltará nada aquí, me aseguraré de que obtengas todo lo que deseas —apretó su mano.

Ella se sintió tan especial y amada en ese momento, podría jurar que nunca se había sentido así antes de conocerlo.

—¿Nyx?

—¿Sí?

—Realmente, realmente necesito tu ayuda —dijo con calma.

—¿En qué debería ayudarte? Lo haré si puedo —sonrió.

—¿Cuándo aparece exactamente ese extraño?

—Solo por la noche.

—¿Incluso cuando no estás en el jardín?

—Sí, vino a mi habitación anoche, todavía no sé cómo entró, y estoy muy segura de que cerré mi puerta y mi ventana —suspiró.

—Hmm, eso es muy extraño. ¿Tienes una idea de la manada de la que viene?

—Él no me da ninguna información sobre sí mismo, solo me advierte de un peligro inminente y luego desaparece. Ya me he acostumbrado a su presencia, sin embargo —negó con la cabeza y suspiró.

—Nyx, ya que eres la única persona que puede comunicarse con este extraño, la próxima vez que venga, necesito que estés tranquila y obtengas toda la información que puedas de él. Necesitamos rastrearlo —le dijo.

—¿Obtener toda su información? No puedo parecer hablar cuando él está cerca de mí —se quejó.

—Solo sé valiente y hazlo, supongo que volverá esta noche. Así que, simplemente haz lo que te dije que hicieras.

—Él... es de alguna manera aterrador... —tragó saliva y se inquietó un poco.

—Desearía poder estar allí contigo pero no puedo. Si logras hacer esto, te prometo que serás recompensada grandemente.

—No tengas miedo Nyx, esto es para el bien de todos y tú eres nuestra única esperanza.

—Está bien, lo haré —sintió esperanza y suspiró.

—Muchas gracias —sonrió en agradecimiento.

La línea de batalla había sido trazada.