Capítulo 1 El mejor y peor lugar para reencarnar...
Abrí los ojos y me encontré sentado en una silla bastante cómoda en medio de cierto lago cliché, donde solo se puede ver el azul infinito del cielo y el agua del lago fundiéndose en el horizonte.
--¿O estoy muerto o las drogas estaban duras?
--Para ser alguien que acaba de morir estas muy calmado.
Frente a mí y de la nada apareció una chica inhumanamente hermosa, digo inhumanamente ya que ella tiene orejas puntiagudas y ojos heterocromaticos rojo y verde, sin contar las alas blanco puro a su espalda y el aro de luz sobre su cabeza cubierta por un cabello rubio dorado.
--Bueno visite una vez "El espejo del cielo" y estoy hablando con una especie de... ¿Ángel elfo? Así que si no estoy muerto, debo estar bien pero bien drogado~ aunque no logro recordar como morí... sé que estaba en mi oficina y... ¿olía a humo?
Reí haciendo sonreír al Ángel, diablos esa es la sonrisa más hermosa que jamás veré.
--Un buen sentido del humor aun en estas circunstancias, es encomiable, muchos otros entran en pánico o en negación, aunque los más molestos son los religiosos empiezan a orar y orar, no me dejan hacer mi trabajo... pero volviendo al tema, lo siento, realmente moriste.
La chica angelical se inclinó ligeramente dando el pésame antes de continuar.
--Pero debido a una nueva política su alma será enviada a un mundo al azar junto con algunas habilidades o cheats para su beneficio.
Concluyo la chica en un tono de negocios alegre presentándome una ruleta y un juego de tres dardos, uno azul y dos rojos.
--Estos son los dardos del destino, el azul decidirá el mundo a reencarnar y los rojos tus habilidades... el número de dardos rojos es proporcional al karma acumulado en tu vida, como moriste antes de los 40 solo logras acumular karma para dos tiros. Aunque considerando la descomposición moral y ética de tu especie es un éxito lograr dos tiros, realmente un buen tipo.
Dijo el Ángel instándome a tomar los dardos.
--¿Gracias? ¿Entonces solo tengo que lanzarlos al blanco?
--Si...
Con un movimiento de su mano la ruleta empezó a girar a una velocidad absurda, por lo que solo pude rezar y lanzar los dos dardos rojos a la vez, una cosa que aprendí después de ver más de 1000 capítulos de Onepiece es que... ¡No Existe Habilidad Inútil! ¡Solo usuarios inútiles! Lo que sea que salga lo atesorare, lo abrazare y lo cultivare a su máxima expresión, recuerden a Magikarp es feo, pequeño, débil y estúpido, nadie lo quiere pero después que evoluciona en un majestuoso, viril y maléfico Gyarados rojo de veinticinco metros todo el mundo lo ama, pero yo siempre crie mis Magikarp desde el nivel 1 hasta el 100. Eso es amor, eso es compromiso, eso es poder.
Los dos dardos volaron y se clavaron en dos puntos diferentes de la ruleta, la cual como si toda su aceleración y fuerza cinética fuera una mentira se detuvo en un instante.
--Vamos a ver~ ¡Oh! ¡Tenemos un ganador~!
La chica sonrió y aplaudió mientras me entregaba dos orbes de aspecto dudoso, uno era oscuro, increíblemente oscuro y el otro era de un verde vivido y natural casi vivo, leí las placas debajo de ellos, empezando por el negro.
Orbe de habilidad "Hijo de las sombras": Control total sobre las sombras desde Shikamaru pasando por Geko Moria, hasta casi rozar el reino del Gobernante Original Ashborn. Más que una ley pero lejos de un concepto.
Después de leer la descripción bastante concisa del orbe negro, sentía la necesidad de tener una cara más grande para poder dar una sonrisa aún más amplia, realmente le di al premio gordo, Sabía quién era Shikamaru, conozco a Geko Moria y dios amo de una manera No Homo al Gobernante de las Sombras y esta habilidad lo decía claramente, era más que una ley pero menos que un concepto, lo cual era en términos de novela china, una divinidad parcial, no era el reino de la muerte como Ashborn, ni una simple manipulación de las sombras como Shikamaru, tampoco era la alegoría al Alma de Geko Moria, sino que era un todo en uno, el punto intermedio entre el ser más y el ser menos, tanto el todo como la nada. Realmente Increíble.
Rápidamente pase al Orbe verde vibrante.
Orbe de Habilidad "Regeneración Ilimitada": ¿Morir? ¿Acaso se puede? Por cierto, aun duele.
Corto, simple y directo, realmente esto me hizo reír.
--Puffffff~ hahahahahahaha~ ¿Quien escribe las descripciones? Ese tipo merece una cerveza.
--¿Una cerveza? Lo tomare en cuenta~
Respondió la chica con otra sonrisa despampanante.
Tome ambos orbes en mis manos y estos se convirtieron en dos líneas de luz y entraron en mi cuerpo, el conocimiento y las técnicas de empleo de las habilidades se grabó directamente en mi alma así como en mi mente, fue como recibir un batazo en la cabeza pero nada que no pudiera soportar, ya había recibido varios golpes de ese tipo antes y uno mas no sería problema.
--Bien, ahora por favor lanza el dardo y veamos el mundo donde reencarnaras~
Con un aplauso la ruleta volvió a acelerar solo que esta vez triplico su tamaño denotando gráficamente la cantidad de posibilidades que existen.
--¡AQUI VA!
Lance el dardo con todas mis fuerzas mientras rezaba en mi corazón.
--(Que sea uno bueno, OnePiece, Bleach, Naruto, SailorMoon, FaryTail, Pokemon, me conformo con el Universo Marvel o Dc, diablos hasta la unión de Universos de la Clamp o algún Spinoff basura de Digimon... solo dame un buen mundo o un Rom-com decente)
*TOP*
El dardo golpeo el blanco y este último se detuvo mostrando el mundo en donde renacería. Yo perdí la fe en dios que había recuperado segundos antes.
Lloraba sin lágrimas, maldecía sin voz, realmente me sentí infinitamente miserable. De todos los mundos, de todos los universos posibles, de toda la animación del género del fanservice barato y el propio hentai, tenía que ser ese despropósito de ero-shonen.
--Yo... lo siento, parece que realmente odias ese mundo.
El bello ángel elfico se disculpó mientras me daba una palmadita en la espalda, yo estaba postrado en el suelo mientras mis ojos solo veían desolación y desesperanza.
--Preferiría mil y un veces ir a cualquier mundo de hentai barato mal dibujado que a ese despropósito.
--Lo siento no hay segundas, adiós.
--Adiós.
El suelo debajo de mi desapareció al igual que todo, mandándome a la oscuridad por un instante me pareció ver una luz plateada acercándose a mi antes de que sintiera un fuerte dolor en el trasero, que me hizo gritar del dolor, pero aunque grite maldiciendo lo único que salió de mi boca fue un pequeño grito, forcé a abrir mis ojos y lo que vi me ilusiono, era un bebé, un pequeño y recién nacido bebé, literalmente recién salido del horno, podía ver a mi madre acostada en la camilla con un bebe ya en los brazos, parece que seré el hermano menor de alguien.
Mi madre era una mujer de aspecto joven de cabello castaño esponjoso y ojos color café claro, estaba llena de ese aspecto de mama amable y grácil, realmente me sentí feliz, tal vez había nacido en el lugar más alejado posible de todo el lio de poderes de este mundo dirigido por las tetas y los culos.
Lamentablemente la realidad es una perra.
--Oh, mi pequeño Souji, Hyoudou Souji ese es tu nombre y este es tu hermano mayor Iseei.
Realmente quise llorar pero aun mi cuerpo se sentía débil por lo que lo único que pude hacer fue gruñir y dejar que las lágrimas salieran de mis ojos.
Qué lugar más alejado del conflicto, el jodido epicentro del mundo es mi hermano mayor. En las inmortales palabras del Santo de la Mala Suerte Kamijou "FUCKING" Touma ¡FU-KUODA!
***
Si tuviera que resumir mi infancia como Hyoudou Souji sería relativamente normal, simple y tranquila, salvo por mi hermano mayor, es un pervertido que ya leía revistas calientes a los cinco años escondiéndose bajo el puente, o los momentos en que la natural extrañeza de este mundo me hacía atentar contra mi vida por la desesperación y la ira.
Fuera de eso, por mi parte jugaba más tranquilamente con nuestra vecina Irina, no podía ver como ella y su familia serian en realidad asesinos de demonios entrenados por la iglesia, exorcistas y templarios, ya que eran completamente normales a mi parecer, aunque el que yo pueda manipular las sombras y buscara nuevas maneras para intentar suicidarme era aún más extraño pero perdónenme un poco de hipocresía aquí.
Sacando a Iseei de la ecuación y después de la partida de Irina pase la mayor parte de mi infancia solo, si ya sea en la guardería, en el jardín de infantes, en la escuela, me mantuve alejado de todos, mientras Iseei era una mariposa social o más bien un idiota pervertido sociable, yo era voluntariamente aislado del grupo.
Tenía cosas mejores que hacer como por ejemplo familiarizarme con las sombras y desarrollar mi habilidad, tratar de matarme entre otras cosas, para que si llegara el día en que me encontrara con algún demonio callejero, ángel caído, o cualquier otro imbécil sobre natural, poder arrastrarlo a un mundo de horror y dolor inconmensurable, solo por divercion.
Empezamos... se agradecen los comentarios, criticas contructivas y destructivas todo es aprecidado y necesario...